Introducción

En los últimos años, Arabia Saudita ha experimentado un cambio social de gran alcance, liderado por el príncipe heredero a la corona Muhammad bin Salman, quien busca modernizar el país y hacerlo más amigable para los turistas y los negocios. El reino conservador ha experimentado muchas reformas transformadoras, incluyendo el eliminar prohibirle a la mujer conducir autos, la apertura de cines y la reducción del papel de la policía religiosa en el país. Estos cambios significativos y rápidos se están produciendo en medio de críticas y protestas por parte de elementos conservadores en el país y más allá, críticas que encuentran expresión principalmente en las redes sociales, debido a las estrictas medidas empleadas por bin Salman contra sus oponentes y rivales en casa.

Por ejemplo, recientemente estalló una querella en las redes sociales luego que usuarios distribuyeran fotografías y videos de conciertos y eventos culturales que se llevaron a cabo como parte del festival internacional «Temporada Riad 2021», que tuvo lugar en los meses de octubre y diciembre en la capital saudita. Las imágenes mostraban a miembros de la audiencia ataviados con «atuendos occidentales» y hombres y mujeres bailando juntos e incluso abrazándose y besándose en público, contrario a las costumbres sauditas.[1] Un video mostraba a hombres besándose, lo que provocó afirmaciones de que el festival promovía «la apertura hacia la homosexualidad».[2]

Muchos usuarios en las redes sociales expresaron su desaprobación por los comportamientos vistos en las fotografías y videos, calificándolos de censurables y prohibidos y alegando que el festival esparció promiscuidad y hedonismo en Arabia Saudita socavando el carácter árabe e islámico del país. Más de 100.000 tuits con el hashtag «Exigimos detener el Festival de Riad» fueron publicados, llamando a cancelar los eventos.[3]

Los opositores al festival dirigieron acusaciones contra el príncipe heredero a la corona, quien lidera las reformas en el reino. La cuenta Twitter «Fahad Al-Ghofaili» publicó una fotografía de bin Salman junto a fotografías del festival, con el siguiente texto: «El corrupto bin Salman dice que el Corán es la constitución del reino. Alá protege el Corán de sus actos vergonzosos y corruptos. #WeDemandToStopTheRiyadhFestival». Otro tuit en la misma cuenta leía lo siguiente: «…Este tipo de entretenimiento reprobable no representa a la población del reino ni sus aspiraciones. Bin Salman está tratando de forzarnos a hacerlo como parte de la implementación de su agenda exterior y su plan de occidentalización».[4]

Las autoridades saudíes rechazaron las críticas, afirmando que existe una campaña organizada contra el festival y contra el reino saudita en general. Estas afirmaron que los tuits contra el festival fueron publicados por cuentas falsas operadas por Turquía, Qatar, los círculos de la Hermandad Musulmana y por la corriente islamista en el propio suelo saudita.[5]

Muchos intelectuales y escritores sauditas también se unieron al debate y expresaron su apoyo al festival. En los tuits y en los artículos de prensa que estos publicaron, saludaron los cambios que se están produciendo en el reino, la apertura a los deseos y necesidades de las generaciones más jóvenes y la decisión soberana de permitirles a los ciudadanos elegir su mejor forma de vida posible. Estos argumentaron que el festival es un indicativo de que los jóvenes saudíes y de hecho todos los ciudadanos sauditas, pueden disfrutar de una vida buena y normal y que las fotografías y videos que han suscitado objeciones documentan incidentes aislados y atípicos. Estos rechazaron los intentos por parte de las fuerzas extremistas en el reino de imponer una política de prohibiciones estrictas a la población y afirmaron que no existe una base religiosa para prohibir el entretenimiento o los eventos culturales.

Consumo de alcohol y una pareja abrazándose en el festival (watanserb.com, 21 de diciembre, 2021)
Consumo de alcohol y una pareja abrazándose en el festival (watanserb.com, 21 de diciembre, 2021)

Este informe presenta algunas de las respuestas de los saudíes liberales que apoyan la nueva apertura en el país.

Intelectuales se pronuncian contra la política de prohibiciones estrictas

El intelectual liberal saudita Turki Al-Hamad tuiteó el día 20 de diciembre: «Parece ser que este nuevo fenómeno, de prohibir algo legal solo porque puede conducir a una transgresión – domina las mentes de algunos y cualquier error cometido – y de hecho errores serán cometidos – desencadena demandas para cancelar totalmente el evento en el que este ocurrió. El festival en Riad posee muchos aspectos positivos ya sea en términos de incrementar el poder blando del estado y de transformar la cultura predominante. Si se cometen algunos errores, eso no significa que todo el esfuerzo deba quedar arruinado».[6]

El tuit de Turki Al-Hamad
El tuit de Turki Al-Hamad

El periodista liberal saudí Sa’ud Al-Fawzan tuiteó el día 23 de diciembre: «Alabado sea Alá, la historia se repite a sí misma. Hoy, algunos están en contra del festival en Riad, diciendo: ‘No estamos en contra del entretenimiento, sino solo en contra del renunciar a la religión y a los valores». ¡¿Cual renuncia?! En el pasado, ellos decían: ‘No estamos en contra de aquellas mujeres que conducen autos, estamos en contra de la corrupción que esto generará’. Ahora nuestras hijas conducen autos y no hemos visto ningún tipo de corrupción ni nada por el estilo…»[7]

Tuit de Sa'ud Al-Fawzan
Tuit de Sa’ud Al-Fawzan

Ex-parlamentario saudí: Elementos ignorantes que intentan evitar que Arabia Saudita se desarrolle; los saudíes tienen derecho a llevar una vida normal

Zuheir Al-Harithi, ex-miembro del Consejo Shura saudita y ex-vocero de la Comisión de Derechos Humanos de Arabia Saudita escribió en su columna publicada el día 25 de diciembre del presente año 2021 en el diario saudita en Londres Al-Sharq Al-Awsat: «Los países no pueden crecer y desarrollarse sin poseer una visión cultural contemporánea y sin adoptar un pensamiento y comportamiento moderno. Modernidad significa progreso, desarrollo y adaptación a las innovaciones globales, sin abandonar la tradición, historia o la identidad de uno. Arabia Saudita efectivamente lo está haciendo hoy y este es un punto de inflexión genuino, real y serio hacia el lograr realizar reformas integrales…

«El príncipe heredero a la corona ha hablado sobre la necesidad de luchar contra el extremismo… y ha hecho hincapié en que nosotros los saudíes encarnemos los valores correctos y moderados. Esto significa que nadie puede arrojar consignas grandilocuentes en contra nuestra, porque la nueva tendencia es clara y existe una firme determinación política de seguir tras esta situación… Sin embargo, esto no elimina las brechas que actualmente existen en la sociedad en términos de internalizar, digerir y aceptar todos estos desarrollos. Tales brechas son ??naturales, especialmente al principio… pero la decisión de la mayoría es la que finalmente es aceptada y esta decisión se desprende de las encuestas que han sido publicadas, las cuales indican que la mayoría de los saudíes apoyan las decisiones y cambios que el príncipe heredero a la corona lidera con visible determinación.

«Los saudíes y aquellos que viven en Arabia Saudita tienen derecho a llevar una vida normal y disfrutar de todo tipo de entretenimiento, deportes y arte… en su propio país. Como ciudadano, uno tiene derecho a defender cualquier postura u opinión que elija, pero no evitar que otros hagan lo que creen que es correcto. La nueva atmósfera defiende la libertad de elegir que el estado protege.

«Lo que está sucediendo en Arabia Saudita es un mensaje firme a los elementos ignorantes, extremistas y radicales que secuestraron la sociedad, cerraron el país durante décadas, destruyeron su cultura y pensamiento, lo llevaron a un estado de pobreza intelectual, de mentalidad cerrada y odio por todos los aspectos de la vida, el arte y la literatura y perpetuaron la forma más ignorante de pensar por el bien de sus diferentes agendas. Estos elementos acabaron con la vida, anhelaron la muerte y proveyeron terreno fértil para los movimientos extremistas. Al-Sahwa (Al-Islamiyya)[8] no fue solo un movimiento de predica saudí, sino una entidad política revolucionaria secreta, tal como se desprende de las publicaciones y discursos de esa época y de sus aspiraciones políticas, que se ajustaban al plan continental de la Hermandad Musulmana. Uno de los métodos sofisticados que este utilizó para tomar control de la sociedad saudita fue aprovecharse de la religión… e imponer la ideología y planes de los sahwa en la sociedad, de modo que la sociedad quedó subyugada desde el año de 1980 en adelante. Durante 40 años nuestra sociedad permaneció dominada por los sahwa y su influencia, que impregnó a la mayoría de las instituciones estatales…

«Por lo tanto, la importancia de los cambios que se suceden actualmente en Arabia Saudita va mucho más allá de su momento, el carácter de la etapa actual y la capacidad que posee la sociedad para contenerlos. Estos cambios ya no pueden ser considerados como un lujo, sino que están vinculados a las necesidades cruciales del estado y la sociedad. Se ha hecho patentemente claro que las necesidades cruciales del estado obligan a aquel responsable de tomar decisiones considerar cualquier medida necesaria que promoverá el bien común, ignorando cualquier otra cosa.

«En toda sociedad hay siempre un grupo activo abierto y que ve hacia el futuro… y un grupo rival que solo sabe sabotear, oponerse al cambio y le teme a la innovación… El oponerse a la innovación y al cambio es un signo de atraso e ignorancia en una sociedad…

«La cultura de oponerse a todo cambio significa revertir el camino del progreso humano… En esta coyuntura acogemos el liderazgo político actual, que ha demostrado, más allá de toda duda, de que es capaz de traer el cambio cuando lo desee, independientemente de los temas ideológicos y de oposición social. Nosotros tenemos derecho a ser optimistas y creer que nosotros y las próximas generaciones podremos disfrutar de una vida buena y normal la cual perdimos hace ya décadas. Ya hemos comenzado a sentir que muchos de nuestros sueños se están haciendo realidad, mientras aquellos que levantaron barreras y difundieron miedos perdieron toda credibilidad al ver que todo lo que nos dijeron era imposible de que se transforme en hechos tangibles. En resumen, puede decirse que la Arabia Saudita de hoy día no es la Arabia Saudita de antaño».[9]

Activista de los medios sociales saudí: A los jóvenes debe dársele libertad, mientras se preservan los marcos tradicionales

En su columna publicada el 22 de diciembre, 2021 en el diario Al-Watan, la activista social Taghreed Al-Tassan escribió lo siguiente: «El cambio es una bendición para las sociedades y es crucial para asegurar su continuo desarrollo… Es un fenómeno saludable que permite que la vida se desarrolle y mejore y que las sociedades se desarrollen uniéndose a la marcha de la transformación general… aunque existen diferentes tipos de cambio y cada sociedad acepta las que se adaptan a su época, lugar y valores religiosos y sociales.

«Si el cambio es el sello distintivo de la vida en la tierra, entonces los jóvenes son quienes los dirigen y mantienen encendida su llama… Lo que sí es cierto en todo el mundo también lo es en nuestra sociedad saudí, siendo esta una de las sociedades que mantienen vivo el planeta, especialmente porque Alá le concedió gran ventaja al bendecirlo con una mayoría de jóvenes… Esto requiere darles a los jóvenes un poco de libertad para expresar su opinión y su alegría y para adoptar cambios que se adapten a su generación, junto a marcos claros de prohibiciones religiosas y morales que no deben ser vulnerados ni violados.

“Debemos tener en cuenta que proteger la religión y la moral no se hace oponiéndose a las ideas de los jóvenes que, nos guste o no, se ven influenciados por las redes sociales globalizadas… ni tampoco sometiendo a los jóvenes y adolescentes a un descuido excesivo. Como adultos responsables, debemos entender que los métodos estrictos de crianza y la esperanza de que los jóvenes escuchen y obedezcan simplemente a sus padres, sin un diálogo convincente para salvar las brechas mentales e ideológicas entre las generaciones – ya no son efectivos e incrementan la rebeldía más de lo que la moderan.

«El liderazgo de mi país… comprendió cuán cruciales son las vastas energías de los jóvenes para actualizar un crecimiento sostenible de nuestra amada patria. Por lo tanto, como líder de generosidad ilimitada, el príncipe heredero a la corona Muhammad bin Salman se dirigió a los jóvenes, estando plenamente consciente de sus demandas y necesidades psicológicas y saber el cómo hacer uso de la rica reserva de mentes jóvenes sauditas para hacer avanzar a la patria y actualizar sus metas y visión… Gracias a Alá y a la sabiduría de nuestro joven líder, el entretenimiento se convirtió en una realidad en nuestro país con sus puertas abiertas de par en par, junto a estrictas medidas de seguridad contra cualquiera que traspase las fronteras religiosas y morales aceptadas en el país.

«Lo más preocupante es que la opinión que se opone a cualquier apertura e innovación… aún condena cualquier entretenimiento que disfruten los jóvenes exagerando las transgresiones de individuos… Estas reprimen el entusiasmo de los jóvenes al llenar las redes sociales con hashtags y videos muy críticos y no transmiten la imagen precisa y hermosa de los festivales de entretenimiento y de la reacción de la población hacia estos eventos…

“Estos festivales de entretenimiento nos brindan la oportunidad de romper las barreras mentales entre generaciones mientras adoptamos un enfoque pragmático que permite a los jóvenes disfrutar lo que más les gusta, para que nuestra relación con ellos sea de amor y amistad, además de respeto. Este enfoque nos permitirá a nosotros, la generación mayor, establecer más fácilmente los límites en los que creemos y establecerlos como la base del código moral de los jóvenes, para que estos mismos jóvenes adopten disciplina, con nosotros o sin nosotros, por amor y convicción y no por aprensión y miedo…

«Lamentablemente, algunos no comprenden la importancia y necesidad de lo que está sucediendo y permanecen atrapados en una sola visión que distorsiona la realidad… y afirma que estamos en un mundo de inigualable superficialidad y desviación. Me gustaría que mostraran las imágenes de felicidad y de vida hermosa tanto como muestran lo negativo…

«Gracias a Alá… nuestras ciudades han vuelto a la vida y nos hemos ganado el título del reino de la humanidad y de la vida. La apertura ahora ha sido sancionada por la ley, junto a la firmeza que no permite que nadie transgreda las fronteras de la moral, en las que nuestro liderazgo y nuestro pueblo creen firmemente y que forman la base de nuestra constitución y estilo de vida».[10]

Emblema del festival Temporada Riad 2021
Emblema del festival Temporada Riad 2021Escritor saudita: Los saudíes no son monjes, sino gente normal; la cultura ha prosperado en la península arábiga desde comienzos del período islámico

Fátima Al-Muzainy escribió en el diario Al-Watan: «Los extremistas condenan los festivales de entretenimiento en Arabia Saudita con el pretexto de defender la virtud de la sociedad y la santidad del país. Como de costumbre, estos individuos son hostiles a la alegría cuando sucede en nuestro país y su excusa permanente es que lo que cuenta como diversión inocente en todo el mundo es un pecado imperdonable, cuando sucede en Arabia Saudita, la tierra de las dos ciudades santas, Meca y Medina. Pero, ¿todas estas afirmaciones verdaderamente poseen base en el sharia, o es solo una mentalidad que se ha arraigado en el cerebro de algunos individuos, quienes luego comenzaron a difundirla sin pensar? Incluso si esta fuese la postura del sharia, debemos examinar las leyes respecto a lo que está permitido y prohibido tal como se presentan en las fuentes de jurisprudencia islámica y no en las opiniones de usuarios en las redes sociales.

«Quien examine las fuentes religiosas… verá claramente que los jurisprudentes de la nación – desde el primero hasta el último – no establecieron leyes especiales sobre la diversión y el entretenimiento… Al contrario, cualquiera que haya leído sobre la historia cultural del Hejaz (una región en la parte occidental de la Península Arábiga que incluye a Meca y Medina sabe muy bien cuán extendidas estaban las artes de la poesía y el canto y el desarrollo de los instrumentos musicales, en la era islámica temprana. Las fuentes históricas mencionan no a pocos cantantes, sino a muchos, en Meca y Medina. La historia también menciona que el primer salón cultural-literario fue en Medina, donde Sakina Bint Al-Hussein la bisnieta del profeta Mahoma e hija del califa ‘Ali Ibn Abi Talib solía albergar a poetas y a estudiosos religiosos y relatos sobre ello, hay muchos.

«¿De dónde surgió la idea de prohibir las fiestas, el entretenimiento y los espectáculos culturales en Arabia Saudita? ¿Se han inspirado estas personas para iniciar una nueva religión y ahora lo están difundiendo? ¿O sus quejas son parte de un plan mayor contra la diversidad económica cuyos frutos Arabia Saudita ha comenzado a cosechar?

«Finalmente, permítanme decirles a aquellos mentirosos malintencionados: Los saudíes ya están a años luz de su retórica y sus intentos de intimidar a la sociedad no serán nada exitosos. A aquellos bien intencionados, les digo que Arabia Saudita no es una gran casa de culto y que los sauditas no son monjes. Somos una sociedad humana normal, que a veces comete errores y otras veces hace lo correcto…»[11]

Columnista saudita: El régimen saudí favorece la política de vivir y dejar vivir

‘Abdo Khal, autor saudí y columnista del diario ‘Okaz, denunció a los extremistas que incitaron en contra de los partidos en Riad en las redes sociales, afirmando que la población tiene derecho a elegir su propio estilo de vida. Este escribió: «Alabamos a Alá por darle a este país un liderazgo que se dio cuenta de cuánto sufríamos debido al extremismo y actuó para quitarnos los grilletes de nuestras manos. La apertura social, cultural y artística que estamos presenciando hoy día en Arabia Saudita es saludable para la sociedad en su conjunto. Si para comenzar nuestras vidas hubiesen avanzado de manera natural, hubiésemos desarrollado la apertura social que vemos hoy día sin necesidad de aplicar ninguna reforma. Pero 40 años de extremismo, ataques y rigidez cambió la mentalidad de la población y la volvió dura y fatigosa, al punto de que algunos de nosotros no sabemos nada de religión excepto la palabra «prohibido».

“Lo que si estamos viviendo hoy es un logro en términos de estilo de vida y evidencia de una decisión soberana de otorgarle libertad a la gente permitiéndoles elegir su propia forma de vida… Es decir, vivir y dejar que los demás vivan tal como mejor deseen.

“Sé muy bien que el extremismo que dominó al país durante 40 años no puede desaparecer en su totalidad. Pero desde que dimos nuestros primeros pasos hacia el cambio, se han dado varios pasos decisivos para que todos los ciudadanos puedan elegir libremente su estilo de vida. La ley ha comenzado a brindarles protección a todos y toda protesta es aceptable en el marco de la ley que regula la relación entre los ciudadanos y el estado, violar esta ley se le considera una transgresión y un golpe en contra de la libertad.

«En los pocos años desde que comenzó el cambio, hemos sido testigos de instigaciones, abiertas o encubiertas… A menudo estas se hacen con el apoyo de elementos externos dudosos, en un intento por fortalecer a los extremistas y luego interferir en nuestras vidas con base a las mismas demandas extremistas…

«La última forma de incitación es el hashtag ‘Exigimos detener el festival Temporada Riad’, el cual… tenía como destino ser escuchado y ayudar a la incitación y si de hecho se le presta atención, no habrá festival mañana, ya que aquellos que incitan poseen un espacio en la red en el que pueden exigir detener el festival y prohibirlo, o violar las leyes instigando y sembrando hostilidad entre quienes eligen su propio estilo de vida y quienes favorecen el retorno de los extremistas y mientras tanto no podemos vivir una vida normal, fácil y cómoda…

«Queridos incitadores, vivamos sin ser rígidos y sin intentar arrastrar a la sociedad hacia una prisión de extremismo. La religión es una relación personal entre un individuo y Alá y la vida es una relación entre individuos, fijada en leyes sociales por las que todos estamos de acuerdo en ser juzgados».[12]


[1] Raialyoum.com, 20 de diciembre, 2021; watanserb.com, 21 de diciembre, 2021.

[2] Youtube.com/watch?v=KkIG2EfOHpc.

[3] Raialyoum.com, 20 de diciembre, 2021; Al-Arab (Londres), watanserb.com, 21 de diciembre, 2021; twitter.com/fahadlghofaili, 22 de diciembre, 2021.

[4] Twitter.com/fahadlghofaili, 23 de diciembre, 2021.

[5] Raialyoum.com, 20 de diciembre, 2021.

[6] Twitter.com/TurkiHAlhamad1, 20 de diciembre, 2021.

[7] Twitter.com/saudfozan1, 23 de diciembre, 2021.

[8] El movimiento saudita Al-Sahwa Al-Islamiyya (Despertar islámico) fue fundado en la década de los años 1980 por un grupo de estudiosos religiosos sauditas que incluían a Salman Al-‘Odeh en Al-Buraidah, ‘Aidh Al-Qarni en Abha, Safar Al- Hawali en Jeddah y Nasir Al-‘Umar y Sa’d Al-Buraik en Riad. Su ideología combina el islam salafista wahabí con la doctrina sociopolítica de la Hermandad Musulmana egipcia. El movimiento también fue influenciado por pensadores tales como Muhammad Qutb (hermano de Sayyid Qutb) y Muhammad Al-Rashid. Mientras el movimiento no se opusiese al régimen saudita, disfrutó de gran influencia dentro de la sociedad saudita y particularmente dentro de escuelas y universidades. A comienzos de la década de 1990, el movimiento sacudió el sistema político al promover acciones de protesta y manifestaciones que pedían reformas y muy en particular, la creación de un Consejo Shura. La actividad del movimiento se detuvo en el año 1995. Entre sus muchos sucesores incluye a Al-Qaeda.

[9] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 25 de diciembre, 2021.

[10] Al-Watan (Arabia Saudita), 22 de diciembre, 2021.

[11] Al-Watan (Arabia Saudita), 26 de diciembre, 2021.

[12] ‘Okaz (Arabia Saudita), 21 de diciembre, 2021.