A continuación se presentan extractos de una entrevista con Tareq Al-Zumar, líder de la organización egipcia Jihad Islámica. Al-Zumar ha estado encarcelado por su papel en el asesinato del presidente egipcio Anwar Al-Sadat y fue perdonado por el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas Egipcias en marzo, 2011. La entrevista fue transmitida en Misr 25 TV el 4 de agosto, 2011.
«Existe un consenso de que tal cosa como [mujeres gobernantes] no está permitido»
Tareq Al-Zumar: «Todo el asunto de Al-Qaeda ha sido sacado de proporción internacionalmente ¿Equivalen los errores cometidos por Al-Qaeda en los últimos 12 o 15 años a una mil millonésima parte de los errores y los crímenes perpetrados por los Estados unidos y Gran Bretaña contra la nación árabe e islámica?»
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Entrevistador: «¿Permitiría usted que una mujer o un cristiano – un no-musulmán – esté encargado de la presidencia, el cargo más supremo en el país, en el estado islámico al que usted aspira»
Tareq Al-Zumar: «Estos temas están sujetos a los principios de la jurisprudencia islámica política, que deben regir a la sociedad. Algunos de estos asuntos son considerados como innovaciones, que pueden ser adoptados de acuerdo con las circunstancias de nuestros tiempos».
Entrevistador: «¿Ha pensado usted sobre este tema en su partido político?»
Tareq Al-Zumar: «Con respecto al tema de las mujeres como gobernantes, creo que existe un consenso de que tal cosa no está permitido».
Entrevistador: «¿Y un no musulmán?»
Tareq Al-Zumar: «Existe un consenso acerca de esto también, pero esto no les impide tener otras posiciones en la sociedad. A través de toda la historia islámica, los coptos, o no musulmanes, fueron designados a esos cargos, contrario a la práctica en muchos otros países, incluyendo los países occidentales y europeos». […]
«Si en una sociedad hay ladrones, ¿qué nos impide cortarles las manos a unos cuantos… para hacer más segura la sociedad?»
«Respecto a la aplicación de los castigos islámicos, esto es parte del modelo político islámico. Este es uno de los tipos de pena impuesta en la sociedad. En mi opinión, los rumores en este sentido son un intento de difamar los castigos islámicos, en un momento en que existen castigos peores en las sociedades occidentales, por motivos que no deben incurrir en el castigo».
Entrevistador: «¿Pero cree usted que los castigos islámicos deberían ser implementados, aunque sólo sea con el fin de disuadir y asustar a la gente, tal como cortarle las manos a los ladrones, decapitar a los asesinos y así sucesivamente?»
Tareq Al-Zumar: «Si en una sociedad hay ladrones, que nos impide cortarle las manos a unos cuantos de ellos, con el fin de sensibilizar a la sociedad en un todo más seguro?
«Para volver a la cuestión de implementar los castigos islámicos – cada vez que estos fueron implementados, no fue de la forma en que la gente se imagina. La gente piensa que si la mano de un ladrón es cortada, significa que un millón de manos serán cortadas. Nuestra denuncia es que una vez que este castigo se haya aplicado una o dos veces, el objetivo será cumplido». […]