Como parte de los esfuerzos para poner fin a la guerra mortal que ha hecho estragos en Siria durante más de tres años, el enviado especial de la ONU a Siria Staffan De Mistura ha presentado un plan destinado a preparar el terreno para una solución política a la crisis de Siria. El plan llama a «congelar» los combates y restablecer la calma en áreas específicas. Aleppo ha sido elegida como la primera zona en la que el plan será tratado, debido a la grave situación humanitaria allí y el avance de las fuerzas del Estado Islámico (EIIS) hacia esta. Si el intento allí es exitoso, el plan se extenderá a otras zonas, en un intento por crear un ambiente propicio para las negociaciones entre el régimen y la oposición.

Durante su visita a Siria del 8-11 de noviembre, 2014 De Mistura presentó su plan al régimen sirio y recibió la aprobación del Presidente Assad para proceder. La aprobación de Assad posiblemente se debe a la semejanza de este plan con el plan de «Reconciliación Nacional» que el régimen ha estado promoviendo durante más de un año, que también implica altos al fuego en áreas locales y la «reconciliación» en áreas específicas. Sin embargo, el régimen ha logrado alcanzar estos altos al fuego sólo en las zonas donde derrotó a los combatientes de la oposición y a la población sitiándolos y matándolos de hambre, por lo que son básicamente acuerdos de rendición.[1] Durante su visita a Siria, los representantes del régimen acompañados por De Mistura en una gira a Homs, donde el régimen ha logrado lo que llama una «reconciliación nacional» con las fuerzas de oposición locales, a fin mostrarle al enviado cómo el régimen intenta poner en práctica su plan.

La visita de De Mistura a Homs, y su plan para congelar los enfrentamientos – que, como se dijo, corresponde en gran medida al propio plan del régimen – enfrentó duras críticas de elementos de la oposición armada y política de Siria, que temen que el plan perpetuará el estatus quo y el régimen de Assad.

Un ejemplo destacado de esta crítica es un artículo del periodista sirio Ghazi Dahman, quien escribe en el diario saudita londinense Al-Hayat. En un artículo titulado «El plan para congelar el cambio en Siria», este escribió que la visita de De Mistura a Homs era como si un enviado de la ONU visitara Auschwitz para presenciar la exitosa implementación de la Solución Final nazi. Este dijo además que el plan del enviado especial para la suspensión de los combates en áreas específicas era una reminiscencia del plan de la ONU para las «zonas seguras» en Bosnia y Herzegovina a comienzos de 1990, el cual fue un rotundo fracaso debido a la impotencia de la ONU y que condujo a masacres, algunas de las cuales han sido reconocidas como actos de genocidio. Dahman añadió que el plan de De Mistura encaja con otros desarrollos en los ámbitos regional e internacional, incluyendo las negociaciones en materia nuclear entre Irán y los Estados Unidos; la decisión de Estados Unidos de recortar los fondos a la Comisión de Justicia y Responsabilidad Internacional que investiga los crímenes de guerra en Siria; El plan de Omán para reabrir su embajada en Damasco y los esfuerzos de Rusia en convocar una conferencia de diálogo interna-siria en Moscú. Con esto este da a entender que existe un acuerdo estadounidense-iraní para restaurar la legitimidad de Assad.

Lo siguiente son extractos del artículo de Dahman:[2]

Visita de De Mistura a Homs – igual a la visita de algún enviado de la ONU a Auschwitz

«La visita internacional del enviado de la ONU De Mistura a la Homs en ruinas se puede comparar sólo a [una escena en la que] los ministros de Hitler hacen que un enviado de la ONU visite el campo de [concentración] de Auschwitz, a fin de mostrarle las exitosas operaciones de exterminio que tienen lugar allí. el único significado de esta visita… es que la ONU aprueba esta política [de alto al fuego local], cuyo precio es de alrededor de un millón de desplazados y decenas de miles de desaparecidos o muertos bajo las ruinas, [como resultado de] los ataques con bombas barril y la hambruna, así como también un cambio significativo en la composición demográfica de las ciudades – [crímenes] documentados en los [archivos] de las Naciones Unidas. Nadie sabe si este hombre [De Mistura] le preguntó a sus anfitriones en donde están las personas que una vez vivieron en esos barrios – o [quizás piensa] que [el régimen] se dedica a la reconciliación con las paredes en ruinas.

«Tal vez es natural que De Mistura no sienta ningún conflicto de intereses entre su función y el estatus y esta [visita a Homs], porque se corresponde con la conducta [general] de la ONU como representante de la comunidad internacional en Siria, [conducta] que hace eco a lo que esta hizo en Bosnia y Herzegovina, donde se establecieron zonas seguras para proteger ciertas ciudades bosnias de la invasión de Serbia. La ciudad de Srebrenica fue incluida en una de estas zonas seguras. La ONU desmilitarizó estas áreas [prohibiendo] todas las armas de defensa, y como resultado las [mismas] fuerzas de la ONU no podían oponerse a los serbios, quienes arrestaron a los observadores de la ONU, invadieron las zonas de Bosnia y llevaron a cabo muchas de las masacres, la más horrible de estas fue la masacre de Srebrenica, en la que 8.000 personas perdieron la vida. Existe un plan para [repetir] esta experiencia en Siria?


De Mistura (segundo de la izquierda) visita Homs (SANA, Siria 10 de noviembre, 2014)

El plan De Mistura continúa el plan ideado por Rusia e implementado por Assad bajo supervisión iraní

«Algunos piensan que la propuesta de De Mistura para congelar los combates no es nueva, sino que continua el alto el fuego implementado por el régimen de Assad en muchas partes de Siria – [de acuerdo con un plan] ideado por Rusia y supervisado directamente por Irán, tal como sucedió en la propia Homs. El peligro reside en el hecho que la comunidad internacional ha aceptado finalmente el enfoque de Rusia y de Irán para resolver la crisis [tratándola] como una rebelión en algunas áreas específicas que requieren de una solución local. Esto se hace mediante el cumplimiento de algunas de las necesidades básicas [de la población] en zonas en ruinas, y alcanzando un acuerdo con algunos [individuos] buscados allí, [en esperanza de] poner fin a la revolución como un intento de cambio profundo, y revivir al régimen mientras se le suministra con todo lo que necesita para sobrevivir».

«Por otra parte, el examen de esta cuestión desde una perspectiva más amplia de los cambios que se producen en la región, uno encuentra una conexión clara entre [este plan] y algunos asuntos regionales, tales como las negociaciones en materia nuclear entre los Estados Unidos e Irán, la intención de Omán de reabrir su embajada en Damasco, y la [reciente] visita de algunos opositores [sirios] a Moscú.[3] Conectando los puntos permite una lectura precisa de la situación general. Lo primero que surge es que los asuntos regionales, que los Estados Unidos claman no serían incluidos en sus negociaciones en materia nuclear con Irán, en realidad encabezan la lista de acuerdos que se están formando entre las dos partes. [También surge que] el mediador de Omán está dispuesto, luego de dirigirse a los últimos puntos pendientes del [acuerdo] en materia nuclear, a hacerle frente a un nuevo expediente regional, es decir, el expediente sirio, y que algunas de las partes en las negociaciones están dispuestas a declarar un acuerdo [para resolver la crisis siria] en la [conferencia] Moscú Uno.[4]

El plan de De Mistura significa la restauración de la legitimidad de Assad

«En teoría, el significado político de esta política es la restauración de la legitimidad de Bashar Al-Assad, como preludio a incluirlo en los esfuerzos de lucha en contra del terrorismo. El supuesto es que los acuerdos propuestos por De Mistura abarcarán a la mayor parte de las fuerzas locales, por lo que el régimen podrá afirmar que la mayoría de estas fuerzas han firmado un alto el fuego [con este], y los que no lo hagan son elementos extremistas tal como el grupo Jabhat Al-Nusra o los grupos afiliados al EIIS, es decir, fuerzas extranjeras…

«En la práctica, esta política puede ser incluida en un amplio marco de objetivos y estrategias. El plan [de De Mistura] legitima a los señores de la guerra [aprobando] la interpretación internacional que refiere a la crisis de Siria como una guerra civil y por lo tanto, culpa por igual a ambos bandos. No es casualidad que el Departamento de Estado estadounidense recortó los fondos para la comisión que investiga los crímenes de guerra en Siria. La [propuesta de De Mistura] es también el comienzo de [un plan para la] fragmentación ‘pacífica’ de Siria…»


[1] Además, estos altos al fuego le permiten al régimen desviar fuerzas a zonas de guerra más urgentes, mientras también profundizan los conflictos que ya existen dentro de la oposición entre partidarios y detractores de estos ceses al fuego, así como también entre los combatientes locales y el liderazgo general de la oposición. Véase MEMRI Investigación y Análisis No. 1069, «Táctica del régimen sirio contra opositores: ‘Ríndanse o muéranse de hambre'», 13 de febrero, 2014.

[2] Al-Hayat (Londres) 24 de noviembre, 2014.

[3] A principios de noviembre, una delegación de opositores sirios, encabezada por el ex líder de la Coalición Nacional Mu’adh Al-Khatib visitó Rusia y discutió con funcionarios rusos formas de resolver la crisis siria.

[4] Rusia ha anunciado recientemente su intención de convocar una conferencia de diálogo entre el régimen sirio y la oposición para poner fin a la guerra. Según informes, la conferencia se centrará en el peligro que representa el terrorismo islamista y en el establecimiento de un gobierno de unidad nacional. El diario libanés Al-Akhbar cercano al régimen sirio, informó que esta conferencia, llamada «Moscú Uno», avalará un marco diferente en las negociaciones que las conferencias internacionales del 2012 y 2013 en Ginebra, y se centrará en la lucha contra el terrorismo en lugar de la sustitución del régimen. Al-Akhbar (Líbano), 10 de noviembre, 2014. Por otra parte, dijo el ministro de Relaciones Exteriores ruso Sergei Lavrov recientemente que los Estados Unidos han acordado retirar su reconocimiento a la Coalición Nacional para la Revolución Siria y las fuerzas de oposición como el único representante legítimo de la oposición siria, y satisfacer la demanda de Rusia – en realidad la demanda del régimen sirio – de que el diálogo incluya otros elementos de la oposición desde dentro de Siria. Sputniknews.com 8 de noviembre, 2014.