El 16 de octubre del 2013, una conferencia del novelista internacional egipcio ‘Alaa Al-Aswany en el Instituto del Mundo Árabe en París se vio interrumpida por partidarios de la Hermandad Musulmana (HM) del depuesto presidente egipcio Muhammad Mursi, quienes lanzaron objetos contra él y le obligaron a huir por la puerta de salida trasera. «Ellos llegaron a la conferencia para vengarse», Al-Aswany le dijo a Associated Press». Como novelista, se me impidió hablar de literatura en Francia… Esto es lamentable». Agregó que el incidente mostraría que el esfuerzo de la Hermandad Musulmana en representarse a sí misma como víctima «no se ajusta realmente a ellos». El director del instituto dijo que se presentará una queja legal contra de los autores de los hechos.[1]

Al-Aswany ha estado a la vanguardia de las denuncias en Egipto a la dictadura del ex presidente egipcio Hosni Mubarak y la crítica a los abusos del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas (CSFA), que gobernó Egipto desde febrero, 2011 hasta la primavera del siguiente año,[2] y del autoritarismo de la Hermandad Musulmana. En una entrevista con el portal mediático francés Mediapart, este justificó la toma del control del país por el ejército egipcio, explicando que Egipto se encuentra en «una nueva fase» de revolución, esta vez en contra de la HM, que él llama «fascista».[3]

En un artículo anterior traducido por MEMRI [4], escrito por Al-Aswany durante la presidencia de Mursi, escribió que el gobierno del entonces presidente egipcio Mohamed Mursi no era diferente del de Mubarak, y se lamentó de que no había cumplido sus promesas de campaña – entre otras cosas, purgar los servicios de seguridad del país de leales a Mubarak para poner fin a su política de opresión y tortura. Agregó que la oficina del Guía General de la HM fue muy influyente en el gobierno del país, e instó a todos los egipcios unirse a la causa para salvar a Egipto de una nueva toma por la HM.

En su entrevista con Mediapart, Al-Aswany declaró que la toma del 30 de junio por el ejército egipcio «no puede ser llamada un golpe de estado», y expresó su optimismo sobre el futuro de su país. Sin embargo, dijo, la revolución egipcia está todavía en curso, a fin de construir un estado democrático. Agregó que todavía hay muchas batallas importantes que quedan por luchar, como el establecimiento de un salario mínimo y un sistema de impuestos progresivos, y el cambio en la forma en que se elija el fiscal general del país.

Lo siguiente son extractos de la entrevista de Al-Aswany con Mediapart:


‘Alaa Al-Aswany (Foto: Le Figaro, Francia, 31 de enero, 2011)

«Los egipcios están mucho más unidos que antes – porque se sienten en peligro por la agresividad de la HM»

«¿Cómo explica usted el cisma, o incluso el odio, que se ha sentido en la sociedad egipcia desde la destitución de Muhammad Mursi?

«‘Alaa Al-Aswany: No estoy de acuerdo con el término «cisma». Hemos llevado a cabo una revolución por un estado democrático en Egipto. Luego nos perdimos en el camino, sobre todo por los generales del CSFA, y luego la HM, cuyo récord es aún peor que el de los militares. Simplemente nos dimos cuenta que teníamos un grupo de fascistas en el poder. Esto es lo que los países occidentales no entienden, [y] tuvieron que lidiar con los acontecimientos en Egipto de una manera no muy satisfactoria. Hemos de hecho creado una nueva etapa en nuestra revolución en librarnos de estos fascistas. Así que no hay cisma: Existe un conflicto entre un grupo terrorista y el estado egipcio, el estado que cuenta con el ejército, la policía y el pueblo. Un cisma significaría que los egipcios están divididos. Este no es el caso, todos los días hay ataques contra soldados, contra la policía, tal como fue el caso durante la década de 1990. Hoy día, los egipcios están mucho más unidos que antes, porque sienten el peligro por la agresividad de la HM.

«¿Cómo puede ser relevante el término «fascismo» en describir a la HM egipcia?

«‘Alaa Al-Aswany: El Sr. Mursi fue elegido y, de pronto, el 22 de noviembre del 2012, abolió el sistema democrático. Este dio lo que él llama una ‘declaración constitucional’, por el cual abolió la constitución y puso sus propias decisiones por encima de la ley. Esta declaración, en mi opinión, es fascismo. Era como si Mursi dijera: ‘Usé la democracia para ser elegido, y ahora yo soy la ley’. Cuando [el antiguo] presidente de Perú Alberto Fujimori hizo lo mismo en el Perú en 1992, fue percibido como un ‘golpe de estado presidencial’. Ese mismo día, los Estados Unidos anunciaron que ya no consideraban a Fujimori el presidente legal de Perú! Pero cuando Mursi hizo lo mismo, nadie si siquiera pestañeó. Y luego cuando los manifestantes protestaron en contra de esta declaración, fueron asesinados. No encuentro otro término para describir esto sino ‘fascismo’.

“Esta declaración constitucional fue indefendible desde el punto de vista democrático. Sin embargo, el fascismo no es sólo autoritarismo; es el adoctrinamiento de la sociedad, la posibilidad de cambiar a la gente, no sólo a las instituciones. Y si tomamos un criterio democrático como la libertad de la prensa, parece ser que esto fue menos amenazado por Mursi de lo que fue en actualidad – por ejemplo, tras el cierre de cuatro estaciones de televisión en septiembre ¿Cuáles son entonces los demás criterios que llevan a definir el gobierno de la HM como islamo-fascista?'»

«‘Alaa Al- Aswany: El Sr. Mursi trató de deshacerse de 3.500 jueces, y comenzó su sustitución por jueces de la HM! Éste nombró un fiscal general, que está bajo sus órdenes directas. Estaba muy claro en un momento en que si seguíamos así, no existiría un estado egipcio. Egipto permaneció sin parlamento durante año y medio desde el momento en que fue suspendido por el Tribunal Constitucional, por lo que era imposible votar por la destitución del presidente. ¿Qué podíamos hacer? Esta es la razón por la que tres jóvenes revolucionarios, uno de ellos incluso había votado por Mursi, lanzaron el movimiento Tamarrud («Rebelión»), lo que llevó a la destitución de Mursi.

«Recientemente, uno de los tres fundadores de este movimiento justificó el uso de juicios militares, incluyendo a la población civil. ¿No contradice esta declaración las críticas que usted mismo expresó en contra de los miles de juicios militares que se han celebrado desde la revolución?

«‘Alaa Al-Aswany: Mi crítica fue dirigida contra el CSFA, que gobernó el país antes de la llegada de Mursi. Estoy en desacuerdo con la afirmación del fundador del Tamarrud que usted ha mencionado. [Sin embargo,] es importante entender lo que pasó hasta la remoción de Mursi. Tamarrud es un movimiento liderado por jóvenes del movimiento Kefaya [«Suficiente»] (de la inteligencia egipcia anti-Mubarak, activo durante la década del 2000), pero los líderes de Kefaya no les gustaba la idea de recoger firmas para exigir la renuncia de Mursi, y estos tres jóvenes comenzaron por su cuenta a poner en marcha esta campaña de petición, que he apoyado desde el principio porque fue una idea democrática. Terminamos recogiendo 22 millones de firmas exigiendo la salida de Mursi, que intentamos transmitir a la ONU para que fuesen certificados. Luego llamamos a los signatarios a tomar las calles y demostrarle al mundo que ya no queríamos a este señor [Mursi]. En televisión, [y] en mis artículos, llamé al pueblo a movilizarse en contra de estos fascistas, diciendo que si los egipcios no protestaban, significaba que aceptaban que la HM gobernaría durante años y años. Y el 30 de junio, tuvimos más de 22 millones de personas en las calles. Hasta ese momento, el ejército no fue parte de la escena.

«En serio? Tamarrud no gozaba del apoyo en las instituciones del estado, la policía, el ejército o los servicios secretos?

«‘Alaa Al-Aswany: Si quiere escribir eso, usted es libre de hacerlo. Estoy tratando de explicarle a usted lo que ocurrió el 30 de junio, todos estaban en la calle: los revolucionarios, los antiguos partidarios del régimen y la mayor parte de todas las masas de egipcios que no pertenecen a ninguno de estos dos bandos, que forman lo que llamamos el ‘partido colchón’. Esto fue mucho más allá al desafiar a un presidente que no está manejando bien el país. Realmente tuvimos la sensación de estar frente a ‘gángsters’. Aunque no tuvimos ningún parlamento, Mursi incluso discutió un proyecto para cambiar la forma en que se administra el Canal de Suez.

«Usted sabe, desde hace 40 años, la HM le ha mentido a los egipcios, diciendo: ‘No estamos armados, estamos en contra de la violencia». Pero ha habido ataques contra las estaciones de policía, con RPGs (granadas propulsadas por cohetes). Si la UMP y el Partido Socialista [dos partidos políticos principales franceses] llevaran a cabo este tipo de ataques, ¿qué dirían ustedes? Si eso no es terrorismo…

«Esto significa que usted vincula a la HM con los ataques que tuvieron lugar en Egipto, en el Sinaí?

«‘Alaa Al-Aswany: Pero fueron ellos que hicieron la conexión! Uno de los líderes de la [HM], Muhammad Beltagi (ahora en prisión), dijo en televisión: ‘Al minuto que Mursi regrese al poder, no habrá más ataques en el Sinaí’. ¿Cómo interpreta usted esto?

«¿Qué tipo de contra-poder existe hoy en Egipto, cuando el pluralismo de los medios de comunicación se ve amenazado, sin fecha establecida para las elecciones, el proceso constitucional no está progresando según el calendario prometido por el ejército, y la HM está excluida del ámbito político ¿ Acaso los militares mostraron que podían pasar por alto el proceso democrático mediante la celebración de un referéndum sobre la constitución en marzo de 2011, y luego proclamar su ‘declaración constitucional’ sin tener en cuenta el resultado de este referéndum? el 30 de junio, los egipcios si marcharon, pero fue el General Sisi quien habló en persona en televisión, y son los militares que han dado forma al actual régimen egipcio. Podemos por lo tanto no considerar que bajo el gobierno de Mursi había más contra- poderes de los que hay hoy en la actualidad bajo el periodo de Sisi?

«‘Alaa Al-Aswany: En mi opinión, claro que no, pero ese es el punto de vista de un egipcio que vive en Egipto. El Sr. Sisi fue miembro del SCAF, responsable de los servicios. En el ejército egipcio, usted debe saber que no puede decirle no a su superior. Y en ese momento, fue el Mariscal [Muhammad Hussein] Tantawi el líder. El CSFA fue responsable de la masacre de manifestantes durante este período, y yo fui uno de los que criticó el consejo militar, tanto es así que hubo un juicio militar contra mí, acusándome de dañar y perjudicar la imagen del ejército egipcio, un proceso que aún está en curso. Soy por lo tanto, el último en aplaudir al ejército.

«Pero hoy, estoy tratando de explicar lo que está sucediendo en Egipto. Sisi le advirtió a Mursi, dándole una semana para dejar el poder tal como lo solicitó el pueblo, y [sólo] después lo arrestó. No podemos decir que se trató de un golpe de estado, porque todo fue hecho de manera transparente. El 30 de junio, 2013 fue una ola revolucionaria apoyada por el ejército, eso es todo. En última instancia, me hace ser optimista ante el futuro.

«La HM ya no existe en el plano político»

«Así que usted no está preocupado por la situación en Egipto?

«‘Alaa Al-Aswany: Lo estoy, por supuesto. Ser optimista no significa que uno no esté preocupado, pero soy optimista, y apoyo lo que pasó. Esto no quiere decir que la lucha revolucionaria término. Más bien diría que apenas está comenzando. La HM está llevando a cabo ataques, pero en el plano político ya no existe.

«Por otra parte, y esta es la lucha más importante, existe una verdadera batalla que librar en el comité encargado de redactar una constitución – no con los militares, que quieren proteger sus intereses y permanecer de lado, sino con el antiguo régimen, que no quiere cambiar nada, el discurso del antiguo régimen es el siguiente: ‘Estuvieron en contra de Mubarak? Ya él no está aquí. Querían deshacerse de Mursi Hecho. Ahora cálmense, que Tengo trabajo que hacer».

«El bando revolucionario quiere un estado democrático. Pero también hay otros conflictos importantes, tales como el salario mínimo, un sistema de impuestos progresivos, o el hacerlo de modo que el presidente ya no pueda elegir el fiscal general. De todo esto el viejo régimen no quiere saber nada.

“Usted ha mencionado el ‘terrorismo de la HM’. Pero aún así, después del 30 de junio, la represión por el ejército contra la HM fue sangrienta, más de 1.000 personas fueron asesinadas por las fuerzas de seguridad egipcias. Varios cientos de líderes de la HM, pero también activistas comunes, fueron detenidos y condenados a prisión, creando un ambiente digno de una caza de brujas. A pesar de ello, las protestas del bando revolucionario fueron muy discretas, el gobierno se mantuvo a cargo, y el Frente de Salvación Nacional, con la excepción de su portavoz quien dimitió, han apoyado la represión. ¿Cómo se explica este silencio y este apoyo?

«‘Alaa Al-Aswany: No, no me está preguntando, usted me está dando su opinión.

«En otras palabras, ¿es posible construir un estado democrático sobre la matanza de manifestantes, tal como ocurrió en la mezquita Raba’a [Al-Adawiya] en el Cairo en agosto, 2013?

«‘Alaa Al-Aswany: Le recordaré que el señor Mursi tuvo 52 muertos en dos días en Port Said. Este le dio instrucciones específicas a la policía, y luego fue a la televisión para agradecerles por su heroísmo y les advirtió a los habitantes de Port Said que haría lo que fuese necesario para restaurar el orden. No sólo asesinaron a los que estaban protestando contra Mursi, sino que le dispararon de nuevo a la multitud al día siguiente en el funeral…

«El Sr. [John] Kerry no dijo una palabra. [Puede ser que] la HM tenga derechos, pero los que protestan contra Mursi no? Lea el informe de Amnistía Internacional del 2 de agosto, que revela cómo los partidarios de Mursi recurrieron a la tortura. Después la represión contra la Hermandad Musulmana, la organización también criticó al ejército, por lo que no es una organización que se sospeche sea complaciente con los militares!

Para ver el despacho en su totalidad en inglés por favor haga clic en el siguiente enlace: http://www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/7485.htm


[1] Associated Press, 18 de octubre, 2013.

[2] En referencia a las críticas de Al-Aswany al CSFA, véase MEMRI Despacho Especial No. 3740, Autor egipcio Alaa Al-Aswany critica a los militares por socavar los logros de la revolución en Egipto, 5 de abril, 2011.

[3] Mediapart (Francia), 16 de octubre, 2013. Entrevista realizada por Pierre Puchot y José Confavreux.

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