La Iniciativa Mayor de los Estados Unidos para el Medio Oriente, la cual llama a una reforma económica comprensiva, social, cultural, y política, ha puesto el asunto de la reforma en un punto alto en la agenda del mundo árabe y musulmán. Mientras la iniciativa es puesta en lista para ser oficialmente anunciada en la Cumbre del G8, pautada para entre el 8-10 de junio del 2004 en Sea Island, Georgia, Estados Unidos., se escapa a la prensa de que ya se han trazado objeciones de líderes árabes e intelectuales.
Su punto principal de disputa ha sido que la reforma no puede ser impuesta sobre países soberanos desde fuera, y que condiciones especiales y desarrollos específicos en cada país individual no pueden ser desatendidos. Otro argumento rotatorio es el de que la iniciativa no se dirige al conflicto árabe-israelí. La posición americana de que las reformas no deben esperar por la paz entre Israel y los palestinos fue rechazada por líderes árabes e intelectuales – en su principal el Presidente Hosni Mubarak de Egipto según quien uno de los obstáculos principales a la reforma ha sido el conflicto árabe-israelí.
En un esfuerzo por oponerse a las iniciativas de reforma desde fuera, particularmente la Iniciativa Mayor del Medio Oriente, varios países árabes han propuesto planes propios de reforma. En marzo del 2004, Egipto, Jordania, Qatar, Yemen, y Túnez entregaron sus propuestas a la Liga Árabe y la reunión de la Cumbre Árabe puso en la lista de candidatos a Túnez al final de ese mes, dónde serían combinados en un plan representando una posición árabe unificada.
Sin embargo, Túnez decidió posponer la cumbre dos días antes de que se llevara a cabo, y después de la reunión preparatoria de los ministros del exterior árabes, debido a lo que se dice fue un profundo desacuerdo entre los ministros del exterior árabes sobre asuntos de reforma, derechos humanos, y democracia. Siguiendo a las intensas discusiones internas árabes, la cumbre fue reprogramada para finales de mayo, 2004, en un esfuerzo por hacer surgir una contraproposición a la iniciativa americana antes de que fuera formalmente anunciada.
Junto con el rechazo casi automático de líderes árabes e intelectuales a la iniciativa americana, otras reacciones en los medios de comunicación en idioma árabe sugirieron más acercamientos positivos al asunto. Lo siguiente son algunos ejemplos:
La Mentira más Grande es que todas las Naciones Árabes Rechazan la Iniciativa
El anterior Ministro de Información jordano Salleh Al-Qallab escribió en su columna en el diario en idioma árabe con sede en Londres Al-Sharq Al-Awsat: «Es bueno insistir de que la reforma política, cultural, social y económica, la cual es el contenido de la Iniciativa Mayor del Medio Oriente… debería ser específica e interna, basada en nuestros valores y nuestra cultura y de acuerdo con [la suposición] de que algo impuesto debe ser rechazado, y de que el cuerpo lucha con toda su fuerza en contra de cualquier cosa que venga de fuera, aun cuando sea el tratamiento para una enfermedad incurable… [Sin embargo], la mentira más grande que los oponentes a la reforma en el contexto de trabajo a la Iniciativa Mayor del Medio Oriente están intentando propagar es de que todas las naciones árabes rechazan la iniciativa – lo cual no es verdad y es incorrecto.»
«La verdad es que la mayoría en la región desean el cambio y quieren mejorar su actual situación; ellos apoyan el cambio, y algunos no tienen ninguna objeción a este siendo impuesto [desde fuera] si esto es imposible de [lograr] desde dentro por medios pacíficos y la mutua persuasión.»
Hay elementos en el mundo árabe… quiénes evitan anhelar por los cambios, clamando de que es el pueblo que debe decidir sobre la reforma que ellos deseen, y que la decisión está en sus manos. En algunos casos, esta declaración despierta el ridículo y el desprecio, porque en las reciente elecciones ‘libres y democráticas’ en Irak, en el que el pueblo iraquí participó en absoluta libertad… 100% de los votos fueron para Saddam Hussein, incluyendo [aquellos] ocupantes de las prisiones y los de las tumbas en masa…»
«Desde la Primera Guerra Mundial, y por supuesto antes de esta, los árabes no han disfrutado de libertad para expresarse a si mismos y a sus inclinaciones políticas en nada sino de una manera extremadamente limitada. Los golpes militares de estado cuyos perpetradores los llamaron levantamientos populares, intensificaron la represión asiática en esta región, silenciando todo con el lema de ‘ ninguna voz debe ser más alta que la voz de la batalla.’ Y en el nombre de la libertad, de la unidad árabe, y el combatir el imperialismo arrogante del mundo, abrieron ampliamente las puertas de las prisiones, y las de los cementerios en masa «
‘La Reforma desde Fuera, Llegar en un Tanque, será Combatida en contra… Pero el Statu Quo no puede Continuar’
«No debemos aterrarnos cuando hablan de reforma y democracia en el esquema de trabajo de la Iniciativa Mayor del Medio Oriente, o cualquier otro esquema de trabajo… es verdad que el anhelo a la reforma deseada por la nación árabe no es aceptable si llega de fuera o en un tanque, y [en tal caso] lucharán contra ella. Pero también es verdad de que es imposible continuar con el status quo, el cual no puede resistir los tormentosos vientos de cambio que ha comenzado a soplar en el mundo entero, Oriente y Occidente …»
«No hay nada malo en que aprendamos de Occidente, incluyendo a los Estados Unidos, sus logros, y su experiencia en áreas de reforma, economía, filosofía, desarrollo social, derechos humanos, derechos de las mujeres, y la lucha contra la corrupción y el extremismo. Estos asuntos no son el monopolio de cualquier nación; ellos son los logros humanos a los cuales todos los pueblos del mundo han contribuido …» [1]
‘La Iniciativa no debe ser Rechazada sólo porque fue Propuesta por los Estados Unidos’
El anterior jefe de redacción del diario árabe con sede en Londres Al-Hayat, Jihad Al-Khazen, dijo: «Las propuestas americanas para la reforma no son malas a menos que tengan en cuenta las intenciones de la administración Bush. Ellas no deberían ser rechazadas sólo porque fueron propuestas por los Estados Unidos. Aunque, la Declaración de Alejandría es mejor, y si la próxima cumbre árabe la endosa, o parte de ella, nos pondremos en el camino de la reforma.» [2]
Las Iniciativas Árabes tratan con Reformar a la Liga Árabe mientras las Iniciativas Extranjeras tratan con la Reforma del propio Sistema Árabe
El Dr. Abd Al-Hamid Al-Ansari, anterior decano de la Facultad de Ley Islámica en la Universidad de Qatar, discutió la diferencia entre las iniciativas de reforma árabe y las iniciativas de reforma extranjeras: «Alguien que observa las iniciativas de reforma árabes encuentra que ellas se enfocan en la reforma y en el desarrollo en la Liga Árabe, tales como [las propuestas] para eliminar la necesidad para el consenso general en el destino de las decisiones, estableciendo una corte árabe de justicia, estableciendo un parlamento árabe, y haciendo las preparaciones para el establecimiento de un mercado común árabe.»
«Los planes de reforma extranjeros, en contraste, se enfocan en la reforma del propio sistema árabe, reforma en el cuerpo político árabe… introduciendo reformas esenciales en los aparatos políticos, culturales, sociales, y económicos …»
Al mismo tiempo, Al-Ansari mantiene que ambos programas de reforma internos y externos no van lo suficientemente lejos en tratar con «la piedra angular que apuntala la estructura política árabe» la cual es «la idea de conflicto con el otro.» Él declara que «la idea de conflicto y los requisitos de conflicto son manifestados en el precedente dado [a ideas como] la liberación, la unidad nacional, el enfatizar la identidad y el despertar árabe… a expensas de otras [ideas] tales como la democracia, el desarrollo, la ciudadanía, y los derechos humanos árabes y la dignidad… Las deficiencias de la liga son las deficiencias de nuestra cultura, el cual culpa al otro por nuestra situación…» [3]
Haciendo Condicional la Reforma al Resolver el Problema Palestino es ‘Una Tragedia Política y Moral Definida’
El director del Centro Al-Ahram para los Estudios Políticos y Estratégicos, Dr. Abd Al-Mun’im Sa’id, respondió al reclamo de que las propuestas a la reforma que no se dirijan al problema palestino son inaceptables. En un artículo en el semanario egipcio Al-Ahram Al-‘Arabi, escribió: «No estaba muy sorprendido por la declaración de un antiguo oficial árabe en una de las reuniones políticas árabes de que no es lógico para los Estados Unidos exigir que apoyemos los derechos humanos cuando Israel viola los [derechos humanos] del pueblo palestino todos los días… Tal lógica prevalece alarmantemente en la región árabe… Si la examinamos, nos encontraremos enfrentados a una tragedia ideológica, política, y moral definida.»
«En primer lugar, esto significa que hemos hecho prisionero a los derechos civiles árabes y al proceso de reforma árabe al problema palestino. Desde 1948, eso es, durante 56 años, este problema ha estado en la agenda árabe mundial, y nadie sabe si permanecerá de nuevo con nosotros por un largo tiempo, o mucho más tiempo… Y durante todo este tiempo… los derechos del ciudadano árabe seguirán colgados en la pared palestina, y nadie se preocupará de su destino y de su vida…»
Segundo, haciendo contingente la reforma y los derechos humanos al resolverse el problema palestino – dándole así primero sus derechos al ciudadano palestino – confirma lo que los americanos neo-conservadores están diciendo, [e.d] que los regímenes políticos que dañan los derechos humanos están usando el problema palestino para desviar las miradas de su propia conducta y acciones. [Poniendo tales condiciones] es como llevar a cabo un doble criterio moral árabe, defendiendo los derechos humanos en todas partes en el mundo y participando en proteger la integridad de las elecciones en cada esquina del mundo, sino involuntariamente aceptar esto dentro de las fronteras [árabes], y viendo esto como intervención extranjera y un ultraje a la soberanía árabe…»
«Tercero, haciendo condicional los derechos humanos árabes y el proceso de reforma política y económica en los países árabes a los palestinos de obtener sus derechos significa, por una parte de que no somos serios acerca del proceso de reforma… y por otra parte que el árabe en todos los países árabes no tiene ningún valor independientemente de la colectividad árabe entera… La verdad es que cada árabe y cada país árabe tienen una existencia separada digna de respeto y derechos [dignos de] defensa en todos los sentidos. Los derechos humanos… están entre los derechos basados en acuerdos y convenciones internacionales. Luego, ellos son una parte inseparable de los derechos naturales del individuo que no pueden ser revocados porque otro país árabe sea doblegado bajo el fuego de la ocupación…»
«Quinto… [los Derechos Humanos] son la fuente básica de poder en todos los países del mundo. Si miramos en los archivos de cada país, encontraremos que la mayoría de los países más avanzados, más ricos, más conocedores, y poderosos son los que elevan los derechos humanos, multiplican las libertades públicas, y afianzan la participación [pública] en la toma de decisiones políticas. No es ningún accidente que los países árabes no estén incluidos entre éstos…» [4]
[1] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), marzo 10, 2004.
[2] Al-Hayat (Londres), 7 de abril, 2004. A mitad de marzo, la Biblioteca de Alejandría en Egipto organizó una convención de intelectuales para discutir las reformas necesarias en el mundo musulmán. Los participantes firmaron una declaración llamando a una amplia reforma política, económica, social, y cultural, y propusieron vias para su aplicación. Véase
http://www.arabreformforum.com/English/Document.htm.
[3] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), marzo 17, 2004.
[4] Al-Ahram Al-‘Arabi (Egipto), marzo 27, 2004.