En recientes semanas, el diario en idioma árabe con sede en Londres Al-Sharq Al-Awsat se ha convertido en una plataforma para un agudo intercambio diplomático entre oficiales británicos e iraníes. Un editorial del director de Al-Arabiya Tv ‘Abd Al-Rahman Al-Rashed sobre posibles escenarios para una guerra Estados Unidos-Irán fue respondida por el Ministro de Estado británico en la Oficina Exterior de la Comunidad de Naciones Kim Howells quien, mientras argumentaba en su editorial de que «el idioma de diálogo no ha finalizado todavía», también expreso fuertes criticas hacia Irán. El editorial de Howells, a su vez, atrajo una aguda respuesta del Embajador iraní al Reino Unido Rasoul Movahedian, así como también una queja oficial a la Oficina Exterior británica. Al-Rashed cargó de nuevo, escribiendo que sólo si Irán creyera que la amenaza de guerra es real tiene la diplomacia alguna oportunidad de tener éxito.

Director de Al-Arabiya Tv Al-Rashed sobre la posibilidad de una guerra

El 23 y 24 de septiembre del 2007, el director general de Al-Arabiya Tv ‘Abd Al-Rahman Al-Rashed, quién es también ex jefe de redacción de Al-Sharq Al-Awsat, publicó un artículo de dos partes que analiza la conducta probable de los estados del Golfo en caso de una guerra entre los Estados Unidos e Irán. Él opinó que la guerra podría y debería ser evitada, pero declaró que ya que seguía siendo una posibilidad distintiva, merecía la pena analizar cuales serían las posturas de los países del Golfo.

Primero, denotó que Kuwait y Qatar eran ambos casos especiales – Kuwait porque estaba atado a los Estados Unidos por un tratado de defensa común, y Qatar porque es sede de la mayor base del ejército americano en la región.

En cuanto a los otros estados importantes productores de petróleo – Arabia Saudita, Omán, Bahrein, y los EAU – Al-Rashed escribió que aunque el proyecto nuclear de Irán los amenaza directamente, su tendencia natural sería permanecer neutral y no permitirle a los Estados Unidos usar su infraestructura o su espacio aéreo.

Esta presunción estuvo basada ambos en su conducta en la segunda Guerra del Golfo y en el hecho de que Irán pudiera atacarles fácilmente y dañarlos severamente. Al-Rashed también notó que Irán es un país mucho más grande que Irak, y sería probable superar cualquier acción militar que los Estados Unidos estén planeando.

Según Al-Rashed, la única situación bajo el cual los estados del Golfo entrarían en la guerra sería si Irán decidiera atacarlos en respuesta a un ataque norteamericano, como para interrumpir el flujo de petróleo hacia el resto del mundo. [1]

Ministro británico de la Oficina Exterior Howells: El objetivo de Irán es desestabilizar la región, y asegurar la hegemonía de la revolución islámica

El 5 de octubre del 2007, Al-Sharq Al-Awsat publicó una respuesta al editorial de Al-Rashed, de Kim Howells, Ministro de Estado británico de la Oficina Exterior y de la Comunidad de Naciones. En el editorial, titulado «El Idioma del Diálogo No Ha Finalizado Todavía», Howells expresó su preocupación por que el artículo de Al-Rashed dio la impresión de que la guerra era inevitable, y enfatizó que todavía había tiempo para la diplomacia. Haciéndolo así, sin embargo, criticó agudamente al régimen iraní, en varias áreas – qué llevó al embajador iraní a publicar una respuesta.

A continuación se presentan los extractos del artículo de Kim Howells:

«… La amenaza principal que Irán maneja es la estabilidad de la región del Medio Oriente en conjunto. Yo sé de mis discusiones con ministros y comentaristas de la región que Irán bajo su régimen presente en posesión de una bomba nuclear es una probabilidad espantosa. Ellos ya saben, que Teherán está preparado, siempre y dondequiera que crea que obtendrá ventaja, de entrometerse en los asuntos de los países del Medio Oriente.

«Este financia y arma a las milicias asesinas en Irak, y ha capturado ilegalmente y detenido a marineros británicos que estaban intentando combatir entrometidos en el Golfo. Los elementos iraníes contrabandean armas y explosivos al taliban en Afganistán. Muchos otros están ya profundamente perturbados por las implicaciones de la directa interferencia iraní en sus asuntos internos, con más notoriedad en el Líbano y los Territorios Ocupados de Palestina.

«En lugar de gastar su riqueza petrolera en mejorar las vidas de los iraníes comunes y hacer esfuerzos por resolver los problemas económicos, este régimen hace llover millones de dólares a través de la región, mucho de este en armamento, financiando a cualquier grupo armado, desde Yemen hasta Gaza, preparados para socavar con el terrorismo a gobiernos legítimos…

«Muchos de nosotros esperábamos antes de la elección del Presidente Ahmadinejad de que comenzábamos a ver a un Irán interesado en promover el diálogo y el entendiendo entre las civilizaciones y la cooperación para un futuro mejor. Sin embargo, durante los últimos dos años el régimen ha simulado estar siguiendo en una dirección totalmente opuesta, con sus líderes que hablan en un lenguaje altamente xenófobo, hostil e inflexible.

«Las tropas británicas e iraquíes han visto evidencia regular de armas de origen iraní que provienen a través de la larga frontera [iraquí] con Irán. El jurado está todavía deliberando de que parte de la elite gobernante iraní les están proporcionando estas armas y ayudando a que grupos de la milicia iraquí hagan uso de ellas, pero lo que está muy claro es que existen elementos iraníes que invierten fuertemente en crear una violenta y fragmentada Irak, probablemente en esperanza de que eventualmente tendrán éxito en controlar la política y la riqueza de las provincias abrumadoramente chi’itas del sur de Irak.

«El abrazo del régimen a Siria pareciera diseñado similarmente a que la mano siria permanezca e impida a esta cambiar de un partidario neto a aquéllos comprometidos a la inestabilidad a un compañero para la paz… Este abrazo, en donde Siria por el momento tiene la voluntad de ser atraído, parece ser que cosechará sólo un mayor aislamiento junto con un manojo de aliados harapientos que se han caído en bajeza en la comunidad internacional, tales como Corea del Norte y Birmania..

«… El objetivo de [Irán] al parecer es asegurar un Medio Oriente que continúa padeciendo de una violencia que hierve, mientras al mismo tiempo intenta asegurar la hegemonía de la revolución islámica de Irán a través de la región».

Howells: Todavía hay tiempo para el diálogo y la persuasión

«Mientras el Ministerio del Exterior ha dicho claramente, el Reino Unido cree que Irán tiene todo el derecho de ser un orgulloso y respetado miembro de la comunidad internacional. Pero para hacerlo, también debe aceptar que tiene responsabilidades con la región y con la amplia comunidad internacional. Este no tiene derecho a violar las condiciones del Tratado de No proliferación Nuclear (TNP) ni socavar la estabilidad regional.

«Los Naciones Unidas han pasado unánimemente dos resoluciones del Concejo de Seguridad que llaman en Irán a cesar el enriquecimiento de uranio. Irán debe cumplir con la Directiva de la AIEA y los requisitos del Concejo de Seguridad. El conjunto de la comunidad internacional quiere una solución pacífica y diplomática a este problema. Nosotros estamos trabajando duro para asegurarnos que el proceso diplomático tenga éxito…

«Esto no es sobre el tomar posturas unilaterales, es sobre los países del Medio Oriente que trabajan juntos para salvaguardar sus propios intereses nacionales y garantizar su seguridad y prosperidad.

«G. Bretaña tiene el mayor respeto por el pueblo iraní que ha padecido por los excesos de sus líderes con paciencia y fortaleza. Nosotros no tenemos ninguna disputa con ellos y reconocemos que la inmensa mayoría quiere un futuro pacífico y próspero, viviendo en armonía con los estados que bordean sus fronteras. Nosotros apoyamos a aquéllos en el Medio Oriente que están privada y públicamente enviándole al régimen iraní un mensaje claro: Sus intentos por la subversión e intimidación no procederán; su desafío a la ONU y la búsqueda por obtener armas atómicas no es la manera de construir un papel regional constructivo para Irán. Trabajen con la región no en contra de esta.

«Debemos colocar nuestra fe en el idioma del diálogo y la persuasión de promover resoluciones pacíficas y sustentables a los problemas que continúan generando miseria, injusticia y odio en esta problemática región. [2]

Embajador iraní Rasoul Movahedian: El artículo de Howells es propaganda de guerra

En respuesta al editorial de Kim Howells, la Embajada iraní en el Reino Unido, se quejó oficialmente el 7 de octubre, con la Oficina Exterior del Reino Unido. [3] Ese mismo día, Al-Sharq Al-Awsat publicó una respuesta a Howells del Embajador iraní al Reino Unido Rasoul Movahedian. A continuación se presentan los extractos:

«… Las noticias en Irán en estas pocas semanas han sido distorsionadas, en ellas este representa al país como una amenaza que debe ser tratada urgentemente. Es extraño que un oficial británico interfiera abiertamente en un asunto local lo cual es una cuestión de soberanía nacional, empleando un tono impropio y anti-diplomático hacia la República Islámica de Irán. Estos puntos de vista no son nada más que un intento por demonizar a Irán…

«Nuestro mensaje es claro: Este antiguo principio de divide y conquista ha perdido su efectividad – o, al menos, nunca aterrorizará a un gran estado como Irán. Lo qué Howells mencionó no es nada más que una muy conocida propaganda apuntada a influir en la opinión pública árabe en contra de Irán…

«Yo considero que sus puntos de vista son ambos un tipo de sonido de tambores para otra aventura de guerra y en el como pavimentar el camino para la continua presencia ilegal de fuerzas extranjeras en nuestra altamente sensible región.

«… Que el autor [e.d. Howells] intenta representarse a si mismo como alguien que le desea el bien a Irán es risible… La planificación del golpe de estado de 1953 contra Mossadegh, el primer ministro electo de Irán, fue llevado a cabo por aquéllos que desplegaron buena voluntad para Irán, pero quiénes al final hicieron derrumbar a un gobierno popular cuyo [sólo] pecado fue el nacionalizar la industria del petróleo del país.

«El tema de nuestros derechos a las actividades nucleares pacíficas y la violación de los derechos de nuestra nación es uno y el mismo. Y recuerde que la nación iraní nunca se olvidará del apoyo de algunos partidos por Saddam, para que pudiera forzar una salvaje guerra de ocho años sobre [Irán] con el objetivo de estrangular la llamada de la nación iraní para la liberación y la independencia. Aquéllos que [hoy] apoyan la democracia… son los mismos que tristemente se hicieron la vista gorda al uso de armas químicas por de Saddam contra civiles iraníes y soldados…

«Traeré a la atención de este diplomático [e.d. Howells] de que el actual gobierno iraní fue, como sus predecesores, democráticamente electo por el pueblo iraní…

«Irán es uno de los países que son firmantes al Tratado de No proliferación Nuclear, pero tiene el derecho de usar energía nuclear legal. No obstante, esta enfrenta un clamor sin precedentes sobre su programa nuclear – mientras que Israel, que es un poder nuclear fuera de toda obligación, tiene el pleno apoyo de los grandes poderes para que la balanza pueda inclinarse a su favor a expensas del mundo árabe…

«Aun así yo pienso que la diplomacia no se ha puesto todavía totalmente a prueba. Irán ha requerido consistentemente de negociaciones incondicionales de duración limitada… Howells le servirá bien a [la causa de] resolver los problemas de la región, así como también los problemas de su propio país, con un acercamiento pacífico». [4]

‘Abd Al-Rahman Al-Rashed: «Animales que pierden sus instintos de advertencia no viven mucho tiempo»

En otro editorial principal, ‘Abd Al-Rahman Al-Rashed respondió a Howells, argumentando de que es necesario exponer la amenaza de guerra contra Irán para alcanzar una solución pacífica a la crisis:

«… El Ministro [Howells] dijo que deberíamos poner nuestra confianza en el idioma del diálogo y la persuasión. Mi artículo fue sobre posibilidades – yo no desestimé la posibilidad de reconciliación, ni desestimé la posibilidad de una guerra…

«En mi estimación, insistir en desterrar el pensamiento de guerra de nuestras mentes es lo que conducirá al colapso diplomático. La constante de Irán que da la bienvenida a la confrontación militar por vía de la discusión en el obtener armas nucleares podría conducir a la guerra, y esto no es ningún chiste. La razón de esto podría ser que los iraníes no ven ninguna indicación de [que] la guerra [está de hecho próxima].

«En los días a su mandato en Kabul, el Mullah Omar no consideró las advertencias de los mediadores, porque no vio las fuerzas de avanzada americanas en el horizonte, y no tenía una televisión para observar lo que ellos estaban preparando contra él…

«Y el conocimiento de [Saddam Hussein] al desastre que se [acercaba] fue limitado, porque las comisiones seguían compitiendo entre si para llegar a su palacio, así sea para la mediación, o para mostrar solidaridad, o restaurarle [confianza] – entre ellos los escudos humanos que vinieron de Europa para oponerse a la guerra. [Saddam] creía que la guerra no irrumpiría.

«La misma historia se está auto repitiendo con el Presidente iraní Ahmadinejad, quien dijo en su discurso en la Universidad de Columbia que la amenaza de guerra es sólo propaganda norteamericana. Esta confianza de que la guerra no irrumpirá – o si lo hace, será como un paseo [por el parque] – empujará a [Ahmadinejad] hacia el extremismo, y quizás también a enredarse [en la guerra]….

«Yo pienso que clarificando la imagen en conjunto a los iraníes y a los árabes es de gran importancia. Los animales que pierden sus instintos de advertencia no viven mucho tiempo…» [5]


[1] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 23-24 de septiembre, 2007.

[2] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 5 de octubre, 2007.

[3] www.alarabiya.net, 7 de octubre, 2007.

[4] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 7 de octubre, 2007.

[5] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 7 de octubre, 2007.