La última edición mensual del diario en Internet del taliban Al-Sumoud, publicado el 2 de diciembre, 2008 en el foro islamista Al-Faluja, contiene un mensaje del líder del taliban Mullah Omar. En este, el Mullah Omar advierte a los Estados Unidos y la OTAN a que no envíe nuevas tropas a Afganistán, ya que esto sólo llevará a más bajas de la OTAN. Él declara luego que la crisis financiera global es el resultado de la «falta de política beligerante» de los Estados Unidos, y llama en los musulmanes a apoyar a los mujahideen en Irak y Palestina. Él le advierte a los mujahideen contra la disputa interna, y enfatiza que resistirse a la influencia norteamericana en la región es un interés común de Afganistán y sus vecinos.
Lo siguiente son extractos del mensaje:
«Su esperanza de ganar [la guerra] enviando tropas adicionales es ilógica y esta mal encaminada»
Dirigiéndose a los Estados Unidos y la OTAN, el Mullah Omar declara: «Su esperanza de ganar [la guerra] enviando tropas adicionales es ilógica y esta mal encaminada, porque con un número grande de tropas la lucha se extenderá en todas direcciones. Por consiguiente, habrá batallas feroces, con centenares de ataques todos los días en lugar de decenas, y sus [fuerzas] sufrirán miles de bajas todos los meses en lugar de centenares…»
El Mullah Omar luego menciona la crisis financiera global, diciendo: «La causa principal de la tormenta financiera que ha barrido a través del mundo es la fracasada política beligerante de América y su estrategia de ocupación. Los efectos negativos [de esta política] se ha esparcido, en una forma u otra, a todos los confines del mundo…»
«No se desgasten ustedes con la serie burlesca [de procedimientos] llamados ‘elecciones'»
Al pueblo afgano, el Mullah Omar dice: «No se desgasten ustedes mismos con la serie burlesca [de procedimientos] llamado ‘elecciones’. Las verdaderas elecciones tienen lugar en Washington. Los agentes llamados ‘funcionarios [afganos]’ no están designados por su voto, sino de acuerdo a la voluntad de Washington…»
«Si las líneas del santo jihad se [mantienen] unidas y fuertes, como lo hacen en Afganistán, los pueblo oprimidos recobrarán su libertad y [comenzarán a] implementar el shari’a«
El Mullah Omar continúa: «Nosotros le pedimos a las figuras eminentes en el mundo islámico, y especialmente en el mundo árabe, a que apoyen a su hermanos los mujahideen en Irak y Palestina tanto como puedan, con dinero y gente, y a llevar a cabo su deber religioso de la mejor manera posible durante este sensible período de la historia islámica. Los ulama y los estudiosos islámicos tienen un deber especial en dirigir y guiar a los mujahideen hacia el camino correcto. Estoy convencido de que si las líneas del santo jihad se [mantienen] unidas y fuertes, tal como lo hacen en Afganistán, los pueblos reprimidos ganarán su libertad y [comenzarán a] implementar [las leyes del] shari’a…
«La llamada a la reconciliación [en Afganistán es simplemente] otra conspiración… Aquéllos que buscan la reconciliación deben primero poner fin a la ocupación… No piensen [ni un solo momento] que los líderes del jihad islámico abandonarán su… santo jihad [a cambio de] falsas promesas, ganancias materiales, [promesas de] amnistía [y ofertas de] cargos ministeriales y altas posiciones mientras la ocupación [continúa]…
Los agresores se están esforzando de nuevo por disolver la unidad del pueblo afgano y en sembrar las semillas de la discordia entre ellos»
«El pueblo afgano ha perdido frecuentemente la gloria de sus victorias aplastantes, y los frutos de su brillante éxito [después de] derrotar a sus enemigos en batalla, porque sus enemigos, a través de conspiraciones políticas e intromisiones secretas, no les permitieron establecer una administración fuerte y unida alrededor de un solo y fuerte liderazgo. Esto es lo que sucedió después de la derrota de los rusos [en manos de los mujahideen]…
«Hoy día, los agresores están de nuevo esforzándose por disolver la unidad del pueblo afgano y en sembrar las semillas de la discordia entre ellos, antes de que ellos [e.d., los enemigos] sean derrotados en el campo de batalla…»