Daoud Al-Shiryan, editor del portal Alarabiya.net, criticó a Francia a raíz de un informe del 7 de diciembre, 2010 en el diario Al-Sharq Al-Awsat sobre el papel de este país en la negociación de un acuerdo entre las Fuerzas 14 de Marzo libanesas (encabezadas por Al- Mustaqbal) y las Fuerzas 8 de Marzo (lideradas por Hezbolá) en relación con la acusación a ser emitida por el tribunal Al-Hariri. Según el informe de Al-Sharq Al-Awsat, el entendimiento obliga a la Fuerzas 14 de Marzo a abstenerse de acusar a Hezbolá en el asesinato y abstenerse de hacer uso de la acusación en su conflicto político con Hezbolá, incluyendo el conflicto sobre las armas de Hezbolá. Hezbolá, por su parte, está obligado a abstenerse de dirigir sus armas contra elementos dentro del Líbano, permitir que el gobierno libanés pueda operar normalmente y evitar crear una crisis política.

Shiryan señaló que el compromiso que le exige a Hezbolá – evitar el uso de sus armas dentro del Líbano – no es nada nuevo, porque Hezbolá ya se ha comprometido a ello en el acuerdo de Doha. Por lo tanto, esto no constituiría una concesión grave de su parte.

Shiryan se preguntó por las motivaciones de Francia en negociar tal entendimiento y propuso una solución alternativa, es decir, que el tribunal emitiese una acusación reducida en contra de Hezbolá y en cambio esta organización estaría obligada a tomar un paso significativo: deponer sus armas y asimilar a sus combatientes en el ejército libanés.

Lo siguiente son extractos del artículo de Al-Shiryan, publicado el 8 de diciembre, 2010 en el diario Al-Hayat:

«Los franceses tienen la intención de recompensar a Damasco y Teherán a expensas del Líbano»

«El diario Al-Sharq Al-Awsat informó, citando lo que llamó fuentes conocedoras francesas, que durante su visita a Francia [el 9 de diciembre, 2010], París propondrá al Primer Ministro de [Siria] Bashar Al-Assad un plan para sacar al Líbano de la crisis que esta enfrenta sobre la inminente acusación [del Tribunal Especial para el Líbano, que se espera implicará a Hezbolá en el asesinato de Al-Hariri]. La propuesta solución francesa está basada en un acuerdo escrito entre ambas partes [en el Líbano, es decir Hezbolá y la] facción Al-Mustaqbal, que será tomado como seguridad y se hará público después de que la acusación sea dada a conocer.

«El diario [Al-Sharq Al-Awsat] informó que, de acuerdo con la propuesta [francesa], la facción Al-Mustaqbal se comprometería a no vincular una acusación contra distintos operarios de Hezbolá… a la [organización en su conjunto y] aprovecharse de la acusación para presionar a Hezbolá respecto a [sus armas]. A cambio, Hezbolá se comprometerá a abstenerse de utilizar sus armas dentro del [Líbano], permitir que el gobierno actúe libremente y evitar cualquier acción [que] pudiera conducir a una crisis política.

«Si estos informes son correctos, los franceses tienen la intención de recompensar a Damasco y a Teherán a costa del Líbano. [El documento que los franceses] [están proponiendo] no es nada nuevo. El falso compromiso de Hezbolá en este será tal como su [falso] compromiso en el [Acuerdo] de Doha. La facción Al-Mustaqbal está obligada a pagar un precio demasiado alto, [con el fin de evitar cualquier] peligro posible para el futuro de Hezbolá como resultado de la acusación. Por lo tanto, uno debe preguntarse: Es la iniciativa francesa parte de la presión sobre Sa’d Al-Hariri, o se trata de un intento francés para interferir en la crisis iraní-estadounidense a través del Líbano ?…»

Cualquier propuesta viable debe incluir el desarme de Hezbolá

«Nadie puede cambiar el procesamiento, desviarlo de su curso, interpretarlo o evadirlo, sin [pagar] el precio necesario. Lo que se necesita es una iniciativa que moderara la acusación del tribunal a cambio de una cuota clara, es decir, el desarme de Hezbolá, la asimilación de sus cuadros militares en el ejército [libanés] y su transformación en un partido político. Sin una propuesta de este calibre, la crisis sólo se tornará más complicada y muy probablemente cobre un alto precio desde todos los rincones en el Líbano».