En una reunión celebrada hoy en Capitol Hill sobre la estrategia de Hamas después de las elecciones palestinas, el Presidente de MEMRI Y.Carmon presentó un análisis de esta estrategia y sus limitaciones, así como también algunas recomendaciones de la política a seguir.

La sesión de información fue patrocinada por el Subcomité de Relaciones Internacionales de la Cámara de Representantes en Terrorismo Internacional y la No proliferación, y co-patrocinado por el liderazgo del comité, el Presidente Ed Royce (R-CA) y el Miembro de Rango Brad Sherman (D-CA) y el Representante Steven Rothman (D-NJ). La Posición de Autoridad del Subcomité de Asia Central y del Medio Oriente Ileana Ros-Lehtinen y el Miembro de Rango Gary Ackerman también co-patrocinaron el evento.

Lo siguiente es un resumen de la evaluación:

Evaluación

De las tres amenazas islamistas que América enfrenta hoy – Al-Qaeda, Irán, y la Hermandad Musulmana – las primeras dos han escogido el camino de la confrontación para promover sus objetivos, mientras que la tercera ha escogido el camino de la participación política. Esta opción fue incitada principalmente por la guerra global al terrorismo, la cual hizo que Hamas (como parte de la organización madre, la Hermandad Musulmana) comprendiera que después del 11 de Septiembre, las organizaciones terroristas en el mundo no tienen ningún futuro, mientras la participación política todavía pudiera permitirles lograr algunas de sus principales metas.

La participación política requiere de la adaptación a la obligación política. Sin embargo, tales demandas no fueron puestas sobre Hamas antes de las elecciones parlamentarias de enero del 2006; ni tampoco fueron puestas en la Hermandad Musulmán antes de las elecciones parlamentarias egipcias en noviembre-diciembre del 2005. Sólo después de la victoria del Hamas fueron formuladas las condiciones para reconocer la participación política futura de esta.

Las tres exigencias que están siendo actualmente hechas de Hamas son vis-à-vis Israel: la renuncia a la violencia, el reconocimiento de Israel, y el respetar los acuerdos anteriores.

Estas condiciones son ineficaces:

1) Pueden converger sobre una base táctica y temporal limitada – y, de hecho, Hamas ha comenzado a hacerlo.

2) El limitado enfoque sobre Israel pasa por alto el problema más importante y más amplio a saber, la participación política de la Hermandad Musulmana, así como también de los movimientos nacionalistas seculares, en los otros países árabes y musulmanes.

El éxito de Hamas, aunque limitado a los territorios palestinos, propone una amenaza regional a los intereses de los Estados Unidos. Si Occidente se reconcilia a si misma con esta victoria, es probable que la Hermandad Musulmana repita ese éxito en Egipto y en Jordania. Abu Mazen y la OLP serán ampliamente empujados de lado, y los regimenes actuales en Jordania y Egipto podrían estar severamente amenazados. Esto tendrá implicaciones para la total estabilidad del Medio Oriente.

El punto crítico será cuando Hamas asuma el control de las fuerzas de seguridad palestinas. En ese punto, la crisis será mucho más difícil de manejar, así como también es más probable que de vueltas sin control. Esto podría pasar debido a que la estrategia declarada de Hamas es la de combinar la participación política con la continua resistencia, tal como fue declarado por Mash’al, Haniya, y Al-Zahar («El rifle en alto estará en una mano, y la política y la autoridad en la otra»). [1]

El escenario deseado es que, en lugar de combinar la participación política con la continua resistencia, Hamas sufrirá un proceso de extensa moderación – similar al proceso sufrido por la OLP. Las esperanzas de este escenario pueden ser recolectadas de los movimientos tácticos/temporales que están actualmente siendo declarados y hechos por Hamas en sus esfuerzos por obtener el reconocimiento mundial por su toma de posesión.

Sin embargo, la probabilidad de este escenario no es alta. Al contrario de la OLP, la cual es una organización nacional distintiva limitada a un pueblo y a una tierra, Hamas está ligada incluso al movimiento regional global de la Hermandad Musulmana, con su esquema de trabajo islámico comprensivo. Como tal, es probable que mantenga la fe.

Recomendaciones

Las demandas americanas deberían enfocarse en la transformación interna, ideológica, y organizacional. Deberían ser dirigidas no sólo hacia Hamas, sino, primero y por encima de todo, hacia su organización materna, la Hermandad Musulmana. (De hecho, estas demandas deberían también ser aplicables a los movimientos nacionalistas seculares).

Formulando estas exigencias como normas internacionales universalmente aplicadas acumularán el apoyo de la Unión Europea y de las Naciones Unidas

Para fomentar a la Hermandad y sus ramificaciones en tomar los primeros pasos en adaptarse a si mismos a las normas políticas internacionales, el reconocimiento político debería concederse sólo cuando las siguientes condiciones sean reunidas por Hamas y la Hermandad Musulmana, e incluyan en sus plataformas políticas oficiales con cuales van a las elecciones:

1) El endoso de la política a la exclusión de la violencia y al uso de la fuerza. Hamas necesita transformarse a si misma de un movimiento de resistencia armado a un partido político desarmado. Lo mismo se mantiene para Fatah, el cual se suponía que sufriría esta transformación en el proceso de Oslo, pero no lo ha hecho, hasta el día de hoy. Una vez que Fatah tome tal paso, la presión sobre Hamas y otras facciones para hacer lo mismo obtendrán el impulso necesario; en caso que Hamas no cumpla, se le negará el reconocimiento internacional.

2) El endoso del paquete completo de valores democráticos. Esta demanda tiene tiempo que esta retrasada. Esta reversará la corrosión a la noción de la democracia la cual, en los años recientes, se ha reducido sólo para significar elecciones libres.

Este paquete completo de valores democráticos debería incluir: la igualdad de todos ante la ley sin importar la religión, la etnicidad, o el sexo; y el endoso oficial en las plataformas políticas de las organizaciones de todas las libertades constitucionales, incluidas en las convenciones internacionalmente aceptadas, tales como la Declaración de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, la Carta constitucional de las Naciones Unidas, las convenciones relevantes de la Unión Europea, y otras normas internacionales aceptadas.

* Y.Carmon es el Presidente de MEMRI.


[1] Para las declaraciones de Al-Zahar, véase Al-Quds (Jerusalén), 15 de febrero del 2006; para las declaraciones de Haniya, véase http://memritv.org/search.asp?ACT=S9&P1=1017 ; para las declaraciones de Mash’al, véase http://memritv.org/search.asp?ACT=S9&P1=1044 ; http://memritv.org/search.asp?ACT=S9&P1=1024. Para otros segmentos traducidos de las declaraciones de los líderes de Hamas, véase http://www.memritv.org/Search.asp?ACT=S5&P1=151.