El siguiente informe es cortesía del Proyecto Supervisión a la Amenaza Terrorista y Yihad en MEMRI (PSATY). Para información sobre como suscribirse al PSATY, haga clic aquí.

Introducción

En las últimas semanas, la continua lucha entre el Estado Islámico (EIIS) y Al-Qaeda por el liderazgo del movimiento yihadista global encontró un nuevo escenario, la península del Sinaí, mientras Al-Qaeda hacía esfuerzos por reingresar en la arena egipcia y desafiar la hegemonía del EIIS en el Sinaí, o al menos escenificar un programa mediático de desafiar la provincia Sinaí del EIIS. La lucha se manifestó en el terreno, en combates verdaderos entre las dos organizaciones y en propagandas en la red, en un intercambio de perjurios y amenazas. La lucha en el Sinaí refleja la lucha entre el EIIS y Al-Qaeda en otras áreas, tales como Siria, Libia, Yemen y otros lugares.

Jund Al-Islam (JI), afiliado a Al-Qaeda en el Sinaí, se responsabilizo por un ataque el 11 de octubre, 2017 contra combatientes del EIIS que terminó con la vida de varios de ellos y se jactó de tener el poder de «desarraigar» al EIIS. Si el ataque fue realmente perpetrado por JI, constituye un precedente, ya que hasta la fecha el EIIS no ha enfrentado un desafío dentro del movimiento yihadista. Sin embargo, cabe señalar que las amenazas de JI parecen ser una fanfarronada, dado que aún no ha llevado a cabo ninguna actividad militar significativa, a diferencia del EIIS en el Sinaí, que tiene capacidades militares comprobadas. Además, la milicia de la tribu beduina Tarabin, que opera en cooperación con las fuerzas de seguridad egipcias, se responsabilizo por un ataque contra combatientes del EIIS en la misma fecha y en el mismo lugar,[1] mientras que JI no presentó ninguna evidencia filmada de que llevó a cabo el ataque.

Los círculos de Al Qaeda incluso difundieron una grabación de audio de un orador identificado como clérigo en el Sinaí que protestaba contra las injusticias que según él, habían sido perpetradas por el EIIS contra residentes locales. Los agentes del EIIS y sus partidarios en la red rechazaron las acusaciones y amenazaron con responder ferozmente a cualquier ataque a la organización.

Es notable que los agentes de Al-Qaeda le hagan un llamado a los residentes de Sinaí a que confronten al EIIS, describiendo a los agentes del EIIS como meros criminales; Los comunicados de prensa de Al-Qaeda dirigidos a los residentes los abordan respetuosamente y subrayan que la organización los considera como musulmanes correctos, mientras que el EIIS los puede considerar apóstatas por varias razones.

El horrible ataque el 24 de noviembre, 2017 contra una mezquita sufí en el pueblo de Al-Rawda al norte del Sinaí, en el que murieron más de 300 personas, incluyendo muchas mujeres y chicos, enfatizó la volatilidad de la situación en la península del Sinaí. Aunque el EIIS no se ha responsabilizado por el ataque y probablemente no lo hará, el ataque le dio a los oponentes salafistas del EIIS una mayor oportunidad para condenar a la organización y alejar a los residentes del Sinaí. Por lo tanto, JI se apresuró en condenar el ataque bajo los términos más duros, a fin de subrayar el cómo este difiere del EIIS.

Este informe revisa varios aspectos importantes de la rivalidad Al-Qaeda-EIIS en el Sinaí.

Jund Al-Islam ataca y amenaza al EIIS

El 11 de noviembre, 2017, JI anunció que les tendió una emboscada a varios combatientes del EIIS y asesinó a algunos de ellos y también destruyó un vehículo militar e incautó equipos militares. El mensaje describía al EIIS como «Jawarij»[2] y pedía a sus miembros retractarse de su juramento de lealtad al líder del EIIS Abu Bakr Al-Baghdadi.[3]

La organización JI afiliada a Al-Qaeda es uno de los grupos salafistas yihadistas que han estado activos en el Sinaí desde el comienzo de la década. Este grupo llevó a cabo varios ataques contra el régimen egipcio en el 2013, luego de la expulsión del Presidente Morsi. Inicialmente operó como parte de la organización paraguas salafista-yihadista Majlis Shura Al-Mujahideen y más tarde se unió a Ansar Beit Al-Maqdis; cuando este último prometió lealtad a Al-Baghdadi y se unió al EIIS, JI se separó de este, permaneciendo leal a Al-Qaeda. Los expertos egipcios sostienen que su resurgimiento como organización activa es parte de los esfuerzos de Al-Qaeda para reintegrarse a la arena egipcia. Dicen que no es coincidencia que JI vuelve a estar activo a tiempo que el nuevo grupo Ansar Al-Islam asumió ser el responsable de la emboscada el 20 de octubre, 2017 contra las fuerzas de seguridad egipcias cercanas a Al-Wahat Al-Bahariya al suroeste del Cairo.[4]

El mensaje de audio de tres minutos de duración en el que JI se responsabilizó por el ataque contra el EIIS afirma: «En un momento en que los tiranos [las fuerzas de seguridad egipcias] expulsan a los residentes de Rafah de sus hogares, los puestos de control militar egipcios se encuentran diseminados por todo el Sinaí y los judíos bombardean a nuestro pueblo con impunidad en el Sinaí, la pandilla de Al-Baghdadi [el EIIS] se encuentra espiando a los creyentes entre los musulmanes comunes en general junto a los muyahidines. Los incesantes ataques por los Jawarij de Al-Baghdadi – [conocida como] la ‘Provincia del Sinaí’ – contra los musulmanes y su cerco sobre Gaza, han sido demostrados sin lugar a dudas. [Durante este tiempo], hemos descubierto a una unidad armada del [EIIS] con armas ligeras y medianas infiltrándose en el área custodiada por sus hermanos de Jund Al-Islam, con el propósito de asesinarlos a traición.

Combatientes del JI (en video publicado por la organización en el 2015)

«Por consiguiente, el aparato de seguridad de Jund Al-Islam decidió una operación de seguridad para repeler a los Jawarij [combatientes del EIIS], luego de que su malvada expansión y opresión alcanzó el nivel de proclamar takfir a miembros [de Jund Al-Islam] y llamarlos ‘sahawat‘…»[5]

El mensaje continúa describiendo la acción llevada a cabo la noche del 11 de octubre, cuando una unidad de JI preparó una emboscada a fin de capturar a combatientes del EIIS «para interrogarlos sobre sus crímenes [contra Jund Al-Islam]». Se produjo una balacera, durante el cual JI mató a varios combatientes del EIIS, destruyó sus vehículos y confiscó equipo militar.

El mensaje le exige a los combatientes del EIIS «Abu Osama», «Abu Saleh», «Abu Sakher» y «Fahed» que se rindan a JI, nombrándolos para mostrar el grado de familiaridad de JI con las fuerzas del EIIS y agrega : «Hacemos un llamado a los astutos agentes de la organización [EIIS] para que se arrepientan ante Alá y no luchen bajo una pancarta que ha sembrado división entre los musulmanes y ha declarado licita, sin ninguna justificación religiosa, su sangre y la sangre [de sus mujeres]. En conclusión, somos capaces de desarraigar esta organización del Sinaí si no se restringe a sí misma, detener su engaño y desviación y someterse a la ley divina de Alá en lugar de la ley de Al-Baghdadi. ‘Y Alá tiene todo el poder y control sobre sus asuntos, pero la mayoría de la humanidad no lo sabe’ [Corán 12:21]».

JI se responsabiliza por el ataque al EIIS

En otro mensaje publicado al día siguiente, JI fustigó al EIIS por atacar un convoy de camiones de cemento en el área del centro del Sinaí y asesinar a ocho de los conductores, impactando y enfureciendo a la población local.[6] Cabe señalar que, aunque no cabe duda de que el EIIS llevó a cabo el ataque, nunca se responsabilizó por ello. Cinco días más tarde, se atribuyó la responsabilidad de asesinar a un oficial del ejército que acompañó al convoy, pero no reconoció que este asesinato formaba parte de un ataque contra todo el convoy.[7]

La condena de JI declaró: «Con tristeza y angustia, seguimos el crimen perpetrado contra conductores musulmanes indefensos en una carretera en el centro de Sinaí, [quienes fueron atacados] con una salvaje brutalidad y cuya sangre fue permitida por todas los bandos [es decir, por el EIIS y por las autoridades egipcias]… Extendemos nuestras condolencias a las víctimas de la masacre de los camioneros musulmanes en el área del centro del Sinaí. Los agentes del ejército egipcio y los extremistas, Jawarij de Al-Baghdadi, [ambos] participaron en el asesinato de los indefensos musulmanes en el Sinaí. Ya que Alá es nuestro testigo, somos inocentes de cualquier derramamiento de sangre en el Sinaí que no deba ser derramada. Hacemos un llamado al pueblo del Sinaí y al pueblo egipcio en general para que actúen unidos contra el mal y la tiranía en todas sus formas [es decir, contra el EIIS y el régimen egipcio]».[8]

 

Mensaje de JI condenando el ataque al convoy de camiones
Milicia tribal se responsabiliza por ataque el 11 de octubre contra el EIIS

Combatientes del EIIS amenazan a Jund Al-Islam

Combatientes del EIIS reaccionaron a los anuncios de Jund Al-Islam con burlas y amenazas. Abu Sumayah Al-Masri, destacado activista yihadista de las redes sociales afiliado al EIIS en el Sinaí, criticó a JI por dejar de molestar al ejército egipcio y en su lugar atacar al EIIS. Este señaló: «Jund Al-Islam, los huérfanos de Al-Zawahiri, no dispararon ni una sola bala contra el ejército infiel, sino que comenzaron sus operaciones emboscando a los soldados de la provincia [del EIIS] [en el Sinaí]. Tal como es costumbre por parte de la sucia organización en todas las plazas, estos les dan la espalda a los infieles de todas las formas y bandas para que cabalguen, solo para poder luchar contra los monoteístas. Pueda Alá maldecirlos en este y el próximo mundo… Desde el establecimiento del [EIIS en la provincia del Sinaí] y la expulsión de los huérfanos de Al-Zawahiri, estos anhelan abrir su propio frente en el Sinaí, cueste lo que cueste…

«Nosotros les decimos: Les estamos esperando. Les juramos por Alá que su bandera solo volará en Egipto sobre nuestros cuerpos sin vida. Hemos aprendido de los errores de nuestros predecesores. Lo que sucedió en Siria y Libia [donde las sucursales de Al-Qaeda operan y constituyen amargos rivales del EIIS] no se repetirá aquí. Manténganse en espera: Solo nos separan días al momento en que los atraparemos».[9]

Para ver el despacho en su totalidad en ingles junto a las imágenes y videos copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: https://www.memri.org/reports/sinai-%E2%80%93-new-arena-ongoing-isis-al-qaeda-rivalry

*R. Green es director del Proyecto Supervisión a la Amenaza Terrorista y Yihad en MEMRI

 


[1] La milicia ‘militaia tribal’ afirmó que había llevado a cabo un ataque en el área de Nuqaizat, cercano a la base aérea militar de Al-Gura, en el que murieron ocho combatientes del EIIS. Facebook.com/Sinai.tribes.official, 12 de octubre, 2017.

[2] Los Jawarij fueron un grupo que se rebeló contra los sucesores de Mahoma en el siglo VII y proclamó apóstatas a los musulmanes incluso por infracciones muy pequeñas. La corriente principal Sunnah los considera como desviados y extremistas, y el nombre, por lo tanto, es utilizado como etiqueta derogatoria para los grupos extremistas.

[3] Telegram.me/chnegg, 11 de noviembre, 2017.

[4] El ataque resultó en la muerte de decenas de oficiales de seguridad egipcios. Véase el informe del PSATY de MEMRI. Nuevo grupo alega haber perpetrado una emboscada mortal contra las fuerzas de seguridad egipcias al suroeste del Cairo, 5 de noviembre, 2017.

[5] Término despectivo dado a las fuerzas tribales que han estado combatiendo contra Al-Qaeda y el EIIS en la última década. Cuando el EIIS llama a un grupo rival «sahawat», lo define como un enemigo traidor que debe ser combatido.

[6] Al-Hayat (Londres), 11 de noviembre, 2017.

[7] Telegram.me/wikalat nasher news, 14 de noviembre, 2017.

[8] Telegram.me/chnegg, 12 de noviembre, 2017.

[9] Twitter.com/YAH_682, 14 de noviembre, 2017 (la cuenta ha sido cerrada).