El diario londinense Al-Hayat publicó una investigación de tres partes del corresponsal Hazem Al-Amín acerca del movimiento salafí de la jihad en Jordania, en particular en la ciudad de Al-Zarqaa – el lugar de nacimiento de Abú Mus’ab Al-Zarqawi, líder de Al-Qa’ida en Irak.

En la primera parte de la investigación, publicada el 14 de diciembre del 2004, Al-Amín revisa sus impresiones de su reunión con combatientes de la jihad de esa ciudad que habían combatido junto a Al-Zarqawi.

La segunda parte, publicada el 15 de diciembre, trata de la infraestructura social y política, en un intento por comprender la contribución única de esta ciudad al nacimiento de esta y otras tendencias fundamentalistas islamistas.

Lo siguiente son extractos de la primera y segunda parte: 1

Al-Zarqaa envió a la mayor parte de la juventud a emprender la jihad en Irak

Según la investigación, «Al-Zarqaa, localizada en las cercanías del campamento de refugiados palestino de Al-Ruseifah, es la capital del movimiento salafí de la jihad en Jordania, y el lugar desde el que emergió. Abú Mus’ab Al-Zarqawi creció en uno de sus barrios, y desde ahí parte a la jihad en Afganistán y luego a la jihad en Irak». En una línea similar, las ciudades de Al-Zarqaa, Al-Ruseifah y Al-salt son «las ciudades jordanas que envían a la mayoría de los jóvenes a combatir en Irak […]. Los famosos residentes de Al-Zarqaa que fallecieron en Irak eran partidarios de Al-Zarqawi, Abd Al-Hadí Daghlas, Yassin Jarrad y Yazan Nabil Jarada. Esto además de las decenas [procedentes de Al-Zarqaa] que se martirizaron antes, en Afganistán».

Los residentes de Al-Zarqaa destacan prominentemente en el campamento de Herat, Afganistán

«Parece que fue en el campamento de Herat [en Afganistán] donde Abú Mus’ab Al-Zarqawi se convirtió en el comandante de campo de los grupos [de combatientes de la jihad ]. Este es también el campamento que los combatientes de la jihad de Al-Zarqaa mencionan repetidamente a lo largo de la historia de su movimiento.

«Cualquiera que siga la corriente salafí de la jihad estará deacuerdo en que el campamento de Herat en Afganistán es un episodio relevante de la construcción de la organización de Abú Mus’ab Al-Zarqawi en Irak hoy. Al-Zarqawi fundó esta organización en 1999, cuando fue a Afganistán. El núcleo del campamento consistía principalmente de los de la ciudad de Al-Zarqaa, como Abd Al-Hadi Daghlas, un palestino fallecido recientemente en Irak; Khaled Al-‘Arouri, actualmente detenido en Irán; y Yassin Jarrad, el padre de la segunda esposa de Al-Zarqawi y el que, según los combatientes de la jihad de Al-Zarqaa, llevó a cabo el ataque suicida de [septiembre del 2003] que causó la muerte de Mohammed Bakr Al-Hakim y la de decenas de iraquíes en la ciudad de Nayaf.

«La idea de crear el campamento de Herat se basaba en [la suposición] de que había varios cientos de combatientes árabes – jordanos, palestinos, sirios y unos cuantos libaneses – que preferirían una dirección independiente de la organización Al-Qa’ida, tras apacibles desacuerdos en temas de fe que les impidió jurar obediencia a Osama bin Laden. El Mulá Omar estaba deacuerdo en aquella época [con la idea de establecer un campamento independiente] y les asignó un área cerca de la ciudad de Herat a condición de que Mohammed Al-Khalayleh [Abú Mus’ab Al-Zarqawi] fuera el comandante del campamento».

«Según un hombre llamado Alí que se encontraba en el campamento, los combatientes del campamento ‘llevaban vida de muhajiroun 2 bajo la dirección de Abú Mus’ab [Al-Zarqawi]'».

La organización de Al-Zarqawi: compuesta de jeques palestinos fundamentalistas que emigraron de Kuwait a Jordania

La investigación denota que tras la invasión de Kuwait por parte de Irak y la Guerra del Golfo de 1991, 250.000 palestinos emigraron de Kuwait a Jordania. Este fenómeno se denominó «los que volvieron de Kuwait». La investigación afirma: «según los cálculos de expertos e investigadores jordanos, unos 160.000 de estos desplazados llegaron a Al-Zarqaa en exclusiva. Los expertos notan una conexión entre su retorno y el florecimiento de la tendencia salafí de la jihad en Jordania, particularmente en Al-Zarqaa».

Deacuerdo con la investigación, el fenómeno de «los que volvieron de Kuwait» fue percibido por muchos en Jordania como «un punto de inflexión en el cambio social». El Centro Jordano de Investigación de la Universidad de Jordania llevó a cabo un estudio en la materia y concluyó que a principios de 1993, «la juventud [de Jordania] se hizo más conservadora que la juventud de las generaciones precedentes, y un alto porcentaje de ellos apoyaba la poligamia y daba prioridad a educar a los varones en lugar de a las mujeres».

Entre los que volvieron de Kuwait había «varias personas pertenecientes a la corriente de la jihad, y al frente [estaba] el jeque Abú Mohammed Al-Maqdisi, [cuyo nombre real es] Issam Mohammed Taher Al-Burqawi. [Es] un palestino que residió en Kuwait, que luego se convirtió en el líder espiritual de esta corriente en Jordania, y que en 1989 se convirtió en el mentor de Abú Mus’ab Al-Zarqawi.

«[Al-Maqdisi] fue de Kuwait a Afganistán con el jeque palestino Omar Mahmoud Abú Omar, conocido por el sobrenombre de Abú Qatadah. Cuando Al-Maqdisi regresó a Kuwait y luego a Jordania, Abú Qatadah halló refugio en Londres. [Pero] estas dos figuras se convirtieron en la principal fuente de autoridad de la ideología salafí de la jihad en Jordania…

«También se encontraba entre los que volvieron de Kuwait Abú Anás Al-Shami, la autoridad legal de la organización de Al-Zarqawi, que falleció hace varios meses en Bagdad, así como Abú Qutaybah, alto oficial militar de la organización Al-Qa’ida. Asimismo, Ghazi Al-Tawba, un líder prominente de la organización de Al-Zarqawi, residía en Kuwait.

«Estos y otros, con Abú Mus’ab [Al-Zarqawi] al frente, constituyeron el núcleo del movimiento salafí de la jihad. Se reunieron a mediados de los años 90, en una de las mezquitas del vecindario de Ma’ssoum, en la ciudad de Al-Zarqaa».

La influencia de la Hermandad Musulmana

La investigación concluye que otro elemento en el fortalecimiento de la corriente salafí en Jordania, y particularmente en Al-Zarqaa, fueron «los sucesos de septiembre de 1970, cuando el ejército jordano expulsó a las organizaciones palestinas de los campamentos de refugiados de Amán y de otras ciudades jordanas. El movimiento de la Hermandad Musulmana, que apoyó al Rey Hussein en su guerra contra las organizaciones palestinas, fue recompensado con el ministerio de educación jordano. El papel de este ministerio a la hora de dar forma a las generaciones educadas con planes de estudios supervisados por la Hermandad Musulmana es bien conocido…»

«En 1982, los miembros de la Hermandad Musulmana identificados con Sayyid Qutb, dirigidos por Abdaláh ‘Azzam – más tarde jeque de los árabes afganos y maestro de Osama bin Laden 3 – junto con el jeque Ahmed Nawfal y el jeque Dib Anis, se unieron a lo que se denominó el campamento de los jeques, que había sido establecido por el movimiento Fatah en la región [del Valle] del Jordán. Desde entonces, la corriente de la Hermandad [Musulmana], afiliada a Sayyid Qutb, comenzó a distanciarse del movimiento; entonces el salafismo creció en estos círculos… Hassan Abú Haniyyah, que investigó los movimientos islámicos en Jordania, apunta que [ya en] los años sesenta, estos jeques estaban influenciados por la corriente salafí, tras las conferencias del jeque sirio Nasser Al-Din Al-Albani en las mezquitas de Al-Zarqaa».

Trabajando juntos: Abú Mohammed Al-Maqdisi y Al-Zarqawi

La investigación también examina la relación entre Abú Mohammed Al-Maqdisi, actualmente en la cárcel en Jordania, y Abú Mus’ab Al-Zarqawi: «Abú Mohammed Al-Maqdisi llegó a Jordania como inmigrante desde Kuwait en 1991. En aquel entonces, sólo era conocido en los círculos salafíes de la jihad, particularmente entre unos cuantos centenares de jordanos que habían oído de él o le habían conocido en Afganistán, a donde había ido [a librar] la jihad.

«Los afganos palestinos y jordanos – entre ellos Abú Mus’ab Al-Zarqawi – constituyeron el núcleo de la corriente que Al-Maqdisi había comenzado a organizar. Los jihadís jordanos se refieren a este período como ‘el principio de la da’wa [propagación islámica]’, y describen los pormenores de Al-Maqdisi desde su casa del campamento de Al-Ruseifah, pegado a Al-Zarqaa. Visitaría sus casas en las diversas ciudades jordanas, a menudo en compañía de Abú Mus’ab Al-Zarqawi». Además, «un ex- jihadí salafí afirma que la da’wa se centró en aquel tiempo en declarar infieles a los regímenes [árabes] [ takfir ], y en oposición a la Hermandad Musulmana».

Según la investigación, después de que Jordania firmara el acuerdo de paz con Israel en 1994, «el movimiento salafí de la jihad se nutría de sangre nueva. Un ex-activista salafí de la jihad señaló el nacimiento de decenas de organizaciones de la jihad clandestinas en Jordania durante esa época; en algún momento llegó a ser miembro de una y sus amigos intentaron convencerle en varias ocasiones de que se uniera a sus organizaciones – mientras, sin que ellos lo supieran, ya era miembro de otra organización. Destaca que continuó siendo miembro de esta organización durante cinco años sin que los aparatos de seguridad lograran descubrirlo.

«La organización clandestina más prominente establecida en Jordania era quizá Bayat Al-Imán, fundada por Al-Maqdisi y Al-Zarqawi. Algún tiempo después del establecimiento de [esta organización], los aparatos de seguridad jordanos descubrieron armamento y explosivos en manos de Al-Maqdisi y Al-Zarqawi y ambos fueron encarcelaron hasta 1999. Durante el período de su encarcelamiento, los dos lograron organizar un número nada despreciable de activistas… En sus actividades entre los presos, los dos emplearon las tácticas de mano dura de Abú Mus’ab y su familiaridad con el mundo del hampa entre el que había vivido en su juventud.

«Igualmente, los partidarios de [Al-Maqdisi y Al-Zarqawi] fuera de la prisión nunca dejaron de visitarles, trayendo y llevándoles cartas. El número de ensayos y libros decretando fatwas y herencia [islámica] [escritos por] Al-Maqdisi en prisión llegó aproximadamente a 100, y sus partidarios citan sus títulos con orgullo.

«[También] parece ser que en prisión, Abú Mus’ab montó una red de conexiones que le ayudaría cuando salió [de prisión en 1999], e hizo preparativos durante meses enteros para ir de nuevo a Afganistán acompañado por decenas [de sus hombres] que estaban en la prisión jordana y por otros que esperaban a que saliera [de prisión]…

«Uno de los ex cronistas [de Al-Zarqawi] dijo que la última vez que [Al-Zarqawi] salió de [Jordania], los aparatos de seguridad [jordanos] no le prestaron atención alguna. Esto fue antes de los sucesos del 11 de Septiembre, y la salida de Al-Zarqawi de Jordania junto con su grupo fue un alivio para los aparatos de seguridad».

La investigación relata que «[un hombre llamado] Abú ‘Othman dice que la personalidad de Abú Mohammed [Al-Maqdisi] era amable, buena y pacífica, mientras que Abú Mus’ab [Al-Zarqawi] mostraba fuerza y firmeza en prisión. Abú ‘Othman añade que la personalidad tribal de Abú Mus’ab [Al-Zarqawi] le hizo posible obtener juramentos de obediencia de otros dentro de la prisión, y que era agresivo. Los jóvenes que le rodeaban en prisión eran verdaderos guerreros de la jihad, y en consecuencia rechazaban las órdenes de Abú Mohammed Al-Maqdisi, prefiriendo a Abú Mus’ab [Al-Zarqawi] debido a su fuerza y determinación. Pensaron que si [Al-Zarqawi] fuera [su] imán, Abú Mohammed Al-Maqdisi tendría tiempo libre para zambullirse en decisiones judiciales independientes [ ijtihad ] y el estudio [religioso]».

El modus operandi de Al-Zarqawi en Irak

Los combatientes de la jihad «relatan que Abú Mus’ab [Al-Zarqawi] utilizó la experiencia de los Ba’th[istas] [iraquíes] en su guerra contra los americanos y los iraquíes, incluyendo lo referente al tema de la seguridad. [Un hombre llamado] Ahmed aclaró esto particularmente respecto a la ciudad de Al-Faluyah, que contenía centenares de antiguos funcionarios de la inteligencia militar iraquí con gran experiencia en la esfera de seguridad. Docenas de ellos juraron obediencia a Abú Mus’ab [Al-Zarqawi] y renunciaron al régimen secular previo…»

La investigación mostró la posición de los combatientes de la jihad de Al-Zarqaa hacia la disputa entre Abú Mohammed Al-Maqdisi y Al-Zarqawi a propósito del plan de la jihad de Al-Zarqawi en Irak. Recientemente publicó un artículo en el que «expresaba sus reservas respecto a la conducta de su discípulo Abú Mus’ab Al-Zarqawi en Irak. 4

«Esto enfureció a los jóvenes combatientes de la jihad, que ven a Abú Mus’ab [Al-Zarqawi] como ‘la gracia divina, y es herejía que alguien piense que cometió un error, incluso su mentor y guía, Abú Mohammed Al-Maqdisi’.»

La investigación también informa de que «un hombre llamado Mohammed visitó al jeque en prisión y le solicitó que se abstuviera [de escribir] cosas que dañaran la unidad entre las filas».


1 Al-Hayat (Londres), 14-15 de diciembre del 2004.

2 Los muhajiroun eran compañeros del Profeta Mahoma, que emigraron con él a la ciudad de Al-Madina.

3 La investigación también observa «el propio Abdaláh ‘Azzam vivió en Al-Zarqaa antes de que se mudara a Amán para estudiar en la Universidad [de Amán]».

4 En julio del 2004, Abú Mohammed Al-Maqdisi colocó un artículo en su página web titulado «Al-Zarqawi – Ayuda y consejo» en el que escribe: «Digo y subrayo que escucho y sigo el caos que impera hoy en Irak, por medios [con] los que quieren manchar la jihad y su honorable imagen volando coches y colocando explosivos en las carreteras, disparando morteros en las calles y mercados, y en otros lugares donde se congregan los musulmanes. Las manos de los luchadores de la jihad deben continuar limpias para que no se manchen con la sangre de aquellos a los que no se debe dañar ni siquiera [si] son rebeldes o sinvergüenzas… También debéis tener cuidado de [no] enredaos eligiendo medios [bélicos] que sean ilegales en la ley [islámica], o medios y métodos opuestos a las opciones apropiadas preferidas por el combatiente de la jihad, o incluir éstos como parte de la reacción a los crímenes de los tiranos – como si el combatiente cruzara las fronteras de la ley [islámica] secuestrando o matando a los que están entre los musulmanes bajo pretextos no basados en la ley islámica, como el pretexto de que trabajan para los infieles [allí] donde tales actos no alcanzan el [grado] de ayuda a los infieles ni ayudan a perjudicar a musulmanes». Ver http://www.abu-qatada.com/r?i=2979&a=p.