El 7 de junio, 2017 el Consejo de la Federación Rusa discutió «frustrar la interferencia en los asuntos internos de la Federación Rusa». Según el diario ruso Kommersant, el Consejo está planeando crear una comisión que vigile «cualquier actividad hostil de cualquier estado extranjero y de organizaciones internacionales».[1]
El medio de comunicación independiente Meduza.io acotó que la audiencia estaba programada para el mismo día en que los funcionarios de inteligencia estadounidenses testificaron ante el Senado de Estados Unidos, en preparación a la esperada audiencia con el ex director del FBI James Comey. Meduza.io escribió: «Horas antes de que senadores estadounidenses interrogaran a estos individuos sobre el tema de intromisión extranjera en las últimas elecciones presidenciales, los senadores rusos celebraron sus propias audiencias sobre el mismo tema en Moscú, donde el Consejo de la Federación discutió esfuerzos para evitar la injerencia extranjera en los asuntos internos rusos. Los oradores discutieron la intromisión de las organizaciones no gubernamentales y debatieron el qué hacer con los periodistas que llevan a cabo «intervenciones ideológico-políticas» en Occidente».[2]
El proyecto de recomendaciones propuesto tras las audiencias del Consejo de la Federación fue precedido por la siguiente evaluación: «Hemos observado la implementación activa de programas de educación extranjera dirigidos a periodistas rusos, así como también las interacciones profesionales y el intercambio de experiencias entre representantes de los medios de comunicación estadounidenses y europeos y periodistas rusos junto a editores de las publicaciones de oposición en la red».[3]
A continuación se presentan algunas de las observaciones hechas por los senadores rusos durante la audiencia y sus reacciones a lo que perciben como intromisión extranjera en los asuntos de Rusia:
Los medios de comunicación occidentales son como una hidra de mil cabezas a las que hay que matar
(Fuente: Sharzhipero.ru)
Fiscal General Chaika: Las ONG reconocidas como agentes extranjeros se estaban fuera de control, influyendo sobre las acciones de las agencias estatales rusas
Durante la audiencia, el Fiscal General de la Federación Rusa Yuri Chaika, declaró: «Las organizaciones sin fines de lucro reconocidas como agentes extranjeros se encontraban fuera de control y no eran nada transparentes, influyendo sobre las acciones de las agencias estatales rusas en interés de sus propios latrocinantes extranjeros. En un sinnúmero de casos, contrario a las normas del derecho internacional, gran parte de este financiamiento provenía directamente del gobierno y de las misiones diplomáticas de Estados Unidos, Gran Bretaña y de estructuras dentro de la Unión Europea. Estas organizaciones no desean ser llamados agentes extranjeros, proveer los registros financieros pertinentes, o revelar información sobre sus actividades. Poniéndolo en pocas palabras, estos buscan volver a un momento en que pudieran tomar de manera callada el dinero de los extranjeros para destruir las bases de nuestras instituciones estatales, todo esto mientras no se reporta a nadie más sino a sus latrocinantes. Pero esta vez se han ido para siempre”. [4]
El Senador Klimov define el concepto de ‘intervención ideológico-política’
El Senador Andrey Klimov dijo durante la audiencia: «Ya se ha invertido enorme cantidad de recursos comenzando en la década de los 90. Basta con mirar el presupuesto de cualquier emisora de radio y encontraran fácilmente lo mismo en la prensa escrita: miles de personas trabajando incansablemente todo el día en lo que realmente debería llamarse una ‘intervención ideológico-política’. Éstos no son métodos militares, pero no obstante, está sucediendo y como en cualquier guerra, los desertores están siendo utilizados activamente aquí, esto también es un tema separado, porque formalmente siguen siendo ciudadanos rusos comunes, pero cuando se marcharon, o más bien cuando huyeron de nuestro país, ciertamente no fue para fortalecernos como nación y me parece a mí que estos ciudadanos tampoco deberían escapar a sus responsabilidades, incluso cuando se trata de actividades ligadas a subvertir nuestra soberanía nacional».[5]
El vicecanciller Sergey Ryabkov agrego además: «A pesar de las medidas para fortalecer el control de las acciones de las organizaciones sin fines de lucro y las ONG, la infiltración e influencia estadounidense no están disminuyendo y nosotros esperamos un nuevo incremento, aumentando en intensidad y sofisticación de este trabajo en el próximo período, relacionado principalmente al acercamiento de las elecciones y la campaña política rusa.[6]
Jefe del Servicio de Inteligencia Externo de Rusia: Los Estados Unidos quiere restringir el acceso de Rusia a las tecnologías modernas
Durante la audiencia Sergey Naryshkin, jefe del Servicio de Inteligencia Externa de Rusia, dijo: «Estados Unidos convence a sus socios de que es prudente reducir el volumen de sus compras de petróleo y carbón de Rusia, restringiendo así aún más el acceso de Rusia a las tecnologías y equipos modernos. La producción de hidrocarburos y el bloquear proyectos energéticos rusos en el extranjero. Estados Unidos está intentando desesperadamente quebrantar o al menos, frenar la construcción del gasoducto Nord Stream 2. Los Estados Unidos y Polonia han sido especialmente celosos sobre este tema, trabajando realmente duro sobre la materia. Y los estados bálticos se han estado quejando bastante fuerte, también».[7]
Senador Kosachev: La comisión no participará en una ‘caza de brujas’
Al comentar sobre la creación de una comisión del Consejo de la Federación para prevenir injerencias extranjeras sobre los asuntos de Rusia, el Senador Konstantin Kosachev, Presidente del Comité de Asuntos Exteriores del Consejo de la Federación Rusa, dijo: «Necesitamos un organismo permanente que monitoree las actividades dirigidas contra Rusia… Hemos estado enfrentando constantes intentos de que se inmiscuyan en nuestros asuntos internos». Kosachev subrayó luego que la comisión no participará en «una caza de brujas».
(Tass.com, 6 de junio, 2017)
Sanciones como herramientas para interferir en las elecciones rusas
En una entrevista con el diario Financial Times Igor Sechin, director general de la corporación estatal Rosneft y una de las personas más influyentes en el círculo íntimo de Putin dijo respecto a las sanciones: «Para ser honesto, no me gusta hablar de sanciones. Son totalmente injustificadas e incluso ilegales. Uno se puede transferir la responsabilidad política hacia el nivel corporativo. No somos parte de la política internacional. No hacemos política… El objetivo [de las sanciones] fue influir, afectar la situación socio-económica. Empeorarla y afectar las elecciones [rusas]. Esa es mi profunda creencia».[8]
Durante una audiencia parlamentaria sobre el tema de prevención de la injerencia extranjera en los asuntos internos de Rusia, el director del servicio de inteligencia ruso Sergey Naryshkin dijo: «En la lista de prioridades de las estructuras del gobierno estadounidense existe el hecho de una guerra económica contra Rusia. Washington tiene la intención de intensificar presiones sobre las sanciones en nuestro país y está buscando nuevos pretextos para hacerlo».[9]
[1] Tass.com, 6 de junio, 2017.
Véase MEMRI Despacho Especial No. 6950, Legisladores rusos: Los Estados Unidos están llevando a cabo una guerra mediática ‘sucia’ con el propósito de influir en el proceso político de Rusia, 4 de junio, 2017.
[2] Meduza.io, 7 de junio, 2017.
[3] Meduza.io, 7 de junio, 2017.
[4] Meduza.io, 7 de junio, 2017.
[5] Meduza.io, 7 de junio, 2017.
[6] Meduza.io, 7 de junio, 2017.
[7] Meduza.io, 7 de junio, 2017.
[8] Ft.com, 4 de junio, 2017
[9] Tass.com, 7 de junio, 2017