En un editorial titulado «Relaciones Estados Unidos-Irán Preocupa a los Árabes», el Dr. Abdullah Al Shayji, profesor de relaciones internacionales y jefe de la Unidad de Estudios Norteamericanos en la Universidad de Kuwait, discutió los temores de los árabes a «otra traición por los norteamericanos». Lo siguiente es el editorial, tal como fue publicado el 10 de mayo, 2009 en el diario en idioma inglés Gulf News (Noticias del Golfo).
Los árabes «temen otra traición de los norteamericanos si el precio que ponga Irán es el correcto»
«Funcionarios norteamericanos han reasegurado a las autoridades árabes y del Golfo que la apertura de los Estados Unidos hacia Irán no será a expensas de los árabes debido a los lazos históricos y estratégicos entre los Estados Unidos y sus socios árabes y aliados en la región.
«La última convicción vino del Secretario de Defensa norteamericano Robert Gates durante sus visitas a Egipto y Arabia Saudita. Él menospreció el descongelamiento de relaciones y el acercamiento a Teherán, el cual mantiene a los árabes al borde. Ellos temen otra traición de los norteamericanos si el precio que coloque Irán es el correcto.
«‘Existe probablemente algo de preocupación en la región que pudiera arrastrar un sentido exagerado de lo que es posible. Y yo sólo pienso que es importante tranquilizar a nuestros amigos y aliados en la región de que mientras nosotros tengamos la voluntad de extenderle la mano a los iraníes, tal como dijo el presidente, con una mano abierta, yo pienso que todos en la administración, desde el presidente hacia abajo, somos bastante realistas y lo suficientemente arduos de mente si todavía nos enfrentamos con un puño cerrado’, Gates dijo. Él continuó lamentando ‘el puño cerrado’ de Irán.
«Gates resaltó la apertura hacia Irán ‘con el propósito de mejorar la seguridad a lo largo de la región’. Con el fin de reasegurar a aquéllos de nosotros en el mundo árabe, Gates aclaró que ‘construir la diplomacia con Irán no será a expensas de nuestra relación a largo plazo con Arabia Saudita y otros estados del Golfo que han sido nuestros compañeros y amigos durante décadas».
«Pero estas certezas, irónicamente, parecen fortalecer nuestro sentido de inseguridad y confirmar nuestros miedos sobre la perspectiva de un gran regateo entre los dos rivales si el precio es el correcto – y si los israelíes lo endosan, después de asegurar que el programa nuclear de Irán sea discutido».
«La administración Obama necesita que Irán juegue un papel constructivo en el proceso de paz árabe-israelí – y guiar a sus apoderados en el Líbano y Gaza»
«Este diálogo podría ser más directo y concentrará vapor después de las elecciones presidenciales iraníes el 12 de junio. Lo que es alarmante para nosotros en la región es la publicación, hace algunos días, de un informe de inteligencia por el Comité de Relaciones Exteriores del Senado norteamericano. El informe cita el progreso nuclear de Irán, y dice que una inteligencia deficiente fue responsable de menospreciar el progreso de Irán hacia el diseñar una ojiva nuclear antes de que Teherán detuviese su programa en el 2003. El informe sugiere que el compromiso norteamericano con Irán debe convencer a Teherán de que detenga su programa nuclear y acepte duros controles internacionales.
«Pero lo qué alarma a los árabes son las actuales realidades geo-estratégicas, que Irán usa para su propia ventaja y emplea para servir sus intereses y proyectar su poder. Esto es hecho posible como resultado de los cálculos erróneos de los Estados Unidos y a través de los apoderados de Teherán en la región.
«Irán comprende que los Estados Unidos está buscando un ‘retiro responsable de Irak’. Irán está siguiendo la situación de deterioro de la seguridad en Afganistán, y está alarmado por el resurgimiento del taliban. Irán está preocupado por la situación en Pakistán mientras los Estados Unidos buscan estabilizar ese estado nuclear, el cual se ha vuelto un desafío de seguridad mayor para la administración Obama.
«La administración Obama está cada vez más comprometida en lo que Richard Hass llama la ‘guerra de selección’ – es decir, la guerra en Afganistán, el frente principal en la ‘guerra al terrorismo’.
«En adición a esto, la administración Obama necesita que Irán juegue un papel constructivo en el proceso de paz árabe-israelí, y guiar a sus apoderados en el Líbano y Gaza. Todos estos problemas regionales le dan a Irán una carta para actuar en su confrontación con los norteamericanos».
«Un convenio Estados Unidos-Irán… será muy probablemente a expensas de nosotros… sólo nos tenemos a nosotros mismos para culparnos»
«Gates dijo en diciembre que los Estados Unidos no estaba buscando un ‘cambio de régimen’ sino un ‘cambio conductual’ en Irán. Esta línea hizo eco la semana pasada por el Senador John Kerry, presidente del Comité de Relaciones Exteriores, quien declaró que ‘nosotros [los norteamericanos] no estamos aupando por un cambio de régimen [en Irán]. Nuestro esfuerzo debe ser igual de reciproco por el otro bando. Así como abandonamos las llamadas al cambio de régimen en Teherán y reconocemos un papel legítimo iraní en la región, los líderes de Irán deben moderar su conducta y la de sus apoderados, Hezbollah y Hamas’.
«Esto es exactamente lo que le preocupa a los árabes en la región. Qué quiere decir Kerry cuándo dice bruscamente que ‘reconoce un papel legítimo iraní en la región?’ ¿Por qué cavaría y asentiría Irán, y ser cooperativo y complaciente, si el precio no fuese el correcto? Los Estados Unidos ya le han dado a Irán su última convicción – de que no habrá ‘ningún cambio de régimen’.
«Los norteamericanos tienen que ponerse en los zapatos de los árabes y observar su dilema. La mentalidad del cerco que se ha puesto no emana de especulaciones sino de la situación que se está desplegando ante nuestros ojos.
«Cuando los norteamericanos niegan algo, es probable que sea verdad. Así que, deben los árabes en general y los estados del Golfo en particular estar preocupados por el continuo monólogo del puño abierto-puño cerrado, que pudiera evolucionar en un diálogo productivo cuándo los intereses de Washington y Teherán se crucen? ¿O son infundadas las preocupaciones sobre la posibilidad de un ‘gran convenio’ entre los Estado Unidos y los iraníes, mientras Gates y la Secretaria de Estado Hillary Clinton lo afirman?
«Si un convenio Estados Unidos-Irán sucede, será muy probablemente a expensas nuestras. Si no nos despertamos y juntamos nuestro acto, estaremos dispuestos a un rudo despertar. Entonces sólo nos tendremos a nosotros para culparnos».