El Primer Ministro paquistaní Imran Khan se reúne con el Presidente iraní Hassan Rohani en Teherán.

El 13 de octubre, 2019 el Primer Ministro paquistaní Imran Khan visitó Teherán y sostuvo conversaciones con el Líder Supremo de Irán, Ayatolá Ali Jamenei y el Presidente Hassan Rohani. El viaje fue seguido por una visita a Arabia Saudita realizada el 15 de octubre, 2019. En Teherán, Khan le dijo al presidente iraní: «No queremos ningún conflicto en la región. Pakistán sufrió 70.000 bajas en los últimos 15 años en la ‘guerra contra el terrorismo’, Afganistán sigue sufriendo, (existe) una terrible devastación en Siria – nosotros no queremos otro conflicto en esta parte del mundo».[1]

Khan agregó: «[Tenemos] a Irán como vecino, nuestros lazos con Irán se remontan a épocas distantes. Arabia Saudita ha sido uno de nuestros amigos más cercanos. Arabia Saudita nos ayudó cuando de verdad hemos estado necesitados de ello y la razón de este viaje es que no queremos se inicie un conflicto entre Arabia Saudita e Irán. Reconocemos que es un tema complejo, pero creemos que puede resolverse a través del diálogo. Lo que nunca debería suceder es una guerra entre Arabia Saudita e Irán porque esto no solo afectará a toda esta región – dos países hermanos se verán afectados – esto causará pobreza en el mundo. Los precios del petróleo se dispararan».[2]

En Islamabad, la cancillería señaló en un comunicado: «La iniciativa a una posibilidad de diálogo entre el Reino de Arabia Saudita e Irán, los dos países hermanos de Pakistán, es un esfuerzo de parte del primer ministro de Pakistán con el fin de garantizar la paz en el región».[3]

Sin embargo, Khan indicó que fue persuadido por el Presidente de Estados Unidos Donald Trump, para que desempeñe el papel de mediador en el conflicto entre Estados Unidos e Irán. Al señalar que Pakistán estaba «consciente de las dificultades» en las relaciones entre Estados Unidos e Irán, este dijo sobre su reunión con el presidente iraní: «También discutimos el cómo pudiera restablecerse el acuerdo en materia nuclear. Cuando estuvimos en Nueva York, el Presidente de Estados Unidos Donald Trump nos pidió facilitar algún tipo de diálogo con Irán y los Estados Unidos»[4] Khan le dijo a los líderes iraníes en Teherán: «Iré a Arabia Saudita con una mente positiva. Nos gustaría desempeñar el papel de facilitador y no de mediador. Queremos facilitarles las cosas a dos países hermanos islámicos. Es una situación compleja, pero esta puede resolverse».[5]

El primer ministro paquistaní dijo en una entrevista: «Creo que lo que me agrada de [Donald Trump] es que no cree en guerras».[6] Según un informe de los medios paquistaníes, el Líder Supremo de Irán, Ayatolá Ali Jamenei, le dijo a Khan que Irán «ha propuesto un plan de cuatro artículos para terminar la guerra en Yemen desde hace ya mucho tiempo; el final de esta guerra puede tener efectos positivos en la región».[7] Un día después de las reuniones con Khan el 15 de octubre, 2019 con el Rey saudita Salman bin Abdul Aziz y el Príncipe Heredero a la Corona Mohammad bin Salman, el canciller de Pakistán Shah Mehmood Qureshi comentó en una conferencia de prensa: «Los líderes sauditas han respondido positivamente. Se acordó que se preferiría la diplomacia y las diferencias serían resueltas a través del diálogo».[8]

El canciller pakistaní – señalando que la delegación paquistaní compartió la perspectiva paquistaní sobre la situación saudita-iraní y su evaluación del «sentir de los iraníes», agregó: «Si tuviera que presentarles a ustedes el punto esencial de nuestra discusión [en Riad], yo diría que los vientos de guerra y conflicto que se acumularon sobre la región ahora se están disipando».[9]

A continuación se presentan extractos de dos editoriales en un diario pakistaní en referencia al tema de los viajes de Imran Khan.

«Ha habido informes sobre un intento secreto por parte de los Emiratos Árabes Unidos de abrir canales de diálogo con Irán, mientras se dice que Arabia Saudita también le envió mensajes a Teherán a través del canal iraquí»

En un editorial titulado «Primer Ministro en Teherán», el diario Dawn observó:[10]

«Existen pocas dudas de que cualquier brote de violencia entre Arabia Saudita e Irán tendrá un impacto desestabilizador en Pakistán por una variedad de razones. Quizás esto ayude a explicar la diplomacia del mediador Primer Ministro Imran Khan entre Teherán y Riad. El Sr. Khan estuvo en la capital iraní el domingo [13 de octubre] y se reunió con el Líder Supremo Ayatolá Ali Jamenei y con el Presidente Hassan Rouhani. El primer ministro debería presentarse en Arabia Saudita hoy [15 de octubre]. Mientras estuvo en Teherán, el Sr. Khan dijo que los esfuerzos para facilitar el diálogo entre los sauditas y los iraníes fueron parte de su propia iniciativa.

«El primer ministro agregó que deseaba que los ‘países hermanos resuelvan sus diferencias’. También dijo al margen de la Asamblea General de la ONU el mes pasado que el Presidente de los Estados Unidos [Donald Trump] le había pedido que ‘redujera la posible escalada’ de la situación con Irán. Teniendo en cuenta la inflamable situación en el Golfo, existen signos de que múltiples esfuerzos están en marcha para reducir el termómetro político, principalmente a través de medios secundarios, pero también a través del uso de la diplomacia pública tal como la del primer ministro.

«Ha habido informes sobre un esfuerzo secreto de los Emiratos Árabes Unidos para abrir canales de diálogo con Irán, mientras que Arabia Saudita, se comenta también, le envió mensajes a Teherán utilizando el canal iraquí. Tales esfuerzos deben ser alentados. Una solución pacífica a la crisis en el Golfo que haga competir a Irán contra Arabia Saudita y sus aliados es una vía mucho más preferible que una confrontación».

«Se necesitará un alto nivel de diplomacia y de confianza para que los esfuerzos de Pakistán sean exitosos; pero tal como se ven las cosas, la respuesta de Teherán ha sido muy positiva».

«En este sentido, Pakistán está en una posición única. Tanto los chiitas como los sunitas llaman hogar a este país, mientras comparten una larga frontera con Irán y mantienen relaciones cordiales con los sauditas. Por lo tanto, este puede actuar como puente entre Teherán y Riad y ayudan a facilitar un verdadero diálogo.

«Por otra parte, si las cosas salen mal, Pakistán será una de las primeras víctimas de esta inestabilidad. El factor religioso significa que las pasiones sectarias entre [chiitas-sunitas] se avivarán, mientras que la violencia en el Golfo, no muy lejos de las aguas de este país, tendrá un efecto debilitante en la economía nacional, al igual que se dispararían los precios del petróleo.

«La tarea ante el liderazgo es bastante compleja; la rivalidad entre Arabia Saudita e Irán ha entrado en su quinta década y ambos estados se encuentran en dos bandos geopolíticos distintos con agendas y visiones opuestas para el Medio Oriente. Se necesitará un alto nivel de diplomacia y de confianza para que los esfuerzos de Pakistán den sus frutos. Pero tal como parece, la respuesta de Teherán ha sido muy positiva. Queda por ver cuál es la recepción pública a la idea de facilitación en Riad».

Imran Khan llega a Riad el 15 de octubre, 2019.

«No se sabe cómo reaccionaron los mandatarios del Reino [saudita] ante el ofrecimiento paquistaní»; «Esta rivalidad [saudita-iraní] se remonta al año 1979, cuando Irán se salió del bando estadounidense y adoptó la retórica revolucionaria islámica»

En un editorial titulado «Reunión en Riad», el diario Dawn comentó:[11]

«En Riad, en la segunda etapa del viaje ‘facilitador’ del Primer Ministro Imran Khan a Irán y Arabia Saudita, se desconoce cómo reaccionaron los gobernantes del reino ante el ofrecimiento paquistaní de reunir a los rivales del Golfo. Khan se reunió con el rey saudita y el príncipe heredero a la corona de Arabia Saudita y según informes, les ‘aconsejó’ que resolvieran pacíficamente los problemas regionales. La cancillería se mantuvo en silencio sobre la respuesta de la realeza saudita, mientras que según una muy débil declaración en la prensa saudita, las dos partes ‘discutieron… los últimos desarrollos en los ámbitos regional e internacional.

«Esto por supuesto, no es mucho y solo aquellos que estaban al tanto de la reunión pueden comentar mejor en el cómo fueron percibidos los esfuerzos de este país para reducir las tensiones entre los dos principales estados musulmanes en Riad. Anteriormente, el Sr. Khan recibió una respuesta comparativamente más positiva a su ofrecimiento en Teherán, donde los iraníes haciendo hincapié en que una resolución del problema en Yemen pudiera allanar el camino para unas mejores relaciones con Arabia Saudita.

«Independientemente de las reacciones, los esfuerzos realizados por el primer ministro en la mediación deben ser elogiados, ya que una confrontación violenta entre Arabia Saudita e Irán tendría un efecto desestabilizador en toda la región y este país ciertamente no sería inmune a sus efectos».

«Tal como están las cosas, Riad y Teherán se enfrentan en una batalla de influencias en el Medio Oriente, con el teatro de acción extendiéndose desde la zona del Levante hasta el Golfo. Esta rivalidad se remonta al año de 1979, cuando Irán se salió del bando estadounidense y adoptó la retórica revolucionaria islámica como su principio rector político».

«Arabia Saudita e Irán deben elaborar un Modus Vivendi y garantizar su seguridad mutuamente; arrastrar a poderes externos, como los Estados Unidos, a la ecuación solo complicará más las cosas»

«Arabia Saudita, mientras tanto, permaneció apegada a Occidente y la relación entre Riad y Teherán ha sido muy difícil desde ese entonces, en donde los árabes acusan a Irán de ‘exportar’ su revolución, mientras que los iraníes han criticado a las monarquías pro-Occidente del Golfo por hacer avanzar los intereses estadounidenses en la región.

«Hoy, ambas partes tienen intereses en competencia en Yemen, Irak, el Líbano y Siria y si estallase un conflicto armado, el frente se extendería a través de todos estos países. El reciente ataque de los houties contra las instalaciones petroleras sauditas, en el que Riad y Estados Unidos culparon a Irán – sonó la alarma alrededor del mundo, mientras que un tanquero petrolero iraní también fue atacado frente a la costa occidental de Arabia Saudita hace unos días por atacantes desconocidos.

«Sería correcto decir que se está jugando un intenso juego de nervios en el Golfo y que una acción incorrecta o un error de cálculo por parte de ambos bandos pudiera incendiar la región. Por lo tanto, se necesitan muchos más esfuerzos para unir a Riad y Teherán».

«Cualesquiera sean sus diferencias geopolíticas, Arabia Saudita e Irán deben elaborar juntos un modus vivendi y garantizarse mutua seguridad. Arrastrar potencias externas – como los Estados Unidos – a la ecuación solo complicará más las cosas, es decir, la seguridad regional debería dejarse en manos de los estados de la región. Quizás poner fin a la brutal guerra de Yemen pudiera ser un primer paso hacia lograr una región mucho más pacífica».


[1] Dawn.com (Pakistán), 13 de octubre, 2019.

[2] Dawn.com (Pakistán), 13 de octubre, 2019.

[3] Dawn.com (Pakistán), 13 de octubre, 2019.

[4] Dawn.com (Pakistán), 13 de octubre, 2019.

[5] Dawn.com (Pakistán), 13 de octubre, 2019.

[6] Dawn.com (Pakistán), 16 de octubre, 2019.

[7] Dawn.com (Pakistán), 16 de octubre, 2019.

[8] Dawn.com (Pakistán), 17 de octubre, 2019.

[9] Dawn.com (Pakistán), 17 de octubre, 2019.

[10] Dawn (Pakistán), 15 de octubre, 2019.

[11] Dawn.com (Pakistán), 17 de octubre, 2019.