El General del ejército paquistaní A.A.K. Niazi (a la derecha) firma el instrumento de rendición ante el General del ejército de India J. S. Aurora el 16 de diciembre de 1971, en Dhaka (imagen cortesía: desconocido)

En los siguientes dos artículos, un destacado diplomático paquistaní y un blogger paquistaní observan la evolución política sin precedentes y la indiferencia de la élite paquistaní, que llevó a la secesión de Pakistán oriental en 1971. Pakistán fue gobernada principalmente por la elite de la parte de Pakistán occidental del país hasta ese entonces. Sin embargo, un movimiento armado, apoyado por el ejército de India, llevó a Pakistán oriental a separarse y convertirse en Bangladesh, con el ejército paquistaní rindiéndose en Dhaka el 16 de diciembre, 1971.

Hay muchas razones por la caída de Dhaka, incluida la discriminación constante contra el pueblo de habla bengalí de la Pakistán oriental por la élite gobernante, un ciclón mayor en esa región en 1970, así como también la negación de su derecho a formar el gobierno de Pakistán a raíz de las elecciones de 1970. En las elecciones, el Partido Popular de Pakistán (PPP) de Zulfiqar Ali Bhutto ganó 82 de los 138 escaños disponibles en el oeste de Pakistán y ninguno en el este de Pakistán. Sin embargo, fue el partido de la Liga Awami del Jeque Mujibur Rehman que ganó la mayoría en el parlamento de Pakistán, en virtud de ganar 162 de los 169 escaños en Pakistán oriental, es decir, más de los 82 escaños obtenidos por el PPP. A Rehman no se le permitió formar el gobierno paquistaní y pasó a liderar un movimiento secesionista.

En su blog publicado titulado, «Hombre Detrás de la Caída de Dhaka», Tanzeel Ahmad, un columnista de Karachi y profesional del mercadeo, culpó a Zulfiqar Ali Bhutto por la secesión de Pakistán oriental. También acusó a Bhutto de fomentar una política islamista en el país, incluyendo el declarar a los musulmanes Ahmadi como no-musulmanes. En su artículo, titulado «Recordando el 16 de Diciembre», el ex diplomático paquistaní Tayyab Siddiqui argumentó de que era la indiferencia de la élite de Pakistán hacia el pueblo de habla bengalí que condujo a la independencia de Bangladesh. Extractos de ambos escritos se dan a continuación.

«Los confusos pasos de [Bhutto] en la implementación del socialismo islámico declarando el viernes como día festivo fueron las peores pasos adoptados por cualquier gobernante en la historia de Pakistán»

Lo siguiente son extractos del blog de Tanzeel Ahmad: [1]

«A pesar de pasar por las causas de la cesación de Pakistán oriental [en 1971]… me di cuenta de que Hitler tenía razón cuando dijo que ‘cuanto más grande la mentira, más gente la creerá’. Similares ‘mentiras mayores’ han sido dichas por nuestros gobiernos anteriores, especialmente aquellas dirigidas por el PPP [Partido Popular de Pakistán de Zulfiqar Ali Bhutto] desde 1971. El 16 de diciembre del 2010, 39 años después de la creación de Bangladesh, [reflexionemos sobre] el cómo nuestros gobiernos en el pasado nos han dicho una gran mentira sobre [tales] acontecimientos políticos.

«De acuerdo con la información disponible en formas diferentes en los medios de comunicación electrónicos e impresos, el Informe de la Comisión Hamoodur Rehman [a las causas de la secesión de Pakistán oriental] cita que la incompetencia, la degeneración moral y las conspiraciones políticas fueron las principales razones de la debacle de 1971. Se mantuvo en el informe que la derrota sufrida no fue el resultado de factores militares por sí solo, sino que se habían producido como resultado de la suma de acontecimientos políticos que tuvieron lugar entre 1947 y 1971.

«Mirando la otra cara de la historia, me parece que el gobierno de entonces fue en realidad el verdadero culpable. Fue el partido de Zulfiqar Ali Bhutto que obtuvo 82 de los 138 escaños asignados a las cuatro provincias en el Pakistán occidental, pero ninguno de ellos… [estaba] en el Pakistán oriental. [En el este de Pakistán, la Liga Awami obtuvo 167 de 169 escaños, alegando formar el gobierno de Pakistán.] Dejando a un lado la consigna planteada por él ‘Idher ham udher tum’, [es decir ‘Nosotros en este lado, ustedes en el otro’] este incluso amenazó a los miembros de la Asamblea de Pakistán occidental de que les ‘quebraría las piernas’ si asistían… a [la] [sesión inaugural del parlamento] pakistaní en Dacca y si… insistían en estar allí deberían comprar un boleto de ida.

«Este tratamiento de paso materno aumentó aún más las quejas de los habitantes de Pakistán oriental y un movimiento de liberación justificado surgió de su lado. Sin embargo, para ese momento [el] ejército de Pakistán no tuvo más remedio que reprimir al movimiento con el fin de salvar el territorio de Pakistán, mientras Bhutto por otro lado seguía mal informando al [Presidente] Yahya Khan [con el fin de evitar que el líder de la Liga Awami Sheikh Mujibur Rehman formara el gobierno], que terminó en la ruptura de la nación…

«[Bhutto fue] percibido como un ‘héroe’ entre ciertos sectores de los paquistaníes por sus movimientos políticos, que por el contrario, demostraron no tener sentido y llevaron al país a una [situación] caótica. Sus pasos sin sentido de la nacionalización de la economía y los pasos confusos en la aplicación del socialismo islámico al declarar el viernes como día festivo fueron las peores medidas adoptadas por cualquier gobernante en la historia de Pakistán. Con el fin de apaciguar a los grupos religiosos, este hizo que los ahmadíes fuesen declarados como no-musulmanes, [lo que] desencadenó un movimiento de violencia sin fin contra una sección pacífica y progresista de la sociedad. La peor parte de esta decisión se sigue sintiendo… y fatalmente alienada de la comunidad en su propia nación. Para mantenerse en el poder Bhutto tomó decisiones que causaron daños irreparables a la estructura social y política del país”.

Para ver el despacho en su totalidad en inglés por favor haga clic en el siguiente enlace:
http://www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/4893.htm


[1] www.tanzeel.wordpress.com (Pakistán), 16 de diciembre, 2010. El texto del blog ha sido revisado ligeramente para su claridad.