Entre los ávidos espectadores de la Copa Mundial de la FIFA actualmente en curso en Brasil están aquellos de los países árabes y musulmanes. Este año, Argelia avanzó al torneo, el único equipo árabe en hacerlo; muchos en el mundo árabe estaban orgullosos de lo hecho en cuanto a la ronda de 16 finalistas.[1]
El disfrute del fútbol parece, sin embargo, ser inaceptable en los círculos extremistas salafistas. Antes y durante la Copa del Mundo, los clérigos salafistas en Arabia Saudita y Egipto emitieron fatuas y declaraciones atacando el juego y afirmando que el ver partidos de la Copa Mundial era reprensible.
Por el contrario, clérigos de Al-Azhar se apresuraron a subrayar que no había nada malo en ver partidos de fútbol y que los extremistas que prohíben esto deben ser ignorados.
También criticaron las posturas salafistas extremas en ver partidos de fútbol algunos columnistas que señalan que la Copa del Mundo fue disfrutada en todo el mundo árabe por gente sujeta a muchas dificultades y que son testigos de horrores en sus países de origen.
La mayoría en el mundo árabe parece estar ignorando estos fatuas salafistas; algunos espectadores incluso ven las transmisiones de la Copa Mundial gratuitamente de la televisión israelí y evitan así comprar paquetes altamente caros de las redes televisivas árabes.[2] Además, muchos usuarios en Twitter se burlan de los jeques extremistas por la prohibición.
Lo siguiente son declaraciones y fatuas de jeques salafistas en contra del ver partidos de la Copa Mundial, y críticas junto a ridiculizar los fatuas.
Jeques salafistas: Ver fútbol es reprobable y una tragedia para los musulmanes
Antes y durante la Copa del Mundo, jeques salafistas sauditas y egipcios expresaron reservas respecto al deporte así como también su preocupación de que muchos musulmanes pasan mucho tiempo delante del televisor y abandonan sus deberes religiosos, además de sujetarse a las influencias negativas. En su portal el 21 de mayo del 2014, el clérigo saudita Jeque ‘Abd Al-Rahman Al-Barrak emitió un fatua declarando: «No hay duda que el fútbol, jugado de acuerdo con [las normas internacionales aceptadas], ha causado que los musulmanes adopten algunas de las costumbres de los enemigos del Islam, que [preocupan sus mentes] con juegos y frivolidad. [Este juego] causa muchos actos abominables y corruptos…»[3]
Fatua de Al-Barrak (albarrak.islamlight.net)
Otro jeque saudita, Saleh Al-Fawzan, quien es miembro del Comité Permanente de Investigación Islámica y Emisión de Fatuas y del Consejo de Clérigos Sauditas de la Tercera Edad, hizo hincapié en la prohibición de ver partidos de fútbol durante el mes de Ramadán, que comenzó este año el 29 de junio. Al-Fawzan afirmó el relacionarse con el fútbol durante Ramadán era perjudicial y una pérdida de tiempo, y una pérdida masiva de musulmanes. Por lo tanto, dijo, los musulmanes no pueden ver los partidos de la Copa del Mundo, sobre todo cuando existe la posibilidad de que pudieran faltar a algunos de los rezos durante el mes sagrado. Este dijo: «Los musulmanes deben dejar de lado los juegos y la frivolidad y asumir la obra de Alá. No deben perder su tiempo siguiendo los juegos y la frivolidad, y menos durante el mes bendito de Ramadán. Esto es cierto para los musulmanes en general, y para la generación más joven en particular… Estos juegos no tienen ningún uso, y son perjudiciales y pérdida de tiempo…»[4]
El imán de la mezquita Abd Al-Salam Al-‘Izz bin’ en Riad, Jeque Muhammad Al-Habdan, también reprendió a los musulmanes por ver la Copa del Mundo. Este twitteó que el gran erudito musulmán medieval Ibn Taymiyya solía cerrar los ojos cada vez que veía a un cristiano, para no ver a alguien que calumnia a Dios (es decir, al afirmar que Jesús es el hijo de Dios).
Tweet del jeque Al-Habdan (Twitter.com/dr_alhabdan 9 de junio, 2014)
Hace dos años, el jeque egipcio salafista Abu Ishaq Al-Heweny proporcionó una explicación religiosa a la prohibición de ver partidos de fútbol. Citó una tradición del Profeta Mahoma que dice que «cada partido que uno juega es inútil excepto el tiro al arco con flechas, el entrenar al caballo de uno, y jugar con la esposa [juegos previos y besos]». Al-Heweny añadió que, ante la dura situación del ummah, ver el fútbol no es sólo un acto neutral – lo que significa es un acto que Alá ni recompensa ni castiga – sino un acto reprobable, puesto que los musulmanes deberían centrarse en asuntos más importantes que estar sentados frente de la televisión.[5]
El inicio de la Copa del Mundo el 13 de junio provocó un debate público en Egipto, comenzando con comentarios sobre el juego del Jeque Yasir Al-Borhamy, líder y fundador del movimiento egipcio Al-Dawa Al-Salafiyya. Un video publicado en la red muestra a Al-Borhamy contándole a una multitud que el fútbol es «una tragedia que me enoja enormemente… [Aunque] no prohibimos el [fútbol], salvo en determinadas circunstancias, [tales como] si nos distrae de la realización de deberes o desencadena actos prohibidos como lo extremo y el culto [a un equipo o hacia algún jugador], vestimenta indecente, o demostrar afecto o amistad hacia los infieles e hipócritas. Los partidos de fútbol son una especie de poderosa distracción que hace que una persona se olvide de todo lo imprescindible que un musulmán [debe hacer] por su religión, su ummah, y la construcción de su carácter. Hago hincapié en que quienes se ocupan del [fútbol] han caído [en la trampa de] hacer algo prohibido».[6]
El extremismo del Medio Oriente le enseña a las mentes pensantes una tarjeta roja (Al-Sharq Al-Awsat, Londres, 26 de junio, 2014)
Al-Azhar: Cualquiera que prohíba ver fútbol no entiende el espíritu del Islam
En respuesta a las declaraciones de Al-Borhamy, jeques de Al-Azhar se apresuraron en destacar que no había nada de malo en ver fútbol, e incluso fueron tan lejos como para condenar a Al-Borhamy. El Dr. Muhammad Rafat ‘Othman, miembro del Consejo de Expertos Superiores de Al-Azhar, dijo: «Uno no tiene prohibido pasar parte de su tiempo entreteniendo su espíritu al ver cualquier cosa que le anime a uno, mientras no esté prohibido. No podemos aceptar fácilmente el afirmar de que ver partidos haga que amemos a los infieles, ya que los musulmanes no tienen prohibido el respeto a los no musulmanes, siempre y cuando [este último] no les ataque».
El Dr. Magdy ‘Ashour, asesor del Gran Mufti de Egipto, también condenó el fatua de Al-Borhamy, diciendo: «Ver partidos está permitido y no tiene nada que ver con cualquier cosa prohibida [por el Islam]». Asimismo, el Dr. ‘Adballah Al-Najjar, miembro de la Academia de Estudios Islámicos de Al-Azhar, dijo: «Quien diga que el deporte está prohibido no entiende el Islam y está desconectado de la religión».[7]
Columnistas árabes: En lugar del extremismo religioso y la dolorosa actualidad, dejen que la gente disfrute del fútbol
‘Ali Al-Sharimi, columnista del diario saudita Al-Watan, se unió a las críticas de los fatuas que prohíben ver partidos de fútbol. Este escribió: «Los fatuas que prohíben el fútbol no son nuevos. Hace dos años, un predicador aquí [en Arabia Saudita] dictó en contra del juego, llamándolo[8] ‘un juego masón’. El texto más famoso invocado por los fatuas anti-fútbol fue dado a conocer en el 2003 por el Jeque ‘Abdallah Najdi… en este se establecen varias condiciones y reglas extrañas, entre ellas la prohibición de las faltas en el juego, tiros penales y tiros de esquina, la prohibición de usar camisetas numeradas por el jugador, y la prohibición de tarjetas amarillas y rojas…
«Pregunto: ¿Prohíbe el Islam el entretenimiento ¿Por qué algunos fatuas de clérigos se limitan a combatir la alegría y matar la felicidad? ¿Por qué emitir tantos fatuas estableciendo reglas y prohibiciones estrictas, y acosar [gente y] abrumarlos [con el Islam]? ¿Por qué algunos de estos fatuas juegan un papel tan negativo y hacen odiar la vida musulmana plena de penurias y sufrimiento?
«Algunos fatuas… despojan a un hombre de su libertad de elección… Lo persiguen en cada asunto, grande o pequeño, y en cada movimiento o ausencia de movimiento. [Dos tipos de fatuas] – los fatuas estrictos que prohíben la mayoría de los placeres y las formas de entretenimiento que Alá le permitía a sus esclavos [los musulmanes], y los fatuas incitadores que empujan a los jóvenes a la perdición y esparcen la cultura del ‘volarse a sí mismo por los aires’, mientras que exaltan el valor de la muerte y minimizan el valor de la vida – han robado a nuestros hijos de sus familias, de las escuelas, y de los placeres de sus vida, y les han empujado hacia las arenas de la muerte «.[9]
Ata’ollah Mohajerani, escritor iraní para el diario saudita Al-Sharq Al-Awsat en Londres y ex ministro de Cultura y Orientación Islámica bajo el Presidente iraní Mohammad Jatami, también justificó ver la Copa del Mundo como un respiro a las difíciles convulsiones políticas en el mundo árabe: «Parece ser que en estos días, los jóvenes de todo el mundo se han olvidado de la política y se centran en el fútbol, con cientos de millones de ojos pegados a las pantallas de televisión». Este luego compara la política y el fútbol, alegando que este último representa los altos ideales abandonados por el último – tales como la transparencia, con los numerosos ángulos de cámara y la capacidad de capturar cada momento en el terreno de juego; igualdad, con el mismo número de jugadores en cada equipo y las reglas que se aplican a todos; y el respeto, por las decisiones arbitrales. Por el contrario, dice, en la política, es la historia, no una persona viva, el último juez, y mientras miembros de los medios de comunicación pueden juzgar, si cruzan ciertos límites estos podrían ser encarcelados – algo que nunca sucede en el fútbol.
Cerrando, Mohajerani recomienda tomar un descanso de los temas de actualidad: «En lugar de ver a los jóvenes en Irak matándose unos a otros por falsos objetivos y observando la destrucción de Siria, a veces estamos mejor viendo fútbol como un soplo de aire fresco…»[10]
Si a la Copa del Mundo; no a las noticias del sangriento Medio Oriente (Al-Arabi Al-Jadid, Londres, 19 de junio, 2014)
Refugiado sirio intenta consolarse con la Copa del Mundo (emissa2012.com, 15 de junio, 2014)
Tweets se burlan de los fatuas anti-fútbol
Usuarios en Twitter hicieron más que ignorar estos fatuas estrictos; usaron el hashtag en Twitter «Islamic_Football» para enlazar los tweets que ridiculizaban a los islamistas y su aversión al fútbol. Algunos inventaron reglas imposibles burlándose de la visión del mundo de los extremistas islámicos:
«Reemplacen la pelota con las cabezas de los ‘alauitas, chiitas o cristianos – pero no judíos»
Twitter.com/sameeralyousef, 14 de junio, 2014
«Algunas de las gradas en el estadio debe reservarse para las fans femeninas de las brigadas del jihad sexual, que se entregaran a sí mismas al equipo ganador después del partido.
Twitter.com/m_azim59, 14 de junio, 2014
«Las banderas de la esquina deben ser sustituidas por la bandera vista debajo, [del Estado Islámico de Irak y Siria]»
Twitter.com/aboawad98, 14 de junio, 2014
«Cualquier [jugador] que se refugia en un delito será tratado como si este se retirara de las filas del Islam y castigado con ser decapitado»
Twitter.com/Momen0o, 14 de junio, 2014
[1] Al-Quds Al-Arabi (Londres), 27 de junio, 2014.
[2] El diario libanés Al-Nahar informó el 16 de junio, 2014 que la mayoría de los residentes del sur del Líbano, una mayoría que apoya a Hezbolá, observaba estas transmisiones israelíes, y tomó nota de la yuxtaposición extraña de escuchar los comentarios de los locutores israelíes en hebreo de la televisión y llamadas a los rezos desde las mezquitas.
[3] Véase MEMRI Despacho Especial No. 5763, Jeque saudita: El fútbol es una abominación moral, social y pública, 11 de junio, 2014.
[4] Almoslim.net, 26 de junio, 2014.
[5] YouTube.com/jtAQf5sKc48, 15 de mayo, 2012. Este video fue subido en la época de la reciente Eurocopa de fútbol y fue tomado de un programa del canal de televisión egipcio Al-Nas, que fue cerrado después de la expulsión de Muhammad Mursi.
[6] Al-Ahram (Egipto), 15 de junio, 2014.
[7] Al-Ahram Al-Arabi (Egipto), 24 de junio, 2014.
[8] Probablemente se refiere al Jeque Suleiman bin Nasser Al-Alwan. Véase MEMRI Despacho Especial No. 5129, «Fatua de jeque saudí: Los jugadores de fútbol son infieles», 10 de enero, 2013.
[9] Al-Watan (Arabia Saudita), 19 de junio, 2014.
[10] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 23 de junio, 2014.