En las primeras horas del viernes 26 de junio, 2020 el Servicio Iraquí de Lucha contra el Terrorismo (SILT) allanó una base de la poderosa organización Kata’ib Hizbullah (KH) la cual está siendo respaldada por Irán en Al-Dora, al sur de Bagdad, tras obtener información de los servicios de inteligencia de que una «acción terrorista» contra las misiones extranjeras iba a ser cometida.
Diez días antes, el Primer Ministro iraquí Mustafá Al-Kadhimi le ordenó a las fuerzas de seguridad iraquíes «intensificar sus esfuerzos de inteligencia y tomar las medidas necesarias para encontrar a los responsables de los ataques con cohetes contra instalaciones iraquíes y misiones extranjeras». El mismo día, las fuerzas de seguridad iraquíes encontraron dos lanzadores de cohetes listos para ser disparados en el sur de Bagdad junto a «información importante que ayudará a identificar a quienes están detrás de esta acción terrorista».[1]
El relato de la redada contado por el gobierno iraquí
El 26 de junio, varias horas después de la redada, el Comando Conjunto Iraquí emitió un comunicado describiendo la acción. Este dijo que «las agencias pertinentes al caso habían monitoreado muy de cerca las nuevas intenciones de lanzar ataques con cohetes contra objetivos del gobierno dentro de la Zona Verde». Sin mencionar a KH por su nombre, este señaló que «la ubicación del grupo se determinó en base a la información de inteligencia recibida y el poder judicial iraquí emitió una orden de arresto contra aquellos sospechosos, de acuerdo a la ley anti-terrorismo.[2]
«En consecuencia, el Servicio de Lucha contra el Terrorismo fue encargada con la misión de arrestar a [los sospechosos] para evitar así un acto terrorista contra las instalaciones del estado. La misión se llevó a cabo con un alto nivel de profesionalismo, 14 sospechosos fueron arrestados y la evidencia criminal, representada por dos lanzadores de cohetes fue confiscada», dijo el comunicado. «Al término de la redada, el Ministerio del Interior formó un comité especial de investigación, con la membrecía de los servicios de seguridad relevantes. Los detenidos fueron puestos bajo custodia de las autoridades de seguridad relevantes a su jurisdicción hasta que se complete la investigación y el caso será decidido por la autoridad judicial».
Una declaración emitida por el Comando Conjunto Iraquí sobre los detalles de la redada (Fuente: Facebook, 26 de junio, 2020)
Al abordar las secuelas de la redada, la declaración leía que después de los arrestos, «las partes armadas que utilizaban vehículos sin licencia propiedad del gobierno se dirigieron a la sede del SILT en la Zona Verde e intentaron provocar a las [fuerzas] del SILT, en clara violación de la autoridad constitucional y legal del Comandante en Jefe. Estos grupos buscan mantenerse fuera del control del estado».
Este concluyó diciendo: «Mientras enfatizamos la gravedad de este comportamiento y su amenaza a la seguridad del estado y su sistema político democrático, también queremos indicar que estas entidades han utilizado los recursos del estado, un asunto que no permitiremos bajo ningún pretexto. Nosotros afirmamos nuestra determinación de continuar nuestra marcha para lograr la seguridad del pueblo iraquí y remitiremos el caso a las autoridades judiciales». Sin embargo, a pesar de esta firme declaración, tres días después, el 29 de junio, un juez ordenó la liberación de 13 de los 14 detenidos, quien declaró que faltaban las pruebas suficientes para acusarlos.
Una carta emitida por el Comando Conjunto asignando al Ministerio del Interior, el Servicio de Inteligencia Iraquí y los servicios de seguridad de las UMP a cargo de la investigación (Fuente: Ultrasawt.com, 26 de junio, 2020)
El relato de Kata’ib Hizbullah sobre la incursión realizada
Pocas horas después de la redada, las cuentas en las redes sociales afiliadas a las Unidades de Movilización Popular (UMP) distribuyeron un video que mostraba a decenas de vehículos armados de KH conduciendo por el centro de Bagdad en una demostración de fuerza, amenazando con liberar a los detenidos de la redada por la fuerza y atacar al SILT y el presidente Al-Kadhimi si los detenidos no eran liberados.[3]
Poco después, el comandante de KH Abu Ali Al-Askari, tuiteó que «todos los detenidos ahora se encuentran libres, después de que sus camaradas asaltaran el lugar a fin de liberarlos de las garras de Al-Kadhimi, el traidor». Este también describió a Al-Kadhimi como alguien «mutante» que quiere «repartir las cartas» y ofrecer «una nueva manera de realizar su espionaje» hacia los Estados Unidos arrestando a los combatientes de KH.[4]
Las cuentas en las redes sociales de las UMO circularon dos fotografías que mostraban a «todos los detenidos que fueron liberados de inmediato por sus colegas [de KH]», afirmando también que «Al-Kadhimi se disculpó con el comandante de KH Abu Fadak».[5]
Tuit de Abu Ali Al-Askari (Fuente: Telegram, 26 de junio, 2020)
Fotos difundidas a través de las cuentas de redes sociales afiliadas a las UMO que afirman que los detenidos fueron liberados unas horas después de la redada. (Fuente Telegram, 26 de junio, 2020)
Para ver el despacho en su totalidad en inglés junto a las imágenes y videos, copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: https://www.memri.org/reports/iraq-path-national-recovery-iranian-hegemony-%E2%80%93-part-iv-three-days-baghdad-al-kadhimis-raid
[1] Nasnews.com, 26 de junio, 2020.
[2] Facebook.com/iraqicts, 26 de junio, 2020.
[3] Telegram, Tweet92, 26 de junio, 2020.
[4] Telegram, abualaskary, 26 de junio, 2020.
[5] Telegram, Tweet92, 26 de junio, 2020.