Por: Yigal Carmon*

Traducir conceptos de un idioma a otro es una tarea difícil. La traducción de conceptos que no poseen un equivalente en el idioma destino es aún más difícil. La traducción de los conceptos religiosos para una cultura en la que la religión ha dejado de desempeñar un papel central en la vida del individuo y en la sociedad es la más difícil de todas.

Quizás esta es la razón por el cual los modismos islámicos religiosos que representan conceptos tales como Allahu Akbar, la ilaha illa Allah e istishhad por lo general son mal traducidos rutinariamente en los medios de comunicación estadounidenses.

El fracaso estadounidense en entender los conceptos religiosos no sólo se aplica al Islam. Un malentendido similar ocurrió en 1993 entre las autoridades y el fundamentalista cristiano David Koresh, quien se atrincheró en un complejo remoto en las afueras de Waco, Texas junto a decenas de sus seguidores, entre ellos mujeres y niños y un arsenal de armas. Asediado por las autoridades, que intentaron negociar con él, Koresh recitó profecías bíblicas sobre el fin de los días. Tratando de poner fin a la disputa pacíficamente, las autoridades le rogaron, «No hablemos de religión ahora». Koresh, inmerso en sus creencias religiosas, sólo respondió: «Pero la religión es vida y muerte». Fue un «diálogo de sordos», condenado a terminar tal como lo hizo, con la pérdida de muchas vidas inocentes.

El problema no es de relatividad lingüística – tal como fue discutido ampliamente en el siglo pasado por los reconocidos lingüistas Edward Sapir y Benjamin Whorf[1] – ya que existen maneras de transmitir un significado original en una breve explicación adecuada. En su lugar, el problema es sobre la tendencia de los medios en elegir la solución más fácil, es decir, traducir lo que le sonará más familiar a los lectores, aunque sea inexacto.

Esta es el porqué la palabra istishhad – denotando un acto religioso de fe en el que un creyente se esmera por asesinar a tantos enemigos percibidos como le sea posible, a costa de su propia vida,[2] como medio para acercarse a Alá, con los profetas, los justos y los mártires[3] en el Paraíso. El objetivo de este acto de fe es hacer suprema la religión de Alá en la Tierra, en lo que el perpetrador cree es una imitación de las batallas de comienzos de la formación del Islam en la época del Profeta Mahoma y los cuatro califas justos. Esto se traduce muy a menudo de forma imprudente y erróneamente como «suicidio», lo cual es un acto motivado por la desesperación personal y por el cual una palabra diferente – intihar – está reservado en el idioma árabe.[4]

Esta es también la razón por el cual Allahu Akbar y la ilaha illa Allah – ambas declaraciones de fe que encarnan el concepto religioso de la supremacía del Islam y de Alá – están mal traducidas. Primero fue la lucha por establecer la supremacía del Islam monoteísta sobre los ídolos paganos de La Meca en el siglo VII. Luego fue una lucha por la supremacía sobre las otras religiones, incluyendo las monoteístas en la Península Arábiga, resultando en la expulsión de los no musulmanes, tal como se relata en la recopilación de hadiths en honor al Profeta Mahoma: «Sacaré a los judíos y cristianos de la península»[5] – una prohibición que está en vigor hasta el día de hoy contra las instituciones religiosas no musulmanas. Luego fue una lucha contra otros imperios religiosos, tales como el persa y el bizantino. Sin embargo, la traducción de Allahu Akbar en los medios de comunicación estadounidenses como «Dios es grande» omite el aspecto de superioridad en la palabra Akbar (que sin embargo significa «grandioso» o «mayormente grandioso» y no simplemente «grande») y difumina la referencia específica a Alá en lugar de otra deidad. De la misma manera, la illaha illa Allah se traduce a menudo en los medios de comunicación estadounidenses como «No existe dios sino Dios» (en lugar de «No existe dios sino Alá»). El omitir la supremacía de Alá sobre todas las demás deidades es un error de traducción y, además, conduce a un error lógico – una reminiscencia de versos carrollianos sin sentido.

Una de las razones de tales errores de traducción es el hecho de que en el mundo occidental moderno la lucha por la supremacía entre las religiones ha cesado casi por completo y en la medida en que todavía existe, es no-violenta. Por lo tanto, las declaraciones de fe religiosa que encarnan una continua lucha histórica por la supremacía religiosa divina carecen de una base religiosa moderna cultural conceptual a través de la cual son entendidas en Occidente y por lo tanto carecen de un equivalente lingüístico. Los medios de comunicación estadounidenses, frente al riesgo de no ser comprendidos en la traducción de estos conceptos islámicos, prefieren proveer una traducción aproximada, a pesar de que son inherentemente engañosos.

Esto no quiere decir que Allahu Akbar es pronunciado únicamente por los yihadistas continuando la antigua lucha por la supremacía del Islam y de Alá. A través de los siglos esta ha llegado a ser pronunciada también por los musulmanes no religiosos, e incluso por los árabes cristianos. En muchos casos, esta acompaña una variedad de significados – que van desde la admiración a lo que se percibe como un maravilloso acto de Alá a una expresión de conmoción y horror ante una calamidad.

Una traducción debería reflejar siempre el contexto, al orador y su intención. Pero lo que sucede a menudo en los medios de comunicación estadounidense es que cuando Allahu Akbar es dicho por un yihadista, es traducido como si hubiese sido dicho por un musulmán no religioso o un árabe cristiano. Esto es totalmente erróneo. Y cuando tales errores de traducción ocurren una y otra vez, ya sea intencional o por ignorancia, da lugar a una profunda mala interpretación del concepto y de su significado cultural y religioso.

Entonces, ¿cuál pudiera ser la solución? Una escuela de traducción trata de mantener el término original, seguido de una breve explicación de su significado, como por ejemplo, la palabra japonesa kamikaze. En este caso, esta solución fue tan efectiva que la palabra original ya no era necesaria una explicación.[6] No hay razón del por qué el mismo proceso no debería ocurrir con la palabra istishhad, que con el tiempo pudiera llegar a ser igual de conocida y entendido como kamikaze.

La alternativa es que los medios de comunicación adopten un enfoque más profesional, la traducción de estos términos en cada caso de acuerdo al contexto específico, portavoz y significado con intención y no conformarse con un término aproximado pero engañoso.

Esta serie de tres partes tiene por objeto dilucidar los términos Allahu Akbar, la ilaha illa Allah e istishhad en su sentido original, proporcionando ejemplos de su uso por parte de yihadistas tomados de los archivos de MEMRI, basado en años de seguimiento en los medios de comunicación árabes y musulmanes. Esto no desea afirmar que MEMRI, en sus 18 años de traducción de decenas de miles de páginas de material de fuente primaria de los medios de comunicación árabes y musulmanes, no haya caído a veces en la tentación de priorizar siendo entendido por un lector no experto. Incluso en el campo de la transliteración, hemos aceptado transcripciones incorrectas, ya que eran comunes en los medios de comunicación (por ejemplo, «Corán» en lugar de «Qur’an»). En muchos casos, utilizamos la palabra «operaciones de martirio» por «istishhad«, a pesar de que martirio es una traducción inexacta, ya que es un concepto cristiano de un individuo que acepta la muerte en lugar de renunciar a sus creencias religiosas, mientras que el concepto islámico de istishhad se refiere en los tiempos modernos principalmente a asesinar a los enemigos a costa de la propia vida de uno.

  1. Allahu Akbar

El término Allahu Akbar encarna la lucha por la supremacía del Islam, Alá y los verdaderos creyentes: pasado, presente y futuro; real y simbólico; militarmente, cultural o por medio de fuerzas de la naturaleza controladas y dirigidas por Alá. Es el grito de guerra y el himno de esta lucha por la supremacía. La victoria para los musulmanes es una victoria para el Islam y para el monoteísmo y es la victoria de Alá sobre los falsos dioses. La victoria proviene de Él y demuestra Su supremacía. Este fue el principal significado del término en los primeros siglos del Islam. Hoy es un símbolo de los islamistas y yihadistas, así como también todos los otros que deseen restaurar la antigua grandeza de los imperios islámicos, donde «la media luna debe estar siempre en la parte superior de la cruz», tal como es descrito por el activista de la Hermandad Musulmana en Nueva York Ayat Oraby.[7]

Vale la pena señalar que Allahu Akbar es pronunciado por ambos yihadistas sunitas y el liderazgo chiitas de la República Islámica de Irán (que fue establecido como un «Estado Islámico» mucho antes que el EIIS). En cada sermón importante dado por el Líder Supremo de la República Islámica de Irán, la multitud, la cual comprende miles y a veces decenas de miles, entona el cantico «Allahu Akbar» junto a «Muerte a Estados Unidos» y «Muerte a Israel». Véase, por ejemplo http://www.memritv.org/clip/en/4154.htm; http://www.memritv.org/clip/en/5075.htm; y http://www.memritv.org/clip/en/5011.htm.

¿Bajo qué circunstancias «Allahu Akbar» es pronunciado por los yihadistas?

Tal como fue ampliamente informado en los medios de comunicación occidentales, los perpetradores de ataques terroristas en general se les escuchan gritar «Allahu Akbar«. La llamada de Allahu Akbar es también común entre los combatientes del EIIS durante decapitaciones (Robert Hall – Abu Sayyaf da a conocer vídeo de la espantosa decapitación de Robert Hall; John Ridsdel – video de la decapitación del rehén canadiense John Ridsdel; Nicholas Berg – http://www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/8928.htm; Jacques Hamel – http://www.memrijttm.org/normany-church-attackers-pledge-allegiance-to-abu-bakr-al-baghdadi.html y otros tipos de ejecuciones, tales como chicos que le disparan a espías acusados http://www.memritv.org/clip/en/5028.htm; http://www.memritv.org/clip/en/4718.htm; http://www.memritv.org/clip/en/4889.htm; and http://www.memritv.org/clip/en/5048.htm).

Se escucha en videos de los combatientes del EIIS, grabando el derribo de aviones enemigos (http://www.memritv.org/clip/en/5556.htm; https://www.youtube.com/watch?v=yjWsoWdrhBI; https://www.youtube.com/watch?v=oD3qf2ZOucg), o cuando un vehículo cargado de explosivos logra llegar a su posición enemiga, anticipándose a la explosión (http://www.memritv.org/clip/en/1037.htm). En el Estado Islámico, incluso la re-introducción de castigos islámicos es percibida como una victoria para el Islam, lo cual merece el grito de «Allahu Akbar«, tal como en el castigo a los homosexuales lanzándolos a la muerte desde los tejados o en las ceremonias de lapidación a mujeres acusadas de adulterio (http://www.memritv.org/clip/en/4558.htm).

Los propios yihadistas se refieren a Allahu Akbar como un grito de guerra, garantizándoles la victoria al igual que en los tiempos del Profeta, como la «Marsellesa de la conquista árabe», como la «bomba nuclear» de los musulmanes y como lo que el «oriente comunista y la capitalista occidental más le temen».[8]

De hecho, es común para los combatientes del EIIS que entonen «Allahu Akbar» durante las decapitaciones de sus enemigos. Para obtener un informe completo de los actos de castigos islámicos religiosos – decapitación, lapidación, crucifixión, incineración, ahogamiento, arrojamiento de edificios del EIIS – véase www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/8928.htm.

Lo siguiente son algunos ejemplos:

Una imagen de un vídeo de combatientes británicos del EIIS con cabezas de soldados del gobierno’: «Estos son las cabezas de los kuffars que los Mujahids trajeron de vuelta. Allahu Akbar! Uno de los soldados del kuffar gritó ‘han venido a obtener su libertad’ «Abu Aisha respondió ‘No he venido a buscar tu cabeza ‘Subhan Allah trajo una bolsa repleta» (www.memri.org/report/en/0/0 /0/0/0/0/8928.htm).

Desde la cuenta Instagram del adolescente saudí Muadh Al-Jraish: «Urgente | el director de la prisión Abu Ghraib fue degollado con un cuchillo en el patio de la prisión… Este ha torturado y asesinado a los detenidos y aprovechado de su dignidad. Su cabeza fue degollada. Allah Akbar» (www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/8929.htm).

Y los siguientes tuits:

«Allah Akbar, criando a los jefes de Hezb Al-Lat [término despectivo para Hezbolá] hoy en #Quneitra [Siria] a manos de los muyahidines, oh espléndida mañana #Jabhat Al-Nusra»

«Cabeza de un rufián del [régimen alauita/Assad] Nusairi ejecutado por los muyahidines en el Al-Adra Umaliyya en las afueras de Damasco, en respuesta a la masacre de Al-Otaiba, Allah Akbar«

Video de MEMRI TV de ejecuciones y crucifixiones del EIIS, cercanos a Alepo, Siria

Construcción andamios para visualizar los cuerpos; la ejecución, con un chico en primer plano

Locutor conduce a multitud en gritos de «Alá Akbar» y «el EIIS está aquí para quedarse!» La cámara panea a la multitud, que incluye a niños, después de una ejecución, como presentador habla

Tal como se mencionó anteriormente, Allahu Akbar es un grito de guerra que es entonado durante ataques. Por ejemplo, en el informe de MEMRI «Compañía mediática yihadista elogia ataque en Túnez y exige más ataques contra turistas occidentales» (http://www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/8484.htm): «‘¿Cómo entró usted tan fácilmente’, ellos le preguntaron con asombro y los dos respondieron: «Venimos en nombre de Alá’. Luego comenzaron a lanzar granadas, gritando ‘Alá Akbar’, y disparándole a los infieles y a los policías que los custodiaban y la masacre comenzó».

El canto de «Allahu Akbar» es usado comúnmente cuando se destruyen símbolos cristianos o los lugares religiosos, tal como fue hecho por el EIIS tanto en Irak como en Siria, así como los yihadistas en otros países. Véase, por ejemplo, Yihadistas libios profanando lugares cristianos (www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/6142~~number=plural):

Individuo libio: «Quiebren la cruz de estos perros».

Otro individuo libio: «Allah Akbar. Allah Akbar».

Un vídeo de Al Qaeda en referencia a un ataque incluye una grabación de audio del propio atentado. En la grabación, los suicidas se les puede escuchar orando y luego, en el camino, gritando «Alá Akbar!» y «Alá, expulsa a los politeístas de la Península Arábiga!» (Www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/980)

Allahu Akbar es parte integral de las referencias a victorias islámicas históricas y actuales. Por ejemplo, cuando se reanudaron los rezos musulmanes en la Gran Mezquita de Granada después de 500 años de ausencia, un informe de un diario saudí se centró en el grito del muecín de «Allahu Akbar» (http://www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/1331).

Para ver el resto del despacho en inglés junto a las imágenes y los videos copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: http://www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/9492.htm

*Yigal Carmon es Presidente de MEMRI.

[1] Www1.icsi.berkeley.edu/~kay/Kay&Kempton.1984.pdf.

[2] Se narra que en una de las batallas del Ridda (el alzamiento de algunas de las tribus musulmanas contra el primer califa Abu Bakr, con el objetivo de abandonar el Islam luego de la muerte del Profeta Mahoma) Al-Bara bin Malik Al-Ansari, uno de los compañeros del Profeta, se ofreció para ser catapultado al castillo de los enemigos con el fin de abrir las compuertas desde el interior, permitiéndole a los musulmanes entrar en el castillo sitiado, sacrificando así su propia vida por el bien del Islam (http://islamstory.com/ar/%D8%A7%D9%84%D8%A8%D8%B1%D8%A7%D8%A1_%D8%A8%D9%86_%D9%85%D8% A7% D9%84%D9%83). Esta acción se denominó inghimas. En este caso, la única vida sacrificada fue la suya. La táctica de asesinar a muchos por el bien del Islam a través de una persona que llevaba puesto un cinturón de explosivos o conduciendo un auto repleto de explosivos es nueva, pero se remonta a la época de los comienzos del Islam.

[3] La palabra «mártires» siendo esta sinónimo de shuhada en árabe serán discutidos en la Parte III de esta serie, la cual se centrará en el concepto de istishhad. La palabra inglesa que estamos utilizando, «mártires», no es exacta, ya que el concepto del martirio es tomado del cristianismo, el cual posee un concepto diferente del martirio, tal como se explicará en esta introducción.

[4] La historia registra casos en los que una persona sacrifica su vida por un «bien mayor» no es necesariamente por motivos religiosos. Algunos de tales sacrificios fueron motivados por el nacionalismo, tal como algunas operaciones fidai a finales de los años 1950 y 1960 – y estos también no deberían haber sido denominadas «operaciones suicidas». El fenómeno al cual nos estamos enfrentando hoy es por motivos religiosos.

[5] Registrado por Muslim, http: http://www.alifta.net/Fatawa/fatawaDetails.aspx?BookID=1&View=Page&PageNo=1&PageID=773&languagename.

[6] Irónicamente, en los medios de comunicación italianos «kamikaze» es aplicado a menudo a lo que sucede en el mundo árabe y musulmán. En lugar de explicar el significado religioso islámico original de «istishhad«, ellos utilizan un término tomado de una cultura y de un idioma distante y diferente.

[7] Véase MEMRI TV Clip Nº 5691, Activista egipcio-estadounidense en N.Y Ayat Oraby pide boicot económico a coptos: La Media Luna siempre debe estar por encima de la Cruz.

[8] Seguidor del EIIS en el Reino Unido Anjem Choudary explicó en un tuit: «Huracanes, inundaciones y tornados son los soldados de Alá, que Alá envía contra aquellos que desea castigar o despertar» y a esta declaración este añade: «Alá Akbar!”(www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/6786).