Mientras las protestas contra el presunto fraude electoral en las elecciones presidenciales iraníes del 12 de junio, 2009 se encontraban en su clímax en Irán y en otros países, el semanario egipcio Roz Al-Yousef, el cual está afiliado con el hijo del Presidente egipcio Hosni Mubarak Gamal Mubarak, dedicó un gran parte de su edición del 27 de junio a artículos contra el gobierno iraní. Si bien los autores de los artículos criticaron severamente al régimen iraní, comparándolo con el nazismo, el fascismo y Al-Qaeda, y cuestionaron su legitimidad, no se centraron específicamente en las elecciones presidenciales iraníes, sino que las utilizaron como pretexto para vociferar opiniones anti-iraníes.

Las relaciones entre Irán y Egipto han sido tensas desde comienzos de la Revolución Islámica en Irán en 1979, intensificándose estas después de la guerra en Gaza de diciembre, 2008 y la captura en abril del 2009 de una célula del Hezbolá que opera en Egipto. [1] En consecuencia, los artículos elaborados sobre el «mandato del jurisprudente» (velayat-e faqih) en Irán establecidos por la revolución, tratando de refutar la afirmación oficial iraní de que fue instaurado a través de elecciones democráticas expresando la voluntad del pueblo, y demostrando que el concepto de gobierno de los clérigos iraníes es incompatible con los principios de la democracia.

Parece ser que al atacar el estado teocrático, los autores de los artículos fueron motivados en parte por consideraciones políticas internas – que tienen por objeto advertirle al público egipcio acerca de las intenciones de la Hermandad Musulmana de formar un estado islámico en Egipto, y socavar la imagen de la organización presentándolo como un aliado de Irán. Criticando a Irán, los autores también condenaron el lobby iraní en la prensa egipcia, el cual está representado por un grupo de periodistas que son financiados por Irán y que sirven a sus intereses.

A continuación se presentan extractos de los artículos de la edición del 27 de junio, 2009 de Roz Al-Yousef:

Editor de Roz Al-Yousef: La democracia de Irán es falsa y su presidencia insignificante

En un artículo titulado «Dictadores en Nombre de Alá: El Líder Supremo Absoluto y el Presidente Obediente», el editor de Roz Al-Yousef ‘Abdallah Kamal escribió: «La situación [en Irán], ha alcanzado el punto donde [las elecciones] fueron arregladas y se le disparó a la [gente] con el resultado de decenas de muertos en las calles. Un verdadero infierno! Y sin embargo, aún tratan de convencernos de que [las elecciones], fueron democráticas y vitales y que han dado lugar a un cambio de gobierno.

«Este país [Irán]… no es nada más que un gran fraude y un gran escenario de corrupción y conspiraciones… Ningún ciudadano iraní puede participar en las elecciones sin la aprobación del Líder Supremo y el Consejo Guardián. Este debe ser 100% fiel a la Revolución, y se espera que crea en esta y defienda sus principios. En otras palabras, antes de ganar los votos del público, un candidato debe obtener el ‘voto sagrado’…»

Kamal escribió que las elecciones en Irán son un mero espectáculo, y por tanto carecen de valor alguno: «Dejando de lado por el momento el juego de las elecciones presidenciales, que sólo sirven para entretener a la gente… cuyo voto no tiene incidencia alguna sobre la naturaleza del estado, el régimen revolucionario ha sido dirigido durante los últimos 30 años por tres personas: el fallecido [fundador de la Revolución Islámica Ayatolá Ruhollah] Khomeini, [el Presidente del Consejo y ex presidente iraní Ali Akbar Hashemi] Rafsanjani y [el Líder Supremo iraní Ali] Khamenei…»

Kamal lanzó luego un ataque personal contra el Presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad, y desestimó la Presidencia como algo sin importancia. Él escribió: «El presidente del régimen iraní no es presidente tal como se entiende el término en Egipto, en los Estados Unidos o en Francia – regímenes en los que el presidente es elegido. La verdad es que [en Irán], el soberano absoluto con el más amplio alcance de autoridad es el [supremo] guía, es decir, el máximo líder revolucionario, quien no es elegido por el pueblo, sino por la Asamblea de Expertos…

«El presidente de [Irán] es de escasa importancia en este régimen – quien sólo vela por la implementación de políticas y funciones de un alto vocero, o, si queremos ser más benéficos, como el jefe de gobierno – mientras que, según el artículo 57 de la Constitución, toda autoridad está en manos del líder supremo, quien es denominado «el gobernante absoluto y el imam de la nación'».

El régimen de Irán es dictatorial y tiránico

Otro artículo, titulado «Estado Religioso – Mentira Política» incluye una entrevista con varios intelectuales egipcios centrándose en Irán, realizado por el periodista Asmaa Nassar. En esta, el líder del partido Al-Tagammu ‘Dr. Rif’at Al-Sayyed declaró: «El verdadero problema es que [Irán] tiene sólo una fuente de autoridad, que no es la Constitución, ni la ley, ni la opinión de la mayoría. Más bien, es el ‘mandato del jurisprudente’, [que representa] la visión religiosa de los fundadores del estado religioso, que no honra ni a la constitución ni a la democracia».

En otro de los artículos, el investigador del Islam político Ismael Hosni estableció un paralelo entre el régimen de los ayatolaes iraníes y la dictadura, alegando que el denominador común en una fuente de teocracia autoritaria y en una dictadura es tiranía. Él escribió: «Ambos [tipos de régimen claman] poseer la verdad absoluta, y no dejar pasar un solo día sin [ejercitar] la tiranía o privar a otros de la libertad de expresar sus opiniones…»

Varios de los autores de los artículos de Roz Al-Yousef sostuvieron que la República Islámica nunca, desde su creación, reflejó la voluntad del pueblo, apoyándose en cambio en el poder, la intimidación, la coacción y la violencia. Por lo tanto, Hosni afirmó que cuando el Sha fue depuesto en 1979, los clérigos en Irán eliminaron los elementos liberales de izquierda que habían participado en el golpe: «Ellos [es decir, los clérigos] lograron [adquirir el control total] de la situación debido a la tiránica y agresiva naturaleza de su organización, la cual se rige por el principio de obediencia ciega, a causa de la ruptura y discordia en el movimiento [nacional], y aprovechándose del caos en la calle iraní. Capitalizando en el alto y constante aumento de analfabetismo entre la población, atrajeron a una enorme cantidad de gente común alrededor de llamativas consignas religiosas y asumieron el liderazgo del movimiento nacional…»

En un artículo titulado «La Historia Negra de la Revolución de los Ayatolaes», el Dr. Jamil Al-Sayyar analizó los métodos por los cuales los clérigos iraníes establecieron el mandato absoluto y suprimieron a la oposición. Él escribió: «Cuando [el Sha fue depuesto] a mediados de agosto de 1979, decenas de publicaciones y periódicos iraníes opuestos a la idea de un gobierno islámico fueron cerrados. El [Ayatolá Ruhollah] Khomeini denunció airadamente las protestas en contra de los cierres, diciendo: ‘Pensábamos que estábamos tratando con seres humanos, pero al parecer este no es el caso…’

«En marzo de 1980, el caos de la Revolución Cultural irrumpió, y las universidades iraníes de izquierda y fortalezas marxistas – fueron cerradas…

«En julio [de 1980], la [recién creada] teocracia despidió a 20.000 maestros y 8.000 funcionarios, con el argumento de que estaban ‘demasiado occidentalizados’…

«Aunque la mayoría de los iraníes acepta [el ‘mandato del jurisprudente’], los intelectuales y [varios] grupos políticos en Irán lo rechazan categóricamente – y muy pronto descubrirán que el destino de todos los que se oponen a esta ideología es la muerte…»

Al-Jamil concluye que la revolución iraní no ha mejorado la situación del pueblo iraní, que «después de derrocar una dictadura tiránica, se encontró a si misma encasillada en una teocracia tiránica».

El principio del fin de la República Islámica

La mayoría de los autores y entrevistados acuerdan en que los recientes acontecimientos en Irán, marcaron el comienzo del fin de la República Islámica. Pero difieren en sus predicciones en cuanto al momento en que esto sucederá, y también en sus evaluaciones de los factores contribuyentes. Algunos sostuvieron que la disminución general de popularidad de las organizaciones religiosas que tratan de establecer un régimen dictatorial lo llevaría a su colapso – tal como ocurrió con los talibanes, al Hezbolá y la Hermandad Musulmana en Egipto. El Dr. Jihad ‘Awda, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Helwan, declaró: «La historia ha demostrado que las teocracias no puede perdurar. En ningún periodo histórico las naciones han sido capaces de tolerar un régimen político que tiene como base una visión religiosa monolítica del hombre y su comportamiento y en un solo concepto de lo que es o no es permisible…»

El editor del semanario del Ministerio de Cultura egipcio Al-Qahira, Salah ‘Issa, afirmó que las protestas que siguieron a las elecciones presidenciales de Irán fueron montadas por la generación más joven «nacidos después de la revolución, cuya conciencia ha sido formada de una manera diferente».

«Él agregó:» [Esta generación] tiene otros sueños, formados en un mundo que está más abierto. Cuarenta y cinco millones de personas en Irán usan teléfonos celulares e Internet, y tienen más oportunidades de interactuar con el mundo. Ellos piensan diferente y sueñan con un mundo distinto – uno basado en el pluralismo racial y cultural. Esto es lo que ellos han encontrado en la civilización humana a la cual han sido expuestos.

«Han percibido una enorme contradicción entre estas ideas y la ideología del estado teocrático en el que viven… La humanidad descartará la teocracia al igual que ha descartado el nazismo, el fascismo y otras formas de dictadura».

En su artículo, ‘Issam’ Abd Al-‘Aziz sostuvo que los recientes acontecimientos en Irán significaron una protesta nacional contra la política externa e interna de Ahmadinejad, la cual ha requerido un alto precio del pueblo, y expresó esperanzas de que el rival de Ahmadinejad podrá resolver los problemas que acosan a Irán.

Otros señalaron que fue la intervención occidental que ha socavado al régimen teocrático de Irán. «El conferencista de la Universidad ‘Ain Shams Dr. Muna Abusana declaró: «Los acontecimientos en Irán no hubieran sido posibles sin la ayuda de la comunidad internacional, y esto es cierto en el caso del Líbano. Hezbolá estaba al borde de la victoria, pero de repente las cosas se voltearon y perdieron las elecciones.

«Recientemente, la comunidad internacional ha profundizado claramente que una teocracia representa una grave amenaza a la modernización y la civilización… Una guerra a gran escala se está librando en contra de este concepto -, y es por esta razón que está en retirada. Nos enfrentamos a una oportunidad histórica, que tenemos que aprovechar con el fin de salvar a nuestra civilización…»

El Dr. ‘Sayyar Al-Jamil, sin embargo, tomó una postura diferente. Aconsejó a los Estados Unidos y a Gran Bretaña a que se abstengan de interferir en los acontecimientos en Irán, afirmando que cualquier amenaza externa para el régimen sólo generará un mayor apoyo entre el pueblo iraní.

Críticas de los aliados de Irán en el mundo árabe

En sus artículos, los autores también criticaron a los países árabes aliados con Irán, cuyas relaciones con Egipto son tensas. El editor de Al-Roz Al-Yousef ‘Abdallah Kamal criticó a elementos árabes que elogiaron a Irán en la prensa árabe, en particular, el Ministro del Exterior sirio Walid Al-Mu’allem y el Emir de Qatar. Él dijo que Al-Mu’allem «actuó como si el fuera el Ministro de Asuntos Exteriores de Irán», y criticó al Emir por decir que «Irán ha tenido cuatro presidentes en el período [pos] revolucionario». Kamal escribió: «[La declaración del Emir] puede haber sido intencional, pero tal vez simplemente se olvidó de que han habido seis [presidentes iraníes]: el primero huyó de la revolución, mientras que el segundo fue asesinado por su gran generosidad…»


[1] Véase MEMRI Investigación y Análisis No. 512, «Egipto: La Célula del Hezbolá en Egipto – Una Conspiración Conjunta de Irán, Siria, Qatar, Hezbolá, Hamas y la Hermandad Musulmana», 27 de abril, 2009, http://www2.memri.org/bin/espanol/articulos.cgi?Page=countries&Area=egypt&ID=IA51209.