El Dr. Al-Youssuf Hadhiri, columnista del diario yemení ‘Aden Al-Ghad, se pronunció en contra de la práctica de los clérigos y predicadores musulmanes de llamar a los judíos ‘descendientes de los monos y cerdos’, y afianzar esta expresión en el discurso público musulmán.[1] En un artículo reciente, este analiza los versos del Corán que son el origen de esta expresión a fin de demostrar que es falsa, y sostiene que el uso de esta expresión sólo daña al Islam.
A continuación extractos del artículo traducido:[2]
Dr. Al-Youssuf Hadhiri
«Desde los albores de nuestra vida fuimos criados sobre una serie de términos [que absorbimos] durante nuestros estudios, de nuestros profesores, de algunos de los medios de comunicación [impresos] y de mensajes sociales prevalentes, hasta que [se convirtieron en parte de la] cultura islámica de la cual… dependemos en nuestra actitud hacia otras religiones, y especialmente hacia el judaísmo y el cristianismo. Sin embargo, el término más importante con el cual hemos vivido, y todavía vivimos, es [el utilizado para] describir a los miembros de [éstas] otras dos religiones, es decir, los ‘descendientes de los monos y cerdos’. De hecho, esto se ha convertido en un concepto fijado en nuestras mentes, ya que creemos fue dictado del Señor del Universo a nuestro venerado profeta, el fiel Mahoma…
«Sin embargo, una vez, mientras hojeaba los versos del Corán que describen la historia y [explican] la fuente de esta noción de los simios y su conexión con el judaísmo y los judíos, me encontré acosado por las preguntas que surgieron a mi mente y causaron que detectara una discrepancia entre mi racionalismo y el método para extraer conclusiones y [las opiniones de] los clérigos religiosos musulmanes, juristas y predicadores que han estado durante mucho tiempo [inculcando] este concepto y esta percepción en la sociedad musulmana.
«Vayamos de nuevo al principio – a los antepasados de estos descendientes a los que desde hace tiempo hemos descrito como simios. Si somos lógicos y honestos con nosotros mismos y con los demás, independientemente de la hostilidad y el conflicto que ha existido entre [nosotros y] ellos a lo largo de la historia, [debemos examinar] la historia sobre los violadores del sábado a quien Alá se dirigió. La historia [del Corán] sobre ellos dice: ‘Y les preguntamos (O Mahoma) por el pueblo situado al mar – cuando trasgredieron sobre (el tema del) sábado – cuando el pescar fue algo abierto para ellos en su día de reposo, y el día de no reposo no vinieron a ellos. Entonces les juzgamos porque fueron perversos desobedientes. Y cuando una comunidad entre ellos dijo: «¿Por qué aconsejan (o advierten a) un pueblo a quien Alá está (próximo) a destruir o castigar severamente?» Ellos (los consejeros) dijeron: «Para ser absueltos ante vuestro Señor y quizás puedan temerle». Y cuando se olvidaron de aquello a lo que se les había recordado, salvamos a quienes habían prohibido el mal y nos apoderaron de aquellos que habían hecho mal, con una pena severa y miserable, porque desafiadamente estaban desobedeciendo. Así que cuando fueron insolentes sobre lo que se les había prohibido, Les dijimos: «¡Convertíos en monos, despreciados»‘ [Corán 7:163-167].
“Cualquiera que estudie estos versículos lógicamente, con una mente diáfana y honesta, descubrirá que la gente descrita en estos estaban divididos en tres grupos: un grupo cuyos miembros Alá transformó en monos luego de que le desobedecieron, se opusieron a sus edictos y pescaron el día sagrado Sabbath, y dos grupos que no pescaron, [sino que más bien] cumplieron el mandamiento de Dios y la prohibición de pescar que este les impuso. Por otra parte, un grupo de los dos incluso cumplió [la orden] de prohibir la maldad y aconsejó al primer grupo rebelde a obedecer a Alá y temerle. Por lo tanto, sólo los rebeldes cambiaron su forma y se convirtieron en animales, mientras que los miembros del grupo obediente se mantuvieron como humanos… Ya que todos sabemos que los animales dan luz a animales, esto significa que los seres humanos judíos a los que Alá transformó en simios, si fueron capaces de multiplicarse para ese entonces, deben haber dado luz a simios que dieron a luz a [más] simios, y así sucesivamente hasta el día de hoy. [Por lo tanto, sus actuales] descendientes son simios, y no seres humanos, mientras por desgracia escuchamos de algunos académicos, juristas y predicadores musulmanes [que] les regañan y maldicen. Por otra parte, las leyes de la naturaleza y la lógica [dictan que] los seres humanos cuya forma Alá no alteró, y que obedecieron sus edictos durante ese período, produjeron descendientes que son humanos hasta el día de hoy. Por lo tanto los judíos que son nuestros contemporáneos son descendientes de judíos que obedecieron a Alá durante ese período. En otras palabras, son descendientes de personas que fueron creyentes, independientemente de su condición actual [de creyentes o incrédulos], y no son descendientes de los monos y cerdos, tal como actualmente diseminan algunas de las mentes que le hacen daño a la religión islámica y a su fiel profeta.
«El que investigue la biografía del Profeta y la de los hadiths que pronunció no encontrará ni una sola mención hacia [los judíos] en referencia a la frase descendientes de los monos y cerdos. Nosotros nunca escuchamos estas palabras [hasta] que la religión se entremezcló con la política y los clérigos se sumergieron en la política desde la coronilla a los pies. El judaísmo y el cristianismo son dos religiones que nosotros los musulmanes debemos creer, de lo contrario nuestra creencia será deficiente o inaceptable ante los ojos de Alá… El uso de estas expresiones afecta negativamente nuestra religión islámica, a pesar de ser inocente de tales expresiones y de las personas que las utilizan, cuya [conducta] se refleja en ellos solos y no en el Islam…»
[1] Véase MEMRI Informe No. 11, » Basados en los versos coránicos, interpretaciones y tradiciones, los clérigos musulmanes declaran: Los judíos son descendientes de los monos, cerdos y otros animales, «1 de noviembre, 2002.
[2] ‘Aden Al-Ghad (Yemen), 27 de mayo, 2013.