El 15 de junio, 2020 la red televisora qatarí Al-Jazeera transmitió un documental de 45 minutos sobre el asesinato del intelectual liberal egipcio Farag Foda, quien fue asesinado el 8 de junio, 1992 por dos miembros de la organización islamista Al-Gama’a Al-Islamiya[1] El asesinato de Foda se produjo después de una prolongada campaña contra su persona por parte de prominentes islamistas, quienes lo proclamaron apóstata por sus opiniones progresistas, tal como su apoyo al tema de la separación de religión y estado.
El documental de Al-Jazeera, producido en el año 2012, incluye una recreación del asesinato y su planificación, imágenes de archivo de Foda y entrevistas con varias figuras, incluyendo a investigadores egipcios y al antiguo miembro de Al-Gama’a Al-Islamiya Nageh Ibrahim. Otra figura entrevistada extensamente en la película es Abu Al-‘Ela ‘Abd Rabbo, miembro de la organización que le proveyó a los asesinos de Foda sus armas. Este fue sentenciado a cadena perpetua pero fue liberado en el 2012 como parte de una amnistía general otorgada por el entonces presidente egipcio Muhammad Morsi, perteneciente a la Hermandad Musulmana. Cabe señalar que en el 2014 ‘Abd Rabbo alejó del grupo Al-Gama’a Al-Islamiya debido a desacuerdos ideológicos con el movimiento y se unió al EIIS. Rabbo fue asesinado en Siria en marzo del 2017.[2]
Farag Foda (fuente: English.alarabiya.net)
En la última parte del documental, el narrador comenta que el asesinato de Foda «trajo la paz a ambos bandos», ya que «a los asesinos de Farag Foda le inhibieron la lengua y sus pensamientos, mientras que a él se le libraron todos los problemas de este mundo». Esto es seguido por comentarios del miembro de Al-Gama’a Nageh Ibrahim, quien advierte que «los líderes del pensamiento secular no deben llegar a extremos, lo que da lugar a la radicalización del otro bando» y de ‘Abd Rabbo, quien declara que no lamenta su participación en el asesinato.
Para ver un video del portal MEMRI TV sobre extractos del documental, pulse a continuación:
El documental provocó intensas críticas contra la red qatarí Al-Jazeera, que a menudo ha sido acusada de apoyar el terrorismo y a las organizaciones extremistas. Los críticos, en su mayoría periodistas y columnistas, escribieron que el documental pretende ser objetivo, pero en la práctica está muy parcializado a favor de los opositores islamistas de Foda que apoyan su asesinato: les concede amplio espacio en pantalla para expresar sus puntos de vista, mientras que deliberadamente se niega a mencionar la campaña contra Foda por parte de Al-Azhar, Al-Gama’a Al-Islamiya y otros elementos islamistas que llevaron a su asesinato. Estos agregan que el documental justifica efectivamente el asesinato al presentar a los asesinos como jóvenes piadosos y a Foda como un laico imprudentemente radical. Por lo tanto, incita a asesinar a otros intelectuales liberales que luchan por un estado civil y contra la coerción religiosa y el extremismo.
Lo siguiente son extractos traducidos de algunos de estos artículos.
Autor yemenita: La película expresa su apoyo a los asesinos y ayuda a eliminar las ideas de Foda
El autor, periodista y activista de los derechos humanos yemení Hussein Al-Wade’i atacó a los creadores del documental de Al-Jazeera, quien dijo utilizaron técnicas sofisticadas de edición para presentar a los asesinos de Farag Foda bajo una luz neutral e incluso positiva. Este escribió: “El asesinato de Farag Foda fue transmitido en el canal de documentales de Al-Jazeera el 15 de junio, 2020, [una semana después] el 28avo aniversario del asesinato. El clip de avance del film trató de presentarlo como objetivo, pero un examen crítico a sus métodos de dirección y elección de aquellos que fueron entrevistados y segmentos de audio en este, expone claramente su parcialidad a favor de los yihadistas que asesinaron a Foda y la de los islamistas «moderados» que estuvieron tras de ellos y el apoyo a sus puntos de vista. Cualquiera que esté un poco familiarizado con los métodos en analizar el contenido de los medios de comunicación sabe muy bien que existen muchas maneras de apoyar y promover un punto de vista particular, que puede utilizarse de manera inteligente para que los espectadores ni siquiera los noten… [y] esta película definitivamente hizo un uso inteligente de estos.
“En términos de los entrevistados, hubo una mayoría de figuras que representaban una ideología hostil hacia Foda: seis oradores con puntos de vista hostiles, ante solo cuatro que lo defendieron. Pero ese no es el punto principal. La mayoría de las figuras elegidas en representación de la visión yihadista eran oradores elocuentes que expusieron bien sus puntos, mientras que las figuras que apoyaron a Foda eran débiles… Un tercer método astuto implicaba la selección de entrevistas grabadas. Los yihadistas estuvieron representados por grabaciones fuertes y coherentes, mientras que los entrevistados que defendían a Foda se presentaron en segmentos confusos y desconectados… El cuarto método utilizado por la película para promover la visión que favorece el asesinato fue darle más tiempo [en pantalla] a los proponentes de los puntos de vista yihadistas en la película. El terrorista Abu Al-‘Ela tuvo la mayor parte del tiempo [en pantalla], mientras que los cineastas no hicieron el menor esfuerzo para [presentar ninguna] respuesta a las afirmaciones y mentiras que este repitió constantemente.
“¡Esto nos lleva al quinto método utilizado por la industria de los medios inmorales, que presenta al rival [de Foda] como un testigo neutral! Sí, la película presentó a los terroristas de la [organización] Al-Gama’a Al-Islamiya que planearon y llevaron a cabo el asesinato como testigos ‘neutrales’, ¡y estos estaban repletos de hadiths peligrosos y fallos terroristas [religiosos] presentados como opiniones!…
“¡Los cineastas presentaron a Al-Gama’a Al-Islamiya como una organización pacífica que difunde el Islam perseguida por el régimen [egipcio], que asesinó a 2.000 de sus miembros! Esta postura fue expresada en la película por Nageh Ibrahim, [otro] terrorista de Al-Gama’a Al-Islamiya y en este caso también, los realizadores no hicieron el más mínimo esfuerzo por presentar pruebas de sus afirmaciones. Al mismo tiempo, estos presentaron muy astutamente todo tipo de evidencia falsa para convencer a los espectadores de que el asesinato había sido una iniciativa personal de unos pocos ‘jóvenes celosos’ y que Al-Gama’a Al-Islamiya no tenía parte en este. La película incluso ocultó el hecho de que las decisiones religiosas [habían sido emitidas sancionando] el asesinato, incluyendo uno del encabezado de Al-Gama’a Al-Islamiya, ‘Omar’ Abd Al-Rahman. En cuanto al propio Foda, la película lo presentó como un filósofo provocativo y como tonto quien se auto-impuso la perdición…
«¿Hasta ahí todo? [¡No!] ¡La peor parte está por venir! La película también utiliza el método de noquear… El argumento de noquear en una escena, como cualquier persona en el campo de los medios de comunicación sabe, es el reclamo más fuerte y la idea que uno desea comercializar o enfatizar. La peor parte de esta película son sus últimos diez minutos, que describen los eventos inmediatamente posteriores al asesinato de Farag Foda. En este segmento, los cineastas no escatimaron el riesgo. Todas las voces y figuras que defendieron a Foda desaparecieron y los yihadistas dominaron hasta el final de la película… En estos momentos [finales], los cineastas realizaron cuatro argumentos otorgándoles ventaja a los terroristas:
“La primera fue la línea terrorista más repugnante que he escuchado: ‘Y por ende, el asesinato fue beneficioso para ambas partes. ¡A los rivales de Farag Foda les inhibieron sus ideas y lengua y al propio hombre se le diluyeron todos los problemas de este mundo’! Describir el asesinato en estos términos, como si la víctima se beneficiara de su propia muerte, es uno de los puntos de vista mediáticos más despreciables que he conocido y el Sindicato de Periodistas Egipcios debería enjuiciar a figuras peligrosas de esta calaña en los medios de comunicación.
Para ver el despacho en su totalidad en inglés copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: https://www.memri.org/reports/arab-press-slams-al-jazeera-documentary-egyptian-intellectual-farag-foda-film-justifies-his
[1] Los asesinos de Foda fueron Ashraf Sa’id Ibrahim, quien condujo la motocicleta desde donde le dispararon a Foda y ‘Abd Al-Shafi Ahmad Ramadán, quien disparó el arma. Ambos fueron luego condenados a muerte y ejecutados.
[2] 24.ae, 26 de marzo, 2017; albawabhnews.com, 24 de marzo, 2017.