Clérigos árabes han declarado recientemente que el terremoto y el resultante tsunami que azotaron Japón el 11 de marzo, 2011 fue la manera de Alá de castigar a los «infieles». Por ejemplo, el jeque saudita Abd Al-Rahman Al-Barrak escribió en el portal islámico almoslim.net que es ignorante pensar que los desastres naturales son fenómenos aleatorios y exhortó a los musulmanes a que se regocijan cuando los infieles, «los enemigos del Islam y los musulmanes», son castigados.

En su columna del 24 de marzo 2011 en el diario kuwaití Al-Qabas, la columnista Dalaa Al-Mufti criticó mordazmente opiniones como la de Al-Barrak y respondió un correo electrónico que ella recibió pidiéndole que se abstenga de simpatizar con las víctimas del desastre del tsunami japonés ya que fue una acción deliberada de Alá contra los infieles, tiranos y paganos japoneses. Ella señaló que la humildad mostrada por los japoneses en hacer frente a la catástrofe demostró la falsedad de la afirmación de que son tiránicos y malvados y acusó al autor del correo electrónico de distorsionar el Islam señalando que los países musulmanes también han sido afectados por catástrofes naturales. [1]

A continuación se presenta una traducción de la columna de Al-Mufti:

Los japoneses se han comportado honorablemente durante la crisis

«Yo estaba asombrada, mi presión arterial y niveles de azúcar en la [sangre] subieron y mis células cerebrales casi estallaron de rabia cuando recibí un correo electrónico de ‘uno de ellos’ advirtiéndome sobre los tormentos del infierno que me esperaban si me atrevía a expresar condolencias por el desastre en Japón y por los residentes [del país]. Su largo correo electrónico leyó, en parte: «Lo que ocurrió en Japón – la tierra de la incredulidad, el ateísmo y la idolatría – es un grito de advertencia a los infieles y ateos, que han demostrado falta de fe en contra de Alá y fueron rebeldes, arrogantes y tiranos en la tierra. Lo triste es que nos encontramos con algunos musulmanes ignorantes – pueda Alá colocarlos en el camino correcto – y se apiade de estos infieles, pecadores y adoradores de ídolos».

«Que extraño, no hemos escuchado hablar de ningún japonés tiránico y arrogante – son un pueblo conocido por la modestia y la humildad. No sabíamos que habían actuado de forma tirana en la tierra – ellos fueron los que sus ciudades quedaron totalmente destruidas durante la Segunda Guerra Mundial y que las reconstruyeron con firmeza y determinación, transformando a Japón en uno de los países más grandiosos e importantes del mundo.

«Cuando las imágenes del momento en que el terrible terremoto en Japón fueron transmitidas, nos sorprendió ver a los japoneses actuar con calma, a pesar del miedo que les golpeó. En lugar del impacto [que sería] ‘lo usual’ siempre [en tales circunstancias], cientos de personas se levantaron y esperaron que el semáforo [cambiara a verde] para que pudieran seguir, mientras el suelo temblaba bajo ellos. A pesar de todo, no hubo un solo incidente de robo o saqueo, que solemos ver en tales circunstancias. En una entrevista con la BBC, el estadounidense a cargo de las operaciones de rescate, dijo que no podía creer la serenidad, la cortesía, el respeto y el amor por su prójimo que caracteriza a los japoneses en un momento tan difícil. ¿Son estos los incrédulos, malvados y tiránicos japoneses que el autor escribió en su correo electrónico?»

«Si los desastres naturales son dirigidos únicamente contra los infieles, ¿Por qué estos también han azotado Indonesia, Afganistán, Irán, Argelia y otros países musulmanes?»

«Estoy sorprendida por la condescendencia de algunas personas, [que actúan] como si sólo ellos merecieran la misericordia de Alá y Su Paraíso. Estoy asombrada por aquellos [como el autor de este mensaje] que se regocija cuando le ocurre un desastre a los demás y me entristece que vinculen sus horrendas consignas en nuestra religión monoteísta [es decir, el Islam] y utilicen eventos e historias incorrectas para distorsionar la misericordia y la paz [que caracterizan] nuestra fe. ¿Tiene sentido para alguien el observar con tanta maldad un devastador terremoto, un horrible tsunami y una fuga radiactiva que amenaza el planeta?

«Tengo una pregunta para ese hombre que se regocija: Si los desastres naturales van dirigidos exclusivamente contra los infieles, ¿por qué azotaron también a Indonesia, Afganistán, Irán, Argelia y a otros países musulmanes ¿Existe [algo así como] un terremoto islámico y un terremoto infiel?

«Está claro que Japón no le preguntó a los kuwaitíes de que religión eran cuando les dio $12 millones en efectivo durante la invasión a Irak – y les pagamos con un pensamiento catastrófico repugnante y con un tsunami de ignorancia que inunda la mente de algunos de nosotros. Pero en última instancia, sólo podemos pedirle al Alá que conocemos – no el que [el autor del e-mail] conoce – que tenga piedad de los japoneses y pueda ayudarles a levantarse de donde han caído, por lo que restaurarán la riqueza de la humanidad con su actividad, moral y cultura». [2]


[1] El redactor Dr. Abd Al-Aziz Hussein Al-Sawigh escribió en el diario saudita Al-Madina que el mensaje enviado a Al-Mufti fue el mismo a algunas reacciones en Arabia Saudita tras las inundaciones en Jeddah, en noviembre del 2010. (Al-Madina, 26 de marzo, 2011).

[2] Al-Qabas (Kuwait), 24 de marzo, 2011