El 21 de junio del 2006, el canal de televisión libanés New Tv colocó al aire una entrevista con el escritor americano Norman Finkelstein, quien escribió el libro La Industria del Holocausto. En la introducción a la entrevista, el narrador de New Tv afirmó, «Nunca ha existido un asunto sujeto a tantas contradicciones, mentiras, y exageraciones respecto al número de víctimas tal como el asunto del Holocausto judío». En su entrevista, Finkelstein declaró que el número de sobrevivientes judíos del Holocausto había sido exageradamente inflado por la «industria del Holocausto» para chantajear a Europa.
PARA VER ESTE SEGMENTO: http://www.memritv.org/search.asp?ACT=S9&P1=1180
Lo siguiente son extractos de la entrevista:
New Tv: «Nunca ha existido un asunto sujeto a tantas contradicciones, mentiras, y exageraciones respecto al número de víctimas como el Holocausto judío»
Informe: «El ‘Holocausto’ es el término judío de quemar la ofrenda de sacrificio en cenizas. Nunca ha existido un asunto sujeto a tantas contradicciones, mentiras, y exageraciones respecto al número de víctimas como el asunto del Holocausto judío. El número de personas muertas en el Holocausto fue estimado, en la película cinematográfica Noche y Niebla del director francés Alain Resnais, en ser entre ocho y nueve millones, sobre la base de documentos inventados por los judíos. El número bajo a cuatro millones de judíos en el informe soviético en los juicios de Nuremberg. La cifra bajo aun más, a 300,000 víctimas, según el historiador británico David Irving, y alcanzó sólo 50,000, según el judío Raúl Hilberg.
«Dadas las contradicciones estadísticas en el número de víctimas del Holocausto, el intelectual francés Roger Garaudy pregunta cómo puede ser determinada la verdad. La Industria del Holocausto, del Dr. Norman Finkelstein, narra cómo los judíos del mundo han convertido el sufrimiento judío en manos de los nazis en una industria política e ideológica con el objetivo de concentrar apoyo para Israel, y en una fuente de extorsión económica, que ha rendido sumas inconcebibles para los judíos y sus organizaciones, usando como pretexto las así llamadas víctimas de las operaciones de aniquilación nazis».
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Finkelstein: Escribí mi libro porque «el Holocausto nazi estaba siendo usado como un arma política para silenciar la crítica a las políticas israelíes en los territorios ocupados»
Norman Finkelstein: «La razón principal por la que escribí el libro es porque pensé que el Holocausto nazi estaba siendo explotado por Israel y sus partidarios en los Estados Unidos en contra de los palestinos y en contra de los principios básicos de justicia. Es decir, el Holocausto nazi estaba siendo usado como arma política para silenciar la crítica de las políticas israelíes en los territorios ocupados.
«Existen también otras razones para escribir el libro. Obviamente, hubo una razón personal, – a saber, mis padres pasaron por el Holocausto nazi. Todos en sus familias fueron exterminados durante la guerra, y sentí que era importante representar con precisión lo que les sucedió durante el Holocausto nazi».
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«Mi libro es principalmente sobre el mal uso o la explotación del Holocausto nazi con propósitos políticos. Las principales denuncias que hago en el libro son, en primer lugar, que esta noción de singularidad del Holocausto – es decir, ningún grupo de gente en la historia de la humanidad ha sufrido de la manera en que han sufrido los judíos.
«Esta noción de singularidad del Holocausto no tiene ninguna base en el hecho histórico y es una doctrina inmoral, ya que cataloga el sufrimiento humano, diciendo que algún tipo de sufrimiento es bueno y algún tipo de sufrimiento es peor. El propósito principal de esta denuncia de singularidad del Holocausto es inmunizar a Israel, proteger a Israel, de la crítica».
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«Ha habido una exagerada inflación del número de sobrevivientes del Holocausto nazi… Todos los historiadores han mostrado [que] la exterminación de los judíos por Hitler fue muy eficaz»
Finkelstein: «Bien, uno de los puntos que intenté hacer en el libro es que ha habido una abultada inflación en el número de sobrevivientes del Holocausto nazi. De hecho, tal como todos los historiadores han demostrado, el exterminio de los judíos por Hitler fue muy eficaz. Fue como una fábrica, una línea de ensamblaje. Los judíos fueron procesados para ser asesinados. Cuando uno tiene tal sistema eficaz no puede haber muchos sobrevivientes. De hecho, los mejores estimados muestran que en mayo de 1945, es decir, al final de la Segunda Guerra Mundial, aproximadamente 100,000 judíos habían sobrevivido a los campos de la muerte, a los ghettos, y a los campos de trabajo. Si 100,000 judíos sobrevivieron a los campos y a los ghettos en 1945, entonces 60 años después – es decir, aproximadamente por esta fecha – no pueden haber más de unos mil sobrevivientes todavía vivos».
La industria del Holocausto clamó centenares de miles de sobrevivientes para chantajear a Europa
Finkelstein: «Pero la industria del Holocausto quiso chantajear a Europa para conseguir compensación en moneda. Y para chantajear a Europa dijeron que habían centenares de miles de víctimas necesitadas del Holocausto que todavía estaban vivas, y comenzaron a inflar el número de sobrevivientes para chantajear a Europa».
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«Yo no creo que el Holocausto nazi es único, y no creo que el sufrimiento de los judíos es único. Pienso que no existe ninguna base en el argumento histórico para la singularidad del Holocausto nazi. Existen aspectos, rasgos, del Holocausto nazi que son únicos, así como existen aspectos y rasgos de otros genocidios que son únicos, pero eso no significa que el Holocausto nazi pertenece a una categoría separada, aparte de todos los otros sufrimientos en la historia de la humanidad. No estoy de acuerdo con eso.
«En un nivel moral, es simplemente una abominación el calificar el sufrimiento, y decir que un pueblo ha sufrido más que otro. ¿Cómo puede usted decir que es más doloroso morir en una cámara de gas que morir cuándo su carne es incinerada por napalm? ¿Quién decide qué sufrimiento es más doloroso? Eso, pienso yo, es absurdo».
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«Y hay algo equivocado cuando los Estados Unidos tienen un museo consagrado a lo que Alemania le hizo a los judíos, pero no tienen un museo consagrado a lo que América le hizo a su población nativa – la expulsión y exterminio de los americanos nativos. No tiene un museo consagrado a lo que se le hizo a los africanos traídos aquí como esclavos, aun así tienen un museo acerca de lo que sucedió en Europa. ¿Qué pensarían los americanos si Alemania, en su capital, fuese a crear un museo que conmemorara la esclavitud en los Estados Unidos, conmemorara el exterminio de los americanos de origen, pero ningún museo consagrado al Holocausto nazi? Por supuesto, los americanos dirían que eso es pura hipocresía. Bien, nosotros ahora somos culpables de la misma hipocresía».
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«No existe ninguna evidencia en lo absoluto de que los bancos suizos mantuvieron billones de dólares que pertenecieron a los judíos durante la Segunda Guerra Mundial, o antes»
Finkelstein: No existe ninguna evidencia en lo absoluto de que los bancos suizos mantuvieron billones de dólares que pertenecieron a los judíos durante la Segunda Guerra Mundial o antes de la Segunda Guerra Mundial. Los hechos básicos son tal como sigue: Primero, la mayoría de los judíos antes de la Segunda Guerra Mundial eran muy, muy pobres. Vivian en pequeños pueblos en Europa Oriental. Los pueblos eran llamados shtetls. Eran pueblos pequeños en Rusia y en Polonia. La mayoría de los judíos eran pobres.
«Numero dos, comenzando a principios de los años 1930, hubo una depresión mundial, que quiere decir que aun cuando usted tuviera dinero, usted lo perdió durante la depresión.
«Y numero tres, si tuvo el dinero, y usted fue… y guardó el dinero, entonces usted pudo escapar durante el Holocausto nazi. Ésa es una de las ventajas de ser rico. Usted tiene suficiente dinero para comprar su salida.
«Así que esos judíos que tenían dinero y lo guardaron después de la depresión – usaron el dinero para salir, y luego sacaron su dinero de los bancos después de la guerra».