En una columna del 16 de agosto, 2010 en el diario de Londres Al-Sharq Al-Awsat, ‘Abd Al-Rahman Al-Rashed, director general de Al-Arabiya TV y ex editor del diario, criticó al Presidente Obama por apoyar la construcción de la mezquita Casa Córdoba en la Zona Cero en Nueva York. Este dijo que no sería prudente construir una mezquita en esa ubicación, ya que no existen musulmanes practicantes que vivan en la zona y la mezquita se convertiría en un centro de coordinación tanto para los partidarios del terrorismo como para los campeones de la islamofobia. Por lo tanto, argumentó, sería preferible para Obama apoyar temas que sean de una verdadera preocupación para los musulmanes, tales como la promoción de la paz en el Medio Oriente.
A continuación se presentan extractos de la columna: [1]
«El Presidente de los Estados Unidos Barack Obama tomó una postura difícil cuando apoyó la construcción de una mezquita en un lugar donde 3.000 ciudadanos estadounidenses fueron asesinados por terroristas de Al-Qaeda el 11 de septiembre, 2001. A pesar de que la postura del presidente fue la correcta en principio, es decir, en términos del principio de libertad de culto, creo que tomó una postura política [sobre un tema] innecesario y sin importancia, incluso para los musulmanes. Esta mezquita no es un problema para los musulmanes y a estos no les importa su construcción.
«Esto nos recuerda otra postura de principio que Obama tomó cuando insistió en que presuntos miembros de Al-Qaeda encarcelados en Guantánamo fuesen juzgados en cortes civiles [y no militares] y que la prisión militar de [Guantánamo] debe ser cerrada. Esta postura [también] es ciertamente importante. Sin embargo, el hecho es que [Obama] se enfrentó a una batalla que no les concierne a los musulmanes alrededor del mundo, porque decenas de miles de musulmanes, también acusados de extremismo, están presos en [incluso] peores condiciones en los países musulmanes.
«Los musulmanes no anhelan [realmente construir] una mezquita cerca del cementerio del 11 de Septiembre, ni les importa si el cocinero de bin Laden es juzgado en un tribunal civil [o militar]. Los musulmanes están preocupados por cuestiones que involucran los destinos de pueblos [enteros]… tales como el establecimiento del estado palestino. Si Obama concentra su energía y esfuerzos en la lucha por la paz en el Medio Oriente, esto seria [mucho] más importante y valioso que [su postura a favor de la] mezquita de Nueva York…
«La mezquita de la [Zona Cero]… es un asunto extraño, porque no es un tema [que le concierne] a los musulmanes. [De hecho], nosotros ni siquiera habíamos escuchado hablar de esto hasta que se convirtió en el foco de argumentos vociferantes entre partidarios y los que objetan, la mayoría de ellos estadounidenses no musulmanes!…
«Los musulmanes nunca pidieron [esta mezquita], e incluso los musulmanes enojados no la quieren. Esta es una de las pocas veces cuando las dos partes en conflicto están de acuerdo. Sin embargo, la controversia se encendió. Esta llegó a las primeras páginas de los diarios y es [destacada en] los principales programas de televisión. Se celebraron manifestaciones en las calles y se colocaron grandes carteles en los autobuses de Nueva York, exigiendo que la construcción de la mezquita sea prevenida recordándoles a todos el crimen del 11 de Septiembre. Esto realmente es una batalla extraña!
«No puedo imaginarme a los musulmanes [en realidad] queriendo una mezquita en ese lugar en particular, porque se convertirá en una arena para los promotores del odio y un monumento a los que cometieron el crimen. Por otra parte, no hay musulmanes practicantes en el zona que necesiten un lugar de culto, porque es un distrito comercial. ¿Hay alguien que esté [realmente] deseoso [de construir] esta mezquita?…
«Aquellos que presionan para construir esta mezquita pueden ser empresas de construcción, empresas de arquitectura o grupos políticos que quieren aprovecharse de este asunto. La persona que presentó la solicitud de construcción – no sé si [realmente] quiere [construir] una mezquita que promoverá la reconciliación, o si es [sólo] un inversionista en busca de ganancias rápidas. Porque la idea de una mezquita junto a un lugar de destrucción no es del todo inteligente. Lo último que los musulmanes quieren hoy es construir un centro religioso que provoque a otros o una mezquita simbólica que la gente visitará como un [tipo de] museo al lado de un cementerio.
«Lo que los ciudadanos estadounidenses no entienden es que la batalla contra los terroristas del 11 de Septiembre no es su batalla. Es una batalla musulmana – un cuyas llamas todavía ruge el furor en más de 20 países musulmanes… No creo que la mayoría de los musulmanes quiere construir un monumento o un lugar de culto que mañana pueda convertirse en una fuente de orgullo para los terroristas y sus seguidores musulmanes, ni tampoco quieren una mezquita que se convertirá en un santuario para los enemigos del Islam… Esto ya ha comenzado a suceder: [los islamófobos] se quejan de que una mezquita está siendo construida sobre los cadáveres de 3.000 ciudadanos estadounidenses que fueron enterrados vivos por gente que coreaba ‘Alá akbar’ – la misma llamada que se escuchó desde la mezquita…»
[1] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 16 de agosto, 2010.