¿Permite la ley religiosa visitar las pirámides egipcias?

Las autoridades religiosas sauditas han estado examinando recientemente el tema de si a un musulmán se le permite visitar las pirámides egipcias – un lugar turístico favorecido por los saudis – o cualquier otra tumba de infieles. Se han emitido fatwas permitiendo sólo visitar las pirámides con el objetivo de aprender una lección moral (pertinentes a la muerte y al mundo por venir) basados en las palabras del Profeta en el hadith: «Visiten las tumbas, porque estas les recuerdan el mundo por venir». Otras autoridades religiosas, sin embargo, han prohibido visitar las pirámides porque estas son tumbas de infieles.

Lo siguiente son opiniones de algunos muy conocidos estudiosos religiosos:

Disertantes universitarios sauditas: Visitar las pirámides es permisible – bajo ciertas condiciones

En julio del 2007, el Dr. Muhammad Al-Khudhairi, conferencista en la Universidad Al-Qassim en Arabia Saudita, publicó en www.Islamlight.net un fatwa permitiendo visitar las pirámides egipcias con el objetivo de aprender una lección moral. A continuación se presenta la traducción del fatwa:

«En lo mejor de mi conocimiento, las pirámides son tumbas de politeístas, y a un musulmán se le permite visitarlas con el objetivo de aprender una lección moral. Visitar estas tumbas [tiene varios propósitos]:

«1. Aprender una lección moral y ser advertido, tal como se declara en el hadith, basado en la [fiable] colección de Musulmán, transmitido oralmente por Abu Huraira, que dijo: ‘El Profeta visitó la tumba de su madre y lloró, haciendo que todos a su alrededor lloraran con él, y dijo: ‘He pedido el permiso de Alá para pedir perdón por mi madre, pero [mi demanda] no fue concedida. Así que le pedí permiso para visitar su tumba, y Él me lo concedió. Por consiguiente, visiten tumbas, ya que estas les hacen recordar la muerte’.

«2. Implorar en nombre del fallecido, siempre que sean musulmanes, tal como se ordena en varios hadiths…

Basados en lo anterior, no me parece a mí que existe una prohibición contra el ir a ver las pirámides, pero es obligatorio en el [visitante] adherirse a los siguientes principios:

«a) Uno no debe hacer un viaje especial a las pirámides, o un viaje que requiere preparaciones especiales. Un hadith fiable de los profetas declara: ‘No se preparen para el viaje, excepto a [las siguientes] tres mezquitas: Mi mezquita [e.d. la Mezquita del Profeta en Al-Medina], la Mezquita Al-Haram en la Meca, y la Mezquita Al-Aqsa’.

«b) El lugar no debe estar lleno de objetos abominables, ya que no es apropiado para un musulmán ser expuesto a lugares que contienen tentaciones y objetos abominables, por motivos de entretenimiento o por la causa de contemplar las maravillas de Alá.

«c) Se prohíbe a las mujeres visitar estos lugares, y se les prohíben realmente visitar tumbas, según las sagas religiosas.

«d) [La visita no debe ser] con la intención de engrandecer estas tumbas o a los muertos que estas contienen, de rodearlos, o de tocarlos con el objetivo de ser bendecidos por estos, tal como es la costumbre de algunos visitantes.

«El Jeque Al-Islam Ibn Taymiyya declaró en su libro Visita de Tumbas en Busca de Ayuda de los Muertos: ‘No existe ningún objeto inanimado en el mundo que a uno se le permita besar salvo la piedra negra [en la Ka’ba]. Está demostrado en dos fiables hadiths que ‘Omar dijo: ‘Juro que sé que tu adoras una piedra que ni daña ni ayuda, y si no hubiera visto al Profeta besarla, yo no la habría besado [tampoco]’. Por consiguiente, los imams no están de acuerdo entre ellos si a un hombre [se le permite] besar o bendecir las dos esquinas de la Ka’ba [en ambos lados de la piedra negra], o sus alrededores, o colocar el lugar de oración de Abraham adyacente a la Ka’ba, o la piedra dentro del Domo de la Roca, o la tumba de cualquiera de los profetas o virtuosos.

«e) Esta prohibido hacer votos de castidad cuando uno esté de lado de estas tumbas, o de ofrecer súplicas en estos lugares, ya que éstos son actos rituales que deben ser dedicados a Alá'». [1]

El Dr. ‘Ali Al-Zahrani, conferencista en la Universidad Um Al-Qura en Arabia Saudita, había previamente emitido un fatwa similar permitiendo visitar las pirámides. En ese fatwa, publicado en www.islamtoday.net, Al-Zahrani escribió que visitar las tumbas de politeístas e infieles «es generalmente permitido para recordarse a sí mismo de la muerte; sin embargo, está prohibido ofrecer súplicas o pedir perdón en nombre del fallecido». Él dijo que «una visita con la intención de ofrecer súplicas en nombre del fallecido es permisible, basado en la ley [islámica], sólo respeto a [las tumbas] de musulmanes. En general, se permite visitar las pirámides, pero está prohibido si, fuese normalmente el caso, donde hombres y mujeres se entremezclan [en el lugar], con el último medio desnudo. Lo mismo es verdad si existe temor de que la visita fortalecería la propensión de uno por las tendencias jahili faraónicas, o aumentara el número de defensores hacia esto». [2]

Jeque saudita: Las pirámides contienen tumbas de tiranos infieles»

Junto con las autoridades religiosas que permiten visitas a las pirámides bajo ciertas condiciones, hay aquéllos que las prohíben. En mayo del 2004, el Jeque Maher Al-Qahtani, administrador de la red en www.alsonan.net (el cual se especializa en las tradiciones del Profeta), publicó un fatwa que prohíbe visitar las pirámides egipcias sobre las bases de que contienen tumbas de infieles. A continuación se presenta la traducción de su fatwa:

«Se prohíbe entrar en las casas [de los infieles] o en las ruinas de las casas en las que solían morar, y se prohíbe visitarlas si se sabe que tiranos infieles [moraron allí]. Si un visitante [musulmán] debe pasar por [tales sitios], debe hacerlo con prisa – según lo que se nos ha transmitido de Bukhari y Musulmán a través de Ibn ‘Omar – ya que cuando el Profeta pasó por las piedras [ruinas de estructuras], dijo: ‘No entren en las casas de [los infieles] quiénes se infligieron iniquidad en si mismos [e.d. se perjudicaron a si mismos no abrazando el Islam], a menos que estés llorando [de miedo] de que esto te perjudicará al igual que le perjudico a ellos’. Él luego miró hacia adelante [sin mirar hacia la derecha o a la izquierda] y caminó a paso rápido hasta que dejó atrás el wadi.

«Se prohíbe quedarse en sus casas o entre las ruinas [de sus casas], o disfrutar verlas. Ya que Alá dijo en el Corán [acerca del Faraón y su pueblo]: ‘Delante del Fuego serán traídos, por la mañana y por la noche: Y (la sentencia será) el Día en que el Juicio Final sea establecido: «Lancen ustedes al pueblo del Faraón en la más severa de las penalidades!»‘ [Corán 40:46].

«Los lugares arqueológicos contienen imágenes grabadas, y está prohibido entrar en un lugar que contenga fotos o imágenes grabadas, a menos que sea con el propósito de borrarlas, tal como Abraham hizo con las estatuas – entró en el lugar dónde estaban, y las destrozó.

«Al comienzo, mientras el Profeta todavía moraba en la Meca, no destrozó las estatuas alrededor de la Ka’ba, ya que existía [peligro] [e.d. era muy probable que el pueblo de la Meca pudiera matar a Muhammad si destruía sus estatuas]. A pesar de las estatuas, él oró y circulo alrededor de la Ka’ba. Cuando el [peligro, e.d. a su vida] finalizó, no dejó [las estatuas] sino que las destrozó. Por consiguiente, la decisión definitiva es, tal como fue declarado por el Jeque Al-Islam [Ibn Taymiyya], de que es permisible orar en una iglesia si no contiene ninguna imagen, pero está prohibido hacerlo si las contiene.

«Algunos de los amigos del Profeta siguieron esta decisión, ya que el Profeta no entró en la Ka’ba mientras contuviera imágenes, hasta que fueron removidas. El Jeque Al-Islam ordenó que si uno se encuentra a sí mismo en un lugar que contiene un objeto abominable, y no puede cambiar [las circunstancias], uno no se le permite permanecer allí.

«Es más, visitar los sitios arqueológicos puede causarle a [los visitantes] a que sean atraídos hacia ellos. Se prohíben las imágenes grabadas… porque conducen al politeísmo». [3]