Por: N. Mozes*

La semana pasada, las relaciones entre Egipto y Siria se calentaron aún más, tal como lo evidencian las declaraciones públicas del Presidente egipcio Abd Al-Fattah Al-Sisi en apoyo a la guerra del ejército sirio en contra de los «terroristas» y a través de varios artículos en el diario del gobierno egipcio Al- Ahram que expresan la aprobación de relaciones más cercanas ante los cambios en la región, entre ellos debido a la elección de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos y los desafíos comunes que estos enfrentan. Otros signos de acercamiento incluyen una visita oficial al Cairo por parte del jefe de la Oficina de Seguridad Nacional de Siria Ali Mamlouk en octubre, e informes de la ayuda militar y humanitaria egipcia a Siria.

La declaración de Al-Sisi en apoyo al ejército sirio también provocó críticas en Egipto, expresadas en artículos de prensa que le pedían aclarara su postura sobre Siria y se abstuviera de enviar tropas al lugar.

El acercamiento entre Egipto y Siria se produce en un momento de creciente tensión entre Egipto y Arabia Saudita debido al profundo desacuerdo sobre la crisis siria;[1] de acuerdo al diario londinense Al-Quds Al-Arabi, los esfuerzos para mediar entre los dos países por parte del secretario general de la Liga Árabe Muhammad Abu Al-Gheit y por los EAU han fracasado.[2]

Lo siguiente son extractos de la declaración de Al-Sisi y de los artículos en la prensa egipcia:

Al-Sisi: Apoyamos al ejército sirio

De acuerdo a informes en la prensa árabe en una entrevista para la televisión portuguesa el 22 de noviembre Al-Sisi expresó públicamente, por primera vez, su apoyo al ejército sirio, mientras que al mismo tiempo rechazaba la posibilidad de que tropas egipcias operaran en Siria como parte de las fuerzas de las Naciones Unidas. Este dijo: «Es mejor que las fuerzas armadas nacionales de un país que protejan su seguridad y estabilidad, de modo que no surjan sensibilidades por la presencia de otras fuerzas. Lo más apropiado [para otros países] en tales casos] es apoyar al ejército nacional de un país, por ejemplo en Libia, para que [el ejército libio] pueda controlar el territorio libio, tratar con los elementos extremistas [allí] y lograr una estabilidad necesaria. Lo mismo aplica a Siria, donde nosotros apoyamos al ejército sirio y a Irak… «Respecto a los esfuerzos internacionales de combatir el terrorismo, Al-Sisi dijo que era preferible «preparar a los ejércitos nacionales para que lidien con las organizaciones terroristas, En lugar de tener fuerzas internacionales [en los países]… El mundo debe inevitablemente unir esfuerzos para combatir el terrorismo, [pero] es mejor apoyar a los ejércitos nacionales en Libia, Siria e Irak a fin de que puedan lidiar con el terrorismo por cuenta propia]».[3]

Al-Sisi dio estas declaraciones dos días después de que el Ministro de Asuntos Exteriores de Siria Walid Al-Mu’allem, señaló que «el discurso egipcio había mejorado», pero agregó que esta mejora «aún no concuerda con nuestras expectativas. La razón [de nuestras expectativas] es simple: Cuando Siria y Egipto se juntan, la situación de el ummah árabe es buena El poderoso Egipto, su pueblo y su ejército no pueden permanecer de brazos cruzados ante lo que está sucediendo en Siria, al igual que Siria no puede sino mostrar su solidaridad con el ejército egipcio en su lucha contra el terrorismo en el Sinaí. [En este momento, Egipto necesita dar] un pequeño salto [hacia adelante] para que las cosas vuelvan a su estado natural».[4]

En Siria, la declaración del 22 de noviembre en apoyo al ejército sirio por Al-Sisi fue bienvenida. El embajador sirio a Moscú Riad Haddad dijo: «Anticipamos que Egipto si desempeñara un papel positivo en la resolución de la crisis siria. Le damos la bienvenida a cualquier esfuerzo de Egipto para acabar con el terrorismo en Siria…»[5] El diario del gobierno sirio Al-Baaz señaló que la postura «visible» de Al-Sisi en apoyo al ejército sirio «indica que Egipto pronto volverá a su papel de liderazgo para ayudar a resolver las crisis a través del ummah».[6] El portal de noticias DP, cercano al régimen sirio, también dijo: «En los últimos días ha habido declaraciones positivas de ambos bandos los egipcios y sirios que allanan el camino a una renovación de los lazos entre los dos regímenes».[7]

Informes de la ayuda militar egipcia a Siria

Según informes, estas declaraciones de Al-Sisi y Mu’allem están respaldadas por medidas prácticas de los dos países. Durante su visita al Cairo el 17 de octubre, 2016 el jefe de la Oficina de Seguridad Nacional de Siria Ali Mamlouk, se reunió con el jefe de la Dirección General de Inteligencia egipcia Khaled Fawzy y los dos acordaron que sus países «coordinarían sus posiciones políticas y aumentarían la coordinación militar en la lucha contra el terrorismo al cual ambos combaten».[8] De acuerdo al diario saudita Al-Hayat, Mamlouk y los funcionarios egipcios discutieron el envío de oficiales egipcios a los frentes de batalla en Siria, el incremento en la cooperación de seguridad, e incluir a Egipto en los esfuerzos de ayuda humanitaria a Alepo.[9]

Dos semanas más tarde, el 3 de noviembre, la agencia de noticias iraní Tasnim informó que el gobierno egipcio estaba «decidido a extender la ayuda militar a Siria y enviar tropas allí con el propósito de participar en la guerra contra los terroristas… Los dos gobiernos anunciarán pronto oficialmente [su] coordinación en la guerra contra el terrorismo».[10]

El 24 de noviembre, dos días después de las declaraciones de Al-Sisi, Muhammad Ballout, reportero del diario libanés Al-Safir, cercano al régimen sirio, escribió: «Los egipcios han dejado de observar sin realizar acciones a lo que está sucediendo en Siria y han decidido… intervenir allí gradualmente». Según el informe, contactos militares en secreto Siria-Egipto han estado en marcha durante más de un año y estos se han intensificado en las últimas semanas. Dos altos oficiales del ejército egipcio están actualmente en Siria recorriendo los frentes de batalla, incluyendo el área de Quneitra y también participaron en una reunión de la división del ejército sirio desplegada allí. El informe agregó que, el 12 de noviembre, 2016 una unidad de 18 pilotos de helicópteros egipcios llegó a la base aérea de Hama y, citando una fuente siria, que después de enero del 2017, grandes contingentes de las fuerzas egipcias llegarían a Siria para participar en las actividades militares y no sólo tendría un papel auxiliar en la base aérea de Hama. Adicionalmente, según el informe, se espera que un diplomático egipcio de alto rango visite Siria pronto, posiblemente, el Canciller Sameh Shukri o uno de sus asesores principales.[11]

Egipto fue rápido en negar la información de Al-Safir. El portavoz egipcio del Ministerio de Relaciones Exteriores Ahmed Abu Zeid, destacó que El Cairo no ha enviado fuerzas militares a Siria y un funcionario militar egipcio calificó el informe de «tonterías» y «totalmente falsas». El funcionario afirmó que «la percepción del liderazgo general y del estado egipcio y sus políticas, se basa en la no interferencia en los asuntos internos de otros países».[12] Sin embargo, Al-Safir Estaban estuvo junto a su informe.[13]

El 28 de noviembre, el Ministerio de Asuntos Exteriores egipcio volvió a rechazar el informe de Al-Safir, señalando: «Estos informes existen únicamente en la imaginación de quienes los difunden y su propósito es claro para todos». Un portavoz del ministerio añadió que antes de que Egipto envíe soldados o equipos fuera de sus fronteras, deben ser tomadas medidas constitucionales y administrativos y tales medidas «no se llevan a cabo en secreto o sin el conocimiento del pueblo egipcio».[14]

Otra señal del acercamiento Siria-Egipto es que Egipto es el primer país al que Siria le ha permitido participar en los esfuerzos para ayudar a los residentes de Alepo. A finales de octubre, el encargado de negocios egipcio en Damasco Muhammad Selim, dijo que en coordinación con el Ministerio de Asuntos Exteriores de Siria y la ONU, Egipto participara en los esfuerzos coordinados de rescate en Alepo y supervisara la evacuación de los residentes lesionados y de edad avanzada a través de rutas de seguridad establecidas por el régimen sirio y Rusia hacia el este de la ciudad. Esto, dijo, es una expresión de «la estima» que se le tiene a Egipto «en todas partes».[15]

Artículos en Al-Ahram que expresan aprobación a las mejoradas relaciones entre Egipto-Siria

Egipto y Siria tienen una oportunidad de oro de redibujar el Medio Oriente

El deseo de Egipto a un acercamiento con Siria también fue expresado por artículos publicados por el diario oficial egipcio Al-Ahram. Los artículos exhortaron al régimen egipcio a mejorar sus relaciones con Siria ante la nueva situación creada por la elección de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos y los desafíos conjuntos que estos enfrentan y para reposicionar a Egipto como líder del mundo árabe.

En un artículo, el periodista egipcio Ilhami Al-Maligi[16] llamado a ambos países para que aprovechen la oportunidad histórica que se les presenta por la victoria electoral de Donald Trump a fin de unir fuerzas y trabajar para dar forma al Medio Oriente como mejor les parezca. Este escribió: «Las relaciones Egipto-Siria se caracterizan desde hace tiempo por una inexplicable falta de claridad, aunque lo que poseen en común es más profundo que cualquiera de sus desacuerdos naturales.

«La desconexión entre los países nunca fue seria, tal vez porque todos saben que incluso si las relaciones se deterioraron, los lazos de sangre entre ellos son demasiado fuertes como para ser socavados por una alienación política. Más aun, mientras mayor son las disputas entre los países, mayor se convertía las relaciones [luego de cada crisis]. Esto siempre estuvo muy claro luego del cisma a finales de 1961.[17] Todos predijeron que el colapso de la República Árabe Unificada sería el primer paso hacia una desconexión final entre los países – pero resultó ser uno de los primeros pasos hacia la guerra de octubre, 1973 que produjo la primera victoria militar de los árabes sobre Israel.

«A pesar de toda esta relación histórica compartida y de la cohesión popular que es imposible de deshacer, la descripción general de las relaciones oficiales entre los países fue siempre de que no eran tan buenas como pudieran ser, pero tampoco tan malas que fueron cortadas totalmente, esto es como una fisura voluntaria en una familia, en la que dos hermanos siguen viviendo sus vidas sobre el mismo camino, pero cada uno lo hace por separado, después de todo, que es lo que nos viene a la mente cuando pensamos en Egipto y Siria? Fraternidad y unidad…

«Egipto y Siria poseen una larga historia compartida que no ofrece ninguna explicación por este largo período de buenas [relaciones]. Aunque durante la última década Egipto ha tenido cuatro presidentes diferentes, nada ha cambiado a nivel oficial. Porque el amor y la unidad entre los dos pueblos nunca han disminuido y hasta los sirios que han dejado su país por otros lugares alrededor del mundo debido a esta reciente crisis no han florecido en ninguna parte como lo han hecho en Egipto…

«A mi manera de ver, no habrá mejor oportunidad en la historia para los dos países para que vuelvan a tomar [un paso conjunto] como en octubre del 1973 – una oportunidad para que los países despejen la neblina… y reorganicen la región. Actualmente el único país que goza del tipo de apoyo popular y oficial que le permite actuar para detener los acontecimientos en Siria, con todas sus implicaciones regionales y convertirlos en una nueva victoria tipo octubre…

«La elección de Trump a la presidencia de Estados Unidos y el enfoque hacia Estados Unidos por lo menos en el futuro previsible, representan una oportunidad de oro para todos los residentes de la región y especialmente para los dos polos del poder árabe, para deshacerse del nuevo Medio Oriente previsto [para ellos] y en su lugar planificar el Medio Oriente que estos desean. Hoy, no existe ningún impedimento entre los dos países para que recuerden su himno nacional compartido…»[18]

Para ver el resto del despacho en inglés junto a las imágenes copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: http://www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/9583.htm

*N. Mozes es compañero investigador en MEMRI.

[1] Véase MEMRI Investigación y Análisis No. 1274, «La disputa entre Egipto y Arabia Saudita sobre una solución a la crisis en Siria se hace pública», 18 de octubre, 2016.

[2] Al-Quds Al-Arabi (Londres), 21 de noviembre, 2016.

[3] Al-Yawm Al-Sabi’ (Egipto), 23 de noviembre, 2016.

[4] SANA (Siria), 21 de noviembre, 2016.

[5] Al-Watan (Siria), 24 de noviembre, 2016.

[6] Al-Baaz (Siria), 24 de noviembre, 2016.

[7] Dp-news.com, 23 de noviembre, 2016.

[8] Dp-news.com, 23 de noviembre, 2016.

[9] Al-Hayat (Londres), 14 de noviembre, 2016.

[10] Tasnimnews.com, 3 de noviembre, 2016.

[11] Al-Safir (Líbano), 25 de noviembre, 2016.

[12] Al-Jarida (Kuwait), 25 de noviembre, 2016.

[13] Al-Safir (Líbano), 25 de noviembre, 2016.

[14] Al-Ahram (Egipto), 28 de noviembre, 2016.

[15] Al-Watan (Egipto) 20 de octubre, 2016.

[16] Al-Maligi fue acusado previamente de apoyar al régimen de Assad y un portal opositor sirio incluso lo llamó «uno de los padrinos de la banda Assad en El Cairo». All4syria.info, 29 de julio, 2012.

[17] En referencia a la secesión de Siria de la República Árabe Unida – una unión política entre Egipto y Siria establecida en 1958.

[18] Al-Ahram (Egipto), 15 de noviembre, 2016.