Egipto ha intensificado últimamente sus críticas hacia Irán, tal como se refleja en las declaraciones de funcionarios egipcios y en artículos en prensa del gobierno advirtiendo sobre la influencia del Irán y de su creciente injerencia en el mundo árabe. En su discurso en la apertura del período de sesiones invernales del parlamento, el Presidente Hosni Mubarak dijo: «Advertimos contra la interferencia iraní en los asuntos árabes. No dudaremos en adoptar una postura que se opone a los intentos de desestabilizar a [Egipto] y proteger su seguridad nacional, la cual está vinculada a la del Golfo, a la región del Mar Rojo y a la seguridad del Medio Oriente en general». [1]

El Ministro del Exterior egipcio Ahmad Abu Al-Gheit, instó a Irán a no actuar dentro del dominio árabe, ya que esta es una de las razones de la inestabilidad en la región. Dijo que la influencia de Irán es evidente no sólo en Irak, el Líbano y Yemen, sino también en los países árabes de África del Norte y el Cuerno de África. [2]

Lo siguiente son extractos de artículos en la prensa egipcia respecto a este tema:

Editor de Roz Al-Yousef: Irán está concentrando esfuerzos en la región del Mar Rojo

El editor de Roz Al-Yousef ‘Abdallah Kamal escribió: «Todos los ojos están puestos en el continuo apoyo de Irán a la rebelión Houthi en Yemen y hacia los barcos iraníes que descargan armas destinadas a los Houthis en aguas internacionales frente al puerto de Assab en Eritrea, Irán… este quiere mantener un constante [estado de] tensión en las rutas del mar de nuestra región, a fin de impedir el comercio y el transporte de petróleo y colocar a los países árabes en una especie de estado de sitio. Para ello, instiga disturbios e incluso causa estallidos en los países árabes que se oponen a este…

«Irán está llevando a cabo… [varias] guerras de poder simultáneamente, todas ellas dirigidas a la seguridad nacional árabe… Desde hace muchos años, esta ha [ampliado su esfera de influencia] hacia el Mediterráneo a través del Hezbolá, tratando de crear lo que los medios de comunicación y muchos oradores han llamado una «media luna chiíta». Lo ha hecho no sólo a través de sus vínculos con Hamas en Gaza, sino centrando cada vez más esfuerzos en la ruta [naval] más volátil, el Mar Rojo…»

Kamal luego enumeró a varios grupos armados que operan bajo el patrocinio de Irán, incluyendo no sólo a los Houthis, al Hezbolá y Hamas, sino también a Jaysh Al-Mahdi en Irak y Al-Qaeda en Yemen. Él añade que Irán también patrocina a organizaciones no-armadas tales como los movimientos chiítas de Bahrein, la Hermandad Musulmana en Egipto, y los peregrinos en la Meca con el fin de «apuñalear por la espalda a varios países árabes”, especialmente aquellos cuya política está en desigualdad con Irán y forman un obstáculo a su creciente influencia en la región y a sus [intentos de] imponer su agenda. [Los otros objetivos de Irán son:] debilitar a los estados árabes para forzarlos a [lidiar con las tensiones] internas en lugar de luchar contra la expansión persa…; promover el plan chiíta global en la región – especialmente en su dimensión política – de modo que la media luna chiíta que se extiende desde el Golfo hasta el Líbano se convierta en un anillo que rodee la península arábiga… y exportar su revolución iraní en la región, rompiendo con ello la estabilidad de los países, mientras hacen que los movimientos que apoyan a Irán prosperen…» [3]

Editor de Al-Ahram: Irán está tratando de sabotear las elecciones de Irak

Osama Saraya, editor del diario del gobierno Al-Ahram, escribió: «Irán ha violado el acuerdo sunita-chiíta para evitar el proselitismo en cada uno de los otros [países] y para que se abstengan de explotar la hostilidad sectaria oculta. Se ha llegado a un punto donde Irán está incitando a disturbios en toda la región, instigando guerras y agotando a los países de la región perjudicando a sus residentes mediante la explotación de [las tensiones] entre las diversas sectas y grupos árabes. Quien no esté de acuerdo debe observar muy bien la arena de las operaciones que ha surgido recientemente en Yemen… y en la [guerra] de desgaste en Irak, donde hay combates reales, y donde las milicias de Irán están operando en varias ciudades. Irán tiene el papel más importante en el problema que ha acosado a los iraquíes desde el [principio de la] ocupación norteamericana…

«Irán no se opone a Israel… No tiene ningún reparo en llevar a la región al borde de una guerra limitada o total, ya que sabe que está muy lejos [del peligro]. Irán está [también] hostigando a Israel hacia la agresión contra los árabes. No esta interesada en soluciones diplomáticas y pacíficas en la región. [De hecho], está incluso ayudando a Israel a sabotear la iniciativa de paz de Obama y a la de un estado palestino, porque percibe [la iniciativa] como una amenaza a su intereses y a su futuro en la región, que considera [alcanzable] sólo a través de la muerte de los árabes y el colapso de sus países… [Su influencia] ha alcanzado a todos los estados árabes, no sólo en la [región] del Golfo Pérsico y el Mar Rojo, sino incluso a los países del Magreb árabe…

«No debemos olvidar que la guerra que actualmente causa estragos en Yemen y en algunas zonas de Arabia Saudita contra los Houthis se está librando con dinero y armas iraníes y que el gobierno libanés fue formado solo con el consentimiento de Siria e Irán, bajo la amenaza constante de un veto iraní [cumpliéndolo] por medio del Hizbullah…

«Debemos rediseñar las relaciones entre Irán y los árabes, y las relaciones de los árabes e iraníes chiítas con los árabes e iraníes sunitas, ya que existe una necesidad para un diálogo sincero entre las partes. No podemos de ninguna manera depositar nuestras esperanzas en el diálogo llevado a cabo por Estados Unidos y Europa con Irán… Es hora de que los árabes trabajen juntos para detener la injerencia iraní en sus países y formen planes conjuntos para resolver sus problemas…» [4]

En otro artículo, Saraya dio a entender que Irán estaba detrás de los recientes atentados en Bagdad, que, dijo, tenían como objetivo detener el proceso político que tiene lugar allí: «… Es específicamente Irán el que tiene un interés en sabotear el proceso político en Irak, en torpedear los planes de Estados Unidos para la retirada de ese país y en hacer que los Estados Unidos no puedan [implementar] sus opciones más extremas [para hacerle frente a] la crisis nuclear iraní. Irán considera que el retraso de las elecciones en Irak es una forma garantizada de retrasar la retirada de los Estados Unidos y causar que las fuerzas estadounidenses permanezcan allí más tiempo – lo que retrasaría cualquier movimiento militar estadounidense [contra Irán]». [5]

Al-Ahram también publicó esta caricatura, que muestra a Irán encendiendo la mecha de las bombas en Irak. [6]

Editor de Al-Akhbar: Irán es la fuente de los problemas palestinos

El editor del diario gubernamental Al-Akhbar, Muhammad Barakat, se refirió a la participación iraní en todos los problemas del Oriente Medio, diciendo: «[Irán] no oculta sus intenciones y objetivos de [lograr] la hegemonía y control [sobre la región ], ahora que el estado persa ha crecido en poder, y sus ambiciones y codicia han crecido también…

«Ha habido un claro incremento en la presencia iraní en el Líbano y Siria. Acuñando sus dedos firmemente en el Líbano, Irán fue capaz de [tirar de los hilos] abiertamente y en secreto… causando guerras civiles y de instigar disturbios [en el país]… a expensas de los libaneses y los demás pueblos árabes…

«La presencia de los dedos de Irán también se siente en los territorios palestinos. Son ellos los que están detrás de la hostilidad y la división que imperan allí. Estos dedos negros… son la causa principal de todas las catástrofes que han asolado al pueblo palestino en el período reciente. [Irán] estuvo detrás del sangriento golpe de estado en Gaza, en el que Hamas derrocó a la legítima Autoridad Palestina allí, y detrás de la pérdida de los derechos palestinos y el daño a su causa… [Irán] es también la principal razón de la demora y el fracaso de los palestinos en los intentos de reconciliar y limar sus diferencias…“ [7]

Al-Ahram: El extremismo de Irán – Un intento por escapar de su crisis interna

Un editorial de Al-Ahram señaló que el conflicto entre Irán y Occidente podría agravar la ya inestable situación en el Medio Oriente. Además, señaló: «Los países de la región han advertido de un posible conflicto [militar] entre Irán y los poderes [occidentales], y creemos que la continuación de las negociaciones es la forma de distanciar la región de los peligros de [tal] conflicto…

«El régimen iraní se aferra obstinadamente a su extremismo en un esfuerzo por ser visto como un régimen fuerte en lugar de un régimen en medio de una grave crisis política. Por lo tanto, es razonable suponer que este va a persistir en su extremismo y continuar denegando la cooperación con el OIEA (Organización Internacional de Energía Atómica). Este extremismo es su forma de prolongar su existencia». [8]


[1] Al-Gumhouriyya (Egipto), 22 de noviembre, 2009.

[2] Al-Siyassa (Kuwait), 2 de noviembre, 2009.

[3] Roz Al-Yousef (Egipto), 14 de noviembre, 2009.

[4] Al-Ahram (Egipto), 27 de noviembre, 2009.

[5] Al-Ahram (Egipto), 11 de diciembre, 2009.

[6] Al-Ahram (Egipto), 11 de diciembre, 2009.

[7] Al-Akhbar (Egipto), 27 de noviembre, 2009.

[8] Al-Ahram (Egipto), 1 de diciembre, 2009.