El corresponsal principal del medio de comunicación Rosbalt Media Alexander Zhelenin, entrevistó al experto militar Pavel Felgengauer y logró escuchar de su boca una predicción muy impactante. Rusia tiene intenciones de invadir Ucrania y ocupar todo el sur de ese país. En realidad no se trata de si la invasión se hará realidad, sino cuándo. Mientras que la mayoría de los observadores ven a Donbass como el punto álgido de una guerra renovada, Felgengauer ve el control del mar Azov como el casus belli. Ir a la guerra será una decisión trascendental para Putin, porque a diferencia del exitoso ataque sorpresa llevado a cabo por Rusia en la guerra del año 2008 con Georgia, los movimientos rusos están siendo monitoreados muy de cerca y puede esperarse que Occidente, incluso si no interviene directamente en el conflicto, le suministre a Kiev con armas que encarecerán enormemente tal invasión.
El artículo completo de Rosbalt puede leerse a continuación:[1]
La situación que rodea el estatus del mar Azov sigue siendo uno de los temas más inquietantes en las actuales relaciones ruso-ucranianas y en las relaciones internacionales en general. El canciller de Ucrania Dmitry Kuleba ya ha expresado su preocupación porque «Rusia pueda llevar a cabo una anexión progresiva de la zona del mar Azov». Según él, la Federación de Rusia «se encuentra fortaleciendo constantemente su presencia militar allí e interrumpiendo las rutas comerciales».
Existen contradicciones obvias en la definición del estatus del mar Azov. En Moscú, claramente estas aguas son consideran aguas internas de Rusia. En Kiev, señalan una serie de tratados bilaterales, según los cuales son aguas internas para ambos estados. Mientras tanto, el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, el Coronel General Ruslan Khomchak dijo el miércoles que «en el mar Azov, ellos (los rusos) generalmente desean mostrar que este es su mar interno. Khomchak simultáneamente declaró lo siguiente: “Digo esto con total responsabilidad de que estamos listos para cualquier acción que realice el enemigo en lo referente a nuestro estado”.
Hasta dónde pueden llegar todas estas y otras contradicciones ruso-ucranianas y qué tan alta son las probabilidades de que todo esto se convierta en una guerra a gran escala, el observador de Rosbalt habló con el experto militar Pavel Felgenhauer.
– ¿Puede Rusia, de una forma u otra, tratar de hacer del mar Azov, así como también del estrecho Kerch, una zona interna de aguas rusas? El canciller de Ucrania Dmitry Kuleba, ya ha anunciado que Rusia puede llevar a cabo su «progresiva» anexión…
– Yo no diría «progresista», sino una más resuelta. Sin embargo, militarmente, el significado de esto para Rusia es solo que los buques de guerra de la Flotilla del Caspio puede que crucen el canal Volga-Don hasta los mares Azov y Negro y luego regresar. Pero oficialmente hoy consideramos al Azov como nuestro mar interno.
Pero también existen dos puertos ucranianos: ¿Berdyansk y Mariupol?
– Bueno, sí, pero nosotros, según tengo entendido, nosotros tratamos esta situación como de fenómeno temporal… Creemos que Ucrania todavía posee parte de la costa allí, estos dos puertos y una zona costera de 12 millas.
En principio, antes de que ocurrieran todos los acontecimientos del año 2014-2015 (la anexión de Crimea), se concluyeron una serie de acuerdos con Ucrania, en los que se detallaba el estatus de Azov como mar interno conjunto. En consecuencia, los buques de guerra extranjeros (a diferencia de los rusos y ucranianos) solo podían entrar allí mediante un acuerdo con Kiev y Moscú. Por el momento, los buques mercantes internacionales pueden ingresar a los puertos rusos y ucranianos. En teoría, se necesita algún tipo de delimitación (frontera) entre Ucrania y Rusia en el mar Azov, pero parece ser que nadie tiene la intención de alcanzar ningún acuerdo.
En general, las cosas se encaminan directamente hacia una guerra. No vamos a arreglar nada con los ucranianos por la vía diplomática. Creo que la decisión en principio ya ha sido tomada, ocupar el sur de Ucrania en su totalidad.
– ¿Por qué piensa usted eso?
– Por diferentes razones. En particular, el presidente de la Duma Estatal Vyacheslav Volodin quien, por cierto, es miembro permanente del Consejo de Seguridad de la Federación de Rusia, anunció recientemente que era hora de detener cualquier exportación de capital de Rusia, ya que igualmente, pronto este será congelado. Aparentemente, él sabe muy bien de lo que está hablando: Volodin es una persona muy pragmática.
Repito, ya fue tomada una decisión fundamental, desde mi punto de vista, la pregunta es solo cuándo es que esto sucederá, a finales de mayo, en junio, o será postergada hasta el otoño. Entonces, ¿qué tipo de «ocupación negativa» tenemos realmente? Es mucho más probable que sea un solo «paso».
Al mismo tiempo, el otro día la fragata de la Guardia Costera estadounidense Hamilton participó en las maniobras de la Armada de Ucrania y luego ingresó al puerto de Odessa. ¿Pueden los buques de guerra estadounidenses intentar pasar por el estrecho de Kerch hacia puertos ucranianos en el mar Azov, por ejemplo, al mismo Berdyansk o Mariupol?
– No lo creo.
– ¿Por qué?
“No tiene ningún sentido. Es muy poco probable que Washington comience alguna acción de este tipo ahora.
– ¿Pero entran ellos en el Mar Negro?
– Llegan por el estrecho de Turquía, por el Bósforo. Turquía es un país aliado de Estados Unidos, miembro de la OTAN. Todos los países del Mar Negro, además de Rusia, son amigos de los Estados Unidos. El mismo Hamilton visitó no solo Odessa, sino también Georgia, en cuyas aguas realizó entrenamientos con barcos de la guardia costera georgiana.
Pero no existe ninguna razón militar para que los barcos estadounidenses entren en el poco profundo mar Azov. Su flota aérea, aviones de reconocimiento y drones de combate estratégicos vuelan de todos modos a lo largo de la costa de Azov y de la frontera con Crimea, sobre Donbass. En otoño pasado, un bombardero estratégico estadounidense B-52, escoltado por cazas ucranianos, viajó a lo largo de la costa del mar Azov. Pero fue más una demostración, porque no existe una lógica militar básica para tales vuelos. Si van a lanzar un ataque con misiles, sería mucho más probable que lo realicen desde la región de Lvov en el área oeste de Ucrania, si no Cracovia o Dresde…
– Si uno trata de imaginarse que las tropas rusas intentarán ocupar ciertamente el sur de Ucrania, ¿cuál será la respuesta estadounidense y de la OTAN en tal caso que suceda?
– Ahora es muy difícil decirlo con precisión. Por ejemplo, durante la guerra del 2008 con Georgia, un grupo muy poderoso de buques de guerra de la OTAN penetró en el mar Negro. Estábamos muy preocupados, porque para ese entonces la Flota rusa del mar Negro no pudo hacer nada serio para oponerse a ello.
En las condiciones actuales, pueden comenzar a sucederse algún tipo de escaramuzas en el mar y en el aire. Un suministro aún mayor del ejército ucraniano con todo lo necesario, especialmente aquellos que puedan ser necesarios rápidamente: misiles antitanques y antiaéreos, comenzará por tierra a través de la frontera polaca y por aire. Los sistemas de misiles antiaéreos estadounidenses u otros de la OTAN pueden ser desplegados en territorio ucraniano. Los aviones de la Fuerza Aérea estadounidense también pueden aparecer en el lugar para cubrirlos.
No es necesario en lo absoluto que los destructores o submarinos estadounidenses entren al mar Negro para destruir todos los sistemas de defensa aérea rusos junto a las bases aéreas en Crimea. Estos también pueden hacerlo desde el mar Egeo u otras áreas del Mediterráneo.
Así las cosas, mucho más grave que en el año 2008, cuando nadie en el Pentágono (y en Occidente en general) creía que Rusia lanzaría una campaña en contra de Georgia. Ahora la situación está siendo monitoreada en el lugar muy de cerca por satélites, drones de reconocimiento y aviones. Por lo tanto, esta vez ninguna de las sorpresas será exitosa.
– Me parece que una guerra en las actuales condiciones se convertirá para el Kremlin en una apuesta muy salvaje…
– Sí, el director ejecutivo está nervioso porque entiende que esto sería una decisión a tomar muy seria. El tema ya ha sido debatido, pero en última instancia, es él quien debe decidir. El primer indicio de que todo ha comenzado será una fuerte escalada en el Donbass: «proteger a los rusos del genocidio», etc. Este será un pretexto para iniciar una guerra junto a una señal de que la operación ya está en marcha.
[1] Rosbalt.ru, 13 de mayo, 2021.