En una serie de artículos, el diario libanés pro-Hezbolá Al-Akhbar discutió los recientes contactos entre el régimen de Assad y los estados árabes y Occidente, incluyendo a Arabia Saudita y los Estados Unidos, en anticipación al final de la guerra siria y al inicio de la reconstrucción de Siria. Según el diario, se realizaron más de 20 discusiones en los últimos dos meses, tanto directas como indirectas entre el jefe de los servicios de seguridad de Siria Ali Mamlouk y los jefes de los servicios de inteligencia de Occidente. Los debates trataron temas de seguridad y de política, incluyendo la posible participación en la reconstrucción de Siria. El diario afirma que una importante delegación estadounidense llego a Damasco en junio, 2018 en una visita organizada por Rusia y los Emiratos Árabes Unidos, durante la cual presentaron los siguientes términos para la retirada de sus fuerzas de Siria: una retirada total de Irán del sur Siria, una participación en la empresa petrolera al este de Siria, e información sobre organizaciones terroristas en el país. El diario afirma que el régimen sirio rechazó estos términos, ya que percibe a las tropas estadounidenses en el país como una fuerza de ocupación, mientras que Irán es considerado como un aliado que ayuda al ejército sirio. Este sostiene además que se dará preferencia a los aliados de Siria en la cooperación económica con el régimen en la fase de posguerra y que no habrá coordinación militar entre Siria y los Estados Unidos hasta que las relaciones entre ellos se lleguen a encontrar en una nueva fase.

En respuesta a estos informes, la portavoz del Departamento de Estado de los Estados Unidos Heather Nauert dijo que no tenía conocimiento de que se hubiera celebrado ninguna reunión de tal tipo[1] y el canciller sirio Walid Al-Mu’allem negó cualquier reunión entre representantes sirios y estadounidenses.[2]

Cabe señalar que esta no es la primera vez que Al-Akhbar ha informado sobre contactos entre los Estados Unidos y el régimen sirio. En noviembre, 2017 afirmó que se había celebrado una reunión entre un funcionario de seguridad estadounidense y un funcionario sirio, en la que el primero aclaró que los Estados Unidos no tenían intenciones de permanecer en Siria una vez que el EIIS fuera derrotado. El informe fue negado por el Pentágono.[3]

Según el diario Al-Akhbar, Arabia Saudita también ha ofrecido renovar sus relaciones con Siria, siempre que «Bashar Al-Assad se libere a sí mismo de Irán y de Hezbolá»; además, se han restablecido los canales de comunicación entre el régimen sirio y los Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Jordania, Egipto y Qatar. El diario afirma que «todos parecen apresurarse [a renovar sus relaciones con Siria] de alguna u otra manera, mientras que los sirios, sorprendentemente, parecen no tener prisa. Damasco está convencido de que la administración [siria] ha salido ganador y que el victorioso es quien establece los términos». En consecuencia, Damasco espera que el mundo acepte la situación política existente y declara: «No cooperaremos, ni siquiera a nivel de seguridad, antes de que tal reconocimiento exista y antes de que se renueven las relaciones diplomáticas y Damasco recupere su papel como actor importante regional».[4]

Lo siguiente son extractos de los artículos de Al-Akhbar:

Tropas estadounidenses en Siria (imagen: almasdarnews.com)

Jefe de los servicios de seguridad de Siria le dijo a la delegación estadounidense: No cooperaremos antes de que las relaciones se normalicen

«Una de las noches en la última semana de junio, las fuerzas de seguridad sirias reforzaron [la seguridad] en el Aeropuerto Internacional de Damasco y sus alrededores. Poco antes de la medianoche, aterrizó un avión privado de los EAU. Unos 40 minutos después, una larga fila de camionetas negras SUV llevaron a los pasajeros del avión hacia Al-Mezzeh en el centro de Damasco, donde se encuentra la oficina del General ‘Ali Mamlouk, jefe de la Oficina de Seguridad Nacional de Siria.

«Allí, un alto oficial estadounidense se acercó lentamente a la oficina, a la cabeza de una delegación de oficiales de varias agencias de inteligencia y de seguridad estadounidense. Mamlouk recibió a la delegación estadounidense junto al jefe de los Servicios de Inteligencia Generales Dib Zaitoun y el Vice-Jefe del Ejercito General Muwaffaq As’ad. La reunión entre las partes duró 4 horas…

Según la información obtenida por el diario Al-Akhbar, las partes revisaron varios aspectos de la crisis siria, sus etapas de desarrollo y sus ramificaciones para la región. Luego se abordó el tema esencial de la reunión: una propuesta clara y definida estadounidense. Los Estados Unidos estaban dispuestos a retirar todas sus tropas del territorio sirio, incluso las tropas de la base en Al-Tanf y desde la región oriental del Éufrates, de conformidad con los acuerdos de seguridad que serían supervisados ​​por los ejércitos ruso y sirio. Esto sería a cambio del cumplimiento por Damasco de tres demandas estadounidenses: 1. La retirada total de Irán del sur de Siria, 2. Garantías escritas de que las compañías estadounidenses recibirán una parte del [mercado] petrolero en las regiones del este de Siria y 3. La provisión de información completa por Siria a los Estados Unidos sobre las organizaciones terroristas y sus miembros, incluyendo la cantidad de [miembros] extranjeros de estas organizaciones que han sido asesinados y aquellos que continúan con vida, así como también datos sobre aquellos que puede que regresen a Occidente. Esto, dado que «la amenaza del terrorismo se extiende por los continentes y cualquier [información] que se pueda obtener le sirve a la seguridad global».

«La parte siria evaluó a los visitantes estadounidenses y su propuesta ‘tentadora’ con una lógica fría y la respuesta de Mamlouk a los tres puntos fue muy clara: Primero, ustedes son una fuerza de ocupación en Siria. Ustedes ingresaron a nuestro territorio por la fuerza, sin pedir permiso y pueden marcharse de manera similar. Hasta que eso ocurra, seguiremos considerándolos una fuerza de ocupación. Segundo, Siria no es un estado huérfano y desarraigado. Es parte de un eje amplio. Nuestra postura a las relaciones con Irán es muy clara y el Presidente Bashar Al-Assad lo ha reiterado en varias ocasiones. Su principal objetivo es que nuestra alianza con Teherán, Hezbolá y las fuerzas aliadas que combatieron a los terroristas junto al ejército sirio sea una alianza fuerte y esta propuesta no alterará nuestra estabilidad. Tercero, «nuestra preferencia [en la etapa] después de la guerra es cooperar con los países que son nuestros aliados y amigos y no conspirar contra el pueblo sirio. Es inconcebible el que debiéramos facilitar [la operación en Siria] de empresas que pertenecen a países que combatieron contra nosotros y continúan haciéndolo». Sin embargo… «Este tema puede ser dejado de lado a [consideración en] una etapa futura, cuando el gobierno sirio establezca políticas para reconstruir [el país]. Luego se le permitirá a las empresas estadounidenses ingresar al mercado energético sirio a través de compañías occidentales o rusas. Consideramos que esto es un gesto de buena voluntad a cambio de la presente visita.

Para ver el resto del despacho en inglés junto a las imágenes copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: https://www.memri.org/reports/us-negotiated-with-syrian-regime-on-terms-for-withdrawl-from-syria#_ednref4


[1] State.gov, 29 de agosto, 2018.

[2] Sana.sy, 1 de septiembre, 2018.

[3] Véase la serie de MEMRI Despacho Especial No. 7163 – Diario libanés cercano a Siria: Antiguo funcionario estadounidense en visita secreta a Siria para discutir sobre el tema de los estadounidenses desaparecidos, incluyendo a agentes de la CIA, 5 de noviembre, 2017.

[4] Al-Akhbar (Líbano), 28 de agosto, 2018.