Introducción

Mientras el régimen iraní realiza esfuerzos por mantener su dominio en casa y contener el brote de disturbios del mes pasado, también ha hecho gestos diplomáticos hacia sus enemigos jurados, Egipto y los Estados Unidos. Estos gestos, aparentemente dirigidos a reducir las tensiones, incluyeron también la voluntad de Irán de reanudar relaciones diplomáticas con Egipto, que fueron cortadas poco después de la Revolución Islámica de 1979. Esta iniciativa también fue aparentemente un intento por romper el cerco diplomático impuesto sobre Irán, en luz de la posibilidad de que la crisis nuclear empeorará después del 31 de diciembre, 2009.

Las aperturas de Irán también equiparan los esfuerzos de Arabia Saudita de apartar a Siria del eje iraní – Irán está tratando de apartar a Egipto del eje de Arabia Saudita.

Tomando un tono conciliador hacia los Estados Unidos

En los últimos meses, Irán ha estado conduciendo tanto un diálogo público y secreto con los Estados Unidos – el «Gran Satanás». Fuentes occidentales informaron sobre el acuerdo nuclear que los Estados Unidos, encabezados por el Presidente Barack Obama, habían intentado en vano forzar sobre Irán en la Cumbre del 18-19 de diciembre, 2009 en Viena. Mientras que a nivel público, los funcionarios iraníes pronunciaron las habituales beligerantes, desafiantes y despreciables advertencias, hay que destacar que el canciller iraní Manouchehr Mottaki, decidió no atacar a los Estados Unidos en la sexta edición anual del diálogo sobre seguridad regional de Bahrein, celebrado del 11-13 de diciembre, 2009 en la capital, Manama. [1]

Igualmente notable fue la desconcertante y sorprendente declaración del Subsecretario Interino de Estado norteamericano Jeffery Feltman en la conferencia, de que los Estados Unidos no tienen pruebas de la participación iraní en el conflicto Houthi al norte de Yemen: «Muchos de nuestros amigos y socios han hablado con nosotros sobre la posibilidad de un apoyo externo a los Houthis, y hemos escuchado las teorías sobre el apoyo iraní a los Houthis, «Feltman dijo, añadiendo: «Para serles sinceros, no tenemos información independiente acerca de esto». [2]

Una sorprendente declaración adicional provino del Ministro de Relaciones Exteriores de Irán Manouchehr Mottaki, quien le dijo a la televisión iraní en una entrevista el 24 de diciembre, que Irán estaba dispuesto a transferir 400 Kg. de uranio enriquecido al 3,5% a Turquía o a cualquier otro país, pero que cada bando tenía que llevar a cabo su parte del trato. [3] Cabe recordar que Irán había rechazado la propuesta del director de la Agencia Internacional de Energía Atómica Mohamed ElBaradei. [4]

Iniciativa de Irán para renovar las relaciones con Egipto

El Líder Supremo iraní Ali Jamenei, aprovechó la visita del Cairo de su socio en el Majlis el portavoz Ali Larijani a la convención de la Unión Interparlamentaria Islámica (UIPI) de hacerle cumplir ampliamente con todo el liderazgo egipcio, especialmente con el Presidente egipcio Hosni Mubarak, entre el 20 y 23 de diciembre. [5]


Larijani y Mubarak. Press TV, Irán, 20 de diciembre, 2009

Esta reunión, la primera de su tipo después de 30 años de haber cortado relaciones, terminó con declaraciones positivas de Larijani. Según las declaraciones del jefe de inteligencia egipcio Omar Suleiman, no hubo desacuerdo entre los países sobre la necesidad de ayudar a los palestinos a alcanzar sus objetivos, pero sólo en la forma de hacerlo. [6] Sin embargo, otros funcionarios egipcios no respondieron positivamente a las aperturas de Irán.

En una conferencia de prensa tras su reunión con Mubarak, Larijani calificó la conversación de «productiva», diciendo que esta se había «centrado en asuntos de la región… La visión de los dos países sobre las relaciones bilaterales es positiva, que es clave para el desarrollo de la relación entre ellos… el potencial positivo en esta debe ser aprovechado…»

Refiriéndose a la cuestión de los combates al norte de Yemen, Ali Larijani dijo: «Nuestro problema es con los hermanos sauditas, y no con los yemeníes». Condenó el asesinato de chiítas en el Yemen, y prometió que Irán no escatimará esfuerzos para resolver el problema. [7]

En otra conferencia de prensa en el Cairo, el 22 de diciembre, Larijani dijo: «No existe ninguna duda de que Irán y Egipto son los dos países más importantes e influyentes en la región… [por lo tanto] deben acercarse unos de otros, y todos deben ayudar esta [tendencia]… No hay ninguna duda de que Israel nunca querrá un acercamiento Irán-Egipto, pero esperamos que todas las conversaciones y reuniones prepararán el terreno para esto… la estrategia de Irán es que en las condiciones actuales, los países islámicos se acercarán unos a otros lo más que puedan, aunque habrá desacuerdos sobre varios temas… No debe haber ninguna duda de que la unidad [entre] los países islámicos tiene por objeto permitir a sus gobiernos cooperar juntos vis-à-vis… el desafío más importante al que nos enfrentamos es – Israel». [8]

Sin embargo, Larijani negó los informes de los medios de comunicación egipcios de que le había dado una carta a Mubarak con una propuesta y un esquema para la reconciliación entre los países. [9]

Los socios de Ahmadinejad expresan apoyo a la apertura

Aunque los círculos identificados con Hashemi Rafsanjani fueron severamente críticos a la reunión de Larijani con Mubarak, altos funcionarios iraníes cercanos al presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad expresaron su apoyo a esta.

El canciller iraní Mottaki dijo durante una entrevista el 24 de diciembre en la televisión iraní de que Irán le había definido a Egipto sus puntos de vista con respecto a la posibilidad de establecer relaciones entre los dos países, pero que Irán no avanzaría el tema, mientras no viera que Egipto tomase una decisión sobre este asunto. [10]

En una entrevista con Khabaronline, el presidente del Comité de Seguridad Nacional del Majlis Ala Al-Din Boroujerdi dijo que no había ningún obstáculo para establecer relaciones entre Irán y Egipto. Él explicó que las órdenes del Ayatolá Ruhollah Jomeini de romper relaciones con Egipto pertenecían al pasado y ya no eran válidas. [11]

El miembro del Comité de Seguridad Nacional del Majlis Hashmatollah Falahat-Pisheh dijo que era una decisión del régimen que Larijani se reuniese con Mubarak y que esta decisión fue tomada al más alto nivel en Irán. Dijo que en luz del punto más bajo en las relaciones entre los dos países; «la visita pudiera jugar un papel crítico en la solución de las tensiones entre ellos y en el establecimiento de amplias relaciones entre ellos». Añadió que la razón por las cuales las relaciones entre los dos países aún no se ha reactivado era el plan del «Gran Medio Oriente» del presidente de los Estados Unidos George W. Bush, presentado en el 2004, que había dado lugar a una nueva ronda de tensiones, ya que aspiraba a abrir una brecha entre la mundo árabe e Irán. Explicó que algunos desacuerdos entre los dos países eran naturales, pero que elementos externos la estaban exacerbando. [12]

Asimismo, tres miembros del Comité de Seguridad Nacional del Majlis – Isma’il Kowthari, Mohammad Karim Abedi, y Hossein Ebrahimi – dijeron que Irán estaba interesado en renovar relaciones con Egipto, pero que el asunto estaba sujeto a demoras debido a que los Estados Unidos e Israel estaban tomando decisiones por Egipto, y también debido al acuerdo de Camp David. [13]

Ebrahimi, quien es jefe del Comité de Seguridad Nacional y del Subcomité de Relaciones Exteriores del Majlis, rechazó las críticas internas en Irán sobre la reunión Larijani-Mubarak, y anunció: «Nuestras relaciones con Egipto son muy importantes, y aunque su gobierno sea dependiente [de los Estados Unidos], su gente busca la paz… y la corriente wahabí, que se ha infiltrado en la mayoría de los países árabes, no goza de esa condición en Egipto». [14] «Él Dijo que el Ayatolá Jomeini y el Líder Supremo iraní Ali Jamenei prohibieron las relaciones sólo aplicables a Israel: «Las negociaciones con Egipto podría eliminar los obstáculos a las relaciones con este. Egipto, a nuestra manera de ver, es el corazón del mundo árabe, y por lo tanto el precio debe ser pagado por las relaciones con este si es necesario».

Asimismo, rechazó las pre-condiciones para renovar las relaciones con Egipto, al explicar que «no debemos buscar pretextos para [no] establecer relaciones con este… nuestras acciones con [Egipto] deben poseer amplios horizontes y deben mostrar tolerancia». En una entrevista con la agencia oficial de noticias iraní IRNA, Ebrahimi enumeró las ventajas en la renovación de relaciones entre Irán y Egipto, siendo las principales «utilizar a Egipto para influenciar a Israel», «salvar al mundo islámico del imperialismo y de la explotación por este» y exportar la revolución islámica de Irán: «Los países islámicos tomarán un nuevo aliento, y quizás de esta forma el aroma de la revolución y del régimen islámico sagrado llegará a sus narices». Otras ventajas que nombró fueron que esas relaciones ayudarían a los palestinos y de esta manera también a algunos otros países de la región, y calmará las tensiones entre Irán y otros países. [15]

* A. Savyon es director del Proyecto Mediático Iraní en MEMRI


[1] La conferencia fue llevada a cabo por el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IIES), un grupo británico para solventar situaciones.

[2] Themajlis.org, Alarabiya.net, 13 de diciembre, 2009.

[3] Fars (Irán), 27 de diciembre, 2009.

[4] Véase MEMRI Investigación y Análisis No. 557, «Las Conversaciones Sobre Materia Nuclear de Viena – y el Rashomon/Occidental-iraní,» 25 de octubre del 2009, http://www2.memri.org/bin/espanol/articulos.cgi?Page=archives&Area=ia&ID=IA55709 y MEMRI Investigación y Análisis No. 564, «Respuesta de Irán a Occidente: ‘Irán ha Perdido la Paciencia’, ‘Nosotros Ya Hemos Comenzado a Producir [Uranio Enriquecido al 20%]'», 17 de Noviembre del 2009, http://www2.memri.org/bin/espanol/articulos.cgi?Page=archives&Area=ia&ID=IA56409

[5] Larijani, se reunió con los miembros de mayor jerarquía del régimen y con figuras públicas diciembre 20-23, 2009, incluyendo al canciller egipcio Ahmad Abu Al-Gheit, el secretario de la Liga Árabe, Amr Moussa, el jefe de la inteligencia egipcia Omar Suleiman, el presidente de la Asamblea Popular de Egipto Ahmad Fathi Sorour, el Secretario General de la Organización de la Conferencia Islámica Ekmeleddin Ihsanoglu, y Mohammed Hassanein Heikal, ex asesor del difunto presidente egipcio Gamal Abd Al-Nasser, así como con el presidente de la Universidad Al-Azhar Muhammad Ahmad Tayyeb. Portal del Majlis, Irán, 24 de diciembre, 2009.

[6] Suleiman dijo que «Irán y Egipto tienen mucha base en común, y también si existen desacuerdos, no son grandes, sino pequeños… En cuanto a la cuestión palestina, compartimos un objetivo común, y es ayudar al pueblo palestino a alcanzar sus objetivos. Tal vez haya desacuerdos [entre nosotros] en relación con el método, pero esto puede ser resuelto mediante el diálogo». Mehr, Fars, Irán, Al-Gumhouriyya, Egipto, Al-Sharq Al-Awsat, Londres, 21 de diciembre, 2009.

[7] Fars (Irán), 21 de diciembre, 2009

[8] Mehr (Irán), 22 de diciembre, 2009. A su regreso del Cairo, Larijani dijo que «la estrategia de Irán es utilizar todo el potencial en el mundo islámico para una amplia participación en la lucha contra el régimen sionista», y que los desacuerdos entre los dos países eran «tácticos», pero que sus «estrategias no son diferentes». ILNA, Irán, 23 de diciembre, 2009.

[9] IRNA (Irán), 22 de diciembre, 2009

[10] Mehr (Irán), 25 de diciembre, 2009

[11] Él firmó que la exigencia de Egipto para que el nombre de la calle en Teherán de Khaled Islambouli sea cambiado (esta fue nombrada en honor al asesino del difunto presidente egipcio Anwar Sadat) fue sólo una excusa para no renovar relaciones. Khabaronline, Irán, 25 de diciembre, 2009.

[12] Portal del Majlis (Irán), 23 de diciembre, 2009

[13] Siyasset-e Rooz (Irán), 23 de diciembre, 2009

[14] Mehr (Irán), 23 de diciembre, 2009.

[15] IRNA (Irán), 23 de diciembre, 2009.