Desde el 11 de Septiembre del 2001, las teorías de un supuesto complot han abundado en la prensa árabe y, especialmente, en la prensa egipcia. Las teorías afirman que los ataques fueron perpetrados por la CIA, el FBI, los Judíos, el Mosad, etc.[1] Estas teorías volvieron a difundirse en la prensa egipcia en el primer aniversario de los ataques. El Embajador de los Estados Unidos en El Cairo, David Welch, publicó un artículo en árabe[2] en el principal diario del gobierno egipcio Al-Ahram, desacreditando la diseminación de estas teorías. Su artículo fue ampliamente criticado por los periodistas e intelectuales egipcios. A continuación presentamos extractos del artículo de Welch[3], y de las reacciones en la prensa egipcia:
Artículo del Embajador Welch
«La conmemoración del primer aniversario de los ataques terroristas del 11 de Septiembre ha producido un halo de recuerdo, comentario y análisis en los medios de comunicación egipcios, sobre el significado de los acontecimientos y cómo Estados Unidos y el resto del mundo han cambiado desde aquel funesto día. Algunos escritores presentaron a los estadounidenses sentidas condolencias, por lo que les estamos agradecidos, y también estamos agradecidos por su ayuda para traer a la justicia a los responsables de estos crímenes. El Presidente Bush le ha agradecido publicamente al Presidente Mubarak por su ayuda, reconociendo que los egipcios conocen por experiencia propia el pánico que los grupos terroristas pueden imponer. Los egipcios también comprenden la necesidad de dar caza a los terroristas antes de que puedan cometer más atrocidades.»
«Desafortunadamente, el aniversario ha levantado también mas voces en los medios de comunicación que preguntan quien planeó y realizó los ataques, y difundiendo teorías sobre un complot increíbles, sin ningún fundamento ni evidencia que los respalde. Los principales periódicos y revistas egipcios han publicado -en las pasadas dos semanas-, columnas de sus editorialistas mas destacados, quienes insinúan que el responsable de los ataques no fué Al-Qa’ida, sino que fueron otros gobiernos y grupos. Un conocido profesor egipcio de sociología, durante una cátedra publica el 11 de Septiembre, paso casi una hora tratando de sembrar la duda sobre la culpabilidad de Al-Qa’ida, llegando incluso a implicar al gobierno estadounidense diciendo que Estados Unidos se había beneficiado con los ataques….»
«Es un hecho que la mayor parte del mundo acepta la inmensa evidencia que comprueba la responsabilidad de Al-Qa’ida. No existe ninguna evidencia que pueda refutar este hecho. Esta evidencia se ha mostrado detalladamente en miles de artículos de los medios de comunicación independientes en muchos países del mundo, artículos que están al alcance de todos por medio de la Internet. Mas aún, el mismo Al-Qa’ida ha admitido su culpabilidad en entrevistas concedidas a Yusri Foda, del canal de televisión de Al-Jazeera, que fueron transmitidas por ese canal la semana pasada. Es difícil imaginarse como estos comentaristas pueden simplemente ignorar estas confesiones, que confirman todas las demás evidencias que son de el dominio público…»
«Desgraciadamente el que los medios de comunicación egipcios pasen por alto los hechos reales de manera tan contundente, daña enormemente su reputación. Tengo la esperanza de que los editores tomen esto en cuenta y pongan en práctica su buen juicio cuando revisen los artículos o editoriales que se publican en sus publicaciones. Por lo menos, los medios de comunicación responsables deberían estar dedicados a decir la verdad no a difundir mentiras y a distinguir la diferencia entre ambas.»
La Respuesta de los Intelectuales Egipcios: Un Comunicado
Después de la publicación de el articulo de Welch, los «intelectuales, escritores y periodistas» egipcios publicaron un comunicado exigiendo que el gobierno de los Estados Unidos considerara a su embajador en cairo persona non grata. El comunicado fué publicado con la firma de docenas de periodistas, profesores y políticos. Decía parcialmente:
«…El embajador se expresó como si estuviera dirigiéndose a ciudadanos de alguna nación platanera, no a quienes representan la voz y la conciencia de la nación árabe con profundas raíces históricas y cuya cultura es, tal y como lo han reconocido escritores estadounidenses y occidentales, la cuna de la conciencia del mundo entero.»
«Es extraño que el embajador de un país extranjero, ya sea Estados Unidos o Micronesia, pretenda dictar lo que los periodistas e intelectuales egipcios deberían de pensar y escribir, y decirles que ello deben de creer todo lo que sus medios de comunicación difunden, aunque sean mentiras…»
«Un representante de la democracia mas poderosa del mundo se encuentra en problemas al destruir los principios fundamentales que sostienen la constitución de su país y las convenciones de los derechos humanos – entre éllos la libertad de expresión… Los intelectuales egipcios se oponen a este vergonzoso comportamiento por parte del embajador de los Estados Unidos, y a su desvergonzada interferencia en los asuntos de la prensa egipcia. Ellos le exigen que dé los mismos consejos a la prensa y al gobierno de su propio país, que ve la verdad solamente por medio de sus ojos prejuiciosos.»
«Esperamos que el embajador estadounidense se asegure de no cruzar la línea que se le ha marcado por medio de la diplomacia internacional, y que no trate de inmiscuirse en los asuntos de la prensa egipcia, porque Egipto es un país independiente, no una nación platanera, porque los periodistas egipcios son profesionales y no necesitan lecciones de nadie. Aunque los Estados Unidos piensen que han conquistado el universo, no podrá conquistar ni subyugar a los escritores libres.»
«Exigimos que el gobierno de los Estados Unidos considere a su representante en El Cairo persona non grata y lo despida, pues ha hecho daño a la democracia y ha clavado una daga en el corazón de la constitución de su propio país…»
«Le aconsejamos al embajador de los Estados Unidos que trate de salvar la reputación de su país, puesta en vergüenza por su silencio ante los crímenes israelíes, comparables con los crímenes de Hitler. Si tiene tiempo de dar consejos e interferir en los asuntos internos de Egipto, le advertimos que sería mejor para él regresar a su país.»[4]
Welch Debería de Corregir los Errores de los Medios de Comunicación Estadounidenses
El Doctor Muhammad Al-Shadhli, catedrático en la facultad de idiomas de la Universidad de Ein Shams de El Cairo, escribió su respuesta en el diario oficial Al-Gumhuriya:
«…La mayoría de los intelectuales y del pueblo egipcio están de acuerdo con el artículo de el embajador estadounidense, debido a su amor por la verdad, por encima de la mentira -particularmente en los medios de comunicación- que pueda causar el derramamiento de sangre de personas inocentes y la usurpación de sus derechos.»
«Quiero llamar la atención de el embajador hacia el gran numero de errores que se han difundido durante muchos años en los medios de comunicación estadounidenses -tanto en su prensa como en su televisión-, acerca de asuntos islámicos, árabes y palestinos. Todos sabemos que estos errores se venían cometiendo desde mucho antes de los acontecimientos terroristas del 11 de Septiembre, y que aumentaron después de los ataques – lo cual afectó la reputación y la credibilidad de los medios de comunicación estadounidenses entre la inteligencia egipcia y el pueblo en general.».
«No estoy justificando una reacción equivocada. Un error es un error en cualquier parte y a cualquier hora. Pero espero que el Señor David Welch les aconseje a los editores de los periódicos y estaciones de televisión estadounidenses que conserven la reputación de los medios de su comunicación entre los pueblos islámicos y egipcio, principalmente por el hecho de que los pueblos islámicos y árabes pagan el precio de la indiferencia de los medios de comunicación americanos con respecto a el derramamiento de sangre de miles de sus hijos, a la degradación de sus pueblos, y a la usurpación de sus derechos legítimos.»
«El interés de el embajador estadounidense por preferir la verdad sobre la mentira y en la reputación de los medios de comunicación egipcios debe de recibirse con gratitud por parte de los egipcios. Este sentimiento de gratitud aumentaría si los editores de periódicos y televisión estadounidenses siguieran el mismo consejo de el embajador…»
«Por ultimo, extiendo al embajador y al pueblo estadounidense mis condolencias por las victimas de los acontecimientos terroristas del 11 de Septiembre.» [5]
Welch Debería Leer sus Libros de Historia
En un artículo titulado «El Alto Comisionado Americano,» Mustafa Bakri, editor del semanario de oposición Al-Usbu’, escribió: «El embajador estadounidense en Egipto se ha desviado de todas las normas diplomáticas al hablarnos sobre nuestros periódicos como si el fuera un nuevo Alto Comisionado que impone órdenes que deben ser obedecidas y dando instrucciones que debemos acatar…»
«Mi sugerencia al embajador estadounidense en Egipto es que lea cuidadosamente la historia y que entienda que cada vez que se desvíe de sus tareas diplomáticas, encontrará rechazo y oposición de todos los ámbitos egipcios. No es la primera ni la ultima vez que este embajador y su gobierno interfieren en asuntos egipcios. Este embajador jugó un papel negativo al dañar la reputación del sistema legal egipcio en el asunto de Sa’d Al-Din Ibrahim, y convirtió la embajada en un centro de operaciones para la emisión de comunicados y para dirigir una campaña en contra de Egipto y de su noble sistema legal. Este embajador no cesa en ningún momento en sus intentos de incitación en contra de la prensa egipcia, con reportes que envía a su gobierno y con sus demandas constantes al gobierno egipcio para que intervenga en contra de uno u otro periódico…»
«Si este embajador ha decidido ingresar en las filas de el periodismo, yo hubiera esperado que nos hubiese expresado su opinión sobre los crímenes que su país está cometiendo en contra de todo árabe o musulmán y que respondiera a los reportes de las organizaciones internacionales, enumerando las violaciones de los derechos humanos de la administración de Bush tanto dentro como fuera de los Estados Unidos. Yo hubiera esperado escuchar de él palabras valientes sobre lo que está pasando con el pueblo palestino hoy, y con la destrucción de los cuarteles de Arafat, y con el asesinato de algunos de sus guardaespaldas, y el arresto de docenas de ellos. Pero todo lo que hemos escuchado de Washington ha sido la justificación del enemigo sionista bajo el pretexto de defensa propia.»
«Hubiéramos querido escuchar la posición de el embajador sobre la violación de Washington de la autonomía internacional, y sus preparativos para invadir a Irak, a pesar de que Irak ha expresado su deseo incondicional de permitir el regreso de los inspectores internacionales. Hubiéramos esperado que Su Excelencia, el Embajador, hablara con nosotros, aunque sea un poco, sobre la creciente histeria en la Casa Blanca y las amenazas de declarar la guerra a todo el mundo, no para defender la libertad y enfrentarse al terrorismo, sino para reacomodar los intereses estratégicos estadounidenses y para reacomodar los intereses de Israel y controlar el destino de el mundo entero.»
«Pero usted no tiene la culpa, Señor Embajador. La culpa la tienen aquéllos que le permitieron escribir esas palabras tan arrogantes en nuestra prensa.»[6]
Respuesta del Sindicato de Periodistas Egipcios
Varios días después, según el diario oficial Al-Gumhuriya en una conversación con el Ministro del Exterior Egipcio Ahmad Maher, el Embajador Welch explicó que el no atacó a la prensa egipcia, a la cual el «respetaba y estimaba». Dijo:, «Lo que importa es analizar los hechos y estudiarlos de forma abstracta y objetiva y de consolidar ideas basadas en estos hechos.»[7]
Sin embargo, el Sindicato del Consejo de Periodistas Egipcios publicó un comunicado diciendo que «el principio sólido sobre el cual se basa este sindicato es el de la libertad de expresión… y la forma para llegar a la verdad es por medio de la publicación de una variedad de opiniones, no por medio de la censura. No hay duda de que el más antiguo periódico egipcio y árabe [Al-Ahram] que publicó el artículo [de Welch] reitera este principio, en un momento en el que dudamos que un artículo escrito por un crítico de la prensa americana fuera publicado tan fácilmente en los Estados Unidos… El Consejo desea aclarar al Embajador que su intento de intervenir en las políticas editoriales de los periódicos egipcios es inaceptable y daña la autonomía de la prensa…»[8]
En Defensa de Welch
El periodista egipcio Nabil Sharaf Al-Din, se puso de parte de Welch respondiendo al comunicado del Sindicato de Periodistas Egipcios en el diario en árabe de Londres Al-Quds Al-Arabi: «…Entre los profesionales [i.e. periodistas egipcios] hay muchos, entre ellos yo, que mantienen que no todo lo que dijo el embajador estadounidense fue nulo, a pesar de mi objeción a su llamado para censurar los artículos antes de su publicación. Sus palabras acerca de la difusión de la teoría del complot son absolutamente correctas. No es lógico que nosotros continuemos contando cuentos de hadas sobre la responsabilidad por los ataques del 11 de Septiembre, cuando los seguidores de bin Laden ya reconocieron su responsabilidad por propia iniciativa…» «El embajador americano actuó como debería de actuar el embajador un país defendiendo los intereses de su país. El no esperó instrucciones ni guías [de arriba], como lo hacen nuestros diplomáticos. Después de todo, Welch solo defendió lo que él considera la verdad y estaría bien que nuestros diplomáticos hicieran algo para corregir la perspectiva occidental hacia nuestra nación y nuestra cultura de la misma forma que el embajador estadounidense lo hizo por las suyas…» «Si los honorables colegas y hombres de lucha [i.e. miembros del Sindicato de Periodistas Egipcios] piensan que el embajador de un país de la importancia de Estados Unidos está actuando como actúan nuestros diplomáticos, en un mundo de egoísmo y gozando de lujos a expensas de los contribuyentes, están muy equivocados…»[9]
[1] Para mayor información, lea el Reporte Especial de MEMRI No. 7: Los Eventos del 11 de Septiembre en los Medios Arabes: El Nuevo Mito Antisemita y No. 6: UN NUEVO MITO ANTISEMITA EN LOS MEDIOS DEL MEDIO ORIENTE: «Los Ataques De Septiembre 11 Fueron Perpetrados Por Los Judios»
[2] Al-Ahram (Egipto), Septiembre 20, 2002.
[3] Tomado de la versión original en inglés titulada «Time to Get the Facts Right,» en el sitio de la Embajada Norteamericana en Egipto, http://www.usembassy.egnet.net/newsa.htm
[4] Al-Usbu’(Egipto), Septiembre 23, 2002.
[5] Al-Gumhuriya (Egipto), Septiembre 22, 2002.
[6] Al-Usbu’ (Egipto), Septiembre 23, 2002.
[7] Al-Gumhuriya (Egipto), Septiembre 24, 2002.