Las elecciones presidenciales del 2007 en Francia han sido caracterizadas por la participación de un número grande de ciudadanos franceses de África del Norte en el proceso electoral. Cuatro aplicaron a la candidatura: el ex mufti de Marsella Soheib Bencheikh, [1] la embajadora al Concejo Supremo Audio-Visual de Francia (CSA) Leila Bouachera, el empresario Rachid Nekkaz, y Zakaria Ben Mlouka quien tiene ambas ciudadanías la tunecina y la francesa. Sólo 12 de todos los solicitantes a la candidatura pidieron obtener las firmas de los 500 alcaldes exigidas para participar – siendo los más prominentes Nicolás Sarkozy, Ségolène Royal, François Bayrou, y Jean-Marie Le Pen. Ninguno de los cuatro probables candidatos de origen norteafricano consiguió el número requerido de firmas.
No obstante, el alto porcentaje de ciudadanos franceses de África del Norte o del Medio Oriente involucrados en la política en Francia enfatiza el sentido de estos ciudadanos de pertenecer a la República Francesa y su deseo de participar y hacer escuchar sus voces a través del proceso político.
El ex mufti de Marsella Soheib Bencheikh y la embajadora del CSA Leila Bouachera son fuertes defensores del secularismo. Soheib Bencheikh dice que Francia provee una oportunidad única al surgimiento de un Islam reformado, y que el Islam en Europa debería pasar por la misma evolución como lo hizo el Cristianismo durante la iluminación, confinándose a si mismo a la esfera privada de la vida. Por su parte, Bouachera defiende la prohibición de «ostentosas» señales religiosas (tal como los define la ley francesa), no sólo en las escuelas sino en todos los lugares públicos.
Rachid Nekkaz apunta en promover una democracia eficaz principalmente a través de la inscripción automática del votante de todos los ciudadanos franceses. Zakaria Ben Mlouka, con un programa general que apunta a la «paz y la justicia», está esforzándose más específicamente por promover los derechos del inmigrante y de la población de segunda generación.
Bouachera, Nekkaz y Ben Mlouka consideran obsoleta la separación de la izquierda-derecha en Francia, y lo que realmente está en peligro son las necesidades del pueblo. Por su parte, Bencheikh se define a si mismo como «un izquierdista que deplora la desaparición de la verdadera izquierda».
Lo siguiente es un corto perfil de los cuatro:
Dr. Soheib Bencheikh
Soheib Bencheikh nació en Jeddah, Arabia Saudita, en 1961. Estudió teología islámica en la Universidad Al-Azhar y recibió su doctorado del prestigioso Ecole Parisiense des Pratique des Hautes Etudes (EPHE). Anteriormente Mufti de Marsella, Francia, es un miembro del Concejo Francés para la Religión Musulmana [2] y encabezado del Instituto Francés para la Ciencia Islámica. [3]
Un fuerte defensor del secularismo, Bencheikh cree que el secularismo al estilo francés es una condición previa necesaria para la reforma del Islam, y llama en los musulmanes y no-musulmanes a participar en la crítica al Islam, reinterpretando sus textos santos, combatir el fundamentalismo, y ayudar al Islam a adaptarse a la era moderna.
El secularismo es clave para un Islam reformado; La experiencia francesa provee la posibilidad de un Islam reformado
Según Bencheikh, el releer los textos «en luz del pensamiento moderno» sólo puede tener lugar en un contexto secular. Él dice que la experiencia francesa proporciona en particular la posibilidad de un Islam reformado, [4] pero que Francia podrá nutrir al nuevo Islam reformado sólo si se adhiere a los valores seculares de la República Francesa: «El Islam… debe adaptarse a la modernidad, siglo tras siglo. Yo llamo en los franceses a permanecer fieles a la misión histórica de Francia. Llamo en los musulmanes a hacer lo único que los salvará: adherirse a los principios básicos [del estado francés], tales como el secularismo». [5]
Bencheikh explica que el secularismo no es ateísmo, sino un juego de leyes que habilitan la tolerancia: «Yo creo que la comprensión inter-religiosa es otra palabra para el secularismo… creo que la religión vive bajo el [protección] del secularismo». [6]
Él agrega que la izquierda debe permanecer fiel a su misión de proteger el secularismo: «Yo soy izquierdista, y me espanto por el colapso de los ideales de la izquierda [en Francia]…» [7] Él agrega: «Yo no estoy en contra de la izquierda. Al contrario, deploro su ausencia… La izquierda siempre fue menos tímida [que la derecha]…, más receptiva a la igualdad y a las causas universales. ¿A dónde se ha ido esta izquierda? [La izquierda de hoy] gasta sus energías buscando la figura más carismática por quien la gente vote. ¿Dónde están las ideas? Dónde están los planes [para el futuro]? Existe [todavía] una izquierda que cree en su propio mensaje?» [8]
El Islam tradicional se ha vuelto obsoleto
Bencheikh dice que el Islam se desarrollo en las sociedades tribales y todavía se enfoca en el estilo de vida tribal. De esta forma, él dice, debería ser reformada para dirigirse a las necesidades de la vida moderna: «… Las enseñanzas religiosas se desarrollaron y fueron formuladas entre los siglos 8 y 12, y no han sufrido reforma alguna o actualización desde esa época… [Los musulmanes hoy día] experimentan una contradicción peligrosa entre su estatus como ciudadanos y su estatus como creyentes…»
«Esta teología [del Islam tradicional] no le importaba vivir en armonía con otras culturas, y no sabe nada del pluralismo basado en los principios universales tales como el secularismo y la libertad religiosa – [principios que son] aplicables a todas las religiones y concedidos a todos». [9]
El Islam político es herejía
Bencheikh deduce una distinción entre el Islam como una religión humanista y el Islam como una herramienta política, declarando que los teólogos musulmanes tienen una responsabilidad en promover el Islam humanístico: «Depende de nosotros los musulmanes que estamos versados en las ciencias religiosas el hacer distinción, en las mentes de los musulmanes y no-musulmanes por igual, entre una religión basada en la espiritualidad, el humanismo, y la civilización [por una parte], y el uso puramente instrumental [de la religión] lo cual apunta a tomar el poder mundano y material [sobre el otro]…» [10]
«El Islam debe ser criticado, al igual que el Cristianismo fue [criticado] durante la Iluminación»
Él agrega que el no criticar al Islam es equivalente a la destitución despectiva de este: «El Islam debe ser criticado, así como el Cristianismo fue [criticado] durante la Iluminación. El Islam es un mensaje para toda la humanidad. Por consiguiente, no es propiedad [exclusiva] de los musulmanes. Todos tenemos el derecho a estar fascinados por esta religión, adherirse a esta, ser críticos de esta, e incluso ser hostiles a ella… El evitar criticar al Islam es una forma de segregación». [11]
Promover el Islam moderno
Bencheikh agrega que «la mayoría de los musulmanes – la gente común – quiere un Islam abierto, moderado. Ellos quieren escuchar un discurso innovador, moderno. Esta es [la tendencia] que yo quiero promover… [Los musulmanes] moderados son la mayoría, pero no toman acciones. Éste es siempre el caso con las mayorías silenciosas. Los movimientos radicales, por otro lado, se benefician de los grupos de activistas [organizados en] partidos… Existe una necesidad para una totalmente nueva organización [que promoverá un Islam moderado]». [12]
Dra. Leila Bouachera
Leila Bouachera es hija de inmigrantes argelinos pobres. Se define a si misma como una «berebere de la [región] Aurès». Nacida en Marsella en 1960, ha sido embajadora del CSA por más de 17 años.
Bouachera perteneció a los partidos derechistas ya difuntos Rassemblement pour la République (RPR) y el Centre des Démocrates Sociaux (CDS) por muchos años, pero estaba decepcionada de ellos y se marchó. Su programa político apunta a ser ni de derecha ni de izquierda. Ella cree que el sistema de dos partidos se ha vuelto obsoleto. A continuación algunos de los elementos principales de su programa: [13]
Reformas constitucionales
– Secularismo: Según Bouachera, el secularismo debe ser estrictamente obligatorio en los lugares públicos, y el velo, el yarmulke, y todas las otras señales ostentosas de afiliación religiosa deberían prohibirse en todos los lugares públicos (no sólo en las escuelas).
– El Establecimiento de la 6ta República: Ella cree que el presidente francés ha llegado a mantener poderes casi monárquicos bajo la 5ta República. Según Bouachera, el presidente debería decir menos, y la autoridad del parlamento debería ser reforzada.
– La Reforma del Parlamento: El parlamento no representa la diversidad de la población francesa y la paridad entre los hombres y las mujeres en la población. «La verdadera democracia tiene todas sus corrientes representadas. Es necesario introducir una medida de [representación] proporcional en las elecciones parlamentarias».
– Representación Justa de Todas las Comunidades: Bouachera señala que existen muy pocos ciudadanos franceses de origen inmigrante en los cuerpos principales del estado, y dice que los «hijos de la República» de origen inmigrante también deberían ser representados en el liderazgo.
– Extranjeros que Votan en las Elecciones Locales: Extranjeros que residen en Francia durante por lo menos 10 años deben tener derecho al voto en las elecciones locales.
Problemas sociales
– Seguridad: Ella defiende la legalización de las drogas suaves junto con el desmantelar de las redes de los distribuidores que aterrorizan los suburbios. Respecto a los suburbios con un alto porcentaje de violencia, ella dice: «Uno no debe esperar [para tomar acciones] hasta que los estudiantes violen a muchachas más jóvenes, lo cual es más frecuente – o hasta que los maestros sean atacados».
– Construcción de cementerios para musulmanes: Bouachera cree que los musulmanes deberían tener cementerios propios, ya que «los individuos tienen el derecho de vivir y morir en dignidad».
– Homosexualidad: Ella está en pro del matrimonio homosexual, y dice que a los homosexuales debería permitírsele adoptar niños.
Asuntos internacionales
Teniendo en cuenta la esperada crisis del petróleo, Bouachera cree en la necesidad de reforzar la investigación en los campos de bio-combustible y fuentes de energía alternativa. Ella cree que Turquía, que siempre ha sido un país estratégico, debería entrar en la Unión Europea, y que las fuerzas norteamericanas deberían salir de Irak.
Rachid Nekkaz
Nació en 1972, el noveno de 12 hijos en una familia de origen Kabyle Beréber, Rachid Nekkaz creció en los suburbios de clase obrera de París. Sus padres llegaron a Francia desde Argelia en 1950. Él obtuvo un grado de maestría en historia de la Sorbonne.
Iniciativas políticas públicas
En el año 2000, Rachid Nekkaz publicó un libro basado en entrevistas con los líderes de los países de G7 para responder a las preocupaciones de comienzos del siglo 21. El libro, titulado Millenarium: Cual Futuro para la Humanidad? Un Diálogo entre la Juventud Mundial y los 7 Líderes Mundiales fue publicado en febrero del 2000.
Después del comienzo de la segunda Intifada, Rachid Nekkaz entregó una propuesta al Presidente norteamericano Bill Clinton para que las oficinas principales de las Naciones Unidas sean movidas de Nueva York a Jerusalén. Él sugirió que Jerusalén fuese convertida en una ciudad internacional en un esfuerzo por lograr la paz a largo plazo en el Medio Oriente.
En 1995, Nekkaz estableció una asociación para promover el uso de multimedia en los suburbios inmigrantes de Francia.
En el 2001, Rachid Nekkaz fundó, junto con Hakim el-Ghissassi, editor en jefe de la revista La Medina, [14] el Foro citoyen des cultures musulmanes (FCCM), una organización dedicada a promover una imagen más positiva de los ciudadanos musulmanes de Francia.
Una democracia del siglo 21
Nekkaz cree que la división entre la izquierda y la derecha es obsoleta, y que el próximo gobierno debería ser un gobierno de unidad nacional no-político ya que hay buenas ideas en todas partes» y «los problemas de los franceses van más allá de esta división». También, Nekkaz cree que el parlamento debe disfrutar un decir mayor, restringiendo así la autoridad del presidente. Además, Nekkaz favorece el uso de Internet en el proceso electoral (para el registro, actualización de datos personales, y el votar). Él cree que esto motivaría a la gente a tomar parte en el proceso electoral, en contraste a la actual baja concurrencia de votantes en Francia – sin mencionar el aproximadamente 30% de ciudadanos franceses que no están ni siquiera registrados para votar. Para promover su idea, Rachid Nekkaz co-fundó el Club des Elus Allez France (El Club de Oficiales Electos de «Arriba Francia»). El Club defiende el registro automático del votante de todos los ciudadanos franceses, en un esfuerzo por reforzar la democracia efectiva.
Discriminación
La lucha contra la discriminación general en relación a la edad, color, y sexo debe convertirse en una prioridad nacional ya que esta se ha vuelto más fuerte en los últimos años. Como herramienta, Nekkaz sugiere trazar varios casos donde existen muchos candidatos con idénticas calificaciones.
Naturalización
Nekkaz representa la ciudadanía de todos los extranjeros que residen legalmente en Francia por más de 10 años, mientras se comprometan a aprender el idioma francés y los principios de la República Francesa. Él también desea facilitar la naturalización de los extranjeros.
Servicios públicos en las áreas rurales
Mientras recolectaba las 500 firmas requeridas para entrar en la contienda presidencial, Nekkaz recorrió toda Francia tres veces, y se armonizó favorablemente a las necesidades de los pequeños pueblos rurales. Él exige que a todos los alcaldes les sean pagados (por lo menos) un sueldo legal mínimo, y que los servicios públicos sean proporcionados a pueblos aislados – apuntando al hecho de que a algunos les falta instalaciones de cuidado diario, escuelas, oficina de correos, panaderías, comestibles, farmacias, y médicos locales. [15]
Zakaria Ben Mlouka
Ben Mlouka, 52, provee poca información sobre su historial. Según información proporcionada por varios contribuidores, [16] que no ha sido negado por Ben Mlouka, su padre es tunecino y su madre francesa. Su esposa e hijos son tunecinos. Él es un veterinario que reside en Túnez y según informes recibidos tiene ambas ciudadanías la tunecina y la francesa. A continuación algunos de sus puntos de vista:
– Seguridad: Ben Mlouka dice que el país está en paz y que uno no debería converger en posturas alarmantes respecto a la seguridad, la cual fomenta la desconfianza hacia los inmigrantes. Él dice que el discurso sobre inseguridad fue concebido para activar un sentimiento de inseguridad en la opinión pública y hacer de la inmigración responsable de esta.
– Salarios: Diciendo que él «siempre quiso ser el candidato de los marginados», [17] desea elevar el salario mínimo y apoya un aumento quincenal temporal del impuesto a la riqueza.
– Igualdad: «Reestableceré la justicia y la igualdad para todos los franceses. Ésta será mi prioridad. Los valores Republicanos franceses mencionan una comunidad de ciudadanos con idénticos derechos y deberes, sin importar sus orígenes…»
– Discriminación: «La humillación de las hijas e hijos de la República sólo porque tienen un origen diferente, color o credo se ha convertido en un hecho ordinario y trivializado (…) Las nociones de discriminación e integración no pueden estar separadas (…) Haré de la lucha contra la discriminación una causa nacional. Francia debe rápidamente adoptar un arsenal judicial que le permita castigar a cualquiera culpable de discriminación. Ésta es la única manera de evitar otra caída, 2005». [18]
– Libertad de Expresión sin Restricción para los Historiadores: Sin embargo, refiriéndose aparentemente a la ley francesa que prohíbe la negación del Holocausto, Ben Mlouka escribe: «Como en ciertos países totalitarios, Francia ha promulgado leyes coercitivas que restringen la libertad de expresión de los historiadores. Por temor a ser castigados, se les dice lo que deben buscar y lo que deben encontrar. Esto es inaceptable en Francia. Estas leyes deben ser abolidas (…) No depende de los políticos y de la ley el reescribir los libros de textos. Yo tomaré todos los pasos necesarios para detener tal intervención política y presión ideológica ejercidas en los investigadores o historiadores que revaloran el pasado».
– La Guerra en Irak: «Los americanos son nuestros amigos y aliados. Esto es el por qué yo les diré a su debido tiempo de que deben salir de Irak lo más pronto posible (…) Depende sólo de los iraquíes el establecer la paz y la seguridad en su país».
– Una Europa Unida: Ben Mlouka apoya una Europa unida no sólo económicamente sino también política y militarmente, para que Europa pueda hablar «con una voz» y pueda ser «independiente de nuestros aliados al otro lado del mar».
– Inmigración: Como remedio al problema de inmigración que enfrenta Francia, Ben Mlouka defiende la ayuda a los «países sub-desarrollados» y la «regularización del estatus de los extranjeros en una situación irregular».
– El Himno nacional: «Yo pienso que debemos cambiar sus palabras (…) La llamada a la guerra y las referencias a la sangre y a los grupos extranjeros no honran a Francia». [19]
* Nathalie Szerman es Directora del Proyecto Reformista de África del Norte en MEMRI.
[1] Véase MEMRI Despacho Especial No.1368, «Ex Mufti de Marsella Soheib Bencheikh: ‘El Islam Debe Ser Criticado, Al Igual que lo Fue el Cristianismo Durante la Iluminación; El Islam es un Mensaje para Toda la Humanidad – Por Consiguiente No Es Propiedad [Exclusiva] de los Musulmanes,'» 28 de noviembre del 2006, http://www2.memri.org/bin/espanol/articulos.cgi?Page=archives&Area=sd&ID=SP136806.
[2] El Concejo Francés para la Religión Musulmana fue establecido en el 2003 con el apoyo del entonces ministro del interior Nicolás Sarkozy, como una organización paraguas para las asociaciones islámicas.
[3] Institut Supérieur des Sciences Islamiques: http://www.institut-issi.fr/Niv_Sens_Gd_Pub.htm.
[4] Marianne et le Prophète, l’Islam dans la France Laïque, París: Grasset, 2006.
[5] La Nouvelle République d’Alger (Argelia), 8 de julio, 2006.
[6] Le Dauphiné Libéré (Francia), 16 de octubre, 2002.
[7] Charlie Hebdo (Francia), 4 de octubre, 2006.
[8] La Nouvelle République d’Alger (Argelia), 8 de julio, 2006.
[9] Extractos de Marianne et le Prophète, l’Islam dans la Francia Laïque, París: Grasset, 2006.
[10] Le Soir d’Algérie (Argelia), 27 de octubre, 2002.
[11] Le Parisien (Francia), 3 de octubre, 2006.
[12] Le Parisien (Francia), 21 de enero, 2004.
[13] Para el programa electoral, véase: http://www.presidentielles-2007.net/ex-cds.php.
[14] Hakim el-Ghissassi fundó en 1998 la publicación mensual La Medina, que ofrece temas pertinentes a las sociedades islámicas en el mundo. Hakim el-Ghissassi también ha fundado el portal de Internet www.sezame.info que provee noticias sobre las actividades islámicas en Francia y Europa.
[15] Véase el portal Nekkaz: http://www.nekkaz.com/programme/.
[16] http://66.102.9.104/search?q=cache:DbxGwdXU7WcJ:www.lapresidentielle.info/candidats/%3Fcandidat%3Dzakaria-ben-mlouka+probleme+ben+mlouka+tunisien+veterinaire&hl=en&ct=clnk&cd=1.
[17] Le Monde, 8 de diciembre del 2006, http://abonnes.lemonde.fr/web/panorama/0,11-0,32-843711@1-5380,0.html.
[18] Esta es una referencia a los enfrentamientos que se extendieron a través de Francia en otoño del 2005 entre la juventud de origen predominantemente inmigrante, quemando centenares de automóviles todas las noches después de que el Ministro del Interior Nicolás Sarkozy los denominó «racaille» (basura).
[19] Para el programa electoral, véase: http://www.ben-mlouka-presidentielle-2007.fr/programme.html.