En un artículo por el Día Internacional de la Mujer, que tuvo lugar el 8 de marzo del 2014, la activista palestina Ahlam Akram revisó las repetidas violaciones de los derechos de la mujer a través de todo el mundo árabe y afirmó que las leyes relativas a la condición de la mujer árabe «pertenecen a la Edad de Piedra». Según ella, los países árabes hacen casi nada para mejorar la situación de la mujer bajo pretexto de estar preocupados por «la gran campaña contra Israel». Ella señaló además que, a pesar de las reformas que han sido promulgadas para otorgarles a las mujeres más libertades, por ejemplo, en Arabia Saudita, la situación de la mujer árabe sigue siendo sombría.

Lo siguiente son extractos del artículo:[1]


Ahlam Akram (imagen: gulfnews.com)

«Las mujeres iraquíes lanzaron [recientemente] una protesta en contra de la [propuesta] ley de condición personal, [una ley] que fue vehementemente defendida por la parlamentaria iraquí Susan Al-Sa’ad en la BBC en árabe. El proyecto de ley, de aprobarse, permitirá casar a menores de edad – niñas de 9 años de edad o a los primeros signos de madurez sexual… La ley, de aprobarse, determinará que el testimonio de un hombre vale por el de dos mujeres, lo que afianza la desigualdad sexual, y se unirá a otras violaciones de los derechos de las mujeres [tipificado] en la ley, tales como una pena máxima de tres años de prisión para un marido que asesina a su esposa…

«[La situación respecto a] la condición de la mujer en Egipto no es menos sombría. Desde el levantamiento popular en el 2011, ha habido una disminución constante en la condición de la mujer, ya que la nueva constitución preserva la desigualdad entre los ciudadanos de diferentes religiones. Además, ha habido un aumento en la violencia y acoso sexual, en la trata de mujeres y la mutilación genital femenina [MGF].

«En cuanto al Líbano, los diarios informaron sobre 27 mujeres libanesas que sufrieron violencia, algunas asesinadas por sus maridos, pero los parlamentarios [libaneses] – que se supone representan a estas víctimas de la violencia y defienden sus derechos – insisten mayormente en bloquear las leyes que [habilitarían condenar a hombres]…

«La tragedia de la mujer siria supera todas los demás, desde los matrimonios de niñas menores de 12 años en los campos de refugiados a la propagación de violaciones, y peor aún, más de 4.000 casos de MGF reportados – por no mencionar otras violaciones!

«En Arabia Saudita, a pesar de las reformas promulgadas por el rey, [el requisito] para observar la costumbre de tutela [por un familiar varón] todavía ahoga a la mujer y le niega su libertad. La policía religiosa continúa [operando] como un [cuerpo] hostil que ahoga las ambiciones de la mujer y les niega las libertades humanas más simples que pueden hacerle la vida más fácil, tal como conducir un automóvil. [A las mujeres] también se les requiere operen de acuerdo a las leyes firmemente tipificadas en el sharia, que provienen de la Edad de Piedra…

«En los territorios palestinos, ambos gobiernos [el de la Ribera Occidental y en la de la Franja de Gaza] culpan su falta de acción e incapacidad para defender [los derechos de] la mujer a la ocupación israelí. Esta es la misma excusa utilizada por los países árabes [para prevenir] reformas políticas y económicas y evitar defender al ciudadano árabe. El pretexto de la gran campaña contra Israel sigue vivo después de más de 60 años, aunque no hay rastro de ninguna guerra – que ciertamente no deseo – ni de la ‘paz del valiente’…

«Además de la pobreza del sufrimiento de la mujer palestina y la violencia doméstica, extendida y culturalmente aceptables, los mayores violaciones son los ‘crímenes de honor’. Las estadísticas muestran que en los primeros nueve meses, 2013 se registraron 25 delitos de este tipo, y sin embargo, tanto las autoridades [de la Autoridad Palestina y Hamas] no levantan un dedo para cambiar las leyes que han existido desde la Edad de Piedra y que exonera al asesino considerando que este defendía su honor.

«En cuanto a Jordania, aparentemente punta de lanza de la modernidad civilizada, debemos saber que los parlamentarios educados, que van de Jordania, Europa y Estados Unidos para visitar a sus hijas que estudian en las universidades allí, todavía se niegan a aprobar una ley que impondría un castigo disuasorio sobre los hombres culpables por crímenes de honor.

«En Marruecos, es suficiente para saber que el código penal prohíbe albergar una mujer que ha dejado a su marido.

«Existen muchos denominadores comunes en la legislación que son exclusivas de los países árabes, [incluyendo una tendencia a] favorecer al hombre, [la práctica de obligar a] una víctima de violación a casarse con su violador para que este pueda evitar el castigo; las leyes [discriminatorias] sobre herencia y testimonio; indemnización por daño físico [en lugar del castigo]… y la incapacidad de la mujer en muchos países árabes para transferir su nacionalidad a sus hijos si se casa con un extranjero. Por otro lado, [una mujer divorciada] no recibe la custodia de sus hijos, mientras que el hombre puede engañar en el pago de la pensión alimenticia, etc. etc…

«En la última década no he conocido a ninguna soltera que quiera volver a un país árabe después de terminar sus estudios en una universidad británica. De hecho, algunos utilizan cada truco posible para obtener una visa permanente y no volver nunca, y la razón que [dan] es una: yo quiero vivir en una sociedad que me respeta como mujer».


[1] Mufaker.org, 9 de marzo, 2014.