El 2 de agosto del 2009, el director del buró político del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) Yadollah Javani concedió una entrevista al portal iraní Press TV. En esta, declaró que las protestas post-electorales en Irán fueron el resultado de un complot occidental para instigar una revolución aterciopelada en el país alentando y ayudando a los reformistas iraníes – quienes, afirmó Javani, intentaron derrocar al régimen de la Revolución Islámica.

En un artículo del 10 de agosto 2009, titulado «Los Jefes de la Revolución Aterciopelada Deben ser Detenidos, Juzgados y Castigados», en el semanario del CGRI Sobh-e Sadeq, Javani nombró a Mohammad Jatami, Mehdi Karroubi, Mir Hossein Mousavi y a otros como los jefes líderes de la oposición responsables de organizar el golpe de estado, en cooperación con elementos occidentales. Para respaldar esta afirmación, señaló que las autoridades iraníes habían detenido a un espía «quien había entrado al país para participar en la revolución aterciopelada», después de recibir instrucciones de fuerzas extranjeras, incluyendo a instituciones occidentales como MEMRI.

Lo siguiente son extractos de una traducción al inglés de la entrevista de Press TV que fue publicada en su portal Press TV, [1] y extractos traducidos del artículo de Sobh-e Sadeq.

Javani en entrevista de Press TV: Habiendo fracasado en derrocar al régimen iraní por medios militares, los enemigos de Irán decidieron que la única alternativa era una revolución aterciopelada

«Desde los [primeros] días de la Revolución… nosotros [los iraníes] nos hemos enfrentado [periódicamente] a diversas amenazas. Sin embargo, después de un tiempo, nuestros enemigos se dieron cuenta de que no podían derrocar el sistema islámico con una ‘amenaza fuerte’. Por ejemplo, se dieron cuenta de que no podían dar un golpe en Irán, o llevar a cabo planes que se centren en dividir al país en regiones sectarias. [Ni tampoco podían tomar] acciones militares, o [colocar a Irán bajo una] ocupación militar directa.

«En los últimos años, hemos visto a los Estados Unidos amenazarnos con un ataque militar, pero esta [amenaza] nunca se materializó, [gracias a] nuestras capacidades y habilidades de defensa.

«Fue bajo estas circunstancias que [los] medios de comunicación occidentales comenzaron a [decir] que la única manera de derrocar a la República Islámica es a través de una ‘revuelta suave’ (es decir, una revolución aterciopelada)… Vieron las elecciones como una oportunidad adecuada para lograr algún tipo de cambio en Irán…»

La Guardia Revolucionaría no apoyó a ningún candidato presidencial – sólo trató de sensibilizar a la población de los grupos políticos y tendencias

«En el período previo a las elecciones, [el] CGRI se centró en sensibilizar a la población, basados en los principios de una votación limpia. Las raíces de las acusaciones [de que la Guardia Revolucionaria apoyó a Ahmadinejad en las elecciones] yacen en [los] esfuerzos de la Guardia Revolucionaria para sensibilizar a [sus propios miembros] y a [los miembros de las fuerzas] Basij, de manera que pudieran participar en las elecciones con un alto nivel de comprensión, de una manera centrada e informada y con conocimientos sobre las tendencias y grupos políticos del país.

«Aquellos que formalizaron [las] acusaciones contra la Guardia Revolucionaria [siempre] tratan con estos asuntos… Si planteáramos algunas cuestiones acerca de los grupos políticos y tendencias, y sus posturas y perspectivas, ellos a veces tratan de presentarlas como una señal de que nos hemos unido a un grupo determinado. Esto, sin embargo, no es básicamente el caso, porque apoyar a un candidato determinado significaría que la Guardia Revolucionaria tendría que funcionar como un partido [político] [y escoger] a un candidato determinado… hacer campaña para él, nombrarlo y oponerse a los demás candidatos.

«Pero esto no es lo que hicimos. La Guardia Revolucionaria [sólo] se esforzó por crear conciencia sobre los problemas políticos del país, en especial [considerando que] los enemigos están tratando de llevar a cabo una ‘revuelta suave’ en nuestro país. Es natural que tales actividades sensibilizaran a la población, especialmente [entre] los Basij y las fuerzas voluntarias. Sin embargo, esto pudiera disgustar a algunas [personas], particularmente aquellos que están tratando de beneficiarse con sus propios objetivos a través de las elecciones».

Estadounidenses y otros occidentales están detrás de todas las «revoluciones aterciopeladas» y «revoluciones de color»

«En primer lugar, en las revoluciones aterciopeladas y de color, los elementos foráneos [que las instigan] siempre han sido estadounidenses u occidentales. Los elementos extranjeros [que instigaron la revolución] en Polonia, Georgia, Kirguistán y Ucrania… fueron estadounidenses y occidentales…

«Después del colapso de la Unión Soviética, trataron de establecer gobiernos pro-occidentales en la región en un intento de ampliar aún más la influencia de la OTAN hacia el este…

«Cuando la Sra. [Condoleezza] Rice fue asesora de seguridad nacional durante el primer mandato de [George W.] Bush en el cargo, anunció en una entrevista que los Estados Unidos [tuvieron que examinar] el por qué sus políticas respecto a Irán había fracasado [durante] 24 años. Este… es un tema interesante. En primer lugar, ella admitió [que los Estados Unidos habían estado] tratando de dar un golpe a la República Islámica desde el comienzo de la Revolución [islámica]. Admitió que los Estados Unidos habían estado tratando de aislar a Irán, quebrar la revolución, causar la caída de la República Islámica y establecer un régimen pro-estadounidense [en su lugar]. Y ella además sostuvo que [estos esfuerzos] habían fracasado…

«Después de convertirse en Secretaria de Estado, la Sra. Rice, presentó una propuesta de presupuesto en el Congreso, y propuso [incluir] un artículo sobre la adopción de medidas en Irán dentro del presupuesto para la protección y promoción de la democracia y la protección de grupos que defienden los derechos humanos y la libertad. Abordando el Congreso, dijo luego: «Nosotros, los estadounidenses [hemos] pasado con éxito a través de Polonia, [y] estamos empujando hacia [las] fronteras de Rusia con nuestros movimientos unidos y revoluciones aterciopeladas. Hemos logrado establecer regímenes democráticos [en esa región]’. Aquí ella se refería a [estas] revoluciones particulares de color. Luego añadió que, hoy, la única [manera] de cambiar al régimen en Irán es hacer uso del mismo [método].

«Los norteamericanos y occidentales declaran que [una revolución aterciopelada] es la única manera [de lograr sus objetivos]… Y ya que Irán tiene un sistema electoral, han llegado a la conclusión de que en este país, ciertos grupos y movimientos políticos…. pueden participar en las elecciones… También saben que estos grupos no tienen gran fe en el establishment islámico, lo que significa que se han distanciado a si mismos de sus convicciones pasadas y ahora se inclinan hacia Occidente. Esta es una cuestión importante y los occidentales se han dado cuenta de ello…»

Los reformistas buscan acabar con la era de Jomeini en Irán – lo cual es lo que los norteamericanos y europeos siempre han deseado

«Un número de figuras reformistas, tales como Akbar Ganji, Merhrangiz Kar y Hasan Yousefi Eshkevari, estuvieron todos presentes [en] la Conferencia de Berlín en el 2000. [2] El Sr. Ganji, que está ahora actuando en contra de los intereses iraníes en el extranjero, representó al bando reformista en la conferencia como periodista y analista político. Para ese momento, dio incluso una entrevista a la revista Der Spiegel, en la que abiertamente sugiere que la idea de «reforma en Irán» significa que los puntos de vista políticos y principios [del Ayatolá Jomeini], fundador de la Revolución Islámica, sólo deberían ser estudiados en los libros de historia…»

«Esto significa que el movimiento reformista [apunta] a marcar el final de la era de Jomeini – una [incidencia] que ha sido largamente deseada por los estadounidenses y europeos.

«Occidente desaprueba fuertemente los puntos de vista políticos del Ayatolá Jomeini, que han dado como resultado un despertar político en la conciencia islámica que ha ayudado a crear un movimiento mundial en contra de la tiranía política de los Estados Unidos. Sin embargo, esta [es decir, la contrarrevolución] no ocurrió durante la presidencia del presidente reformista Mohammad Jatami (1997-2005)».

«Debemos [examinar] si… aquellos quienes se oponían a los resultados electorales tenían vínculos con extranjeros»

«Ahora, debemos mirar y ver si existen señales… de que aquellos quienes se opusieron a los resultados electorales del [12 de junio, 2009] habían tenido vínculos con extranjeros. Si juntamos las cosas… llegaremos a [la] conclusión de que estos sucesos post electorales fueron un escenario premeditado.

«Canales mediáticos occidentales, incluyendo las estaciones de televisión anti-iraníes en Los Angeles y los movimientos anti-revolucionarios que han provocado sentimientos anti-gubernamentales en Irán durante las últimas semanas, reciben su financiamiento desde los países occidentales. Lo más interesante es que en el 2005, su política fue boicotear las elecciones presidenciales – pero ahora su política ha cambiado de repente en apoyar a [los] líderes de la oposición iraní.

«Esto plantea [la] pregunta de qué les hizo cambiar su política de décadas de aislamiento. Por primera vez en la historia de la República Islámica, rumores de fraude electoral se han esparcido, creando dudas sobre la legitimidad del establishment. Estas tácticas difamatorias, al igual que en las anteriores revoluciones aterciopeladas, fueron esfuerzos pre-planeados para [socavar] la confianza de la nación en el establishment… [Los] canales mediáticos extranjeros se apresuraron a explotar estas afirmaciones sin fundamento y diseminaron la idea de un fraude electoral en Irán». [3]

En Irán, un fraude electoral que pueda cambiar los resultados electorales es prácticamente imposible

«… El proceso electoral iraní puede fácilmente evitar el fraude. Puede haber algunas irregularidades, pero el fraude electoral que pueda [cambar] el resultado de las elecciones es prácticamente imposible. La naturaleza libre y democrática de las elecciones iraníes se ha demostrado repetidas veces en las últimos tres décadas. Creemos que Irán es un país fundamentado en las elecciones. Nunca nos imaginamos que partidarios de un candidato presidencial tomarían ejemplo de [los] canales mediáticos occidentales, tales como el canal persa de la BBC y cuestionen los resultados de las votaciones.

Javani en Sobh-e Sadeq: «En Israel existe un instituto llamado MEMRI – que está promoviendo un proyecto destinado a apoyar a los reformistas en el mundo musulmán

En su artículo en Sobh-e Sadeq, Javani declaró que el objetivo final de la revolución aterciopelada era secularizar al régimen iraní. Este dijo que el ex presidente Jatami trató de lograr este objetivo durante su mandato, pero habiendo esto fracasado, recurrió recientemente a la opción de una revolución aterciopelada, junto con los candidatos presidenciales Mir Hossein Mousavi y Mehdi Karroubi.

Según Javani, esta afirmación está apoyada por el testimonio de un iraní que espiaba para los Estados Unidos y está actualmente bajo custodia iraní. Este hombre, según él, «entró en [Irán] con el fin de desempeñar un papel en la revolución aterciopelada… [y sus] importantes declaraciones sobre este asunto fueron citadas en el procesamiento [emitido] por la Fiscalía General de la Nación. [Este espía dijo que] en Israel existe un Instituto llamado MEMRI, que está promoviendo un proyecto destinado a apoyar a los reformistas en el mundo musulmán, incluyendo a Irán. El director de este proyecto es un oficial de inteligencia en el ejército del régimen sionista. En un conversación con el espía, [el funcionario] dijo, ‘Uno de nuestros objetivos es difundir ideas como las del [intelectual reformista] iraní Abd Al-Karim Soroush… ‘

«De acuerdo con [varios] documentos, así como también el procesamiento [emitido por] la oficina del fiscal general de Teherán y las confesiones de los acusados, [una serie de organizaciones reformistas] – [incluyendo] el partido Mosharekat [IIPF, una organización paraguas de los grupos reformistas iraníes], el partido Kargozaran, [asociado con Hashemi Rafsanjani]; la organización Mojahedeen [Enqelab-e Eslami], la [organización] Majma Rohaniyoun-ye-e Mobarez y otros grupos dentro del Segundo Frente de Khordad [un movimiento reformista asociado con Jatami] – todos jugaron un papel destacado en este intento de «rebelión suave’. [Por otra parte, varias] personas – incluyendo a Mohammad Jatami, Mousavi-Khoeiniha, Mir Hossein Mousavi, [Mahdi] Karroubi, Mousavi-Lari, Majid Ansari Mohtashemi-pour, Behzad Nabavi – pueden ser nombrados como las principales figuras que planearon y llevaron a cabo la «revolución aterciopelada».

Javani luego describió las medidas supuestamente adoptadas por los planificadores, ambos antes como después de las elecciones, a fin de preparar el terreno para la revolución. Él dijo que ellos pre-programaron a los medios de comunicación y a la opinión pública, a que difundieran mentiras sobre el gobierno de Ahmadinejad y lo embarraran personalmente, esparcieran rumores sobre fraude electoral y emprendieron una campaña permanente de incitación al pueblo y fomentar protestas públicas contra el régimen. Él por consiguiente, llamó al arresto, juicio y castigo de los jefes que planificaron la revolución – es decir, Jatami, Mousavi, Khoeiniha, Karroubi, y los otros.

Javani concluyó: «El régimen islámico es el régimen que el Imam [Ayatolá] Jomeini [llamó] a mantener, respecto a esto como un deber de suma importancia. La revolucionaría nación musulmana de Irán está pagando un alto precio por el mantenimiento de este régimen divino. Por lo tanto, cualquier movimiento o persona que quiere unirse al Gran Satán, [es decir] Estados Unidos, en [trabajar] para sustituir al régimen islámico con uno secular, debe ser castigado por su actividad criminal destinada a derrocar al régimen – independientemente de su condición o antecedentes». [4]


[1] El texto ha sido ligeramente editado para su mayor claridad.

[2] Esto se refiere a una conferencia de tres días celebrada en Berlín el 7-8 abril del 2000, tras la victoria de los reformistas en las elecciones del Majlis de febrero del 2000. A ella asistieron activistas iraníes que viven en Europa y por reformistas de Irán. A su regreso a Irán, varios de estos últimos fueron procesados por el establishment reformista, el cual fue más conservador que ellos y condenados a largas penas en prisión.

[3] http://presstv.ir/detail.aspx?id=102264, 2 de agosto, 2009.

[4] Sobh-e Sadeq (Irán), 10 de agosto, 2009