Lo siguiente son extractos de una entrevista con el primer ministro sirio que deserto Riad Hijab, la cual fue presentada en el canal de televisión Al-Arabiya el 27 de septiembre, 2012.

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Entrevistador: «Usted tiene una larga historia como miembro activo del Partido Ba’th, y aceptó el cargo de primer ministro, un año y cuatro meses después de que estalló la revolución ¿Por qué lo aceptó?»

Riad Hijab: «¿Por qué…»

Entrevistador: «¿Por qué aceptó el cargo?»

Riad Hijab: «Para dirigir el gobierno?»

Entrevistador: «Así es».

Riad Hijab: «Para serle honesto, no quise encabezar el gobierno de Siria. Traté de no aceptar esta posición. Algunos de los hermanos en el liderazgo, en el círculo de Bashar Al-Assad, saben que hablé con ellos más de una vez, antes de mi nombramiento, sobre mi falta de voluntad para convertirme en primer ministro.

«Esto surgió de las circunstancias en Siria. Estoy consciente de que el primer ministro es incapaz de hacer algo, pero ellos insistieron en nombrarme primer ministro.

«Cuando Bashar Al-Assad me llamó a su palacio, yo estaba determinado a declinar. Sin embargo, en mi camino hacia el palacio, recibí una llamada de un amigo, quien fue uno de los asesores de Al-Assad, y me pidió que aceptara el cargo de primer ministro sin dudar.

«De hecho, cuando me reuní con Bashar Al-Assad y hablamos largo rato, le informé de lo que estaba sucediendo en las calles, sobre la mala gestión de la crisis siria desde el comienzo, sobre la conducta de las fuerzas de seguridad y del ejército, sobre la corrupción, y sobre muchos otros temas.

«Discutimos largamente lo que el gobierno podría hacer en un futuro cercano con el fin de detener el derramamiento de sangre, promulgar reformas, y enjuiciar a aquellos que perpetraron crímenes durante la crisis.

«Bashar Al-Assad estuvo de acuerdo conmigo. Le dije claramente que me gustaría hacer sólo lo que le agradara a Alá y lo que estaría en consonancia con los intereses del país y su reconstrucción. Este estuvo de acuerdo con todo esto, y de hecho, formamos el gobierno.

«Por primera vez, un ministerio de reconciliación nacional fue establecido en el gobierno sirio, para que el gobierno pueda hacerle frente a los problemas de reconciliación nacional y diálogo. En una declaración ante el Parlamento, declaramos que el gobierno pediría cuentas a todos los perpetradores de crímenes en contra del pueblo…»

Entrevistador: «Señor, entiendo lo que usted está diciendo que no pudo, de hecho, negarse cuando Al-Assad le ofreció el cargo de primer ministro. Esto se desprende de lo que ha dicho».

Riad Hijab: «Sí, usted sabe lo que se siente en Siria».

Entrevistador: «¿De verdad cree usted que podría formar un gobierno de reconciliación nacional? Estamos hablando de junio, 2012. Hubo aproximadamente 20.000 muertes en Siria. ¿De verdad cree usted que, en junio del 2012, se hubiese podido lograr la reconciliación nacional y la reforma?»

Riad Hijab: «Siempre hay que tener esperanza. Yo actué sobre esa chispa de esperanza. Sin embargo, el mismo día que el gobierno se formó, Bashar Al-Assad bombardeó mi ciudad, Deir Al-Zor – después de reunirme con él y le rogué que no enviara el ejército a Deir Al-Zor y no lo bombardeara. Me prometió que el ejército no entraría en la provincia de Deir Al-Zor, pero el día en que el gobierno se formó, lamento decir, bombardeó la ciudad.

«Por lo tanto, después que el gobierno prestó juramento, Bashar Al-Assad se dirigió a este, diciendo que se trataba de un gobierno en tiempos de guerra, en completa contradicción con todo lo que acordamos – de que este sería un gobierno de reconciliación nacional, de diálogo y de cambio».

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