La activista liberal secular kuwaití Dra. Ibtihal Al-Khatib, cuya audaz visión ha puesto frecuentemente mucho fuego a ambos bandos sunitas y chiitas en el mundo árabe, [1] abogó, en un artículo el 30 de noviembre, 2015 a abolir los estudios religiosos en las escuelas y reemplazarlos con lecciones sobre la historia de la religión o sobre la ética y los derechos humanos. Al-Khatib, profesora en la Universidad de Kuwait y columnista del diario Al-Jarida, argumentó que el estado no tiene derecho a imponer la religión de una corriente en particular o secta sobre los estudiantes de diversos orígenes y por lo tanto se propuso limitar los estudios religiosos a marcos electivos tales como clases de tarde o de fin de semana, para que los padres que deseen pueden inscribir a sus hijos en una clase de religión de su escogencia. Al-Khatib también criticó los métodos de enseñanza que prevalecen en las sociedades árabes y musulmanas, que dijo, se basan en aprender al caletre, ambigüedad y el refuerzo a los tabúes y el no fomentar el pensamiento creativo. Ella argumentó que esta es la raíz de los problemas en el mundo árabe y musulmán, en particular el cisma interno, el racismo y el extremismo.

Cabe señalar que 10 días antes de la aparición de este artículo, Al-Khatib realizo comentarios similares en el programa del Dr. Sulaiman Al-Hattlan [2] «Hadith Al-Arab» en Sky News Arabia, provocando muchas respuestas airadas en los medios de comunicación sociales.

Imagen: Dra. Ibtihal Al-Khatib en «Hadith Al-Arab» (Imagen: Youtube.com/watch?v=F8sieJaxYQQ 26 de noviembre, 2015)

A continuación se traducen extractos de la columna de Al-Khatib: [3]

La reforma curricular no ayudará; Todo material religioso debería ser abolido

«Pienso que casi todos nuestros problemas se derivan de los métodos de estudio y la calidad de enseñanza a la que nuestros chicos están expuestos. Soy consciente de que esta declaración [parece] muy simplista y superficial, pero en la mayoría de los casos, las [más simples y claras observaciones] en nuestra vida son los más precisas.

«Nuestros hijos crecen sin mucho énfasis en el pensamiento crítico, ya que nuestros planes de estudio tienen como base el aprendizaje al caletre en lugar de la persuasión. Crecen dependiendo casi exclusivamente del citar y copiar… porque la creatividad y la diligencia no son parte del material o del método de estudio. Crecen evadiendo muchas preguntas, recurriendo a la ambigüedad y evitando muchos temas científicos y filosóficos, ya que los planes de estudio rodea a [los estudiantes] con miles de líneas rojas, los traban con miles de prohibiciones y los encadenan con miles de tabúes.

«Muchos escritores, incluyéndome, han abogado por modificar el plan de estudios, pero no estoy convencido de que esto será suficiente para generar suficiente cambio. Pedí tal reforma ante la creencia de que era lo mínimo que tenía que hacerse y pudiera quizá salvar lo que [todavía] fuese salvable y minimizar las manifestaciones de racismo y extremismo… [Pero] en mi opinión, la verdad es que ninguna modificación [del plan de estudios] erradicará el sectarismo o sanará el cisma [social] – mientras el currículo oficial presente material religioso [desde la perspectiva] de una escuela o secta en particular, el cisma permanecerá y la grieta y el desacuerdo serán tallados en piedra, con la bendición oficial del gobierno».

Debemos ‘vernos como realmente somos, o de lo contrario pereceremos en el papel de víctima de un teatro vacío’

«Cuando me di cuenta, en una entrevista con el Dr. Sulaiman Al-Hattlan, que la verdadera solución es abolir todo material religioso, de cualquier tipo, en las escuelas estatales, recibí una respuesta muy dura pero que era de esperarse, que se deriva de la mentalidad de víctima que los musulmanes emplean contra cualquiera que se oponga a su opinión o los critique. [Estos ven] cualquier crítica como un complot contra los musulmanes, cualquier cuestionamiento como un plan para destruir la religión y cualquier sugerencia innovadora como occidentalización con la intención de destruir los fundamentos de la fe. ¿Por qué? Tal vez se debe a las duras condiciones históricas y a las restricciones que prevalecen actualmente, o a la naturaleza de la mentalidad árabe-islámica, o a [influencias] políticas externas o a las disputas regionales internas. [Y] tal vez a todo estos factores juntos, o a varios de ellos, alimentan este sentido perpetuo de discriminación y hace que árabes y musulmanes desempeñen este tedioso papel [de víctima], [el cual] encarnan tan bien que [terminan] creyendo en este de todo corazón. Sin embargo, el mundo, y nosotros mismos, estamos hartos de este papel sin final [de víctima], que ya no provoca ninguna simpatía o lágrimas. Así que, o [comenzamos] a vernos como realmente somos, o pereceremos mientras continuamos jugando el papel de víctima en un teatro sin público.

«Sí, la solución es abolir las clases de religión en las escuelas durante la mañana y reemplazarlas con lecciones sobre la historia de las religiones, para que los estudiantes lleguen a conocer las diversas religiones del mundo, o bien con clases sobre derechos humanos y ética. Esto, siempre y cuando el estado permita que las escuelas religiosas ofrezcan clases por la tarde o de fin de semana, al igual que las escuelas dominicales [operadas] por la iglesia, a aquellos que deseen enseñarle a sus hijos la religión en función de su secta y fe [en particular]. Todos tenemos derecho de proporcionarles a nuestros hijos con una educación religiosa en una escuela estatal, pero el estado no tiene derecho a imponerle a todos sus ciudadanos y residentes… un solo camino religioso desde la perspectiva de una secta y una sola corriente. El estado debe insistir en la igualdad para todos en todos los servicios que este presta.

«Yo no veo el cómo esta propuesta pudiera [posiblemente] ser considerada como un complot anti-religioso pero, conociendo la mentalidad de autocompasión árabe islámica, entendemos por el qué hay gente que piensa que si uno dice ‘los buenos días’ en lugar de ‘al-salaam alaikum’ usted es un [musulmán] occidentalizado trazando esquemas anti-religiosos. Así es como siempre nos comportamos, deliberadamente miserables».


[1] Véase, por ejemplo MEMRI Clip No. 1720, Columnista kuwaití Ibtihal Al-Khatib critica a Hezbolá y declara: Un estado laico es la única manera de proteger los derechos religiosos en el mundo árabe, tomado de una entrevista con Al-Khatib, tras lo cual fue amenazada de muerte. El 7 de noviembre, 2015 se informó que Al-Khatib había dicho que la coeducación era preferible a las escuelas segregadas, ya que produce mejores resultados, desarrolló la personalidad de los estudiantes y les creo más confianza en las relaciones con el sexo opuesto. Abohamdan.com 7 de diciembre, 2015.

[2] La Dra. Sulaiman Al-Hattlan es escritora y personalidad en los medios saudíes y ex editora en jefe de la revista empresarial estadounidense Forbes Arabia.

[3] Al-Jarida (Kuwait) 30 de noviembre, 2015.