Progresistas iraquíes y árabes han tenido la tendencia a ver durante mucho tiempo la persistencia de las tribus y el tribalismo como un fenómeno negativo que está impidiéndole al Medio Oriente desarrollar relaciones sociales modernas basadas en el voluntarismo y un sistema político moderno. Esto es particularmente cierto en Irak dónde el régimen del Ba’th se aprovechó del tribalismo para sostener la dictadura.
Recientemente, sin embargo, algunos liberales han comenzado a repensar este punto de vista de las tribus iraquíes, y en luz de los éxitos de los Concejos de Despertar tribales, han comenzado a discutir que las tribus pueden ser una fuerza para el progreso y una alternativa positiva para los islamistas. Por ejemplo, en su elogio por el asesinado Jeque Abd Al-Sattar Abu Risha, el fundador del movimiento Despertar Anbar [sahwah] el redactor liberal iraquí Al-Wadi alabó a Abu Risha como un mártir y un verdadero patriota iraquí no-sectario. [1]
Recientemente, el autor iraquí Hussein Karkush escribió en el diario árabe liberal en Internet Elaph que las tribus son relativamente seculares y que los Despertares son esencialmente revueltas de la sociedad civil iraquí contra el Islam político.
A continuación se presentan los extractos: [2]
«Los intelectuales iraquíes… han descrito persistentemente a la tribu iraquí como ‘reaccionaria y retrograda’… pero esto no es del todo correcto»
Los intelectuales iraquíes, incluyendo a sociólogos y antropólogos, han persistentemente descrito a la tribu iraquí como una institución ‘reaccionaria y retrograda’ que entorpece el progreso de la sociedad. Tal descripción es parcialmente correcta, pero no es totalmente correcta, y hay mucho en esta que es arbitraria. Así, necesitamos colocar esta descripción en su contexto histórico, así como necesitamos colocar los términos ‘progresivo’ y ‘reaccionario’ en el contexto de sus condiciones [históricas].
«Cuando el ‘moderno’ estado iraquí fue fundado por primera vez, en vísperas del fin de la Primera Guerra Mundial, una sociedad iraquí ‘moderna’ también comenzó a tomar forma y crecer. Justo cuando el estado encontró su apoyo en las nuevas y unificadas instituciones nacionales (el ejército y otras fuerzas de seguridad, la burocracia, las instituciones de aprendizaje, la magistratura, la radio nacional), la ‘moderna’ sociedad iraquí también encontró su apoyo en las nuevas instituciones nacionales unificadas: los partidos, las uniones y las asociaciones profesionales, el parlamento, la prensa, las actividades culturales, comercio, y todo lo que es conocido por el nombre de actividades de las instituciones de la sociedad civil.
«Aunque hubo algunas discordancias entre ellos… el estado y los sectores en vías de desarrollo de la sociedad civil estuvieron de acuerdo en las metas. Ambos apuntaron a los éxitos compartidos y una visión compartida siendo la más importante las relaciones entre todos los ‘ciudadanos iraquíes que se centrarían en un criterio – el de la ‘ciudadanía’ – y no en la sangre o en relaciones de familia, como en la tribu – y que todos los ciudadanos estarían sujetos a una sola ley civil…
«Así, en la larga y multifacética lucha dentro de la sociedad iraquí, las fuerzas ‘progresivas’ – las instituciones de la sociedad civil y las instituciones gubernamentales – trabajaron para llevar a la sociedad hacia adelante, y en situación opuesta estaban las fuerzas ‘retrogradas’ – las tribus – que se esforzaron por conservar sus propias leyes…»
La mentalidad de las tribus iraquíes es más progresiva que la de los islamistas políticos
«Pero nosotros vemos que la tribu iraquí, al final de la primera década del siglo 21, no es la misma tribu iraquí que existió a comienzos de la fundación del moderno estado iraquí del siglo anterior.
«Mientras en los años veinte, e incluso en los años cincuenta, era raro encontrar a líderes tribales con buena lectura y habilidades en el escribir, hoy encontramos a muchos líderes tribales que han completado la preparatoria, e incluso la universidad. Y mientras [en el pasado] era difícil encontrar a mujeres educadas en las tribus, hoy encontramos muchas – incluso a hijas de líderes tribales – que han completado estudios universitarios.
«Este tremendo desarrollo que tuvo que pasar la mentalidad tribal ha, en efecto, abolido muchas de las costumbres tribales que fueron predominantes durante muchos largos años…
«Si comparamos la mentalidad tribal de hoy día en todas las regiones iraquíes con la mentalidad de los partidos del Islam político que ha estado a la vanguardia de eventos desde el 2003, encontramos que la mentalidad tribal es más abierta y más ‘progresiva’ que el de los partidos de Islam político, en temas de política nacional, cultura y sociedad. Y es menos extrema en los temas de la práctica religiosa.
«Tal como sabemos, muchas de las tribus iraquíes establecidas son mitad-chi’i y mitad-sunni, estando en la región occidental y la otra en la región en el medio del Éufrates y el sur.
«Podemos imaginar las grandes pérdidas que le serían causadas a los partidos religiosos chi’i y sunni – la justificación para cuya existencia es, desde el comienzo, el conflicto sectario – si cada tribu iraquí fuese a celebrar una conferencia que incluyera a sus miembros chi’i y sunni, o si las tribus de las diferentes sectas fuesen a celebrar conferencias compartidas.
«Además – y éste es un punto importante – el universo moral y cultural de la tribu no está [basado en] los sagrados textos inmutables. Es este – lo mundano y civil, susceptible a cambiar, alterarse, y transformarse. El jeque tribal gobierna de acuerdo con lo que piensa es lo mejor, y sus órdenes derivan su fuerza de su lugar y de su sabiduría. En contraste, [los líderes] de los partidos del Islam político se presentan a si mismos, de una manera u otra, como los representantes de Alá en la tierra».
«Los Despertares son una revuelta civil/secular
«… Los Despertares tribales son una de varias campanadas que anuncian que el monopolio de los partidos del Islam político en la vida política está comenzando a retirarse…
«Hoy día existe un vacío político «[como resultado de] la total ‘desertificación’ de la operación… impuesta en la sociedad por el régimen de Saddam durante las últimas tres décadas. Debido a la [resultante] ausencia de partidos civiles, liberales, democráticos e izquierdistas, y la ausencia de cualquier actividad de una unión profundamente arraigada, la única fuerza mayor en la actualidad (repito, en la actualidad) capaz de tomar en lo colosal – es decir, los partidos fuertes del Islam político – es el de las tribus. Este concurso tomó de hecho forma en los Despertares.
«Los Despertares están en un suelo completamente diferente – o por lo menos en un suelo muy diferente – que el Islam político (no el Islam, sino el Islam político). Los Despertares son una revuelta civil-secular, y son la antítesis no sólo de los grupos islamistas extremistas, sino también del Islam político en general».
«El Jeque ‘Abd al-Sattar Abu Risha dijo: ‘El Despertar es la dirección correcta en el camino correcto contra la falsedad’. Él dijo que los miembros de ‘Al-Qaeda se aprovechan de los especiosos e incorrectos fatwas y han sostenido al Islam como una cubierta para ellos’ (entrevista en Al-‘Arabiya, 3 de junio, 2007).
«Otro miembro de los Despertares, el Jeque Kamal Al-Mu’ajjal Abu Risha, fue más extenso incluso que el Jeque ‘Abd Al-Sattar Abu Risha, y dijo que ‘el Despertar está trabajando en lograr las metas nacionales generales para todos los iraquíes: seguridad, justicia y democracia’. A su manera de ver, ‘El Islam tiene un papel activo en nuestra sociedad, pero rechazamos la interferencia de clérigos en la política. La autoridad del clérigo no debe trascender la mezquita, y no debe oscilar sobre los que toman decisiones políticas (Al-Hayat, 13 de enero, 2008)».
Jefe del Concejo de Salvación Anbar Jeque Hamid Al-Hayis: «Quise prohibir usar el hijab en la Universidad Anbar – y me llamaron Chirac Segundo»
«El Jeque Hamid Al-Hayis, jefe del Concejo de Salvación Anbar – considerado el ala armada del Despertar – fue más allá que los otros dos cuando se describió a si mismo como ‘muy liberal’. Él dijo que quería ‘edificar a Anbar sobre el modelo de las ciudades que florecen con clubes nocturnos, hoteles, y el comercio global. Haremos de Ramadi la Dubai de Irak».
«Luego dijo: ‘Quise prohibir portar el hijab en la Universidad Anbar, y me llamaron Chirac Segundo’. Una de las objeciones de Al-Hayis’ al concejo provincial Anbar, el cual es cercano al partido islámico, es que el partido islámico quiere convertirse en la provincia de Anbar ‘una región wahhabi’ (Televisión por satélite iraquí, 11 de febrero, 2008).
«Por supuesto, no podemos ayudar sino notar que algunas de estas declaraciones son parte de una lucha de poder, y pueden ser exageraciones retóricas. Viéndolas quizás como meras palabras que expresan sólo los puntos de vista del portavoz que serían correctas – y quizás estos puntos de vista sean exagerados, y sean un extremismo ‘secular’ no apropiado para la condición actual de la sociedad iraquí. Quizás todo eso sea verdad. Aun así deberíamos tomar nota del hecho que estos puntos de vista están siendo dichos por primera vez desde la caída del régimen de Saddam Hussein. Aparte de los líderes tribales Despertar, no hemos escuchado ninguna fuerza política organizada, ningún político independiente, ninguna figura académica, o ningún medio de comunicación que exprese clara y abiertamente tales puntos de vista.
«También, estos líderes de Despertar no estarían declarando francamente posturas y puntos de vista que citamos si no estuvieran convencidos de que el temperamento popular aceptara estos puntos de vista – ya que si no fuera así, el sólo hecho de declarar sus puntos de vista sería un suicidio político para ellos. Imagine, por ejemplo, si dijeran que estaban en contra del Islam – pasarían tales declaraciones?»
Si la movilización de las tribus iraquíes continúa, hará sentir el pánico en los corazones de los islamistas políticos
«Este nuevo temperamento popular no se limita a la región occidental de Irak y sus tribus; es un temperamento colectivo ‘iraquí’. Hemos visto cómo el contagio del despertar tribal se ha extendido ahora a otras tribus. Esto es lo que nosotros hemos comenzado a ver entre las tribus del medio-Éufrates y la región del sur. Este temperamento se está moviendo hacia el romper el monopolio y la hegemonía de los partidos del Islam político…
«Todo esto no es para decir que los partidos del Islam político desaparecerán hoy o mañana. Estos partidos tienen sus miembros, sus defensores, y sus partidarios, y así tienen una base popular. Pero desde hoy en adelante no dormirán bien. La movilización de las tribus iraquíes ha empezado a perturbar su sueño, y si esta movilización continúa y es ahondada, hará sentir el pánico en los corazones de estos partidos».
[1] www.elaph.com, 17 de septiembre, 2007.
[2] www.elaph.com, 21 de julio, 2008.
