Lo siguiente son extractos de una entrevista con la psicoterapeuta egipcia Dra. Radhwa Farghali, la cual fue presentada en Al-Jazeera TV el 5 de agosto, 2010:
Para ver este segmento de video en MEMRI TV, visite
http://www.memritv.org/clip/en/0/0/0/0/0/0/2612.htm.
La ley trata a las mujeres con más dureza que a los hombres
Dra. Radhwa Farghali: «En algunos casos, la ley no trata a las mujeres y los hombres por igual. Tomemos, por ejemplo, el tema de los [asesinatos] por honor…»
Entrevistador: «Así que existe una ley para los hombres y otra para las mujeres?»
Dra. Radhwa Farghali:… «Exactamente, a pesar de que la discriminación en estas cuestiones no es ordenado por la religión. Tomemos, por ejemplo, el tema de la prostitución. Si una mujer se la descubre en un caso relativo a las relaciones sexuales, es castigada severamente, mientras que al hombre se le deja sin un rasguño. En la mayoría de estos casos, el hombre se convierte en evidencia para el estado, mientras que la mujer recibe el castigo más severo -… por no mencionar el daño social hecho a ella y la marca de vergüenza con que carga. Esto no quiere decir que estoy personalmente defendiendo la promiscuidad de la mujer, o que estoy pidiendo por penas más leves para las mujeres, pero al menos, debe haber igualdad, ya que hay dos partes en este crimen, entonces ¿cómo se puede castigar a una de las partes y a la otra no?»
Entrevistador: «¿Es esto cierto para las legislaciones de todos los países árabes?»
Dra. Radhwa Farghali: «Las leyes de la mayoría de los países árabes no castigan al hombre y la mujer por igual, a pesar de que la religión los trata por igual. La segunda cuestión tiene que ver con los asesinatos por honor. Un hombre tiene derecho a asesinar a su hermana, a su hija, o a su esposa, si es atrapada en circunstancias inmorales. Lo mismo no ocurre para las mujeres. Si una mujer mata a su esposo, que la engañó, ella está sujeta a severas medidas legales y en la mayoría de los casos, es castigada como a cualquier asesino. El hombre, en cambio, se considera que está defendiendo el honor y se le impone una sentencia mitigada o incluso es absuelto».
Las esposas árabes son tratadas «como una pieza de mobiliario en la casa»
Entrevistador: «Tenemos en línea a Ibrahim Abdallah de Arabia Saudita. Hola….»
Persona que llama por teléfono: «El Islam le ha dado a todos sus derechos ¿Qué se dice sobre la violencia de las mujeres contra los hombres? Por ejemplo, una mujer podría obstinadamente rebelarse contra su marido, salir de casa sin su permiso, traer a gente que este odia al hogar e incitar constantemente a sus hijos en su contra. Algunos maridos fueron incluso asesinados por esposas desequilibradas, con trastornos mentales o retrasadas socialmente. A esta lista debería añadirse la traición sexual de la mujer al marido, dándose a conocer delante de los hombres en lugares públicos, reprendiendo a su marido por ser pobre, comparándolo con otros, viajando al exterior por su cuenta, insistiendo en trabajar sin su permiso, siempre queriendo tener la última palabra y siempre utilizando el arma de la que pretende estar oprimida. Allá dijo sobre las mujeres: ‘Ciertamente, grande es su astucia’. Debería existir igualdad entre los derechos del hombre y la mujer.
Entrevistador: «Gracias, hermano Ibrahim […]”.
Dra. Radhwa Farghali: «En la sociedad árabe, las mujeres son tratadas como si fueran menores de edad o incompetentes. El hombre tiene derecho a golpear a su esposa con el fin de disciplinara. Este tiene derecho a patearla, quemarla y a veces incluso asesinarla, o degradar su cuerpo, como forma de disciplina. Ella es como una pieza del mobiliario en la casa. […]
«¿Por qué tiene un hombre que casarse con cuatro esposas? Si un hombre está casado con una buena esposa, que se comunica con él psicológica, social y físicamente y cría a los hijos ¿por qué querría casarse con cuatro esposas? Todo en aras de la variedad?
