La primera parte de la entrevista del Dr. Abd Al-Hamid Al-Ansari con el diario Qatari Al-Raya[1] se enfocó en su apoyo a la reforma curricular del mundo árabe, a la incitación en las mezquitas, a la guerra en Afganistán, y a la popularidad de Osama bin Laden. En la segunda parte, que presentamos a continuación, el Dr. Al-Ansari discute las relaciones entre Estados Unidos y los árabes y musulmanes, y la necesidad de reformar el mundo árabe y musulmán:
Relaciones entre Estados Unidos y los Árabes y Musulmanes [2]
«Uno de nuestros mayores errores, que nos perjudica a nosotros mismos, es que clasificamos de hostiles nuestras relaciones con el occidente en general, y con los norteamericanos en particular… Estamos dispuestos a borrar todos nuestros logros, sacrificar nuestro nivel de vida, y adoptar niveles de vida de países clasificados de hostiles hacia Estados Unidos, como son Irak, Sudán e Irán. En mi opinión, sería idiota de nuestra parte permitir que nuestro desacuerdo con Estados Unidos con respecto al conflicto árabe-israelí nos empuje al abismo.»
«Muchas ideas religiosas y pan-árabes son suicidas y destructivas… No intento inspirar miedo ni me opongo al sacrificio por el bien de la religión y de la patria. Pero, la irresponsabilidad y la falta de entendimiento nos han atrapado en esta retórica ciega, que nos lleva a la destrucción. Hay estrategias y alternativas para resolver las contradicciones y problemas que existen entre nosotros Estados Unidos…»
«Aquel que describa nuestras relaciones con Estados Unidos como hostiles, es injusto, por las siguientes razones»:
«Ni la administración ni el pueblo norteamericanos son hostiles hacia el Islam o los musulmanes. Por el contrario: en comparación a otros pueblos, el norteamericano es el que mejor ha acogido al Islam. La comunidad islámica ahí cuenta con mas de ocho millones de personas, y hay cientos de mezquitas, centros, asociaciones y organizaciones islámicos. La situación del Islam en Estados Unidos es buena, y cada día gana mas terreno y aceptación.»
«Sí, el pueblo y la administración norteamericanos son hostiles a la forma destructiva del Islam. Sí, hay escritores, políticos y la extrema derecha que son hostiles hacia el Islam y los musulmanes. Sin embargo, ellos son solo un sector. Ellos no forman la opinión pública y no dirigen la política del gobierno…»
«El gobierno norteamericano ha declarado repetidamente que respeta al Islam y a los musulmanes – principalmente el Presidente Bush, que se ha mostrado más entusiasta que todos los anteriores presidentes norteamericanos en la defensa del Islam… Él hizo una distinción cuidadosa entre el Islam y el fanatismo. Cuando usó la palabra ‘cruzada’ fue malentendido, por lo que de inmediato acudió al Centro Islámico, se encontró con líderes musulmanes y les ofreció una explicación y, no dudó en disculparse- aunque esta palabra [cruzada] no tenga ningún significado en el contexto moderno…»
«Al igual que él, los medios de comunicación también alabaron al Islam, motivando a los norteamericanos -aun después del 11 de Septiembre- a que estudiaran el Islam y lo comprendieran mejor. La administración se aseguró que el Islam y los musulmanes estuvieran representados en todos los eventos oficiales. El servicio postal imprimió la primera estampilla conmemorando las festividades islámicas… La Cámara de Representantes comenzó una de sus sesiones con la lectura de un párrafo de Surat Al-Fatiha… ¿Podemos llamar hostilidad hacia el Islam y los musulmanes estos actos de amistad de la administración y del pueblo norteamericanos?…»
«Las relaciones árabe-norteamericanas han pasado por diferentes etapas a través de la historia: han habido acuerdos y desacuerdos, pero los aspectos positivos sobrepasan en mucho a los negativos. Basta con mencionar unos cuantos»:
El Apoyo Norteamericano a los Musulmanes y a los Árabes
«El ultimátum norteamericano [a Gran Bretaña, Francia e Israel] durante la Guerra del Canal de Suez [1956]; la liberación de Kuwait; los acuerdos de defensa del Golfo en contra de los peligros regionales y aspiraciones avariciosas; la ayuda norteamericana a Egipto por mas de 25 años, que suma mas de 52 billones de dólares. Después de los ataques del 11 de Septiembre, Estados Unidos apoyó a la economía egipcia con otro billón de dólares. Es mas, las inversiones norteamericanas son de las más importantes de las inversiones extranjeras en los países árabes, y la venta de armas de Estados Unidos a los países árabes es enorme – la última transacción con Arabia Saudita fue por mas de 2.4 billones de dólares.»
«Si no hubiera sido por la intervención y mediación norteamericanas, Egipto no hubiera recuperado el Sinaí, y la Autoridad Palestina no hubiera recuperado parte de su territorio… Además, Estados Unidos subsidia el presupuesto de la Autoridad Palestina, proporciona ayuda a Jordania, y es el mayor donador a países como Afganistán, Sudán y Somalia. Estados Unidos proporciona armamento, tecnología y entrenamiento a los ejércitos de muchos países árabes. Los ejércitos árabes dependen de armas y refacciones norteamericanas para desarrollar su capacidad bélica y para sus ejercicios de entrenamiento. Sin la intervención armada para defender a los musulmanes en Kosovo en 1998, y antes de eso su intervención en Bosnia en contra de la agresión Serbia, los musulmanes no hubieran sido liberados. Estados Unidos se comprometió a donar 7 millones de dólares a Bosnia… Sin la intervención y armas norteamericanas, Afganistán no se hubiera librado de los rusos.»
«No debemos olvidar el apoyo norteamericano a la independencia del colonialismo de los países árabes y musulmanes. No debemos olvidar los acuerdos económicos, comerciales y militares con Estados Unidos. También debemos recordar el apoyo norteamericano a favor a la apertura democrática, la modernización y los derechos humanos en el mundo árabe.»
«Ente los aspectos negativos, podemos mencionar la preferencia y apoyo perpetuo de los norteamericanos a Israel. Sí, este es un importante aspecto negativo. Sin embargo, es tan solo un elemento dentro de la relación… no en toda la relación. Los aspectos positivos son mucho más numerosos…»
«Es cierto, Norteamérica favorece a nuestro enemigo [Israel], pero ¿podemos permitir que este problema controle nuestras relaciones con Estados Unidos? ¿Qué ganamos mostrando hostilidad hacia Estados Unidos? ¿No perdimos suficiente durante el tiempo en el que éramos hostiles hacia Norteamérica y confiamos en los rusos como nuestros aliados, creyendo en frases revolucionarias huecas y en llamados para atacar intereses americanos? ¿No fue esta una mala apuesta por la que todavía estamos pagando?» «…¿Qué gana nuestra nación al con maldecir a Washington y con diseminar odio y hostilidad hacia Estados Unidos a través de la televisión y la prensa? ¿Qué hemos ganado de las manifestaciones de gente ondeando la foto de bin Laden y quemando banderas norteamericanas? …»
«…En vez de maldecir e insultar, deberíamos ganarnos a Estados Unidos… como lo hacen otros. Nuestro desacuerdo político con Estados Unidos es de cantidad, no de calidad; es un desacuerdo basado en el porcentaje de tierra que debe de regresársele a los Palestinos de los territorios ocupados en 1967. Egipto recuperó sus tierras al igual que Jordania. Los palestinos tienen una autoridad y un estado, y existen acuerdos firmados con Israel bajo auspicios internacionales y norteamericanos que no pueden ser revocados. Por lo tanto, responder a llamados y gritos de combate que falsos y obsoletos no ayudará en nada a nuestra causa.»
Necesitamos Cambios
«…Nuestra situación debe cambiar; debe haber mas apertura democrática, social y económica, mas respeto por los derechos de los seres humanos, las mujeres y las minorías. El pueblo norteamericano no respeta a quien no se respeta a sí mismo… El mundo está cambiando rápidamente, y no debemos de ser simples espectadores.»
«Debemos entender que el Islam no es víctima de la conspiración de nadie. Debemos liberarnos de nuestro complejo de odio y hostilidad. No debemos quedarnos atrapados en las teorías de conspiraciones globales en nuestras relaciones con el occidente y Estados Unidos… ¿Por qué no actúa la comunidad árabe de Estados Unidos, en vez de difundir exageraciones acerca del poder del cabildo sionista?… Debemos aprender como entender la mentalidad norteamericana y comunicarles lo que esperamos.»
«Pero, antes de todo esto, debemos liberarnos del odio y la hostilidad que rigen nuestros periódicos y que emana de nuestros canales de televisión, provocado desde los púlpitos de nuestras mezquitas…»
«…Las nuevas generaciones pagarán un alto precio por la incesante distorsión surgida de los púlpitos de las mezquitas… Debemos saber… que una gran mayoría de norteamericanos está a favor del diálogo y el entendimiento mutuo…»