El Jeque saudita Dr. Saleh bin Sa’d Al-Suhaimi Al-Harbi, quién es predicador en una mezquita de Medina, instructor de predicadores del Ministerio de Asuntos Islámicos y antiguo profesor de la Universidad Islámica de Medina, ha emitido una respuesta al intento de asesinato el 27 de agosto, 2009 contra el Viceministro del Interior saudita, príncipe Mohammed Bin Naif, llevado a cabo por un terrorista suicida de Al-Qaeda. [1]

En su respuesta, publicada en el portal de Al-Suhaimi’s (www.al-soheemy.net ), Al-Suhaimi llama el intento de asesinato «un acto vergonzoso perpetrado por los enemigos del Islam», y denuncia con dureza a todos los partidarios de la corriente salafista-jihadista, diciendo que son Khawarij [2] y que sus dirigentes son «unos [jeques] ignorantes escondidos en cuevas». Afirma que con este intento de asesinato, los salafistas-jihadistas, en lo referente al Sharia islámico, se colocaron a si mismos en la misma categoría que los suicidas y asesinos de inocentes musulmanes e hipócritas, aquellos que violan la santidad del Ramadán y aquellos que devuelven la amabilidad con crueldad.

En un intento por combatir la propagación de la ideología jihadista-salafista, Al-Suhaimi pide a los imams, a los predicadores, educadores y escritores que protejan a los jóvenes de esta ideología y de manera explícita e inequívoca condenar a sus autores. También pide a los padres mantener una estrecha vigilancia sobre sus hijos e hijas, para no ser tentados a seguir esta corriente y prohibir los escritos que la inspiran – de Sayyid Qutb, Ahmad Al-Rashed, Mohammed Al-Maqdisi y otros — y también las grabaciones de audio y vídeo que incitan al jihad.

Lo siguiente son extractos de la declaración de Al-Suhaimi:

El asesino fue guiado por fatwas «muy alejados de la verdad del Islam»

«[La acción perpetrada contra] el príncipe Mohammed bin Naif fue un acto vergonzoso, cuyo autor fue reclutado por los enemigos del Islam… [Este hombre] recibió fatwas equivocados de los dirigentes de los Khawarij quienes se esconden en cuevas – [fatwas] muy alejados de la verdad del Islam y del camino divino del Islam sobre el cual [Arabia Saudita] fue fundada.

«Estos Khawarij han sido conocidos por su carácter depravado desde los albores del Islam, y nadie ha escapado de sus [actos malvados] – ni siquiera el Mensajero de Alá [el Profeta Mahoma]… que los llamó ‘perros del infierno’ y ‘los asesinos más malvados de la faz de la tierra’… Ellos están presentes en todas las eras… y no es sorprendente que hayan decidido apuntar a los buenos hombres dedicados a la seguridad de [nuestro país], tales como el príncipe Mohammed Bin Naif, el Viceministro del Interior para asuntos de seguridad…

«Alá sea alabado, la rueda se volvió contra el perpetrador, [quien fue] la única victima [verdadera del crimen]…»

De acuerdo con el Sharia, el asesino es un suicida, el asesino de un musulmán inocente, un hipócrita y un ingrato

«Cualquier persona que observe este incidente encuentra que las decisiones religiosas siguientes se aplican al perpetrador [de este crimen], a quien emitió el fatwa sancionándolo y a quien lo aprobó o justificó:

«En primer lugar, [la decisión respecto a] los que muestran hipocresía, esto es debido a que [el atacante] pretendía entregarse a si mismo y arrepentirse ante Alá… Este se comprometió a renunciar a las ideas desviadas de los Khawarij, pero [luego] rompió su promesa. Fue una persona de confianza y traicionó esta confianza, hizo un compromiso y lo rompió.

«En segundo lugar, [la sentencia sobre] los suicidios, el Profeta dijo que los suicidios pertenecen al infierno… En tercer lugar, [la decisión respecto a] alguien que intenta matar a un musulmán inocente… la vida de un musulmán creyente es más sagrada que [incluso] la Ka´ba. En cuarto lugar, [la decisión relativa a] cualquier persona que viole la santidad del Ramadán y quinto, [la decisión relativa a] cualquiera que dañe a una persona que fue amable con este y con los demás, [el Príncipe] le abrió la puerta al [asesino] y lo invitó [a su palacio], y [el asesino] le pagó con este acto despreciable, del cual él [mismo] fue la única víctima.

«Tal comportamiento es una característica sólo de los individuos más depravados, que son ingratos [a sus benefactores]…

«El príncipe Mohammed hizo grandes esfuerzos para establecer una relación con los miembros de la [corriente salafista-jihadista], dándoles consejo y orientación y perdonando a los que se arrepintieron… Condenamos este acto despreciable y nos sumamos a nuestros dirigentes, [en apoyo a ellos] en todas [sus esfuerzos] por alcanzar la paz y la seguridad de la patria, de sus ciudadanos y los lugares santos al Islam…»

«Todos debemos poner de nuestra parte para proteger a nuestros jóvenes de las ideas falsas» de los salafistas-jihadistas

«Después de varias propuestas:

«En primer lugar, todos debemos poner de nuestra parte para proteger a nuestros jóvenes de las ideas desviadas de los Khawarij, cada uno en su campo específico de conocimientos – en particular los imams y predicadores, los académicos y educadores, los clérigos, los profesores universitarios y los escritores. Este es un deber religioso correspondiente a cada persona en este país, cada uno según su capacidad.

«Segundo, debemos llamar a las cosas por su nombre, y llamar a los proponentes de la ideología [salafista-jihadista] por los nombres que se merecen, ya que son Khawarij. De hecho, son peores que los antiguos Khawarij, ya que han combinado las ideas desviadas Khawarij con la teoría de Maquiavelo de que el fin justifica los medios.

«[Por consiguiente] no es suficiente para los escritores y predicadores andar con rodeos y resolver en busca de pistas y [medias] condenas. Deben denunciar [explícitamente] a los proponentes de esta ideología, y explicar la decisión del Sharia respecto a ellos, a fin de esclarecer los hechos y advertir a toda la nación – en particular a los jóvenes – en contra de ser tentados por esta ideología.

«[Los proponentes de esta ideología] se alimentan de [materiales que se encuentran] en Internet y fatwas [emitidos por] los ignorantes [jeques] escondidos en cuevas, quienes posiblemente son inspirados por los masones, por el Rotary [Internacional] y por las organizaciones sionistas o calañas».

Las fuentes de inspiración de la ideología [salafista-jihadista] deben ser secadas – eliminando todos los libros que la alimentan

«En tercer lugar, las fuentes de esta ideología de inspiración deben ser secadas, mediante la eliminación de todos los libros que la alimentan, tales como [los escritos de] Sayyed Qutb, Muhammad Ahmed Al-Rashed… y [Abu Muhammad] Al-Maqdisi… así como también otros libros takfiri [3] y todas las publicaciones takfiri de la Hermandad Musulmana y [el movimiento] que se separó de ella.

«También es necesario eliminar las grabaciones de vídeo y audio… que esparcen veneno bajo la forma de llamar al jihad, pero en realidad [sólo transmiten] la corrupción… a través del cual se difunde la perversa ideología takfiri.

«En cuarto lugar, los padres deben vigilar a sus hijos e hijas en todas partes, [supervisar] con quien comulgan, con quienes se hacen amigos y se reúnen, y lo que leen, ven y escuchan – ya que [los jóvenes] son nuestros cargos, y somos todos responsables de ellos…

«Quinto, nuestro personal de seguridad debe contar con… la guía religiosa respecto a los Khawarij, para que entiendan que su actividad importante en contra de [los Khawarij] es parte de su fe y que Alá les recompensará por ello».


[1] El príncipe fue atacado en su palacio por un terrorista que pretendía haber renunciado a sus opiniones anteriores, y que pidió una audiencia con el príncipe para entregarse el 28 de agosto de 2009, Al-Qaeda en la Península Arábiga se atribuyó la responsabilidad por el ataque, afirmando que el asesino era ‘Asiri Abdallah Hassan Tali’, alias Abu Al-Khayr, quien estaba en la lista de los terroristas más buscados de Arabia Saudita. Para más información sobre el intento de asesinato, vea el Blog de MEMRI, » Viceministro del Interior de Arabia Saudita Escapa a Intento de Asesinato» y el Proyecto de Supervisión a la Amenaza Terrorista y Jihad de MEMRI, «AQAP se Responsabiliza por el Intento de Asesinato Contra el Príncipe Saudí Muhammad bin Naif.»

[2] Los Khawarij fueron un grupo que se separó de las fuerzas del Cuarto Califa ‘Ali Ibn Abi-Talib durante la batalla de Siffin en el 657 AC, y son considerados la primera oposición musulmana dentro del Islam. Por lo tanto, este término se utiliza como una etiqueta peyorativa de un grupo secesionista.

[3] Takfir, es decir, acusar a otros musulmanes de herejía, es un elemento importante de la ideología Salafi.