En un artículo reciente, el diario pakistaní en urdu Roznama Jasarat argumentó que el cambio estadounidense hacia India ha obligado a Pakistán a entrar en una alianza estratégica con China. El artículo, escrito por el columnista Arif Bahar y titulado «La Cooperación Norteamericana-Hindú: Implicaciones y Peligros», sostiene que el apoyo estadounidense a India en la edificación de su arsenal no son buenas nuevas para el futuro del Sudeste Asiático.
Bahar continúa diciendo que el objetivo de la cooperación de China con Pakistán en desarrollar su poder de defensa es competir contra India. El diario de amplia circulación Roznama Jasarat, vocero de Jamaat-e-Islami Pakistan, es publicado desde Karachi y es conocido por sus puntos de vista derechistas.
Lo siguiente son extractos del artículo:
«La felicidad que los estadounidenses sintieron en poder tener acceso a India pudo no haber sido sentido por Colón al descubrir América»
«De acuerdo a un diario estadounidense, la cooperación de Estados Unidos con India está creando el peligro de un enfrentamiento India-Pakistán. Según el diario, Estados Unidos está aumentando su cooperación militar y nuclear con India para contrarrestar a China. Como resultado, dos rivales tradicionales – Pakistán e India – pueden entrar en confrontación, ya que ambos están equipados con armas convencionales y nucleares. Para combatir a China, la Casa Blanca y el Departamento de Defensa han mejorado recientemente la cooperación en materia nuclear y defensa con India. Tal cooperación con [el Primer Ministro hindú Narendra] Modi ventilará tensiones entre Pakistán e India.
«El objetivo de la cooperación abierta y secreta con china en desarrollar el poderío de defensa de Pakistán [suministrándole] submarinos, [construyendo] [aviones de combate] JF Thunder y construyendo una carretera estratégica a través de Cachemira, es competir con India. En otras palabras, China está apoyando a Pakistán en tierra, aire y mar a la manera en que Estados Unidos apoya a India. El Pentágono ha formado un grupo que apoyará a India en la construcción de un portaaviones, en donde el trabajo comenzará este mes. El informe del diario estadounidense no es buena noticia para el futuro de los pueblos del Sudeste Asiático.
«Después del fin de la Guerra Fría, India, sintiendo hacia donde soplan los vientos en el mundo, saltó del hundimiento del Titanic de la Unión Soviética y decidió convertirse en el aliado de Estados Unidos. Parecía como si los estadounidenses también obtuvieran el reinado de los Siete Imperios [expresión proverbial para el mundo entero]. La felicidad que los estadounidenses sentían en poder tener acceso a India, pudiera no haber sido sentida por Colón al descubrir América. Para ellos, la vasta zona de India y su población de más de un billón de personas era tal mundo que no se hubieran imaginado. Estos consiguieron un gran mercado para el consumo y la venta de sus productos.
«Las élites empresariales estadounidenses colocaron a Estados Unidos en el camino a la conquista de este mercado [es decir, India] a toda costa. Los responsables políticos estadounidenses no pudieron soportar la presión de los inversionistas, o tal vez no querían resistir esa presión mientras la mayoría de los altos funcionarios eran también consejeros o accionistas de las empresas multinacionales. Ellos [los líderes empresariales] obligaron a Estados Unidos a poner todos sus huevos en la canasta hindú en lugar de jugar un papel equilibrado en el Sudeste Asiático. Estos poderes convencieron a los responsables políticos estadounidenses que el ascenso económico y militar de China es el verdadero peligro en la región y si este poder no es controlado en sus comienzos devorara a Occidente. Y sólo India puede confrontarla [China] en su comienzo. Bajo esta filosofía, estos comenzaron a ‘inflar’ a India».
«Estados Unidos estuvo bajo la ilusión de que no sólo aceptara a India como la única potencia contra China, sino que también será capaz de convencer a Pakistán de aceptar la dominación y hegemonía hindú»
«Atravesando el sendero de estas necesidades políticas y económicas cambiantes, los estadounidenses se olvidaron de que tenían un aliado tradicional de la región en la forma de Pakistán, que estuvo junto a ellos en los momentos difíciles durante la Guerra Fría. Los estadounidenses incluso olvidaron las disputas entre Pakistán e India y voltearon su vista [del tema] de Cachemira, que ha sido la base de varias guerras entre los dos países. De hecho, Estados Unidos incluso adoptó la terminología sobre el tema de Cachemira que India solía emplear… Siempre que Pakistán le pedía a [Estados Unidos] que desempeñara un papel de mediación en sus disputas con India, Estados Unidos evitó el tema con el pretexto de ser imparcial.
«Cuando India denunció a Pakistán con Estados Unidos, este [Estados Unidos] adoptó el tono y tenor hindú. Estados Unidos estaba bajo la ilusión de que no sólo aceptara a India como el único poder contra China, sino que también será capaz de convencer a Pakistán de que acepte la dominación y hegemonía por parte de India. [Estados Unidos pensó que] introduciendo el concepto de fronteras suaves entre los dos países [tales como al permitir que gente viaje a través de la Línea de Control que divide Cachemira entre India y Pakistán] será capaz de reducir la intensidad de las disputas históricas y armas tales como la bomba atómica se convertirán en irrelevantes para Pakistán.
«Con este propósito, en lugar de su frontera oriental [con India], la frontera occidental de Pakistán [con Afganistán] se caldearon los ánimos [es decir, se crearon conflictos yihadistas]. La amenaza de los talibanes fue creada para oponerse al ejército de India y el ejército paquistaní se creó para perseguir esta sombra, pero todos estos esquemas se han puesto de cabeza y Pakistán en lugar de mirar a India a través de los ojos de Estados Unidos, continúan viendo las cosas en luz a su pasado, su historia y sus experiencias. En lugar de convertirse en el ‘pequeño’ [chico] estadounidense, tomó la difícil decisión de seguir siendo un aliado de China. Pakistán ha estado pagando el precio por esta decisión durante muchos años.
«En su amor por India, Estados Unidos ha pagado incluso aquellas deudas a las que no estuvo obligado a pagar, incluyendo el distanciarse a sí mismo de Pakistán. De hecho, los Estados Unidos, adoptando una actitud imparcial, podrían haberse ganado la confianza de ambos Pakistán e India. Poniendo su peso del lado hindú, Estados Unidos ha debilitado su papel de mediador. Ahora la situación ha alcanzado una etapa que incluso un diario estadounidense escribe que el ejército estadounidense y la ayuda nuclear a India pueden conducir a la guerra entre India y Pakistán. También debe recordarse que ambos países están equipados con armas nucleares. Sin embargo, hay tiempo para que Estados Unidos no trate de igualar India con China inflándolo y debería desempeñar su papel en la solución de serias disputas como la de Cachemira y la próxima vez enséñenles que ellos [los Estados Unidos], en nombre de la paz y en nombre de la tenue esperanza de paz, de hecho regaron las semillas de la guerra».
Fuente: Roznama Jasarat (Pakistán) 24 de junio, 2015.