Ante la visita del Presidente de los Estados Unidos Barack Obama a Jerusalén el 20-21 de marzo del 2013, corrieron rumores de que planeaba visitar el Muro de los Lamentos y la Mezquita Al-Aqsa. Aunque estos rumores no recibieron ninguna confirmación de fuentes estadounidenses o israelíes, funcionarios y clérigos palestinos – de la Autoridad Palestina, Hamas y el Jihad Islámico, e incluso del Movimiento Islámico en Israel – advirtieron a Obama no visitar el Muro o la Mezquita Al-Aqsa con escolta Israelí, con el argumento de que esto constituye apoyo a la ocupación israelí de Jerusalén y el perpetuar esta ocupación.

Los funcionarios destacaron que Jerusalén es una ciudad árabe palestina ocupada, y que Al-Aqsa y el Muro de los Lamentos, al que llaman el Muro Al-Buraq, son pertenencias waqf islámicas sólo de los musulmanes, los judíos no tienen derechos a estos. Los funcionarios argumentaron que, si Obama desea visitar estos lugares, la visita debe estar patrocinada y ser responsabilidad del Waqf Islámico en Jerusalén, y debe afirmar el estatus de Jerusalén como ciudad ocupada y la soberanía palestina sobre Jerusalén y Al-Aqsa. De lo contrario, habrá «graves consecuencias».

Especialmente dura fue la respuesta de Hamas, que advirtió que, si Obama visita Al-Aqsa con escolta israelí, el movimiento llamaría a los palestinos a lanzar una batalla contra los Estados Unidos y sus intereses en la región. El funcionario de Hamas Mushir Al-Masri, dijo que la visita sería una declaración de guerra contra los musulmanes, y un artículo en el diario de Hamas Al-Risala llamó a los palestinos a oponerse a la visita por la fuerza, incluso a costa de provocar lesiones y fatalidades, y confrontar a las fuerzas de seguridad israelíes antes de la visita. Un funcionario del Jihad Islámico instó a los palestinos a prohibirle a Obama entrar en la mezquita y apalearlos a él y a su séquito con zapatos y huevos podridos.

Lo siguiente son extractos de declaraciones de los funcionarios palestinos sobre el asunto.

Informe: Los Estados Unidos rechazaron una petición del presidente de la Autoridad Palestina de evitar una visita con escolta israelí

El diario saudita Al-Sharq informó, citando «fuentes superiores palestinas», que el Presidente palestino Mahmoud ‘Abbas emitió un comunicado oficial expresando la objeción de los palestinos a la visita de Obama, auspiciada por Israel. Fuentes palestinas le dijeron a Al-Sharq que la Casa Blanca no respondió a esto, sino sólo le pidió a la Autoridad Palestina no impedir la visita de Obama.[1]

Comunicado de funcionarios palestinos: Al-Aqsa y el Muro de los Lamentos sólo le pertenecen a los musulmanes

En respuesta a los informes sobre la posible visita de Obama a Al-Aqsa, tres funcionarios palestinos – el encabezado del Consejo Supremo Musulmán y el predicador de Al-Aqsa Akrameh Sabri, el Ministro de la AP para Asuntos de Jerusalén Hatem ‘Abd Al-Qader, y el líder del Movimiento Islámico en Israel, Raed Salah – ofrecieron una conferencia de prensa en Jerusalén el 23 de febrero, 2013 en la que establecen las condiciones para la visita de Obama. En un comunicado que emitieron después de la conferencia de prensa declararon: «Nosotros, las fuerzas nacionales e islámicas en Jerusalén y sus alrededores, le damos la bienvenida a la visita [de Obama] a Al-Aqsa, siempre y cuando su objetivo sea examinar de cerca la trágica [situación] de esta mezquita bajo ocupación israelí, que el Waqf Islámico de Jerusalén patrocina la visita en su totalidad y es responsable de esta, y que ningún representante de la ocupación israelí acompañe [al Presidente de los Estados Unidos]… Hacemos hincapié al Presidente de los Estados Unidos que la Mezquita Al-Aqsa ha estado bajo ocupación israelí desde 1967… y que gime bajo los ataques de los colonos [israelíes], que la contaminan a diario.

«Hacemos hincapié en que Al-Aqsa le pertenece solo a los musulmanes, y que los demás no tienen derechos a esta. El suelo [sobre el cual se levanta], el espacio a su alrededor y el piso por [debajo] es [pertenencia] musulmana waqf a los musulmanes de todo el mundo, y es parte de nuestra fe musulmana y de nuestros derechos nacionales. [También] enfatizamos que el Muro Al-Buraq [es decir, el Muro de los Lamentos], es parte integral de Al-Aqsa y [también] le pertenece solo a los musulmanes, está cediendo ante la ocupación israelí, que la ha convertido en un lugar de culto judío… Jerusalén ocupada, que la ocupación está tratando de judaizar al apoderarse de sus tierras, destruyendo sus casas e imponiendo una política de limpieza étnica a sus residentes, necesita de alguien que remueva la ocupación de la misma, no alguien que consolide [la ocupación] o la apoye.

«Honorable Señor Presidente, ante las engañosas declaraciones emitidas por la ocupación israelí, advertimos contra cualquier posición que implique que los judíos poseen derechos sobre Al-Aqsa, el Muro Al-Buraq o la Jerusalén ocupada. Hacemos hincapié en que, tarde o temprano, Jerusalén y su perla, la Mezquita Al-Aqsa, volverán al seno del Islam, a los árabes y a los palestinos».[2]

Predicador de Al-Aqsa ‘Akrameh Sabri: Cualquier visitante debe seguir las regulaciones del Waqf, afirmar la soberanía musulmana en Al-Aqsa

El predicador Jeque de Al-Aqsa ‘Akrameh Sabri dijo en la conferencia de prensa: «Todo visitante es bienvenido a Al-Aqsa, mientras siga la normativa del Waqf islámico, principalmente [la regulación que requiere que los visitantes] entren a través de las Puertas de los Leones (Lions Gate), no a través de las Puertas Mughrabi, con el fin de afirmar la soberanía musulmana [sobre Al-Aqsa]»[3] El Ministro de Asuntos de Jerusalén Hatem ‘Abd Al-Qader añadió: «Lo que nos interesa de la visita [de Obama] a Jerusalén o a Al-Aqsa es afirmar que [Jerusalén] es una ciudad árabe… Las acciones de Israel no le dan ningún derecho político o legal sobre Jerusalén o Al-Aqsa. Damos la bienvenida a la visita de Obama a Jerusalén y a Al Aqsa – pero sólo si esta visita afirma que Jerusalén es una ciudad ocupada, que Al-Aqsa está ocupada y que la soberanía sobre Jerusalén y Al-Aqsa [le pertenece a los] palestinos, [ambos] musulmanes y cristianos. Hablando en general, la visita de Obama a Al-Aqsa, en caso de llevarse a cabo, debe estar bajo la soberanía y supervisión del Waqf Islámico de Jerusalén».[4] En una declaración al diario saudita Al-Sharq, ‘Abd Al-Qader advirtió que una visita de Obama asistida por israelíes resultaría en un desastre, y que la intensidad de la ira palestina, y sus consecuencias, no podrían ser previstas.[5]


De derecha a izquierda: Raed Salah, Hatem ‘Abd Al-Qader y ‘Akrameh Sabri en la conferencia de prensa[6]

Jeque Raed Saleh: La visita a Al-Aqsa – un acto de hostilidad hacia la nación musulmana

El Jeque Raed Salah, líder del Movimiento Islámico en Israel, dijo en la conferencia de prensa: «Nosotros, los habitantes de Jerusalén y sus alrededores, hablamos por más de un billón de musulmanes, árabes y palestinos… No dejaremos que Obama visite el Muro Al-Buraq asistido por un representante de la ocupación israelí, no importa cual sea el nombre y título [de este representante]. La presencia de cualquier [representante] de la ocupante Israel necesariamente se entiende como una perpetuación no válida de la ocupación israelí al Muro Al-Buraq, una perpetuación de la usurpación a la ocupación israelí, que ha estado sucediendo desde el año 1967..y la perpetuación de la no valida [afirmación por Israel de que tiene] derecho al Muro Al-Buraq. Por lo tanto, [la visita sería] un acto de hostilidad contra la nación musulmana, el mundo árabe y el pueblo palestino… Una postura que apoye la [afirmación de la ocupación ilegítima israelí de que tiene] [incluso] derecho a un metro cuadrado de Jerusalén o incluso a un ladrillo de la mezquita de Al-Aqsa es un gran desastre…

«Un día pronto tendremos una conferencia de prensa y haremos un anuncio que alegrará a todo hombre, musulmanes, árabes y palestinos en todo el mundo – es decir, que la ocupación israelí ha terminado y Jerusalén y Al-Aqsa han vuelto al seno de la nación musulmana, al mundo árabe y al pueblo palestino».[7]

Hamas llama en los palestinos a «lanzar una batalla decisiva contra… los Estados Unidos y sus intereses en la región»

En una declaración oficial, Hamas dijo que la visita prevista de Obama a Al-Aqsa sería «un gran peligro sin precedente no sólo para Al-Aqsa, sino para Jerusalén» y «un desastre político al que los palestinos, árabes y musulmanes no deben permanecer callados». Este advirtió a los Estados Unidos contra el capitular «al deseo de los sionistas de perpetuar su hegemonía en Jerusalén», e instó a Obama a cancelar su visita, ya que sería «la [acción] más grave en la historia de las relaciones políticas [entre Obama y los palestinos] y un [peligroso show] dirigido hacia el bando israelí y judío». Hamas instó a «los países árabes, encabezados por Egipto», a «que se opongan a la visita por todos los medios posibles», y los palestinos a que «lancen una batalla decisiva contra la ocupación y contra los Estados Unidos y sus intereses en la región, si la visita se da bajo auspicios de la ocupación». Hamas también pidió a las masas árabes y musulmanas «que se preparen para defender el último bastión de honor de la nación – la Mezquita Al-Aqsa».[8]

Funcionario de Hamas: La visita – una declaración de guerra contra la nación musulmana; funcionario del Jihad Islámico: «Arrójenle a Obama los zapatos»

El funcionario de Hamas Mushir Al-Masri calificó la visita de Obama como «una declaración de guerra contra la nación árabe y musulmana y una provocación a los sentimientos de la nación». El funcionario del Jihad Islámico Palestino Khaled Al-Batsh instó a los palestinos a evitar que Obama entre en la mezquita escoltada por guardias israelíes y les aconsejó «arrojarles zapatos».[9]

Artículo en diario de Hamas: Los palestinos deberían oponerse a la visita, incluso a costa de fatalidades

Mustafa Sawwaf, columnista del diario de Hamas Al-Risala, pidió a las masas palestinas disuadir a Obama de que visite Al-Aqsa y entre a la mezquita en los días previos a la visita y se enfrenten a las fuerzas de seguridad israelíes allí – incluso si esto resulta en fatalidades. Este escribió que Obama era un criminal y contaminaría Al-Aqsa, al igual que lo hizo el ex primer ministro israelí Ariel Sharon cuando visitó la mezquita en el 2001, e instó a los palestinos a lanzarles zapatos y huevos si se presenta: «La entrada de Obama a Al-Aqsa y sus instalaciones bajo la protección de los cañones de la ocupación sionista, no importa por la [puerta] que entre, es un crimen que da legitimidad norteamericana a la [demanda] de los sionistas a Jerusalén… Los palestinos deben elaborar un plan [en avance a la visita] de Obama a Al-Aqsa, [un plan] acorde con el visitante y su objetivo, es decir, deben prepararse bien [organizando] una reunión masiva en la mezquita y sus instalaciones. Todos los palestinos que pueden hacerlo deben venir a la mezquita de todas [partes de Palestina], desplegarse allí, y lanzar enfrentamientos directos con los sionistas todos los días hasta la visita – incluso si esto resulta en lesionados y fatalidades. El día de la [propia] visita de Obama debe ser un día de guerra y de reunión masiva, tal como le corresponde a un presidente estadounidense. Este momento [de la historia] es una prueba para la voluntad palestina, un momento que debe transmitir un mensaje claro [a Obama]: Usted no es bienvenido en territorio palestino, Obama, y usted no es bienvenido en Al-Aqsa. Los palestinos [deben] prepararse para esta visita, en caso de llevarse a cabo, y deben responder a esta tal como respondieron a la visita del criminal Sharon [en el 2001].

«Obama no es menos criminal que Sharon y su visita deshonra a Al-Aqsa y a sus instalaciones no menos que la visita de los judíos allí. Si Obama llega, si no aprende una lección por los enfrentamientos palestinos con las autoridades de la ocupación en el días antes de su visita, e insiste en visitar Al-Aqsa, será recibido con [una lluvia de] zapatos rotos y huevos podridos. Los palestinos no deben escatimar esfuerzo alguno para transmitir su mensaje, y no temer a las consecuencias de una confrontación – ya que las consecuencias beneficiarán a los palestinos más que perjudicarlos, incluso si el costo son lesiones y fatalidades.

«En ese día, los palestinos no se les debe dejar combatiendo solos contra Obama y su maldita visita. La nación árabe e islámica seguramente se apresurará a expresar su oposición a la malvada e inaceptable visita, y sus hijos seguramente saldrán a las calles y protestaran frente a las embajadas estadounidenses en todo el mundo árabe y musulmán. Si actúan antes de la fecha de llegada [de la visita], sus acciones pueden restaurar el equilibrio y la conciencia de [la postura de] Obama y la administración estadounidense. Si muestran, con sus protestas y manifestaciones, que están junto al pueblo palestino y se niegan a permanecer en silencio, si su conducta futura es diferente a la que es hoy día, y su lucha asume un carácter diferente, hará que Estados Unidos lo piense mil veces antes de tomar cualquier paso que perjudique al pueblo palestino y a la causa palestina…»[10]


[1] Al-Sharq (Arabia Saudita), 11 de marzo, 2013.

[2] Pls48.net, 8 de marzo, 2013.

[3] Al-Hayat (Londres), 24 de febrero, 2013.

[4] Alwatanvoice.com, 25 de febrero, 2013.

[5] Al-Sharq (Arabia Saudita), 11 de marzo, 2013.

[6] Pls48.net, 24 de febrero, 2013.

[7] Al-Quds Al-Arabi (Londres), 26 de febrero, 2013.

[8] Alwatanvoice.com, 26 de febrero, 2013.

[9] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 10 de marzo, 2013.

[10] Al-Risala (Gaza), 11 de marzo, 2013.