En un editorial en el diario saudita publicado en inglés Arab News titulado «Vivir en Negación», a Bashar Assad y al gobierno sirio se les insta prestar atención a las llamadas de los manifestantes y entablar un verdadero esfuerzo de reforma y cambio.
Los siguientes son extractos del artículo, en su original en inglés traducido al español: [1]
«El líder sirio continua viviendo en negación»
«Tras tres meses de protestas populares y de represión que ha incendiado a Siria, poco parece haber cambiado en Damasco. En su tercer discurso en tantos meses, el Presidente Bashar Assad revisó temas familiares y ofreció pocas novedades. Este culpó de nuevo a las fuerzas externas y a los ‘saboteadores’ y ofreció vagas promesas de reformas inciertas en un futuro distante. Hubo amenazas de regulación ‘después-de mí-diluvio’ también, advirtiéndole del colapso de Siria y todo lo demás en caso de su caída.
«Así que si alguien espera grandes cambios y reformas profundas en el asediado discurso del líder de Siria en la Universidad de Damasco el lunes, estos se decepcionarían una vez más. Es de extrañar que el tan esperado discurso de Assad, en gran parte dirigido a la galería internacional en lugar de a su audiencia nacional, fue seguido rápidamente por más protestas espontáneas en todo el país.
«El problema es, al igual que muchos de sus compañeros de viaje, de que el líder sirio continua viviendo en la negación, o se le permite vivir en negación por sus cuidadores y personas influyentes del régimen Ba’athista. Como resultado, el líder sirio no parecen darse cuenta de la gravedad de la situación y del reto sin precedentes que enfrenta al ya medio siglo de edad del régimen Ba’athista. Y cuanto más tiempo este síndrome del avestruz persista en Damasco, mayor el precio que el país árabe y su gente pagaran.
«Ya, cerca de 2.000 personas han muerto y decenas de miles han huido a países vecinos como Turquía. Existen numerosos informes de abusos cometidos por el ejército en gran parte dominado por una élite minoritaria que también controla todas las otras ramas del estado. Esta puede ser la razón, a diferencia de las tropas egipcias que se negaron a disparar contra los manifestantes desarmados en la plaza Tahrir, las fuerzas sirias no han tenido reparos en tratar con las manifestaciones pacíficas que sacuden al país».
«El uso excesivo de la fuerza bruta contra los manifestantes pacíficos no tratara con el reto de enfrentarla»
«¿Cuánto tiempo durará esto? Los líderes de Siria tienen que aprender de los eventos y acontecimientos recientes en la región. El uso excesivo de la fuerza bruta contra los manifestantes pacíficos no va a enfrentar el desafío que tienen ante sí. De hecho, sólo le inyectara más combustible a la ira y al anhelo de cambio de un pueblo reprimido durante mucho tiempo.
«No es momento de estancamiento y dilaciones. El tiempo para la formación de comités en explorar la posibilidad de reformas en un futuro remoto ya pasó hace mucho tiempo. Lo que Siria necesita es un cambio real y significativo. En lugar de culpar a Israel, Estados Unidos, a la Hermandad Musulmana y a las ‘bandas armadas de forajidos y delincuentes’ por lo que es claramente un movimiento pacífico e indígena, Assad debería abordar el deseo genuino de su pueblo por la libertad. El gobierno de Damasco debe involucrarse pacíficamente al movimiento de reforma por su propio interés, si no en el interés de la estabilidad de su país. Nadie requiere de la inestabilidad o crisis en uno de los estados más grandes y estratégicos árabes. Eso no significa, sin embargo que uno deba pararse y mirar mientras personas inocentes son asesinadas por reclamar lo que les corresponde.
«El jefe de la Liga Árabe Amr Moussa podría haber hablado para la totalidad del mundo árabe cuando este por primera vez expresó su ‘enojo y preocupación’ por la situación en Siria. Articulando la creciente preocupación de los estados miembros, Moussa advirtió esta semana que la continuación del status quo pudiera llevar a lo que no puede ser deseado – para Siria. De hecho, el status quo no es del interés de nadie. Es hora de que Damasco obtenga este mensaje en términos muy claros».
[1] Arab News (Arabia Saudita), 21 de junio, 2011. El texto ha sido ligeramente editado para mayor claridad.