(Al-Qaeda) en el Estado Islámico en Irak secuestra y ejecuta a empleados del Ministerio del Interior iraquí en la provincia de Diyala

Entre el 2 y el 4 de marzo del 2007, los portales islamistas publicaron tres comunicados del Estado Islámico en Irak (EII) informando sobre el secuestro y ejecución de empleados del ministerio del interior iraquí en la provincia de Diyala. Estos comunicados siguieron a un anuncio del gobierno iraquí reportando sobre el secuestro de 14 empleados del Ministerio del Interior en la provincia.

El primer comunicado, del 2 de marzo, declaró que el EII había secuestrado a 18 empleados del Ministerio del Interior en Diyala en venganza por las acciones de «estos apostatas» contra los sunnis, y especialmente por la violación de Sabrin Al-Janabi. El EII hizo dos demandas: que los funcionarios que participaron en la violación de Al-Janabise sean entregados al EII, y que todas las mujeres sunni sean liberadas de las cárceles iraquíes. El mensaje amenazó que los prisioneros serían ejecutados a menos que las demandas fuesen concertadas dentro de 24 horas.

El segundo comunicado, del 3 de marzo del 2007, informó de la ejecución de 14 empleados del ministerio del interior que habían sido secuestrados el 1 de marzo del 2007. El mensaje enfatizó que éstos no fueron los 14 individuos cuyo secuestro había sido informado por las autoridades iraquíes, sino que habían dos grupos de secuestrados, donde todos habían sido ejecutados. El comunicado declaró luego que las operaciones eran parte del «Plan de Honor» anunciado por el comandante del EII Abu Omar Al-Baghdadi.

El 4 de marzo, los portales islamistas anunciaron un video de cuatro minutos de duración, producido por Al-Furqan, titulado «La Aplicación de la Pena de Muerte Contra los Empleados del Ministerio del Interior en la Provincia de Diyala». El video muestra a un grupo de 18 individuos vendados y a un hombre que apunta un arma hacia ellos. Un presentador que lee luego el tercer comunicado, que también aparece escrito en la pantalla. Este comunicado repite el texto del primer mensaje, del 2 de marzo, y luego agrega que ya que el gobierno de Al-Maliki no había podido responder al ultimátum, «la Corte del Shari’a del EII ha ordenado la aplicación de la pena de muerte». El video luego muestra a los prisioneros arrodillándose en fila y siendo asesinados por dos terroristas enmascarados.

El video, con contenido gráfico removido, puede ser visto en: http://switch3.castup.net/cunet/gm.asp?ClipMediaID=658877&ak=null.

Debajo están las imágenes del video:

Al-Qaeda en el Maghreb Islámico se responsabiliza por el ataque a los empleados de Stroytransgaz

En un comunicado oficial publicado en los portales islamistas el 5 de marzo del 2007, Al-Qaeda en el Maghreb Islámico se responsabilizó por los ataques del 4 de marzo, 2007 en Argelia, en donde una bomba a la orilla del camino fue detonada cerca de un autobús que llevaba a empleados de la compañía rusa Stroytransgaz, matando a tres argelinos y a uno ruso. El comunicado declaró que la unidad responsable del ataque fue comandada por Sheikh Asem Abu Hayyan, y que la operación fue un regalo a «nuestros hermanos musulmanes en Chechenia que están siendo oprimidos y descuartizados por el gobierno criminal de Putin con el apoyo del pueblo ruso. El comunicado también declaró que la operación era también parte de una serie de ataques llevados a cabo en la «Región Dos», comandada por Sufyan Abu Haydra.

Al-Qaeda en el Maghreb Islámico amenaza al ejército argelino y a aquéllos que colaboran con este

El 5 de marzo del 2007, los portales islamistas publicaron un comunicado de Abu Mus’ab Abd Al-Wadoud, comandante de Al-Qaeda en el Maghreb Islámico, en donde condena a aquéllos que colaboran con el ejército argelino en contra de los mujahideen, y les insta a que se arrepientan. Al principio del mensaje, Al-Wadoud acusa al ejército argelino de combatir por la separación de estado y religión, de llevar el país a la quiebra financiera y cultural, y de forjar lazos con los judíos y cristianos. Él insiste «todos aquéllos que han caído en ayudar al enemigo y de combatir al Islam y a los mujahideen» a que regresen al Islam, enfatizando de que aquéllos que se arrepienten no serán procesados como responsables por las acciones anteriores contra los mujahideen, y no se les pedirá que luchen junto a los mujahideen sino sólo prevenirles de actuar contra ellos. Finalmente, Al-Wadoud amenaza que cualquiera que no rompa sus lazos con el ejército argelino se le dará muerte.

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