Lo siguiente son extractos de un programa con el clérigo saudita Muhammad Al-‘Arifi que fue puesto al aire en LBC Tv el 9 de septiembre del 2007.
Para ver este segmento de video: http://www.memritv.org/clip/en/1594.htm
Para ver la página web de MEMRITV sobre el tema de golpear a la esposa en el Medio Oriente visite: http://www.memritv.org/subject/en/159.htm
«Mientras el hombre pueda usar el golpear para disciplinar a su esposa, ella a veces usa sus lágrimas para disciplinarlo a él»
Muhammad Al-‘Arifi: «Los hombres golpean más a menudo a sus mujeres que ellas a los hombres. Yo dije que algunas mujeres golpean a sus maridos porque esto sucede, pero es raro, y no existe necesidad alguna de celebrar conferencias sobre esposas que golpean a sus maridos. Yo creo que esto es menos común, debido a que por naturaleza, el cuerpo del hombre… En la mayoría de los casos, Alá hizo el cuerpo de los hombres más fuerte que el cuerpo de las mujeres. Por consiguiente, tu y tu hermana… puedes ser más alta que tu madre, cierto? Si tu madre está enferma, puedes cargarla, pero ella no puede cargarte a ti. Alá creó a las mujeres con estos cuerpos delicados, frágiles, elásticos y suaves, debido a que usan sus emociones más de lo que usan sus cuerpos. Por consiguiente, mientras el hombre puede querer usar el golpear para disciplinar a su esposa, ella a veces usa sus lágrimas para disciplinarlo a él. Él consigue lo que quiere gritando, mientras ella consigue lo que quiere de él llorando y desplegando sus emociones. Para los hombres, las emociones de las mujeres pueden ser más feroces que el golpe de una espada». […]
«Si ni el [amonestar ni el negarse a compartir la cama] funciona con ella, cual es la tercera opción?»
«Primero, «‘amonéstenlas’ – una vez, dos veces, tres veces, cuatro veces, 10 veces. Si esto no ayuda, ‘niéguense a compartir sus camas’. En tal caso, el marido no duerme con su esposa, o, en otras palabras, está enfadado con ella. Él le da a ella un trato silencioso, negándose a hablar con ella. Si él viene a comer, y ella le pregunta: ‘Cómo estas?’ – él no contesta. Si le pregunta: ‘Quieres algo?’ – él no contesta. Él se distancia de ella en la cama y en la conversación; no duerme con ella, sino que se va a dormir a otra habitación. Él le muestra que está enfadado con ella. Si esto no ayuda – si el amonestar no hace ningún bien, y cuando él se va a dormir a otra habitación, ella dice: ‘Gracias a Dios se ha ido. Ahora tengo toda la cama para mí, dormiré sola en la cama y puedo voltearme todo lo que quiera’. Si ningún método de trabajo funciona con ella, cual es la tercera opción?
Invitado: «‘Y golpearlas'».
Al-‘Arifi: «Eso es correcto. Cómo se realizan estos golpes? Qué piensan ustedes?»
Invitado: «Golpes ligeros».
Al-‘Arifi: Golpes ligeros de qué manera?»
Invitado: «Por ejemplo, yo no la golpearía en la cara…»
Al-‘Arifi: «Pegarle en la cara está prohibido, incluso en lo que se refiere a los animales. Cuando una persona le está pegando a un animal… Aun cuando uno quiere que su camello o asno comience a caminar, no se le permite golpearlo en el rostro. Si esto es cierto para los animales, es más verdadero cuando toca a los humanos. Así que el golpear debe ser ligero y no en el rostro.
«Algunos estudiosos religiosos dicen: ‘Él debería pegarle con un palillo’. Yo de hecho tengo conmigo un palillo. Un hombre que está enfadado con su esposa porque no entiende… Si él le dice: ‘Cuidado, el niño ha caído junto a la estufa’, o: ‘Aparta al niño de la toma de electricidad’, y ella dice: ‘Estoy ocupada’ – entonces él le pega con un palillo o algo parecido. Él no la golpea con una botella, un plato o un cuchillo. Eso está prohibido. Los estudiosos dijeron que él debería pegarle con un palillo.
«Comprueben cuan gentil es el palillo cuando es usado para golpear. Esto les muestra que el propósito es no infligir dolor. Cuando ustedes golpean a un animal, tienen la intensión de causarle dolor para que les obedezca, porque un animal no les entenderá si dicen: ‘Oh camello, vamos, comienza a moverte’. El camello no entiende tales cosas, a menos que le peguen. Un asno no entiende nada más que golpizas, pero una mujer, un hombre, un niño y así sucesivamente, generalmente son afectados más por las emociones que por otras cosas».
«Él debe pegarle donde no deje marcas»
«Si ustedes le pegan con un palillo, o si le pegan ligeramente con su mano, y así sucesivamente, es para significar que: ‘La mujer, ha ido demasiado lejos. No puedo soportarlo más’. Si él le pega, los golpes deben ser ligeros y no deben afear su rostro. Él debe golpearla donde no deje marcas. No deberían golpearla en la mano… Deberían pegarle en algunos lugares dónde no le cause daño. No deben pegarle como si le pegaran a un animal o a un niño – abofeteándolos de lado y lado. Desgraciadamente, muchos maridos golpean a sus esposas cuando están enfadados, y cuando comienzan a golpearlas, es como si le estuvieran pegando a una pared – golpean con sus manos, derecha e izquierda, y a veces usan sus pies. Hermano, es un ser humano al que le estás pegando. Eso esta prohibido. Él no debe hacer esto».