En su columna del diario de la AP Al-Hayat Al-Jadida, el Diputado Ministro del Exterior de la Autoridad Palestina ‘Adli Sadeq criticó fuertemente al Presidente Americano George W. Bush, describiéndolo como «la cabeza de la serpiente» de la invasión.[1] Lo siguiente son las citas del artículo:

‘La Llegada de la Cabeza de la Serpiente’

«La cumbre Arabe-Americana se está convocando hoy con la participación de la cabeza de la serpiente de la invasión Americana a Irak, y la cabeza de la serpiente de la opresión Americana contra ambos, los Palestinos y los Arabes. Podría ser que la llegada de la cabeza de la serpiente se convertirá en una oportunidad adicional para los [representantes] de los regímenes Arabes que están presentes [en la cumbre], para entender que apaciguar a los Estados Unidos y consentirlos no les beneficiarán ni a ellos o a sus pueblos.. «

«Este Bush está aterrizando en Sharm El-Sheikh con la arrogancia demostrada, como si lograra una ‘victoria del valiente’ en Irak. [Pero] la lógica y la razón dicen que él no es ningún héroe y de que él no está entre los vencedores valerosos en verdaderas batallas entre iguales. Por otro lado, los Iraquíes simples emprendieron batallas en pueblos remotos, a las puertas de sus ciudades y desiertos, para defender su país, sin considerar la opresión, la tiranía, y el sufrimiento que soportaron a manos de un régimen retrogrado y represivo ‘familiar’ [es decir Saddam y sus hijos], así como la falta de [el] equilibrio de poder [comparado con los Estados Unidos] y las cantidades de municiones disparadas en sus ciudades y centros de población.»

‘Los Estados Unidos Emergieron Seguros De Irak Solo Debido a la Alevosía del Ejército Iraquí’

«Estos Iraquíes podrían haber creado una mayor crisis para Bush, su administración, y su comando militar… [Ellos] emergieron seguros de tal crisis sólo debido a la alevosía… de aquellos a los que Saddam había permitido gobernar Irak con un puño de hierro… «

«Este Bush no logró una notable e impresionante victoria. Él fue insincero en sus promesas de un Irak democrático a ser gobernado por su propio pueblo. Además, él no era un hombre fiable y honorable con sus tácticas sobre las armas de destrucción masiva. Es improbable que W. Bush oirá opiniones claras y valerosas en Sharm El-Sheikh o que le dirán que los Arabes todavía tienen cuentas por cobrar…, de que todavía tienen [fuerzas] de resistencias ocultas en el corazón de la sociedad Iraquí cuyo objetivo es expulsar a los invasores derrotados… «

‘La Construcción de un Imperio Americano, con Metas Imperialistas Disfrazadas como una Guerra contra el Terrorismo’

«La paradoja es que Bush se presentará a si mismo en la cumbre Sharm El-Sheikh como uno que tiene la última meta de luchar al terrorismo, y todos [los representantes Arabes] estarán de acuerdo entre ellos – de una manera u otra – de que sus estrategias no habían sido moldeadas para servir a la construcción de un imperio Americano, con metas imperialistas disfrazadas como una guerra al terrorismo… Bush no encontrará a nadie para decirle abiertamente que la política Americana llevará al desastre y de que es la fuente de venganza que llevó a algunos jóvenes Arabes y Musulmanes a explotarse. Con tal de que los regímenes Arabes obedezcan a Washington por ninguna buena razón, y con tal de que Washington endose actos criminales y agresión contra el honor y los recursos de [otras] naciones – el terror no cesará y América no podrá erradicarlo.. «

‘Nosotros Envidiamos la Abilidad de Bush de Aterrizar Arrogantemente en Cualquier Tierra Arabe’

«Nosotros envidiamos la habilidad de Bush de aterrizar arrogantemente en cualquier tierra Arabe, mientras él es [la] cabeza de la serpiente de la despreciable invasión en Irak… Él sólo triunfó debido a la traición dentro del comando del [ejército] de Saddam… e incluso eso pasó después de dos semanas de fuerte resistencia de Iraquíes que sólo tenían armas oxidadazas en sus manos.»

‘América se está Hundiendo más Adentro… en un Pantano Podrido’

«Nosotros no tenemos ninguna duda de que Bush usará tácticas de intimidación contra los regímenes Arabes y de que él pondrá su total peso a favor de soluciones represivas a cada problema. Habría sido mejor y más racional para los representantes Arabes en Sharm El-Sheikh de hacer un esfuerzo para convencerlo de que es él quien debe temer, y de que son ellos los que deben asustarlo. Es él quién debe temer al futuro, porque su experiencia en Irak no es brillante y América se está hundiendo más y más en un pantano podrido, y sólo se librará de él como un derrotado, y apestoso perdedor… «


[1] Al-Hayat Al-Jadida (Autoridad Palestina), Junio 3, 2003.