El Ministro del Interior saudita Príncipe Na’if Abd Al-‘Aziz ha publicado recientemente declaraciones en la prensa saudita condenando el extremismo y el terrorismo en Arabia Saudita y llama a su erradicación. En las declaraciones, el Príncipe Na’if afirmó que su país no estaba haciendo suficientes esfuerzos para combatir las ideologías extremistas, y llamó en los clérigos sauditas, intelectuales e instituciones de educación superior a intensificar medidas para oponerse a estas ideologías.
A continuación se presentan extractos de algunas de las declaraciones del Príncipe Na’if:
Todo ciudadano debe actuar como si fuera un antiguo funcionario de seguridad
Durante una reunión el 2 de octubre, 2008 con antiguos funcionarios del Ministerio del Interior saudita, celebrada en su residencia en Jeddah, el Príncipe Na’if declaró: «Apelo a los clérigos, a los intelectuales y a todos mis compatriotas – cada uno de acuerdo a su posición y habilidad – a que ayuden a [combatir el terrorismo]. Un ciudadano [común] debe actuar como si fuese un antiguo [miembro de] las [fuerzas] de seguridad, ya que un [funcionario] de seguridad es un ciudadano en virtud que forma parte de la labor de ser un [funcionario] de seguridad, y todos tenemos una responsabilidad [de actuar como si fuéramos funcionarios de seguridad]… Todos debemos comprender de que no estamos tratando sólo con personas, sino con una ideología contraria…» [1]
El Príncipe Na’if también advirtió sobre el inherente peligro en la ideología de Al-Qaeda, enfatizando que esta todavía propone una amenaza a la seguridad de Arabia Saudita. [2]
Las mezquitas sauditas han fracasado en la tarea de combatir el extremismo ideológico
En un discurso el 15 de octubre del 2008 dado en un simposio en lo que él denominó «seguridad ideológica», el Príncipe Na’if declaró que, hasta donde concierne a la seguridad, los esfuerzos de Arabia Saudita para combatir el terrorismo habían sido valerosos y exitosos, pero que combatiendo el extremismo ideológico, las mezquitas sauditas han fracasado en cumplir la tarea esperada de ellas – es decir, predicar la tolerancia. Él afirmó que el aumento global en el crimen exigió una cooperación íntima entre los [aparatos] de seguridad y las instituciones educativas. [3]
Las universidades sauditas deben dirigirse al problema de la «seguridad ideológica»
Durante una reunión con el cuerpo docente de la Universidad Umm Al-Qura en la Meca, sobre las líneas adyacentes del mencionado simposio, el Príncipe Na’if llamó en las universidades [sauditas] a «dirigirse [al problema de] la seguridad ideológica usando medios teóricos y prácticos disponibles para ellos». Él agregó: «… Además de las universidades privadas, existen 20 universidades gubernamentales en Arabia Saudita, todas capaces de promover el tipo de educación que destruiría las ideas mal concebidas y las reemplazaría con aquéllas derivadas del Corán, las cuales son correctas… Le estamos preguntando a nuestras universidades… a que lleven a cabo investigaciones que ayuden a derrocar [las corrientes] ideologías anticonvencionales, que no tienen nada que ver con el Islam y [sólo] lo dañan. Entre los elementos que deben combatir [tales] ideologías anticonvencionales, los principales son nuestros clérigos, guiados por los Mufti… Además, 15,000 mezquitas en Arabia Saudita ofician los rezos del Viernes, y todos ellos pueden usar sus púlpitos para guiar al público a lo largo del camino correcto y prevenir que se descarrilen…» [4]
El terrorismo ha llegado a ser considerado como una parte integral del Islam – y de ser atribuido a todos los musulmanes
Varios días después, el Príncipe Na’if informó que 991 extremistas habían sido acusados de participar en [actividades] terroristas en Arabia Saudita, y que serían llevados a juicio. Él explicó que además de acusar a la sociedad [saudita] de herejía, «estos asesinos criminales han llevado a cabo más de 30 operaciones terroristas contra civiles… contra el personal de seguridad y la madre patria…»
El Príncipe Na’if procedió a describir el daño que los terroristas le habían causado a Arabia Saudita, explicando que no sólo habían dañado sus actividades la reputación del país a nivel mundial, sino que el terrorismo había llegado a ser considerado como una parte integral del Islam y atribuido a todos los musulmanes. Él continuó alabando los esfuerzos de las fuerzas de seguridad sauditas para combatir el terrorismo, declarando que hasta ahora habían podido prevenir más de 160 operaciones terroristas. [5]
Debería señalarse que el Concejo Shura saudita está actualmente debatiendo una ley que castigara a los extremistas involucrados en terrorismo y en otras actividades que socavan la seguridad del estado. Una fuente del Concejo Shura reveló que «la nueva ley tratará con todas las formas de crimen organizado así como también con las actividades relacionadas al terrorismo, y el castigo a aquéllos involucrados en tales actividades será la muerte».
El Príncipe Na’if dijo sobre este asunto que varios crímenes, incluyendo atentados, secuestros y el aterrorizar a la gente en el Reino saudita, eran crímenes haraba. Tales crímenes, definidos en el Corán como actos de «esparcir la corrupción y el caos alrededor del mundo», son caracterizados por el shari’a como especialmente dolorosos castigados con la muerte. [6]
