A continuación se presentan extractos de un debate televisivo que destaca al líder islamista sudanés Hassan Al-Turabi y la activista de los derechos humanos egipcia Farida Al-Naqqash. El debate fue presentado en Al-Arabiya TV el 16 de octubre, 2008:
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Al-Turabi: El movimiento islámico de Sudán siguió el ejemplo de Muhammad; Al-Naqqash: Este llegó al poder a través de un golpe militar, no por elecciones democráticas tal como Al-Turabi clama
Hassan Al-Turabi: «El movimiento islámico [en Sudán] siguió el ejemplo dado por el Profeta Muhammad cuando entró en Al-Madina. La gente le dio la bienvenida de su propio libre albedrío. Éste es el método eventualmente alcanzado por la humanidad – el método del parlamento y las elecciones.
«Pero nosotros hemos comprendido – y esto fue reforzado por la experiencia de Argelia, Turquía y Asia – de que aunque Occidente ve la democracia como un valor, esta inmediatamente suprime [las elecciones], si el resultado refleja la voluntad islámica. Su valor supremo es impedirle al Islam alcanzar el poder, y Hamas es el último ejemplo de esto».
[…]
Farida Al-Naqqash: «Me gustaría hacer los siguientes comentarios sobre el movimiento islámico en Sudán, como parte del movimiento islámico a lo largo del mundo árabe. Me gustaría hacer hincapié en cuatro puntos: Primero, este movimiento llegó al poder en Sudán a través de un golpe militar, y no a través de elecciones democráticas, tal como clamó el Dr. Al-Turabi, quién está hablando ahora de democracia y libertad de prensa.
«El movimiento islámico en Sudán ha frustrado el proceso democrático allí, ha conducido una opresión organizada en el país, y ha impedido la lucha de clases persiguiendo a partidos políticos, sindicatos y movimientos estudiantiles. Ha distorsionado la imagen del Islam, vinculándola con el terrorismo y el atraso».
Entrevistador: «Farida, quizás me puede escuchar, pero…»
Farida Al-Naqqash: «Ha empobrecido la cultura. Es parte del movimiento islámico a lo largo del mundo árabe, y este es el por qué la situación en Sudán hoy es catastrófica – ambos al sur de Sudán y en Darfur».
[…]
Hassan Al-Turabi: «Con respecto a la ascensión del Islam al poder – obviamente, es mejor si es por consentimiento, debido a que nuestra religión no está basada en la coerción. Pero mi querido colega ha omitido el mencionar que el renombrado despertar de la democracia en Francia y en todos los otros países fue logrado por medio de revoluciones y por la fuerza. Luego, las libertades fueron consolidadas, y el poder dictatorial no duró más allá de un período interino, conocido como el ‘Reino del Terror»‘. […]
Al-Turabi: «El jihad no fue [declaró] sólo para amasar más poder, sino para restringir al pueblo también»
Entrevistador: «Pero hubo también una llamada a emprender el jihad en Sudán del sur, no?»
Hassan Al-Turabi: «Una llamada a que?»
Entrevistador: «Al jihad».
Hassan Al-Turabi: «Cual llamada?»
Entrevistador: «La llamada al jihad».
Hassan Al-Turabi: «Fue difícil cambiar a las fuerzas armadas, que fueron todas formadas según los modelos occidentales, los cuales son feroces. En Occidente, cuando desvanecen a un pueblo – tal como lo están haciendo en los países árabes, y al igual que lo hicieron en Alemania y Japón – ellos matan indiscriminada e implacablemente. Así que el jihad no fue [declarado] sólo para amasar más poder, sino para restringir al pueblo también». […]
Al-Naqqash: Las ‘Leyes del Shari’a’ «estaban entre las razones principales del empeoramiento de la crisis del sur de Sudán»
Farida Al-Naqqash: «El Dr. Al-Turabi se está contradiciendo a si mismo, haciendo gimnasia verbal, como siempre. Fue el Dr. Al-Turabi quién estableció las así llamadas ‘Leyes del Shari’a’, o ‘Las Leyes de Septiembre’, por los días del [anterior presidente de Sudán Ja’far] Al-Numeiri. Estas leyes estaban entre las razones principales del empeoramiento de la crisis del sur de Sudán. Sudán es un estado multi-nacional, multi-racial y multi-fe, con musulmanes, cristianos, paganos y ateos. La tolerancia demostrada por el pueblo sudanés a lo largo de su historia fue hecha añicos por la alianza entre Al-Bashir y Hassan Al-Turabi, en el así llamado Frente Islámico Nacional.