Tras la propagación del coronavirus en China y en otros países, varios escritores de la prensa árabe escribieron que este virus y otros, tales como el SARS y los virus de la gripe porcina, fueron creados y difundidos deliberadamente por los Estados Unidos para obtener ganancias vendiéndoles vacunas contra estas enfermedades. Otros escribieron que el virus era parte de una guerra económica y psicológica librada por Estados Unidos contra China con el propósito de debilitarlo y presentarlo como un país atrasado y fuente de enfermedades.

El coronavirus desencadena una guerra entre los Estados Unidos y China (fuente: baladnaelyoum.com, 2 de febrero, 2020)

Lo siguiente son extractos traducidos de algunos de estos artículos:

Escritor saudita: No es coincidencia que el coronavirus haya saltado sobre Israel y los Estados Unidos

En el diario saudita Al-Watan, el escritor Sa’ud Al-Shehry afirmó que el coronavirus era un complot de las compañías farmacéuticas estadounidenses e israelíes para incrementar sus ganancias. Este escribió: «Ayer se halló un ‘prodigioso’ virus en China; mañana se hallará en Egipto, pero no se encontrará ni hoy, ni mañana ni pasado mañana en los Estados Unidos o Israel, ni en países pobres tales como Burundi o las Islas Comoro…

«El coronavirus es un virus conocido y sabemos que fue descubierto en 1960 y que causa enfermedades respiratorias comunes. Sus síntomas son similares a los de cualquier otro virus: tos, congestión y quizás también diarrea y fiebre». Por lo tanto, es extraño escuchar que la Organización Mundial de la Salud este diciendo que ‘este es un virus descubierto por primera vez en el año 2012 en Arabia Saudita, en un camello…’

«Y aquí hay algo más que podríamos denominar como extraño: tan pronto Egipto anunciara, hace unos años, que dependería de las aves de corral [criadas en el país] y que incluso exportaría [aves de corral] al extranjero, es decir, que ya no necesitaban aves de corral de los Estados Unidos, Francia, etc. – [de repente] apareció, por debajo de la tierra, el virus de la gripe aviar… con el objetivo de cortar de raíz el despertar [económico de Egipto]. Indefenso, el mundo buscó un suero [es decir, una vacuna] para este miserable virus de la gripe aviar. De la nada, como un milagro, Merck Sharp apareció como un cordero inocente, con el ansiado medicamento en la mano, como si no supiera nada y como si uno de sus gerentes, Donald Rumsfeld, no supiera nada y pensara que el mundo tampoco sabía nada y tal vez [el mundo] realmente no sabía que este Donald Rumsfeld había servido como secretario de defensa [de los Estados Unidos] durante cinco años, en el 2006. Este miembro secreto del ejército trajo el suero «oculto» en forma de [medicación antiviral] Tamiflu, de esta manera él y su compañía recaudaron decenas de miles de millones de dólares de esta miserable gripe porcina. La pregunta es, ¿cuál es la conexión del Departamento de Defensa [estadounidense] con los tratamientos médicos?

«Incluso antes de ello, se hizo lo mismo en China… cuando en el año 2003 [el país] anunció que tenía [las mayores reservas de dólares del mundo y ellos [los estadounidenses] introdujeron al primo del coronavirus, el SARS, [al país] – junto al suero [vacuna], [diciendo] ‘Nosotros somos los únicos que tenemos esto y ustedes pagarán por ello’. También se realizo un experimento de ántrax, con la misma compañía, Merck Sharp y los mismos métodos de fraude utilizados y que también sucedió con la gripe porcina, cuando Novartis y muchas otras compañías obtuvieron ganancias de $6 billones de todo este caos.

«Estimado lector, cuando usted lea acerca de estos escenarios, seguramente estará de acuerdo en que detrás del [brote de] coronavirus existe un plan de engaño destinado a obtener ganancias y nada más. Todo esto es la industria del virus, un mundo de pequeñas criaturas – virus e ingeniería genética, que culminan en la fabricación de un virus que se transfiere a los países ricos que pueden comprar el suero [de la vacuna]. Esta se transfiere a través de los alimentos, bebidas, animales, el aire o quizás a través de los cosméticos y otros medios que no vienen a la mente. Al mismo tiempo, se está preparando el suero [de la vacuna] apropiado para este virus y se mantiene hasta que la población seriamente lo necesite debido a la gravedad de la enfermedad [causada por] este virus, el cual está genéticamente modificado, luego el paciente se agarra de cualquier cosa que pueda y paga con todo el dinero que posee para comprar este tratamiento artificial que fue creado al mismo tiempo que el propio virus.

«Y quizás, querido lector, usted verá las estadísticas sobre la tasa de contagio con el coronavirus en todo el mundo y aprenderá que los estados del Golfo ocupan los primeros lugares [en esta lista], seguidos de los países europeos y nunca encontrarán [en estas estadísticas]… a los Estados Unidos o Israel. Este es un signo de interrogación que les dejo para que hagan sus hipótesis. Tampoco encontrarán [el virus] en un país pobre. Resolveré el acertijo [de por qué esto es así], pero no se lo digan a nadie – es porque [un país pobre] no puede pagar el precio del suero.

«Finalmente, tengan la seguridad de que su país pagará caro. Tengan la seguridad [también] de que esta es una enfermedad ‘común’ y no muy contagiosa – solo cuando [la gente] se reúne en grandes concentraciones. Viva Arabia Saudita y estén fuertes y sanos».[1]

Escritor sirio: La epidemia del coronavirus es una crisis artificial destinada a socavar la economía china

Hussein Saqer, columnista del diario sirio Al-Thawra, hizo afirmaciones similares en una columna publicada el 3 de febrero, 2020 diciendo que el coronavirus era parte de una guerra comercial-biológica-psicológica librada por Estados Unidos contra China. Este escribió: «Del ébola, el zika, el SARS, la gripe aviar y la gripe porcina, pasando por el ántrax y la enfermedad de las vacas locas hasta el coronavirus – [todos estos] virus mortales fueron fabricados por los Estados Unidos y amenazan con aniquilar a los pueblos del mundo [Los Estados Unidos] han convertido la guerra biológica en un nuevo tipo de guerra, por medio del cual intentan cambiar las reglas del juego y hacer virar el conflicto del camino convencional con los pueblos [del mundo]. Recientemente, el Ministro de Sanidad y Asuntos Sociales finlandés no fue noticia falsa como la que aparece en la contra-propaganda y en los tabloides. Fue un video auténtico con sonido e imagen…[2] [El ministro finlandés] dijo que Estados Unidos actuaba con el objetivo de reducir a la población del mundo en dos tercios de una manera que no le causara pérdida alguna. De hecho, [Estados Unidos] obtendría ganancias en billones de dólares luego de obligar a la Organización Mundial de la Salud a designar estas enfermedades como plagas mortales para hacer que la obtención de la vacuna será algo obligatorio en lugar de voluntario, especialmente para las poblaciones más vulnerables que constituyen la próxima generación: mujeres embarazadas y chicos.

«El anuncio del ministro finlandés prueba firmemente que Estados Unidos posee un cronograma para fabricar virus de este tipo y que el coronavirus es [otro] eslabón en la cadena de [agentes] biológicos mortales que este desea utilizar, después de la enfermedad de las vacas locas, la gripe aviar y las otras enfermedades mencionadas anteriormente. Este se embarcó en tal camino de guerra luego de perder la competencia comercial y financiera, a fin de castigar y aplastar las economías de los países que lo superan [económicamente] y luego de actuar para fortalecer a las compañías de la industria farmacéutica propiedad de [sus] congresistas y ministros y que ponen [a estas compañías] al servicio de la industria de las vacunas. La Organización Mundial de la Salud, por su parte, está dispuesta a comercializar la enfermedad y el tratamiento juntos, de acuerdo a las instrucciones de la Casa Blanca, utilizando las así llamadas ‘buenas nuevas’ sobre las nuevas vacunas descubiertas para este tipo de enfermedades.

«El discurso, luego, gira actualmente en torno a una crisis artificial nueva, creada por los Estados Unidos, al igual que las muchas [otras] crisis que inventa para su propio beneficio. Después de que los asesores económicos estadounidenses comenzaron a temer [que Estados Unidos sería incapaz de competir con China o incluso igualarlo, se les ocurrió el virus para preocupar a los funcionarios chinos, por una parte y comercializar medicamentos [estadounidenses] y aumentar el pánico entre los chinos, por la otra «Por lo tanto, esta es una guerra que tiene [aspectos] comerciales, biológicos y psicológicos simultáneamente y está muy alejada del tipo convencional de confrontación».[3]

Escritor egipcio: Estados Unidos propagó el virus para dañar y perjudicar la economía y la reputación de China

En el portal de noticias egipcio Vetogate.com, el periodista egipcio Ahmad Rif’at explicó el por qué los Estados Unidos eligieron la ciudad china de Wuhan como el epicentro de la enfermedad: «Las fábricas estadounidenses son las primeras en manufacturar todo tipo de virus y bacterias, desde la virulenta viruela y el virus de la peste bubónica a todos los virus que vimos en los últimos años, tales como la enfermedad de las vacas locas y la gripe porcina. Wuhan, la ciudad que ahora ha sido golpeada por la [enfermedad] corona, es una ciudad industrial, pero sin embargo, es la octava ciudad más opulenta de China, después de Shanghái y Guangzhou

Guangzhou, Beijing, Tianjin y Hong Kong, siendo estas las principales ciudades del país. Su lugar al final de la lista [de las principales ciudades de China] es lo que lo convierte en [sitio] adecuado para un crimen estadounidense… porque no es ningún foco de atención y el nivel de atención médica allí es seguramente mucho más bajo que en las ciudades más importantes y de mayor tamaño.

«Todo lo que se necesita para permitir que un virus se propague rápidamente es sacarlo de una bolsa, utilizando una jeringa ordinaria o de cualquier otra manera. Pero el hecho realmente interesante es la gran cantidad de estadounidenses que se quedaron en Wuhan y decidieron marcharse de inmediato y rápidamente, [tal como fue mostrado] en los canales de noticias estadounidenses, entre ellos un reportero del canal de noticias CNN, a pesar de que ninguno de ellos contrajo [la enfermedad]. No sabemos qué estaba haciendo ese [reportero de CNN] allí. ¿Vino a informar sobre los eventos? Si es así, ¿por qué se marchó tan dramáticamente? ¿Vino allí antes [del brote de la epidemia]? [Si es así], ¿qué lo llevó a ir allí antes de que comenzara la crisis del coronavirus?

«Esta guerra no solo pretende hacer preocupar a China, crearle molestias y hacer que gaste billones de dólares en medidas de emergencia y en medicamentos que, por cierto, serán fabricados por una compañía israelí… Estados Unidos desea informarle al mundo y en especial a la propia China, como parte de una guerra de propaganda contra el prestigio y el estatus [de China], ¡que [China] sigue siendo un país atrasado cuyos ciudadanos se alimentan con sopa de murciélago y que exporta enfermedades y epidemias hacia el resto del mundo!»[4]


[1] Al-Watan (Arabia Saudita), 2 de febrero, 2020.

[2] Aparentemente la referencia es al médico y teórico de la conspiración finlandés Rauni-Leena Luukanen-Kilde, quien afirmó que la epidemia de la gripe porcina fue un engaño creado por la compañía farmacéutica Big Pharma para comercializar la vacuna, que en realidad es venenosa y amenaza con despoblar al mundo.

[3] Al-Thawra (Siria), 3 de febrero, 2020.

[4] Vetogate.com, 27 de enero, 2020.