Lo siguiente son extractos de una conferencia pronunciada por el salafista británico Abu Mounisa, en la Conferencia del Despertar Islámico, celebrada el 15 de diciembre, 2010 y publicado en Internet.
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Abu Mounisa: «Cuando hablamos del da’wa [la llamada al Islam], ni se les ocurra pensar, mis hermanos y hermanas, que nuestro da’wa es sólo para dirigirnos a unas pocas personas en las calles, y llamarlos al Islam. Nuestro da’wa debe ser el da’wa que ataca su sistema, y reemplazarlo con el Islam. Eso es lo que tenemos que hacer, mis queridos hermanos, tenemos que llamar a toda la sociedad al Islam. No sólo estamos llamando a una hermana o a un hermano a que siga la religión de Alá. Queremos que toda la sociedad se incline ante Alá. No queremos que sólo una hermana lleve puesto el khimar [velo] y el jilbab [la capa]. Queremos que toda la sociedad lleve puesto el khimar y el jilbab. No queremos que sólo nuestros hermanos y hermanas hagan sujud [el inclinarse] ante Alá. Queremos que toda la sociedad haga sujud a Alá. Este es el da’wa del Profeta Mahoma. Este es nuestro da’wa, mis queridos hermanos y hermanas».
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«Si ustedes llevan consigo su da’wa, y se quedan ahí, simplemente invitando a la gente al Islam, como lo hace [el clérigo] Zakir Naik, ¿creen que cambiara a la sociedad? Sin atacar la ley y el orden? No, mis queridos hermanos, no hay manera de que vaya a cambiar a la sociedad. Es imposible que la sociedad cambie. Ustedes necesitan provocar a la sociedad para que la sociedad pueda cambiar.
«Además, mis queridos hermanos, lo que necesitamos entender es que cuando el Profeta Mahoma estuvo en Meca, había 360 ídolos en La Meca para ese momento. Hoy día, la gente no adora ídolos físicos. Hoy día, la gente adora las ideas de la democracia, libertad y el capitalismo. Esto es lo que la gente adora hoy. La mujer dice: Soy libre de abortar. El hombre dice: Soy libre de practicar la promiscuidad sexual ¿Ven a lo que me refiero? Esta es la realidad de hoy día.
«¿Quién permite esta libertad? Quien permite esa democracia? Quien permite que estos falsos dioses existan? El gobierno, la ley y el orden, ellos son los que lo permiten. Cuando los [pueblos] le dijeron al Profeta Mahoma: ¿Por qué no agregas a tu dios a nuestros dioses? Sólo uno más, sólo añádelo. Él dijo: De ninguna manera!»
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«Él dijo: ¿Creen que voy a mezclar mi Dios con sus dioses? Nunca mezclare a mi Dios con sus dioses. Es imposible que mezcle mis dioses [sic] con sus dioses, y yo nunca haría eso. Creo que Alá es autosuficiente. Él no necesita de sus dioses. Yo he venido a destruir sus dioses. Cuando Alá le dio la victoria al Profeta Mahoma dentro de Meca, se dirigió a la Kaaba y destruyó todos los 360 dioses en su interior. Pero saben que? ¿Nunca se detuvo allí ¿Saben lo que hizo? Se dirigió al área de [los ídolos] Lat, Uzzat y Manat… entró en estas áreas, y le preguntó a la gente: ¿Dónde está Uzzat, ¿dónde está Manat? Este fue y los destruyó, los mató, les cortó sus cabezas, los decapitó. Por eso, mis queridos hermanos, tenemos que decapitar a la democracia desde sus raíces.
«Tenemos que decapitar al capitalismo desde sus raíces, tomarlo, matarlo desde sus raíces. Eso es lo que tenemos que hacer. Debemos odiarlo tanto, mis queridos hermanos, que cada día, debemos atacar su sistema. Todos los días. Al igual que el Profeta Mahoma».
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«Así es como debemos sentir. Así es como debemos creer. Debemos tener el celo en nuestros corazones, por la causa de Alá, para destruir todo su sistema y reemplazarlo con el Islam».
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«¿Quién permite el alcohol en primer lugar? La ley y el orden. Así que tenemos que hacerle frente a la ley y el orden. Tenemos que atacar a la ley y el orden. Un hombre en la época del Profeta Mahoma… Lo siento, me disculpo. Una vez, Omar Ibn Al-Khattab vio a una mujer, y estaba vestida de manera inapropiada. Qué hizo Mahoma… No, lo siento, lo que hizo Omar Ibn Al-Khattab… Se le acercó a ella y la golpeó. La golpeó. Le dijo: «¿Cómo te atreves a caminar por las calles de Al-Madina, que le pertenecen al Profeta Mahoma, vestida de la manera que te vistes?» Ella se dio vuelta y le dijo: «¿Quién demonios eres tú para decirme que me vista así?!»¿Saben lo que dijo?» Yo soy el Emir de los Creyentes». Pero hoy día, no podemos ir por ahí golpeando a todas las mujeres en la calle. No podemos hacer eso. No está permitido que hagamos eso.
«Así que lo que tenemos que hacer es enfrentar el munkar [el mal]. Tenemos que darnos vuelta y atacar a la sociedad. Al eliminar las raíces del problema, se elimina el problema. Pero si sólo nos ocupamos de las ramas, agarramos un par de ramas aquí, un par de ramas de ahí, no va a resolver el problema. Nunca resolverá el problema. Tenemos que atacar la raíz del problema, que es la ley creada por el hombre, el sistema hecho por el hombre, con el que vivimos hoy día. ¿Lo entienden, hermanos? Eso es lo que tenemos que hacer.
«No podemos simplemente sentarnos hasta que nuestros hermanos digan: Hermano, lo que estás haciendo está prohibido. Hermana, tu velo está totalmente prohibido, una gran joroba en la cabeza. No puedes hacerlo así. Lo que necesitas es decirle a la hermana que su joroba está equivocada. Necesitan decirle al hermano que está equivocado. Además, tienen que hacer el bien y prohibir el mal, y hacer que la sociedad se incline ante Alá.
«Eso es lo que tenemos que hacer, mis queridos hermanos. Tenemos que atacar a los líderes. Tenemos que darnos vuelta y atacar, ¿a que me refiero? Daoud Kamroon… Cameron. Este Daoud Kamroon. Tenemos que atacarlo a él. Tenemos que decir: Sus leyes son opresivas. Tenemos que enfrentar esas leyes, y reemplazarlas con el Islam «El que rechace el Taghout y crea en Alá…» Así que destruiremos su sistema y lo reemplazaremos con el Islam. Eso es lo que tenemos que hacer».
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